Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3

Aún no entendía porque le gustaba contemplar las estrellas, quizás lo hacían recordar demasiado el pasado, o quizás le gustaba ver el brillo de ellas en medio de una noche silenciosa y triste. Suelta el humo del cigarro formando un hálito espeso entre el frío y el aliento caliente.

Baja la mirada a la ciudad de Moscú, las luces dándole visibilidad a los edificios altos como el cielo, la gente riendo, paseando y simplemente disfrutando la noche helada de invierno. Todo calmado y rutinario como cada día del año.

Quizás era eso lo que lo tenía desmotivado, la falta de algo diferente a como siempre había sido. Tal vez la amargura en su vida tendría cura si se animara a un cambio. Pero eso no pasaría para el ruso, él no era fanático del cambio, o simplemente le aterraba cambiar para luego fracasar.

Los valores heredados de su padre jamás lo dejaron avanzar personalmente. Siempre se mantenía frío y distante en lo que su vida privada respecta. Era respetado por todos, pero valorado por nadie. No tenía buenas relaciones con demás países, su vida se resumía en más que la palabra: mierda.

Era intimidador, no sonreía, no disfrutaba nada, diablos, ni siquiera sabía que era la palabra disfrutar. Se maldecía y maldecía a los demás, se autocritica en todo y suele enojarse demasiado en los que lo critican sin saber quien es.

Da la última calada de su cigarrillo para tirarlo al suelo y apagarlo con una pisada de su zapato. Gira sobre sus talones caminado hacia el Palacio de Kremlin con las manos en los bolsillos de sus pantalones pateando las rocas con la punta de sus pies mientras tarareaba una melodía.

Con su espalda apoyada, cierra la puerta dejando escapar un suspiro al sentir el aire caliente sobre su rostro. Debía admitir que al paso de los años el invierno de su territorio cada vez era más helado que el anterior.

Deja su abrigo colgado en el perchero vertical, y procede a caminar al pasillo del ala oeste para dirigirse a su habitación, tal vez descansar después de un día lleno de trabajo lograría quitarle la inmensa frustración que sentía en su pecho.

Solo se limita a sentarse al borde de la cama y tocarse la cara con las manos, refregandose los ojos. La puerta es tocada con dos suaves goloecitos. El ruso se levanta y abre, dejando ver a su sirviente allí, con un paquete en sus brazos.

Мистер Россия ... Мистер Мексика приехал и оставил вам этот костюм. [Señor Rusia... El señor México vino y dejó este traje para usted].— El mayordomo le hace entrega del paquete.

Положи на кровать ... Можешь уйти на пенсию.[Déjalo sobre la silla... Puedes retirarte].

Obedece dejando con delicadeza el traje sobre la silla.— Компромисс, сэр.

Con una reverencia educada, se retira de la habitación, dejando al ruso la vista clavada a la silla, contemplando el traje en la funda color negra. Se deja caer de espaldas soltando un bostezo prolongado mientras de los ojos le salen un par de lágrimas.

Sin darse cuenta... Cae dormido.

— Está bien, Argentina. Ya entendí, ya te perdoné como seis veces.

— Perdoname otras seis veces más.

Uruguay sonríe mordiendo su labio inferior, poniendo sus ojos en blanco procede a abrazar a su hermano mayor, quien sorprendido le corresponde.

— Soy un pelotudo grande, perdoname. No vuelve a pasar.

— Al menos lo admitís, quedas exento de todo cargo.

Argentina ríe animado.— ¡Al fin gané un juicio!. Perdoname otra vez.

— Te perdono, pajero.

El albiceleste le da una bofetada en la nuca, mientras que el sudamericano ríe de ganas, separándose del mayor.

— ¿A quién le decís pajero?.

— Vos sos el que tiene un consolador en el armario.

Las mejillas de Argentina se tornan de todos los colores existentes y le comienza a tirar ll que encontrara a Uruguay, quien se protege con los brazos mientras reía.

— ¿¡Estuviste revisando mis cosas!?.

— ¡Te juro que solo vi un consolado!, ¡Te juro que solo eso!. Además de un par de prendas de lencería, juguetes sex... ¡Argentina, listo!.

— ¡Vení acá que te mato!.

Los hermanos comienzan a corretearse por toda la casa. Suben las escaleras a toda velocidad, Uruguay alcanza a llegar a la puerta de la habitación y cerrarla en la cara del argentino, quien por suerte no logró golpearle el rostro.

— Cuando salgas te juro que te parto la jeta. Gardel es re argentino, te aviso.

Opta por rendirse y volver a la sala de estar, echarse en el sillón y revisar sus redes sociales. Se muerde el labio al dejar su cabeza caer hacia atrás.

— ¿Argentina?.

El latino levanta la cabeza.— Eh, Usa. ¿Qué haces en mi territorio, gordis?.

— Deja de llamarme, gordis. No soy gordis.

— Yo te digo como quiero. ¿Qué haces acá?, ¿querés ir a mi casa?.

— Lo siento, ahora mismo no puedo visitarte. Pero, uhm... ¿Puedo ir a verte cuando quiera?.

— Si, vos tranqui. Podes venir y tomamos mate, que se yo.

— Thanks...—

Usa se acerca al latino y deposita un beso a labio pegado en la mejilla del argentino, quien confundido y sonrojado le sonríe tímidamente.

— Te veo luego...

— Si...

Argentina acomoda su cabeza y sonríe embobado. Regresando la vista a sus redes para subir una foto con Alberto y Larreta a Instagram.

#ConElChihuahua
#ConElReptiliano

La publica y a los segundos miles de mensajes y me gustan llenan su perfil. Se concentra en ver los memes de su gobierno.

Una notificación ocupa su pantalla, México le estaba escribiendo.

Mexiverga
Oye, güero. Ya conseguí mi traje.

Shio
¿Tan rápido? México faltan como 3 meses para la junta en Israel.

Mexiverga
Pos mejor prevenir que lamentar.

Shio
Además, ¿cómo hiciste? Dijiste que no tenías un mango.

Mexiverga
Le dije al chiky tripalosky.

Shio
¿Desde cuando te cojes al ruso?.

Mexiverga
¡No te pases de lanza, güey! Nomás me pidió ayuda para elegir un traje, y pos hicimos un trueque.

Shio
¿Rusia se viste de traje?, ¿desde cuando? Siempre lo veo abrigado hasta la bosta, una campera más grande que Tucumán.

Mexiverga
Neta te juro que está interesado en alguien.

Shio
¿Interesado? Debe estar interesado en su sombra, el man es mas oscuro que Voldemort.

Mexiverga
No seas mamón.
Híjole, te hablo después, güero.

Shio
Nos vemos, Palta.

Mexiverga
Ahuaca...Me voy.

Argentina ríe, se levanta del sofá para caminar a la cocina y meter las empanadas al microondas, ya era tarde y tenía mucha hambre y sueño, bueno, eso era todo el día. Hasta pensar en lo que dijo México.

Rusia interesado en alguien...

— Pobrecito. Dios lo bendiga...

Niega con la cabeza y continúa para preparar huevos fritos.

Hola que hace.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro