-¿Estás bien querida?- preguntó levantándola

-Si, estamos bien- confundiendo a Frey- es que.. no es el momento- las palabras, la sonrisa y las manos de Gerda sobre su vientre explicaron la feliz noticia mejor que las palabras.

Thor había caído, apenas con fuerzas para respirar frente a Loki, quien gruñía con furia y amenazaba con devorarlo en un tris. Justo antes de ello, Aren se había trepado a sus lomos hundiendo rápida y hábilmente sus cuchillos. Loki se sacudía para poder quitarselo de encima sin éxito por lo que volvió a su forma humana. También aquel chico provocaba en él un sentido de una cuenta pendiente, un sentir de alguien que le había hecho daño. Lo había alejado de Nadja y en un momento crucial.

Ethan dio un puñetazo a su oponente, éste le contestó impactando la boca del estómago de moreno sacandole el aire. Loki se abalanzó para derribarlo pero Aren utilizó el mismo impulso para golpear con su rodilla en el mismo lugar anterior. Desde el piso , Ethan jaló la pierna de su oponente dejándolo a su lado. El moreno tomó el cetro golpeando desesperadamente el rostro de su contrincante la sangre de la boca de Aren caía al suelo. Éste bloqueaba algunos golpes, otros no, respondía unos cuantos y ambos rodaban por el piso intercalando quien llevaba la ventaja sobre quien en la lucha hasta que Loki puso el báculo frente al rostro de Aren y lo hizo resplandecer, disparando un rayo de luz verde oscuro, el cual impacto en su enemigo impulsándolo hacia atrás.

Loki caminó hacia éste mientras el caído intentaba incorporarse con dificultad, de una de sus botas saco las cuchillas que le quedaban, lanzándolas hacia el moreno quien los esquivaba con gráciles movimientos. Una de las hojas rozó a mejilla del enemigo, haciendo brotar un hilillo de sangre. Ethan se detuvo, pasó uno de sus dedos por la herida y luego lo metió en su boca.

-Has hecho un mal movimiento- comentó antes de lanzar furiosos disparos de luz desde su cetro hacia Aren, quien rodaba por le suelo intentando esquivarlos con lo que le quedaba de fuerzas; hasta que exhausto, no pudo más y fue impactado por dos bolas de luz dejándolo inconsciente.

Loki aprovecho a saciar  su hambre de venganza golpeando de todas las maneras que su retorcida imaginación cegada por la ira le dictaba hasta que al parecer, ya no respiraba más, cosa que no le podía importar menos.

Valko y Freya corrían en dirección a Nadja pero fueron interceptados y separados por Ratatosk que se había logrado liberar por fin de sus ataduras. Valko hizo una señal a su compañera pelirroja para que se adelantara

-Veamos si eres  hábil como tu ego cree- sugirió con tono juguetón. Rápidamente dio patadas a su antojo y golpes con la cola al capitán.

De un momento a otro, el dueño de la nave, se paró en seco, cerró los ojos y respiró profundo. Un pequeño silbido un instante antes de ser impactado de nuevo por otro golpe, le bastó para bloquear el ataque. El sonido, aunque leve y opacado por el bullicio de la batalla, le ayudaba contra su oponente, no ocuparía sus ojos, eso le haría reaccionar hasta que estuviera viéndola golpearlo. 

Aquí y allá, la espada de Valko contra el impacto de los ataques de Pris. En uno de esos, el filo de la hoja, fue a dar a uno de los muslos de la chica

-Idiota! Me has cortado- reclamó con dramatismo y un puchero- no es de caballeros, lastimar a una dama- fingiendo que comenzaría a llorar

-Señorita. Olvida usted dos cosas. Uno:- Bloqueó un golpe de su contrincante- que usted no es una dama pues manipuló a sus amigos- Pris golpeo el costado del capitán con su cola- Dos:- la empuñadura de la espada golpeo el rostro de la chica- Yo no soy un caballero- derribó a la pelirroja de otro golpe- ...Soy un pirata

Culminó su frase mientras la amenazaba con la punta de su espada  en el suelo. Piso la cola de la chica ardilla para evitar movimientos bruscos

-Lo lamento- contestó bajando la cabeza- lamento que seas un estúpido de mierda!- tomó una cuchilla que estaba cerca de su cabeza, jaló con la otra mano su cola y derribó a Valko, abalanzándose sobre él para enterrarle su arma en el pecho. Este soltó un sonoro quejido pero lanzó un último corte, quitándole la cola a la chica antes de que ésta saliera huyendo  sin correr por el dolor en su pierna y la sangre que emanaba la herida reciente.

