POV AUTORA:

3000 atrás...

Él heredero al trono del rey de los demonios se encontraba mirando los desastrosos parajes del mundo demoniaco cuando diviso a lo lejos varios pares de alas emplumadas, las cuales solo podían pertenecer a sus peores enemigos...las diosas.
Sonriendo macabramente, invoco sus "alas" y volo a toda velocidad a su dirección. Al llegar se encontró con varios ángeles espías rondando por él territorio de su hermano estarrosa.

Meliodas: tonto estarrosa, como se le ocurre dejar de vigilar?-se pregunta enojado

Aterrizó amenazante frente al pequeño grupo de espías, vio como los 3 hombres sacaban sus espadas contra él.

Meliodas: je...ridículo.

En un abrir y cerrar de ojos los detroso a loa tres y les arranca las alas como trofeo, de pronto sintió una flecha encajarse en su hombro, vio al cielo y se encontró con una diosa castaña y ojiverde con un arco y flecha apuntandole.

Xxx: no te muevas.-gruño mirándolo con rabia

Contrario a lo que se esperaría de él, meliodas obedeció la orden sin chistar.
La diosa aterrizó frente a él sin dejar de apuntarle.

Xxx: nombre.-exigió

Meliodas: meliodas. Tu nombre?

Xxx: isabella.

Meliodas: que hacen en territorio demoniaco?

Isabella: vine por los súbditos del arcangel mael pero...parece que te encargaste de ellos. Dame una Razón para no matarte, demonio?-preguntó tensando él arco

Meliodas:1-dispara y te mato, 2-pues probablemente ella se entristesca. Parece que te tiene estima y si yo te mato, se pondrá triste.-dijo señalando al cielo

La castaña miro en la dirección señalada y se encontró con una diosa peliverde con heterocromia, tiendo un ojo dorado y él otro azul.

Isabella: hermana!

Ante la distracción, meliodas sonrio y lanzo su ataque contra la peliverde...pero por alguna Razón, al verla a los ojos, no pudo hacerle daño alguno.
Ambos se miraron a los ojos y quedaron perdidos, había algo que nacio en ambos al verse.
Aprovechando que meliodas no reaccionada, isabella tomo a la peliverde del brazo y ae la llevo de allí rapidamente.
Ambas volaron hasta llegar al territorio de las diosas.

Isabella: hermana, que hacías allí? Podrían haberte herido.-regaño molesta

Xxx: fui a buscarte pero...él no iba a lastimarme, él no quería lastimarme.

Isabella: es un DEMONIO, elizabeth, ellos nos odian. No se porque no te mato pero me alegro de que al menos no tienes ni un rasguño.

Elizabeth: hermana, él no es igual...su mirada cambio..

Isabella: los demonios no cambian, elizabeth, prometeme que no volveras a acercarte a los demonios.-dice tomandola de los hombros

Elizabeth: pero...

Isabella: prometelo, lizy, prometelo.-pide

Elizabeth: lo prometo, bella.-dice cabizbaja

Isabella: gracias. Ven, hay que decirle a mael lo que paso con sus ángeles.

Elizabeth: si, hermana.

Desde ese día, isabella comenzó a notar cambios en la actitud de su querida hermana, nunca estaba en los entrenamientos, se iba muy temprano en la mañana y regresaba casi a media noche, sonreia cada vez mas, era mas alegre, espontánea...todos se extrañaban al ver ese cambio.

Mael: isabella

Isabella: arcangel mael, puedo ayudarle en algo?

Mael: sabes lo que le sucede a tu hermana elizabeth?

Isabella: no lo se, ha estado actuando muy extraña desde hace semanas.

Mael: hump...él amor hace cosas extrañas.

Isabella: amor!?

Mael: nada mas podría explicar él comportamiento de elizabeth. Alguien a logrado conquistar su Corazón.

Isabella: él problema es saber quien. Mi hermana es muy confiada, espero que ese sentimiento no le este nublando en juicio.

Mael: nublando él juicio? Querida, cuando el amor llegue a ti, puedes estar segura es que incluso tu estaras cegada.

Isabella: lo dudo, aun no nace nadie que se logre ganar mi cariño a excepción de elizabeth.

Mael: llegara, querida.

Mael se fue, dejando sola a la preocupada castaña.
Isabella se quedo pensando en las posibles parejas de su hermana hasta que se decidió por seguirla, elizabeth era tan ingenua como reservada y estaba segura se que no le diría nada de su koibito.
Siguió a la peliverde hasta un claro muy alejado de su territorio, era parecido al bosque de las hadas, ocultando su presencia se escondió tras un árbol por donde podía ver a elizabeth.

Xxx: llegaste.

Elizabeth: no podía dejar de venir, amado mio.

Isabella: esa voz...-pensó

Miro un poco mas allá del río donde estaba elizabeth y vaya la sorpresa que se llevo al ver a su hermana abrazada cariñosamente con un DEMONIO.

Isabella: Elizabeth!?-exclamo shockeada

Continuara...