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Honey×Trois II

Vale, sigamos con esta cuenta regresiva con esta pareja que, no, no fue a petición del público

La mayoría de comentarios pedían a gritos a los doa reclusos más guapos, y se los concedi... peeero, Ya la tenía en borrador desde hace mucho XD

De todas formas, gracias por comentar. Les dedico este one-shot, que por cierto me ha costado como no tienen idea

Disfruten~

●~~~●~~~●

"Huyendo del amor"

¿por qué?

¿por qué evadia sus muestras de afecto?

¿por qué debía ser tan frío con él?

¿por qué huyó ante tal declaración?

Esas eran las preguntas que rondaban dentro de la cabeza del recluso más guapo del sitio, el único. Ya no competía con su compañero, pues ya no estaba.

¿por qué se enamoró de él?

Era natural que al convivir tanto tiempo con él acabara enamorandose, mas fue despreciado. Sus flores o chocolates a la basura eran tirados
Los cumplidos eran venenosamente asesinados y a sus abrazos huía.

¿tan malo era que el estadounidense le demostrara amor?

Fue un día en que el mayor le dejó en claro lo que sentía con total sinceridad, pero fue también ese mismo día en que el recluso 03 escapó de la prisión. Nadie sabe como lo hizo, se sospecha que con ayuda de los del ala 13 y sus armas, lo logró. Dejando solo a Honey.
Su humor se pudrio más, mostrando su lado venenoso y ocultando su dolor

¿por qué se fue?

¿qué es lo malo que hizo al haberse enamorado?

Dolía. Dolía el no tenerlo a su lado, el no ver su rostro y sus bellos orbes rubíes y esa sonrisa tan cálida. Dolía el quererlo tanto, el querer besarlo, mas nunca lo haría.

Después de varios meses reflexionando en su celda en solitario, llegó a una conclusión. Supo cual fue su error

-fue el dejar salir mis sentimientos... así... ¿de qué sirve vivir?

~●~

-¡quitense! -exclamó aquel hombre con cabellos bien cuidados

Corría entre varios pasillos en dirección a la oficina de la alcaidesa, quien lo llamó para reclutar a un nuevo viejo prisionero.
Esperaba que aquello no fuese una broma, aunque era poco probable de que asi fuese con ese asunto tan delicado que lo sintió hacia ya dos años. Después de varios pasillos, llegó a su destino y, al abrir la puerta, pudo admirar a aquel hombre que parecía no haber cambiado en lo más mínimo, salvo unas facciones más masculinas.

-Kiji -habló la mujer- seguirá siendo tu recluso

-pues bienvenido sea, recluso 03 -habló mientras se acercaba al peliverde con lágrimas en los ojos y lo abrazaba

~●~

Aquellos pasillos se le hacían tan familiares, tanto que se sorprendía de saber de memoria la ruta aún después de dos años.
Se sentía inquito por volver a aquel sitio, por volver a pasar sus días entre cuatro paredes, por volver... a verlo... o eso se podía suponer

Sus nervios se intensificaron al estar frente a la pyesrta de su antigua nueva celda. Tomó aire antes de que el guardia abriera la puerta e ingresar a la celda.
Estaba todo tan oscuro y se sentía un horrible olor, ha encerrado y humedad, hacía calor, por poco y se sentía el vapor.

-¡por dios, recluso! -exclamó Kiji tomando la delantera y precionando el interruptor de la luz, haciendola presente- ¡mira el chiquero que tienes y tú compañero tan incómodo que esta! -reprendió

El recluso 03 vio en un rincón un bulto bajo unas sábanas, se veía que tenía las intenciones de no salir a recibirle, aun sin el conocimiento de quien era.el guardia volvió a reprenderle y recibió un gruñido como respuesta, y no más.
Kiji suspiró molesto y se retiró, dejando solos a ambos reclusos en un sepulcral silencio. Trois estaba demasiado nervioso e incomodo por el sitio al que su compañero se había empeñado por mantener en orden. Por tomar la palabra estaba cuando su compañero tomó la iniciativa

-has lo que quieras, no te detendré -habló fríamente- solo no me molestes y no tendremos porque interactuar

¿era real?

¿no estaba soñando aquella voz?

Trois sintió un vuelco en el corazón que se hizo más intenso al ver como su compañero se levantaba con pesadez y se dejaba ver. Sus alborotados cabellos morados, sus orbes sin vida que descansaban sobre grandes ojeras. Se veía tan... miserable

-Ho-Honey... -murmuró asustado

Al escuchar aquella voz que tanto amaba, el estadounidense levantó la mirada y lo volvió a ver. Se veía tan hermoso.
No sabía que hacer, no sabía si podía levantarse e ir y abrazarlo, o solo quedarse allí, sin derecho alguno. No sabía si aquello era un sueño o la realidad. No sabía si reír por aquella broma de su mente o llorar por aquella tan bella realidad.

-Trois... -fue lo único que llegó a articular

-¿Qué te sucedió? -preguntó con temor

Parecio que Honey lo pensaba. Pensaba en cual de todas las cosas que le sucedieron desde hacía dos años, como su vida se hundió de a poco. Finalmente, contestó:

-el amor -respondió a secas- fue lo mayor que me ha sucedido -bajó la mirada

A Trois se le encogió el corazón ante aquellas palabras

-Trois, necesito que me respondas algo -pidió- ¿por qué? ¿po-or qué te escapaste? -preguntó conteniendo las lágrimas

-es complicad-

-¡no me vengas con eso! -gritó molesto- ¿fue por mí? ¿fue porque te amé? ¿porque te amo? ¿porque te daba pena estar junto a mí? -preguntaba desesperado- ¡contestame! ¿¡fue por mi culpa!?

-¡¡sí!! -le respondió a gritos- ¡fue por ti que yo me escape! ¡por ti me di a la fuga por dos años! ¡por ti me fui a diferentes países mucho más lejos de aquí! ¡no te quería ver! -gritó furioso, pero rápidamente cayó en cuenta de que había dicho y se arrepintió, y más al ver como las lagrimas salían de sus olivas orbes- no-o Honey... yo-o-

-buenas noches -le interrumpió mientras se ocultaba nuevamente entre sus sábanas- haz el favor y apaga la luz -con aquellas palabras se dio por acabada la conversación

~●~

No lograba conciliar el sueño, por más vueltas que diera en aquel colchón, no lo lograba. No podía sabiendo que él estaba cerca de sí.

Se sentó en su sitio y vio la hora, estaban tan cerca de la media noche y no logró pegar ni un ojo y desesperado se sentía por ello al no estar acostumbrado a ello. Giró su mirada y vio al mismo bulto de sábanas que le daban la espalda.

-lo siento... -susurró al bulto durmiente- te seré sincero, ya que no puedes escucharme, es mejor, pues no creo encararte... -tomó aire y continuó- escapé de ti... de tu amor... tenía miedo de que todo fuera un juego, como siempre lo hiciste con cada mujer que conociste. No iba a ser tu juguete y me deshice de tu afecto... no quería ilusionarme y debía alejarme, mientras más lejos, mejor. Ahora, solo quiero que todo vuelva a como era antes. Disculpame por no haberte... por... po-or...

-¿ser un idiota o por no corresponderme? -preguntó el bulto, lo que sobresaltó al francés

Honey se levantó y lo encaró

-por huir

-FIN-



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