Valko se arrastró hasta una de las paredes del salón para descansar. El charco de sangre alrededor de él, crecía a cada segundo y el dolor iba aumentando. Pronto sus extremidades se entumieron, el frío recorría su cuerpo, estaba mareado, confuso y empezó a  toser.

La visión se le nubló, mientras los pulmones le ardían, se le estaban llenando de sangre y no tardaría en morir por más que apretara la herida.

-padre...

-¿Victoria?

-He venido por ti

-Mi ... pequeña, no podré cumplir... mi promesa

-Shh.. tranquilo papá, has hecho lo que has podido, esto debía ser así.- Valko jadeaba y tosía sangre. Junto a él pudo observar una mano extendida en el suelo. Su dueño, el cual conocía ,estaba tendido con los ojos cerrados.

-Yo...Perdón... todo fue mi culpa, moriste y ambas veces....por mi. Estoy cansado, han sido muchos años....esta culpa- lloraba. -Ya no puedo... Ya no quiero

-Todo estará bien. Ven- extendiendo su mano hacia él. Valko la tomó y se levantó. Al instante se sentía lleno de energía y completamente feliz como cuando era un pequeño. No sabía donde estaba, ni el por que estaba en  medio de esa lucha tan bárbara solo sabía que estaba junto a una persona que amaba y eso le bastó para no hacerse preguntas mientras se alejaba junto a Syd. 

Solo por instante fugaz, miró hacia atrás fijando su atención en el cuerpo de un pirata cuyos cabellos oscuros le cubrían el rostro, sus brazos descansaban a los costados dejando ver una gran mancha carmesí en el torso. La mano de un chico, posaba en una de las manos de éste personaje, entonces el joven volteó y se encontró con un ojo gris y otro castaño, ambos  se encendieron en una luz roja cual fuego recordando como sacado de algún sueño lejano una frase que no entendió "Para tí será un regalo, un descanso... lo desearás".

Los enemigos estaban cayendo aunque con dificultad. Freya logró llegar a donde Nadja y Edward, que estaban refugiados detrás de algunos escombros.

Aren, después de colocar el sombrero de batalla de ala ancho sobre la cabeza del pirata, se encaminó a encontrarse con sus amigos. Su semblante totalmente duro,sombrío y la luz roja que refulgía en sus ojos intimidaba. Un soldado se le atravesó de camino pero el chico ni se inmutó, el zombie hizo amago de golpearlo pero al impactar su mano en el cuerpo del joven, cayó desplomado sin vida. Los demás lo observaron atónitos.

-Debemos llegar a Jormungard y matarla ya.

-Pero si la herimos, sale ese líquido viscoso que si nos toca, nos matará.- acotó Nad. Aren gruñó

-¿Que te ocurre?- Ed trató de acercarse

-¡No!, no me toques. Estoy en mi esencia pura, si algo o alguien me toca, terminará muerto, solo Nad, por su misma esencia podría resistir el contacto.

La mencionada lo miró sorprendida por un segundo para después observar la lucha a su alrededor y fijar su vista en un punto específico

-En ese estado... ¿eres capaz de morir?

-No... pero no durará mucho

-¡Bien! Entonces, tengo un plan...

Los lobos y algunos soldados estaban llevando la ventaja sobre Njord, Gerda, Frey y los demás mientras Loki con su magia ayudaba a Jormungard a desenredarse

-Bien... ahora, ¿donde sse habrá metido essa ratita?- siseó Audrey furiosa

-¡Ahora!- se oyó el grito que dio señal para que Freya saliera disparada atrayendo la atención de la serpiente

-¿Sabes? Nadie nunca te ha amado.. jeje y eso te lo digo yo que sé de eso

-Dissculpa- comentó indignada

-Quizá si fueras aunque sea un poco atractiva... un aspecto menos venenoso te vendría bien para agradarle a algún chico- gritaba con una sonrisa burlona

-¡Ah! ¡como voy a disfrutar matarte!- Amenazó la serpiente mientras la perseguía ahora que Freya se había puesto en una carrera frenética

Edward aprovecho para propinarle una paliza al dios de las artimañas apareciendo y desapareciendo frente a él  aunque su contrincante se negaba a responder pues aún lo veía como alguna especie de amigo y sabía que podría matarlo. Nadja se acercaba con sigilo. Tras varios golpes, el moreno se cansó y comenzó a molestarse

-¡Basta!- Falló un golpe con su cetro pero Ed seguía impasible- he dicho ¡basta!- con un fulgor de su cetro Ed salió disparado cuando volvió a aparecer.

-Cobarde, sin magia o trampas no eres nada, si fueras hombre usarías tus propias fuerzas.

Ethan sopesó sus palabras, quizá si lo derrotaba en sus mismas circunstancias pudiera verlo de nuevo como su igual, sin rencores. Dejó su cetro en el suelo y se enfrentó a Ed. Con una patada circular llegó a la cabeza del rubio, éste trastabilló sin usar tampoco su don pero con un gancho izquierdo logró impactar el costado del moreno, a su vez él con el puño derecho golpeo el estómago del humano. Edward arremetió con su cabeza  hacia Ethan para llevarlo al suelo, antes de que eso sucediera, Loki impacto con ambos puños entrelazados en la espalda del rubio y un rodillazo en la cara. Ya en el suelo le aplicó una llave sujetándole una pierna y un brazo hacia su espalda. Ed gritaba de dolor.

Pero un grito aún más fuerte y espantoso se escuchó detrás de Nadja a lo lejos.

-¡Freya!- corrió la rubia al ver que su hermana se sacudía violentamente en el suelo. Ethan notó su presencia por lo que se distrajo y Ed aprovechó para librarse y hacerle ahora él una llave a Loki.

-¡Aren!- Gritó el rubio

Aren salió corriendo desde su escondite y tomó el cetro de Loki, el cual le quemaba la piel sacando incluso humo de sus manos pero no lo soltó y siguió corriendo

-¡No!- Loki trató de zafarse par detenerlo con un jalón y un cabezazo pero una lanza envuelta en un rayo atravesó su estómago. 

Al ver la figura de su amigo en el suelo, Ed se acercó pues a pesar de todo no podía desentenderse de aquel que había sido como su hermano

-Hey..- comentó algo incómodo sin saber que hacer

-Hey- hizo una mueca- no te preocupes, sin rencores ¿no?

-Jé...claro.

-Lo sé... Jé. He sido un pésimo amigo ¿no? Te engañé en muchas cosas, lo admito. Pero algo fue verdad. Siempre te vi como mi único amigo, el hermano con el que soñé ... En verdad lo lamento

-No te odio

-En verdad estás defectuoso de fábrica jejé- sonrió con dificultad- Debes dejar ese corazón de pollo o todos van a abusar de ti.

-Buen consejo- respaldó el rubio

Mientras, poco a poco desde el tobillo donde tenía un agujero del tamaño de una pelota de ping pong; la piel de Freya iba tornándose gris y seca, pudriéndose. Uno de los colmillos de Jormungard había alcanzado a rasguñarla mientras la perseguía. Nadja desesperada intentaba pasar vida a la pelirroja pero solo podía retrasar el avance de la oscuridad por su piel mientras Freya seguía retorciéndose de dolor. Recordó lo que había pasado cuando Ed fue envenenado y las palabras de Aren, solo la haría repetir su dolor una y otra vez.

Freya a pesar de todo, se esforzaba por sonreír.

-Hermanita... alto... por favor- quitándose las manos de la rubia de encima

-No, no, no, no...- repetía mientras sacudía la cabeza y las lágrimas comenzaban a salir 

-Vé, no queda tiempo, Jormun ya está llegando

-No...- lloriqueaba

-No me iré del todo mientras haya amor en cualquier ser. Solo... lamento no poder decirle a Thor que fue el único amor verdadero en mi vida. Te quiero Nad

-Y yo a ti- diciendo ésto, la oscuridad y pudrición llegaron al rostro de la pelirroja, en un segundo la chica expiró en un susurro

-Fre..¿Freya?- Nadja gritó de dolor e impotencia y un resplandor blanco emanó se su cuerpo envolviéndola completamente. Cuando se disipó la luz, dejó a la vista un águila blanca de gran tamaño la cual graznó y emprendió e vuelo hacia Yggdrasil.

Aren luchaba contra Jormungard sobre ella, enterrando una y otra vez el cetro de Loki en el cuerpo del reptil. Entraba cual hierro candente pues al salir, de las heridas no salía sangre, solo dejaban una estele de humo, sin embargo Audrey no dejaba de avanzar hacia su objetivo. De repente, Aren se detuvo, la luz roja de sus ojos desapareció y un mareo lo dejo debilitado, Jormungard lo sacudió de sí haciendolo caer al abismo mientras soltaba el cetro.Nadja en pleno vuelo logró atajarlo y ponerlo a salvo . 

