Capítulo 52
Sakura e Ino estaban almorzando en su restaurante favorito para hablar de cosas de chicas -O sea hablar de sus respectivas parejas.
-Que sepas que hubiera preferido que me llevaras a comer ramen - dijo Sakura con un puchero.
-¡Que sepas que lo hago por tu bien - protestó Ino- No puedes ceder a tus antojos todo el rato.
-¡Tú no lo entiendas! - dijo de brazos cruzados y un puchero- No estás embarazada- y luego puso una sonrisa burlona- y al juzgar por el hecho del que tú y Sai ni siquiera habéis llegado a la segunda base, dudo mucho que estés embarazada tan temprano.
Segunda base: abrazos y caricias.
-¡Que sepas que Sai-kun quiere que nuestra primera vez sea especial! - le gritó Ino mientras se cruzaba los brazos y repetía la mueca que su amiga hizo segundos atrás- Además no soy una ninfómana como tú.
-¡Yo no soy Ninfómana! - gritó Sakura mientras se levantaba y volver a sentarse dando gracias a Dios que estaban tan solo ellas en el restaurante.
-¿Ah no? - Ino puso una sonrisa pícara- Pese a estar embarazada, ¿cuántas veces lo hicisteis?
-Eso no te incumbe- dijo Sakura levemente enfadada- La vida sexual mis y de Naruto no te incumbe.
-Eso significa que si lo habéis hecho cuando aunque estés empezando- dijo Ino con una sonrisa astuta- ¿Cuantas veces?
-¡¿Y por qué se supone que debo decirte eso?! - Le preguntó Sakura sonrojada.
-Vale voy a arriesgar- Ino lo pensó un poco- ¿ Es más de una?
Sakura no respondió, tan solo desvió la mirada.
-¿Unas dos o tres veces? - Sakura meneó la cabeza discretamente- ¿Sabes qué? No importa, lo único que importa es que eres una completa pervertida Sakura Uzumaki.
-Aun soy Haruno y no Uzumaki- le dijo la pelirrosa agradecida por su amiga rubia cambiar de tema.
-Tú lo has dicho - comentó Ino con una sonrisa- "Aún". ¿ Ya tenéis una fecha o algo?
-No aún no - dijo mientras comía su almuerzo- Ni siquiera hemos hablado con mis padres todavía.
-Naruto Uzumaki el chico que se enfrentó a los mismísimos Akatsuki y le teme a su esposa y futuro suegros- bromeó Ino antes de una breve carcajada.
-Si, tienes razón - comentó Sakura antes de reírse junto a su amiga.
Después de unos segundos riéndose Ino volvió a preguntar:
-Pero en serio, ¿ cuántas veces?
-¡Cállate de una maldita vez! - le gritó Sakura mientras se levantaba- Ya me cansé, me voy a comer ramen.
-¡Tú no vas a ninguna parte! - gritó Ino mientras corría detrás de ella- Tienes que comer algo sano.
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Por otra parte Karin se despedia de la rama principal de la familia Inuzuka tras un buen almuerzo.
-Vuelve cuando quieras, cachorra - dijo la madre de Kiba- Que sepas que siempre eres bienvenida.
-Muchisimas gracias por la comida Tsume-sama - dijo Karin mientras hacía una reverencia.
-Kiba, ¿por qué no acompañas a Karin-san a la florería? - le preguntó Hana; la hermana mayor de Kiba.
-No hace falta Hana-san - dijo Karin algo nerviosa - Sé cuidarme muy bien.
-Kiba insiste- dijo Hana antes de empujar a su hermano afuera- ¿A que si hermano?
-Pero... - Kiba intentó hablar, pero no pudo.
-Si, creo que es mejor dejar que mi cachorro se encargue de la hembra - dijo Tsume con una astuta sonrisa.
-¡Madre, no hables así de ella! -dijo Kiba- Karin no es un animal.
-Lo siento cachorro, es la costumbre - dijo Tsume- en fin, acompaña la chica hasta su trabajo y vuelve a casa.
