Pareja dedicada a: Gatto_P

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"¿notas por tu corazón o por el director?"

Cada día Jyugo recibía una nota anónima colocada cuidadosamente junto a su almohada

Recuerda que la primera nota decía lo siguiente:

"Tú tienes un brillo en tus ojos... que te hace tan único, que te hace ver más... bello"

No sabía quién le había mandado aquella nota, solo sabía que un tono carmesí se apoderó de sus mejillas
Supuso que, por molestar, habían sido sus amigos y compañeros de celda. Por ello fue a reclamarles que no bromearan de aquel modo, pero sus amigos, confundidos, le dieron la noticia de que ellos no habían sido los responsables de esas bellas palabras impresas en papel

Entonces... ¿quién era?

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"Ojalá éstas paredes que nos separan no existieran, ojalá pudiese estar contigo ahora mismo, ojalá... pudieses amarme tanto como yo lo hago"

Fue la segunda carta recibida al día siguiente. Jyugo volvía a sentir como sus mejillas se calentaban levemente y ahora su corazón palpitaba con un poco más de velocidad.
No sabía lo que sucedía con él y esas notas románticas, solo sabía que quería conocer a esa persona sí o sí.

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"Créeme que estás encerrado por dos cargos: robar mi corazón y ser tan bello"

La tercera nota. Esto inquietaba más al azabache. Asi que ese día escapó de su celda con un objetivo diferente a lo habitual: buscaría al autor de las notas
Fue de ala en ala, buscando a aquella persona, preguntando a cada prisionero o guardia que pasara por allí si ellos tenían algo que ver con esas notas, y todos dieron la misma respuesta:

-lo lamento, yo no he escrito nada de eso

Finalmente... Hajime atrapó a Jyugo y lo regresó a su celda

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"Lo que tú crees una maldición, yo le considero otra hermosa y única cualidad tuya"

¿qué número de nota era? Nadie lo sabe, se llegó a perder la cuenta de ello. Esa última carta le llegó días después del incidente de Año Nuevo. Esas palabras le llegaron a sacar una sonrisa al chico a quien iba dirigida la carta

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"Nunca creí en el amor... hasta que te conocí"

Fue la nota más reciente que había recibido hasta ese momento. Ya habían pasado varias semanas desde que comenzó todo ello y el chico de los grilletes se iba enamorando más y más de esas palabras.
Necesitaba conocer a su autor, pero nunca lo encontraba, aquel misterioso admirador no quería darse a conocer aun, y eso deaesperaba más a Jyugo

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"Tu corazón... me pregunto como cabe en tu pecho, puesto que es tan grande como mi amor por ti"

...

Aquella tarde, él había sido invitado al ala 3 para ser un espectador del pequeño cine que daban sus reclusos. Solo lo habían invitado a él de la celda 13 por el hecho de que les caía mucho mejor que al resto
Fue escoltado por su guardia hasta el lugar. Ya allí, vio muchas filas de butacas y frente a ellos la gran pantalla, todo eso en su patio.
Fue a acomodarse en primera fila, junto a sus anfitriones: Honey y Trois

Los minutos pasaban y el lugar se llenaba con más reclusos. Finalmente la pantalla se iluminó y comenzó a proyectar una película del actor favorito de Honey
Trataba de algun ninja super genial que tenía misiones geniales y toda la cosa, de todas formas, Jyugo no le prestó atención por pensar en su admirador. ¿Cómo sería? ¿Qué estaría haciendo en ese momento? ¿estará en aquel cine improvisado?

No lo sabía

Pensaba más y más en él hasta recordar aquella última carta que le envío y aquel bello mensaje

-Tu corazón... -escuchó una voz- me pregunto como cabe en tu pecho, puesto que es tan grande como mi amor por ti -alzó la mirada confundido y vio aquella enorme pantalla

Estaba el protagonista de rosados cabellos dirigiéndose a su co-estrella. Esas palabras...

-Honey -llamó el menor- e-eh... ¿esa frase...?

-Shh ahora no -le calló el pelimorado sin despegar la vista de la pantalla

Era obvio que si no era de la película, Honey no se molestaría en verlo. Entonces, decidió algo que parecía tonto

-"Lo que tú crees una maldición, yo le considero otra hermosa y única cualidad tuya" -recitó en voz baja y rápidamente el mayor le volvió a ver

-¿viste "La Maldición de la Princesa"? -preguntó sorprendido

-solo sé esa frase y muchas más -respondió- "Créeme que estás encerrado por dos cargos: robar mi corazón y ser tan bello" -citó

-esa es de "La Prisión de Bambú" -dijo sin titubear

Una a una fue diciendo las frases y Honey le decía el nombre de las películas a las que pertenecían

-¿sabes lo más gracioso? -preguntó Honey, a lo que Jyugo negó- cada película de esas han sido interpretadas por el mismo actor -dijo señalando al ninja que estaba en la pantalla