Ed veía como su amigo había cerrado los ojos y frente a él estaba desapareciendo en pequeñas motitas de polvo brillante, formando a su vez una estela de ellos que se disolvían en el aire. El rubio cerró los ojos un instante recordando por última vez el rostro de Ethan para después girar y correr hacia Aren.

-El cetro.. lo he perdido

-No... -Ed se asomó al abismo... a pocos metros más abajo, podía observar una pequeña chispa verde que resplandeció contra luz. En una de las hendiduras de una rama baja, se había quedado atorado el cetro- Está ahi, tengo una idea- Ed trató de transportarse ahí pero no podía.

-Es inútil, ese espacio es el vacío que protege los mundos, no puedes transportarte por que no es un lugar, son todos y ninguno a la vez. Solo podría llegarse físicamente y esta demasiado lejos.

Pocos minutos después, una cadena humana de piratas y soldados, resguardados por los demás  sobrevivientes, descendía por las fauces de la oscuridad. Estaban a punto de llegar pero el peso era insostenible ya para los que jalaban desde el suelo. 

-No llego... falta muy poco...

-Vamos

-No... está aún como a dos metros

-¡Rayos!

El árbol comenzaba a tornarse negro también en algunas partes y la rama se empezó a  podrir

-Aren... no me gusta nada esto

El chico de ojos bicolor que tenía la cabeza hacia abajo mientras con ambos brazos cargaba las piernas del rubio

-Se romperá y lo perderemos...

-No

Un sonido que les causó un escalofrío se dejó oír y más rápido de lo que pudieron reaccionar, frente a ellos, estaba cayendo Lothus, quien al llegar a la rama con manos por delante, apenas tocó el cetro, lo lanzó hacia el rubio con un quejido y un crujido de la rama que se desprendía

-No lo pierdas esta vez- fue lo último que dijo antes de seguir el camino de la gravedad a través de los mundos con un porte sereno y solemne.

-¡Lothus!- gritó Aren que no pudo hacer otra cosa que mirar como su compañero de aventuras se perdía en el abismo y jalar al rubio con rapidez antes de que muriera con las manos quemadas

La rubia volaba de nuevo hacia la serpiente que se arrastraba rápidamente  y ahí, frente a ella, una gruesa rama al centro del árbol resplandecía. La profecía sobre su caída, la que hablaba sobre la clave para su destrucción, estaba brillando. Se estaba convirtiendo en algo definitivo y no lo iba a permitir, así que hincó sus colmillos sobre la corteza cual loca desesperada y la cosa negrusca y viscosa comenzó a expandirse por aquel ser. Una especie de sonrisa retorcida se dejó entre ver  en aquel rostro repugnante pero sin previo aviso, las garras del águila blanca se incrustaron en su cuerpo, un dolor agudo la atravesó y se enroscó en su enemiga. El águila con su pico daba estocadas por donde encontrara mientras Jormungard se estiraba y enroscaba en sí misma.

Con el pico, Nadja desgarró un poco de la piel del reptil  soltándola de inmediato pues el veneno que recorría su cuerpo emanó. Trató de posarse en una rama cercana pero Jormungard de un impulso con el hocico abierto iba directo a morder una de sus patas. Sin saber como ésta salió disparada por un resplandor aunque con su cola logró asirse de la pata que iba a morder. Aquella luz que salvó a Nad al mismo tiempo cubría intermitente a Yggdrasil, estaba... palpitando.

Nad luchaba contra el agarre batiendo sus alas pero sin poder deshacer le agarre intentó volar, cosa que no ayudó pues Audrey, si medir consecuencias se enredó entre sus alas

-¿Ya vess como no eress rival para mi?- y a mitad de vuelo, cayeron  en picada.

En el suelo, Nadja  y Audrey. Ambas heridas, cansadas y con la llama en los ojos de quien luchará hasta su último aliento con toda la fuerza de un alma indomable y espíritu inquebrantable. Un águila y una serpiente del doble de su tamaño que enfrascadas en un dialogo sin palabras, pues sus miradas decían todo, proyectaban la tensión palpable del aire.

En un segundo se enfrentaron de nuevo, Nadja sentía como su cuerpo luchaba contra el veneno que segundo a segundo la debilitaba. Un coletazo de la serpiente la derribó. Estaba muriendo.

En el suelo solo pudo escuchar a Audrey

-Morirás y sabes que? Me ocuparé también de tus amigos y tus padres.... atesoraré en mi memoria cada gemido, lágrima y gota de sangre de sus despreciables cuerpos mientras los destruyo poco a poco- Y diciendo esto último arremetió contra ella con las fauces abiertas. Sintiendo el placer del triunfo como era detenido por un dolor en el paladar

-Nad! Levántate, ayúdame... no podré detenerla mucho- Aren estaba frente a ella, incrustando el cetro de Loki mientras sus manos sangraban y echaban humo.

Todo se veía borroso, ni siquiera la adrenalina podía hacerla moverse, quería reaccionar, quería... por un segundo ante sus ojos todo fue oscuridad, todo menos un rostro, uno que conocía y que le dio el valor, la fuerza y el poder para levantarse: Freya, el cual se volvió  en su madre, su padre, su abuela, Renata, Copete, Kiev, Valko y cada uno de los que se habían sacrificado, de los que habían luchado o perdido algo con todo aquel caos. 

Las plumas blancas volaron haciendo un remolino a su alrededor. Nad ahora en una forma humana pero con una capa de plumas blancas con las fuerzas que le quedaban no a su cuerpo, si no a su espíritu de combate; se levantó y sostuvo junto con Aren el cetro con una mano y a su compañero con la otra pasándole la vitalidad y sanidad que necesitaría para seguir sosteniendo aquel artilugio. Ambos empujaban el cetro más profundo. Jormungard se retorcía pero ellos no  se rindieron, por más que la reptil se moviera y lanzara coletazos que llegaron a golpearlos  no cedieron.Después de unos segundos, ambos estaban en el suelo, de rodillas con todo no lo soltaron, Audrey dejaba escapar gemidos, lloros, gritos y entonces sucedió.

 Audrey volvió a su forma humana, una que tenía atravesando su pecho un báculo lleno de muerte y olor en su talla, muy adecuado para la ocasión, la piel de Audrey estaba quemada alrededor y ese olor a piel humana chamuscada tan característico de los incendios con victimas, emanaba de ella mientras el humo la envolvía , sus manos golpeaban desesperadamente los rostros de los chicos pero entre más luchaba más se enterraba en el cetro. Poco a poco sus movimientos de volvieron débiles, los golpes no acertaban, dejaba de moverse. Solo quedaban espasmos de su cuerpo quemado con la piel al rojo vivo para después dar paso a una masa cenicienta que desapareció en un soplido de viento entre cenizas.

Aren se desplomó en el suelo respirando con dificultad y  la luz que emanaba Nad se apagó, dejándola inerte en el suelo. 

Los amigos de Nadja habían ganado.Al ver que Jormungard había sido vencida, los restos del escuadrón zombie  junto con los 2 descendientes de Fenrir que sobrevivían y éste mismo intentaron escapar, pero la magia de Frey impidió que pudieran atravesar una barrera que había puesto para evitar que salieran. En su desesperación  se lanzó a Njord, quien fue salvado por el único gigante que había sobrevivido, éste acto no fue tan desinteresado pues sabía que lo matarían por lo que con sus puños aplastó al lobo infernal y con su aliento de hielo lo congeló en una fría cárcel y con ésta acción canjeó su vida. Ahora totalmente encarcelado y herido, descansaba el único sobreviviente de la raza de los colosos en una esquina del salón con la cabeza gacha mientras los demás individuos del bando perdedor terminaban de ser destruidos.

Frey, Gerda, Njord, Ed y los demás tripulantes del Valkiria junto con los soldados asgardianos sobrevivientes se acercaron a los chicos

Njor ayudó a Aren a levantarse aunque con dificultad y le pasó un vaso con agua pero unas palabras rompieron la paz que se estaba instaurand en sus corazón y la felicidad de haber destruido a sus enemigos fue rota con un tono de preocupación

-Nad... ¿Nad?.No me asustes... ¡respira!- gritaba Frey

https://youtu.be/TAdCpT-j7wQ

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Hola!!!! SIII!!! lo sé, a veces soy mala mwahaha... pero no se preocupen, pronto les dejaré por acá un pequeño (por que sí lo advierto: será corto) epílogo.

Este ha sido un  viaje emocionante para mi y espero que también lo haya sido para ustedes, este es el final de la batalla, la culminación de una aventura ¿o no?

Lo empalagoso lo dejaré para la nota autor del epílogo ya que será la última entrada que tenga esta historia. 

Sin más, me despido como siempre con un super mega hiper agridulce (snif snif) abrazo y unas melodías para que acompañen su lectura... 

Recomienden, voten y comenten todo lo que quieran... siéntanse como en casa... no muerdo XD

Besos... maw!