Una tormenta sacude el barco y estoy de nuevo en la canastilla que me dio la oportunidad de vivir. Muchas cosas han cambiado; ahora con mirada altiva y llena del poder que sé que puedo ejercer no solo para salvar mi vida si no la de todos estos hombres, me preparo para enfrentar los ataques de Njord según Aren.
La tempestad ha pasado una vez más, bajo del mástil y todos me felicitan por haber hecho bien mi labor, me siento útil, soy parte de algo. Una vez, un tiempo atrás fui parte de algo, algo que no me reclamó, que no me ha buscado ni lo hará por que nunca fui más que una parte, nunca fui el todo. Ahora soy el salvavidas de cada uno de ellos.
El costal que tanto me costaba cargar cuando llegué aquí hace unos meses; ahora no se siente tan colosal como antes. Termino mi rutina en la cocina y voy para con Aren. Es uno de mis pasatiempos en este momento, disfrutar de las peleas y combates que sostenemos él y yo ahora que he aprendido bastantes técnicas y trucos; aunque no ha querido mostrarme como matar a alguien pues dice que una vez que se hace, ya no se puede volver atrás. Es algo que marca la vida de una persona.
Todos aquí tienen su historia, y a cada uno le he cogido cierto aprecio, Aren como mi entrenador, Valko ha sido como un mentor, una especie de amigo y maestro al mismo tiempo. He descubierto que no son malos realmente, solo que escogieron un estilo de vida ilegal y con nada de honor con lo cual sobrellevar su dolor u olvidarse de su vida anterior. Solo negocios, nada personal, es la filosofía de Valko en cada trabajo.
No es que esté de acuerdo pero muestra que en realidad no disfrutan con el dolor ajeno ni de hacer el mal.
-Hola- Aren me saluda al verme llegar y revuelve mi cabello, un gesto que ha comenzado a hacer hace algunas semanas- hoy tendremos combate.
Era un día lleno de sol después de que se disiparan las nubes de esta mañana, el calor y la humedad hacían que todo se volviera pesado y el aire me faltaba pero aún así, como cada vez que esto sucedía, me sentía llena de emoción. Era mi vida ahora y muchas cosas fuera y dentro de mi habían cambiado. Lo decidí así.
Mi entrenador se quitó la playera aún algo húmeda y tomó su arma. Decididamente yo también tomé mi cuchillo, me había servido bien durante este tiempo. Nos pusimos en posición y comenzamos nuestra danza.
El fue el primero en atacar después de analizarnos un momento, tratando de quitarme el cuchillo hizo un movimiento engañoso hacia la derecha, pero un atisbo de sonrisa en la comisura de sus labios lo delató, fui a la derecha por que sabía que en el ultimo momento giraría al lado contrario y así lo hizo. Un golpe no dado cansa más al atacante que uno asestado; ese era uno de los consejos que me había dado.
Para tomar impulso y regresar al mismo tiempo de realizar otro ataque, intentó golpear con su codo mi espalda, lo logró. Ya hacía algún tiempo que sus golpes no me tumbaban de bruces al suelo con cada impacto pero aún así dolían.
Hice una mueca de dolor pero eso solo me lleno de adrenalina, giré sobre mis talones y me agache al tiempo, logré asestar un golpe detrás de una de sus rodillas para desestabilizarlo, me levanté y le dí un golpe en el oído para terminarlo de desequilibrar. Un segundo después, estaba en el piso, me puse a horcadas sobre él con mi cuchillo amenazándolo para enseguida sentir como sus pies pasaban frente a mi para impulsarme hacia atrás, con un traspié me alejé de él y terminamos en la misma posición de inicio.
-Bien jugado chica...- se abalanzó hacia mi y en un segundo con un golpe en el estómago que logró darme al no poder preveerlo, me sacó el aire, en este lugar el juego limpio no existía, estando arrodillada, sin aire, y algo mareada; visualicé el punto débil de todo hombre, solo logré dar un golpe casi sin fuerzas pero fue suficiente para que se agachara al mismo nivel que yo por el dolor, ambos nos estábamos recuperando mientras aquellos que ya tenían por costumbre observarnos cuando había combate, se reían de la situación.
En mi rostro había un sonrisa triunfante, ya tenía aire en los pulmones y me acercaba a mi oponente, un codazo en la nuca sería suficiente para derrotarlo, tomé fuerza y al querer dar en mi objetivo, él se movió y atajó mi codo junto con la mano con la cual sostenía el cuchillo torciéndome la muñeca y haciendo que lo soltara. Puso su pie detrás mio y me tiró al suelo. Ahora él estaba encima mío sosteniéndome ambos brazos y una pierna, no podía hacer nada.
-Nunca te confíes- dijo sonriendo arrogantemente
Sin quitárseme de encima, me miró a los ojos, sus iris que para mi siempre habían sido un misterio se intensificaron y por un momento me pareció que habían cambiado, una fuerza me atraía hacia ellos nuevamente, como cuando recién llegué.Nos quedamos quietos un instante, mirándonos con la respiración agitada
-¡Bravo!- exclamó el capitán al salir de entre la multitud, rompiendo la tensión y haciendo que Aren se levantara por lo que me dejo vía libre para hacerlo también. Valko me dio al mano para impulsarme.- Veo que has mejorado bastante, me parece bien. Hace casi un año que nos acompañas y -"¡¿dijo casi un año?!"- tenía que darte esto.
Frente a mi había una daga, una muy parecida a la que manejaba Aren solo que ésta tenía el mango de metal labrado y una "V" de podía apreciar en la hoja "que original de Valko poner su inicial en todo" pensé pero no dije más que un - Muchas gracias
Aren tomaba su playera del suelo pero algo en él me llamó la atención, no pude dejar de observarlo, eso causo que se él sintiera mi mirada y volteara, quité mi vista rápidamente pero fue muy tarde. Me había visto.
Estaba en la cubierta del barco, no había nadie, solo oscuridad.
-Muchas cosas han pasado Nadja y necesitamos que pronto estés lista.
Una mujer pelirroja, una que había visto antes en un recuerdo o algún sueño me hablaba. Estaba vestida de una especie de túnica de tela liviana y blanca, se acercaba a mi. Traía puesto un collar de oro que refulgía como el sol y una capa hecha de plumas blancas con algunos detalles en gris y café.
>El reino de los Vanir te necesita, estamos cerca de una batalla y tu eres la llave de nuestra victoria- su voz parecía un eco a pesar de que estaba a un lado mío- querida- dijo acariciando un mechón de mi cabello- has pasado por mucho pero valdrá la pena. Sólo debes ser valiente y aceptar tu destino
-Siento que te conozco... ¿quien eres?- comenté pues me transmitía una extraña sensación familiar pero intimidante al mismo tiempo
-Tu eres mi querida hermana, no temas yo te estoy cuidando.
Un destello de luz iluminó todo mientras el sueño en el que había estado sumergida se desvanecía de mi mente
***
EDWARD--
Este año será diferente, no he perdido la esperanza de que Nadja vuelva, mi madre ha estado muy enferma y quiere que me case pronto con Audrey pues aquella chica que prometí presentarle desapareció sin dejar rastro. Ahora piensa que la engañé por no querer estar con Audrey pero pienso que realmente es muy pronto. Con 17 años no pienso estar preparado para casarme y atarme de por vida con alguien que realmente no quiero ni podría querer.
Tengo que seguir por ahora con esta farsa pero no puedo evitar pensar que en cualquier momento regresará. Las chicas ahora se llevan mejor con ella pero encuentro todo muy extraño.
-¡Holis! -grita Pris al llegar a la mesa- Audrey me dijo que la esperaras a la salida, quiere ir de compras contigo
Giro los ojos con fastidio
-No seas así, ella ha cambiado y le gustas en verdad, dale una oportunidad, después de todo son novios
-Pris, ¿es enserio? ¿que paso con lo Nadja? ¿acaso tenemos que hacer como si no hubiera pasado nada?
-Sabes que no me gusta hablar del tema, ella no volverá quizá esté muerta y no podemos seguir congelando nuestras vidas por algo que pasó hace un año. Audrey ..
-¡¿Ahora la defiendes?!Te puso un taller y ¿con eso dices que ella cambió?...te vendiste
-Ed querido, permíteme recordarte que no estás en posición de reprochar nada, tu eres el primer beneficiado con esa chica ahora, te recuerdo que tu economía no es la misma que hace 3 meses y ahora dependes de ella para salir del hoyo, yo no me vendí pero si lo quieres ver así, tu serías el primero en haberlo hecho.
Se alejó con su bandeja de comida sin tocar
-¿Y ahora que tiene?- me interrogó Ethan al ver que llegando él la pelirroja se había ido
-Audrey
-¡Vaya!...¿sigue con eso? Es cierto que ha cambiado pero solo de tácticas y al parecer le están funcionando, ahora todos parecen quererla cual si fuera la reina Isabel en persona...¿estás bien?-preguntó al notar mi cara.
-No... me vendí Ethan. Nadja...
-Oh, no te aflijas. No te vendiste amigo mío, nos venden, al igual que si fuésemos ganado. Nadja volverá , es una chica fuerte. La policía dice que parece que vieron a una chica con su descripción en Nueva York
-¿Y que haría ella ahí?
-No lo sé, mi servicio secreto ya fue a investigar
-Hoy iré con su abuela
-¿Sigues en eso?
-Si, no importa lo que digan yo siento que algo oculta
-No me vas a decir que la pobre anciana tiene algo que ver con la desaparición de su nieta ¿verdad?
-No lo sé
***
Había tomado la costumbre de ir a visitar a la abuela de Nadja de vez en cuando. Tomábamos un té mientras charlábamos pero siempre era lo mismo, no obtenía nada de información. Quizá solo lo hacía para sentirme más cerca de la rubia pero ¿y si algún día tuviera suerte y encontrara alguna pista?
-Buenas tardes señora Nielsen
-Llamame Syd muchacho, te lo he dicho cada vez que nos vemos.
Me deja entrar y mientras nos dirigimos a la estancia la noto algo cansada
-¿Se encuentra bien?
-Si, solo algo cansada, no pude dormir bien...¿un te?
-Claro, muchas gracias
Como siempre me deja instalarme en el sofá y va por la merienda. La señora Selena ha optado por aislarse en su habitación y su esposo, bueno, digamos que ahora que toma medicamentos para dormir se le nota menos zombie. La única beneficiada en todo esto es la empresa de embarques para la que, ahora que vuelca todo su sentir en trabajar, se ha duplicado en ganancias.
-Esta vez has venido muy pronto, esperaba tu visita quizá en una semana- comentó Syd al volver con el té
-Quería verla
-Más bien no aguantas la ansiedad de no saber nada de Nadja ahora que iniciaron las clases de nuevo¿cierto?- me intriga como sabe tantas cosas esta señora, es por eso que pienso que algo oculta
-Si
-Y como todas las veces muchacho, te puedo asegurar que mi nieta volverá, en su momento, pero lo hará
-Algunos piensan que no
-Si lo dices por mi nuera y mi hijo, ellos tienen sus razones, no me creen, prefieren vivir atormentados, que darse la oportunidad de creer- acusó antes de sorber de su taza delicadamente
-¿Pero como puede usted estar tan segura?
-Hijo, tienes que confiar en lo imposible para hacerlo realidad- sonrió como si fuera lo más obvio del mundo
Esas palabras aunque sonaran extrañas, viniendo de aquella mujer de avanzada edad, me causaron escalofríos por alguna razón
>Todos nacemos creyendo en que podemos volar, que en algún momento todos nuestros sueños pueden volverse realidad, que podemos vivir una gran aventura; pero con el tiempo y las preocupaciones de esta vida frágil y terrena, nos amargamos, nos volvemos incrédulos a lo intangible y por tanto, frustrados, angustiados y por ello no logramos nada.
-Creo que Nadja está viva y tengo la esperanza de que puede volver
-Chico, mantén eso, no lo dejes ir, aférrate a ese sentir y no permitas que nada ni nadie te lo quite... así podrás ver ...que todo es posible.
Media hora después estaba saliendo de casa de los Nielsen con mucha más tranquilidad, siempre estas visitas tenían ese efecto en mi, cuando recordé que había dejado mi celular sobe la mesita de la sala.
Volví a la puerta y la toqué pero se había quedado entre abierta, con la precaución de la descortesía, entre rápidamente y al tomar mi teléfono escuché un grito proveniente del segundo piso. Subí preocupado de que algo hubiera pasado pero con sigilo, quizá hubiera vuelto la desgracia sobre esa familia y debía ver a que me enfrentaría ¿ladrones? ¿traficantes? ¿asesinos?
-¡No podemos aplazar más esto, debemos decirle!- alzaba la voz una mujer
-¡No! aún no, le falta mucho que aprender- contestó la abuela Nielsen. No es bueno escuchar las conversaciones pero quizá esto sea parte de lo que oculta
-Eso lo puede hacer después por ahora necesito comenzar con su entrenamiento y que conozca a mi padre antes de que sea tarde
-Ella está a salvo
-Por ahora Syd, tu sabes que solo es cuestión de tiempo antes de ser detectada.
-Está bien, liberaré el secreto
-Gracias
Un sonido extraño comenzó a estremecerme, un crujido bajo mis pies y un temblor me congeló, ese sonido casi como el eco de un bajo que sigue y sigue envolvió aquel lugar, la abuela Nielsen soltó un grito desgarrador al tiempo que abrí la puerta para ver que ocurría. Una onda ultrasónica me impacto y me tiró al suelo, solo pude ver a la anciana que yacía sobre la alfombra de aquel cuarto con decoración adolescente antes de que mis ojos se cerraran.
***
-¿Descansaste?- fue lo primero que escuché al abrir los ojos, era la voz de Syd.
-¿Que paso?
-Te quedaste dormido muchacho, supongo que estabas muy cansado, llevas casi una hora así
-Lo lamento mucho, que descortés de mi parte, supongo que se sitió ofendida al no prestarle atención, debió reprenderme.
-No, para nada, se te veía tan a gusto cuando volví de dejar las tazas que no quise molestarte
-Muchas gracias por su hospitalidad, debo retirarme.
Me despedí de Syd, esperando pronto poder volver a visitarla. Esa dulce anciana escondía algo, algo lo bastante grande como para mentirme así. Tenía el dolor del golpe en la cabeza y un rasguño en un brazo, el celular en mi bolsillo derecho. Cuando llegué lo llevaba en la chaqueta, solo cuando subí y escuché la conversación fue que lo metí en mi pantalón para dejar libres mis manos. ¡¿como rayos pudo esa anciana llevarme al sofá ella sola?! ¿con quien hablaba Syd si no había nadie más en la habitación? ¿y que fue aquella explosión?
Todo es muy raro, y lo voy a descubrir.
***
NADJA--
Estuve fregando cubierta por la tarde y tensé las velas sueltas, era una tarea que por lo general no me ponían pero me alegraba poder hacerlo y estar en lo alto del barco. Era una ilusión pero el rapel nunca se alejaría de mi.
Saltando de un lugar a otro desde las alturas podrían bien decir que era una especie de parkour. Mi soga me permitía cual tarzán ir de un lugar a otro y a donde no podía llegar con ella, reptaba por las redes estratégicamene colocadas a lo largo de la embarcación.
Llega el momento de la comida y Copete pone ante mi más de 30 pescados que corto, limpio, quito escamas y les saco vísceras en media hora.
Mi cabello, ahora siempre en una coleta alta o trenza, no me quita visión ni me estorba en mis actividades
Humph y el húngaro llamado Kiev, por el incidente que causó en aquel lugar; me retan a jugar a lanzar cuchillos, me he vuelto muy buena en ello, puedo acertar al blanco a más de 8 metros, claro, eso me costó varias burlas y muchas hora de entrenamiento para ganar una que otra muda de ropa o sábanas nuevas. Con ello pude conseguir un colchón aunque sigo durmiendo en el almacén, lo cual es bueno, no debo compartir habitación.
Voy hacia mi lugar favorito al final de otro día más.
-Vi que me observabas- comentó Aren nada más acercarse al barandal que ya tenía por costumbre visitar antes de irme a dormir. Me relajaba ver la inmensidad del mar y sentir el aire fresco de la noche en mi rostro después de asearme.
-No lo hice... tu complejo de superioridad te engaña.
-Claro- dijo con ironía- me alegra que ya te hayas integrado, ya no eres la chica chillona y frágil de hace un tiempo.
-No soy chillona y nunca he sido frágil- sacando mi daga, le apunté amenazante con una sonrisa de lado en mis labios
-Jajaja no tienes que estrenar tu daga conmigo- bajando mi muñeca mirándome burlón- yo sé que esa actitud es solo tu forma de sobrevivir, no puedes fingir conmigo.
-Tu no me conoces- estaba llegando a un punto débil en mi y no quería permitirlo.
-Soy quien mejor te conoce Nadja- otra vez diciendo mi nombre con dulzura, ¿quien se cree?- aunque no lo creas sé todo sobre ti.
-De acuerdo, además de secuestrador, eres un acosador - solté con risa para quitar la tensión - que buen curriculum Aren
-Jajaja sé todo sobre ti desde antes de que estuvieras en el barco querida mía- me miró fijamente
Estaba asombrada por sus palabras y por el parecido de ese tono tranquilizador, de que me llamara querida tantas veces en sueños y ahora fuera de ellos, todo eso fue un poco escalofriante
-Te he esperado por mucho tiempo
¿Estaba jugando con mi mente? ¿Pero como podía saber incluso mis sueños? Quise salir de ahi corriendo, me di la vuelta y me detuvo con la velocidad con la que hubiera lanzado un golpe y me atrajo tan rápido hacia él que terminé frente a él aprisionada por su agarre y su pecho. Mis manos sobre sus antebrazos intentaban alejarme de él todo lo que fuera posible.
-No huyas de tu destino
-¿De que estás hablando? ¿estás loco?- lo que había visto en sus ojos tantas veces volvió, ese hipnotismo que me dirigía a una dimensión alterna, una de calma, volvió y se apoderó de mi. Deje de luchar, era como en mis sueños, sentía que lo conocía, desde hacía mucho tiempo y entonces fue como un recuerdo, como un trailer de una película pasando escenas del filme delante de mis ojos
Aren y yo de la mano huyendo. Un árbol enorme y debajo de el, nosotros tomados de la mano junto con otras personas. Un halcón que se convierte en una mujer pelirroja. Una serpiente cuya cabeza solamente, era del tamaño del barco. Un hombre mayor con ojos de mar y una mujer menuda a su lado sosteniendo su brazo que se parece un poco a mi.
Sentí algo extraño, como si hubiera entrado en mi algo invisible, algo que hasta entonce no sabía que me faltaba pero que al recibirlo me completaba, no sabía que sucedía. Como cuando recuerda uno un sueño que se había olvidado.
-¿Estas bien?- me preguntó algo preocupado
-No lo sé...¿Aren? - preocupada pero tiernamente- ¿Podremos vencer?
-Querida mía... juntos no podrán vencernos- me abrazó y se quedó callado, sobando suavemente mi espalda , entregándome un consuelo que tan desesperadamente me hacía falta en ese momento.
https://youtu.be/rtOvBOTyX00
***************************************************************************************Holis! mis peques consentidos les dejo un nuevo capitulo esperando les esté gustando esta historia... me llena de emoción poder plasmar esta idea que aunque no la tuve hace tanto tiempo, si estaba archivada hace un año aproximadamente.
Si no le entendieron a la ultima parte del capitulo, no se preocupen, todo se irá explicando conforme avance la trama, cada vez hay más misterios y más cosas fantásticas.
¿Que creen que haya pasado con la abuela de Nadja? y ¿quien será esa misteriosa voz que hablaba con ella? ¿Que les espera a Nadja y Aren?
Déjenme sus comentarios, ocurrencias, preguntas y demás que con gusto les contestaré y no se olviden de darle a la estrellita si les gusto y de recomendar esta historia,me ayudarían muchísimo.
Les dejo un super mega hiper empalagoso abrazo como simpre ...besitos mwa! bye.
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