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Volvió a escapar de su celda, pero esta vez se dirigió a la celda 11, la celda donde habían mandado a su excompañero de celda. A aquel ninja mentiroso desde el primer día

No le importo el hecho de que hubiese alguien más en la celda o no, solo necesitaba ver de frente a aquel recluso. Con sus habilidades abrió con facilidad la puerta y de una patada la abrió por completo, dejando ver a aquel chico ninja sentado en medio de a habitación, asustado por la inesperada visita del azabache

-¡¡Tsukumo!! -grito molesto Jyugo aproximandose a él, haciendo resonar sus pasos

Lo tomó del cuello de la camisa y lo halo hacia abajo para tenerlo cara a cara. Tsukumo veía como de sus ojos, Jyugo emanaba ira, aunque también estaban cristalizados, sabía que se iba romper

-¡¡dime la verdad!! -exigió molesto

-¿cuál verdad? -preguntó

-¡¡no me estes jodiendo ahora!! -exclamó- ¡tú sabes muy bien de lo que estoy hablando! dime... ¿has sido tú quién me manda esas notas?

El lugar se inundó de un profundo silencio, en el que ambos solo se miraban a los ojos hasta que al final, Tsukumo se digno a hablar:

-¿y qué si así fuera? -no más de dos segundos pasaron cuando la palma del menor se estrelló contra la mejilla ajena

-maldito bastardo -mascullo Jyugo haciendo un esfuerzo enorme por no llorar- dime... ¿de dónde has sacaso esas bellas y profundas frases?

-Jy-Jyugo...

-responde -ordenó molesto

Tsukumo le miraba, pero no respondía. En todo caso, no hacían falta palabras para confirmar aquel hecho

-todo este tiempo... me recitabas frases de un simple guión...

-Jyug-

-¡palabras de alguien más! -interrumpió molesto- caíste tan bajo al tratar de enamorarme, no con tu corazón,sino con un guión barato... pero más bajo caí yo al enamorarme así -sollozó mientras lágrimas caían de sus cuencas

El lugar se volvió a sumergir en un horrible silencio donde solo se escuchaba el llanto del chico de los grilletes

-te amo -fueron las palabras por parte del ninja que rompieron el silencio- lo hice desde el momento en que te vi

-por favor Tsuk-

-me encantó todo de ti -interrumpió sin problema alguno el mayor- entre tus coloridos y extrovertidos amigos, solo me llamó la atención tu forma callada y reservasa. Quería ver una nueva faceta tuya, el cuando sonreías, cuando disfrutases algo, y más importante aun... quería ser la razón se tu felicidad... -hizo una leve pausa para mirar a los ojos al más bajo- las palabras me asustan, más cuando yo las ocupo, pues sé que a alguien herire, ya me sucedió. No quise arriesgarme a hacerte daño, por ello... agarré frases ajenas. Pues supuse que... si eran mías lo hecharía todo a perder... Jyugo, te amo y te juro que esto no es parte de algún guión

Tenía miedo. Aquellas palabras solo salieron sin pensar, con el corazón guiandolo y este creyendo ciegamente. Cerró los ojos para no ver la siguiente acción del menor, cosa se la que se arrepintió de haber hecho al sentir una presión sobre sus labios. Ya sabía se que se trataba y no dudó en intensificar el beso

Sus lenguas hacían una batalla entre ellas, para lograr dominar en aquel acto de amor, uno de los amores más puros. Ambos se necesitaban y habían esperado demasiado para aquel momento, la espera valió la pena

No importa cuanto rezaron para que nada les interrumpiera, cada oración fue en vano, pues la puerta se abrió de golpe, obligandoles a separse pues aquel era el guardia a cargo sel recluso 15

-¡¡maldito bastardo, deja se escapar!! -gritó molesto ignorando por completo la situación en la que estaban

No espero respuestas y tomó del cuello de su traje al menor y lo arrastró fuera de su celda

¿saben? Haré una campaña a favor de la extinción de los gorilas calvos y malditos y expertos en matar bellos momentos

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Los rayos de amarillenta luz se colaban por las ventanas de aquella gran prisión, y uno de ellos fue a parar al rostro de aquel japonés, quien al abrir los ojos, a parte de la luz, lo primero que vio fue un papel doblado cuidadosamente junto a él.
Sonrió instintivamente y tomó la nota en manos para luego abrirla y leer su contenido

"Te amo demasiado"
-Tsukumo

Era corta, demasiado, cosa que le importó poco pues lo importante era que en verdad lo escribió con su corazón y no por un guión

-yo también te amo -susurró con un sonrojo adornando sus mejillas

-FIN-

APLAUDID Y DADLE AL VOTO, pus esta mierda me costó :"v

No saben el humo que hice por pensar en frases tan bellas
Solo pensé en lo que me gustaría que me dijera mi novio... si tuviera uno :"V