-Si, señora - dijo Kiba algo nervioso.
Y así los dos empezaron a andar hacia la salida del clan Inuzuka.
-Que raro - ella miró a su alrededor- ¿Y Akamaru? El siempre está contigo.
-Akamaru está con muchas pulgas - explicó Kiba- es por eso que no puedo andar con el hasta que se descontamine.
-Entiendo - asintió Karin- Debe de ser difícil para ti, ya que Akamaru y tú sois uña y carne.
-sobreviviré - comentó Kiba - no es la primera vez que eso ocurre.
-Entiendo- comentó Karin con una discreta sonrisa mientras avistaba la salida de del distrito Inuzuka- Lamento que tu madre y tu hermana te haya obligado a acompañarme.
-No importa - le sonrió Kiba- Me agrada tu compañía.
-A mi también la tuya- le sonrió Karin antes de inconsciente notar que estaban dados de la mano- ¡Lo siento yo no...! - decía mientras apartaba la mano.
-¡No importa fui yo que...! - Karin le interrumpió.
-Podemos seguir andando dados de la mano si quieres - decía mientras giraba el rostro hacia otro lado para ocultar su sonrojo.
-¿E-estás segura? - tartamudeó Kiba.
-Claro que si - dijo aún sin mirarle.
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Era por la tarde y la Quinta Hokage estaba teniendo su reunión mensual con el consejo de Konoha.
Tsunade odiaba a todos los presentes sentados en aquella mesa - ya que Jiraiya y Shizune estaban en pié detrás de ella.
-Durante la reunión de este mes me gustaría formalizar un pedido de asilo político de la ex shinobi de la piedra conocida como Fuu - dijo Tsunade mostrando una foto de la peli verde.
-¿Y por qué deberíamos de dar asilo a esa niña?- preguntó Danzou.
-Fuu ha sido vendida a los Akatsuki por el consejo de su villa, ya que ella era la jinchuriki del 7 colas -explicó Jiraiya.
-Interesante...- sonrió Danzou de manera leve- Así tendríamos dos jinchuriki en nuestra poder, por primera vez haces algo bueno Tsunade.
-No te equivoques viejo inmundo- le insultó Tsunade- No quiero a Fuu-chan como arma y si reconocerla como ninja de Konoha.
-Manera tu lenguaje Tsunade- dijo la consejera- Estamos en una reunión oficial.
-Me da igual - dijo Tsunade- ¿Aprobais mi petición de asilo para Fuu o no?
-Yo lo apruebo - dijo Danzou con una discreta sonrisa.
"Te estaré vigilando viejo" - pensó Jiraiya- " Sé que tienes segundas intenciones"
Los dos consejeros restantes también votaron que si, pero no por las razones puras y genuinas que tenía la quinta Hokage.
Para aquellos tres ambos jinchuriki eran tan solo armas para utilizar en caso de una declaración de guerra y a ellos les encantaban la guerra.
-Bien, pasemos al siguiente tema -Tsunado puso unos papeles sobre la mesa y los acercó hacia los demás.
-¿Piensa despedirnos? - se mofó Danzou mientras se reía a carcajadas con el papel en manos - ¡Tú no tienes el poder para esto Tsunade!
-Lo sé, primero debo convocar una reunión con los clanes principales y después enviar una petición firmada hacia el señor feudal.
-El señor feudal jamás aceptará esta petición - dijo Hamura.
-Claro que lo hará- dijo Tsunade segura de si misma- Después de saber sobre el caso de la masacre Uchiha lo hará.
-¡Eso es alto secreto del ANBU! - dijo Danzou- ¿Como lo has...?
-No importa- dijo la quinta Hokage seria- Lo que importa es que sé la verdad y al actual señor feudal no le gustará para nada esto.
-Está bien- Dijo el líder de raíz antes de levantarse- Hagamos una apuesta. A ti te gusta apostar, ¿ Verdad Tsunade?
-¿Y que quieres apostar? - dijo la Senju con una sonrisa.
-Si consigues la firma del señor feudal aceptaremos la derrota - dijo Danzou.
-¿Y si pierdo? - le preguntó la Senju.
-Si pierdes tendrás que darme tu puesto de Hokage - le miró de reojo.
-Acepto - dijo Tsunade.
-¡Tsunade-sama!
-Tsunade...
Hablaron Shizune y Jiraiya al mismo tiempo.
-Pues disfruta de tus últimos semanas como Hokage, Tsunade-sama. - esto último lo dijo con un tono burlesco
Y así todos salieron de la sala dejando a Tsunade, Shizune y Jiraiya solos.
-Si piensas utilizar a Naruto como arma secreta, que sepas que él no lo hará- dijo Jiraiya.
-Lo hará, porque esto es para un futuro mejor para Konoha. - le respondió Tsunade.
-No la hará por qué estás acciones se harán en las próximas seis semanas y Naruto no piensa abandonar a su prometida ahora que está embarazada.
-¿Y que me propones? - preguntó la rubia Senju.
-Deja que yo me encargue de esto cuando llegue el momento - dijo el sanin de los sapos.
-Confio en ti Jiraiya-sama - dijo Shizune haciendo una reverencia.
-Perfecto - dijo mientras caminaba hacia la ventana- Y cariño, ¿ qué tal si probamos lo de la página 344 hoy por la noche? - le preguntó Jiraiya con una sonrisa.
-No hables de estas cosas aquí pervertido- dijo algo sonrojada.
Jiraiya tan solo sonrió antes de irse.
-Tsunade-sama - Shizune se le acercó a la rubia Senju- Usted conoce su historial con las apuestas y...
-Sé lo que hago Shizune - dijo la Senju.
"Ojalá no estés mintiendo Tsunade-sama"
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Después de una larga jornada cortando árboles y cargando los troncos hasta la carpintería más cercana que acepto el proyecto del rubio por un precio no muy razonable. Naruto había decidido hablar con su madre antes de volver a casa.
-Me alegra que tu proyecto va de viento en popa cariño- dijo la pelirroja.
-Tardaran un par de dias en estar listo el pedido, así que aprovecharé para estar con Sakura-chan- comentó el rubio feliz.
-¡Genial! - dijo la pelirroja- Dile a tu rosada que la estaré esperando para ver a mi nieta.
-Antes de irme quiero contarte algo- le dijo el rubio mientras se levantaba- Hinata está saliendo con Sasuke, ¿ te lo puedes cree?
-Supongo que esto es a lo que llaman "efecto mariposa".
-¿Efecto qué? - Naruto le miró sin entender nada.
-Efecto mariposa: es cuando un simple cambio causa alteraciones inimaginables en la línea del tiempo - explicó Kushina- Poe ejemplo, el hecho de que actúes por más madurez hizo que Sakura-san se interesara en ti, o el simple hecho de que le conteste a Konohamaru sobre el rasengan de una forma tan bien hecho, la hizo interesarse por la técnica de tu padre y así van las cosas hasta llegar a este momento.
-¿Con qué a eso le llamas efecto mariposa? - preguntó Naruto.
-Asi es -dijo Kushina - Un simple cambio puede tener serias consecuencias.
-Yo solo espero que Sasuke consiga hacer algo que yo no pude hacer comentó el rubio.
-¿Y que sería? - le preguntó su madre.
-Que Sasuke pueda llegar a amarla- dijo el rubio.
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Hablando de Hinata ella estaba mirando la luna desde su habitación.
De repente un ANBU aparece en su tejado.
-¿Hinata Hyuuga? - ella asintió- Tengo una carta para usted.
Al coger la carta el ANBU desapareció.
-¿De quien será? - ella abrió el sobre y se sorprendió al saber lo que decía:
"Ven a verme en el bosque, utiliza tú byakugan para localizarme"
-¿Sasuke-san?
Continuará
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