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Treinta y tres


Seokjin secó sus manos sudorosas en su pantalón y respiró profundamente mientras miraba la casa de su infancia. Comenzó a mover una pierna de manera repetitiva hasta que una fuerte mano tomó la suya. Alzó la mirada para encontrar la cálida y amorosa mirada de su prometido.

—No estás solo cariño, yo entraré contigo y si tengo que repartir golpes lo haré.

—Espero que no sea necesario —aclaró su garganta —odio tener que venir.

—Eso es porque eres un hombre maravilloso —acarició su mejilla mientras Seokjin se tranquilizaba al sentir el cariño de su novio —Yo no hubiese tenido ni una pizca de remordimiento, me hubiera casado sin siquiera avisarles.

—Lo sé, pero una parte de mi quiere hacer las cosas bien —Seokjin mordió su labio —He estado pensando estos días y creo que me gustaría empezar a buscar a mis padres biológicos.

Taehyung asintió —¿Estás seguro?

—Si, lo estoy. Pienso en nuestros hijos el día de mañana ¿Que les voy a decir cuando pregunten por mis padres? —Seokjin se acomodó en el asiento —no hay manera que nuestros hijos conozcan a esta clase de abuelos. Yo pienso contarles desde el día uno que soy adoptado —se tocó el mentón pensativo —estaba pensando que quizá mis padres son personas buenas, en realidad cualquier cosa va a ser mejor que esta basura que me tocó de familia, pero ese no es el tema.

—Tienes mi completo apoyo amor —Taehyung tomó sus mejillas y mordisqueó los esponjosos labios ajenos —¿Sabes que me enamoro un poco más de ti cada vez que nombras la palabra hijos?

—Dije nuestros hijos —Seokjin respondió. 

—Te amo tanto, tanto —Tae volvió a tomar sus labios y sus manos se fueron a la estrecha cintura de su novio para poder acercarlo un poco más.

Seokjin metió su lengua y cuando el beso fue calentando el ambiente ambos se separaron sonriendo.

—Bien. Vamos —Taehyung mordió su labio mientras se ajustaba la erección bajo su pantalón de tela.

Seokjin se rió y llevó una de sus manos hasta esa zona —Te daré una muy buena recompensa por acompañarme —susurró cerca de la boca del otro.

—Oh, mierda si. —Taehyung se quitó el cinturón mientras veía a Seokjin hacer lo mismo —Vamos ahora entonces, ya quiero volver a nuestra casa.

Se bajaron de la camioneta del médico y tomaron sus manos cuando estuvieron uno al lado del otro.

Caminaron hasta la reja y se detuvieron. Seokjin suspiró y movió su cabeza para relajar los músculos de su cuello. Taehyung lo observó y no soltó su mano en ningún momento.

Taehyung tocó el timbre y sintió el agarre en su mano tensarse.

—Mejor dejemos la invitación en el buzón... Parece que no hay nadie —Seokjin quiso girarse pero justo en ese momento la puerta se abrió.

Era su hermano Mingyu.

—Hola Mingyu —saludó el mayor.

—Hola.

Taehyung tensó la mandíbula ante el frío saludo del menor.

—¿Están los papás?

—¿Mis padres? Sí, aquí están.

Taehyung rodó los ojos y ya no se pudo callar —¿Puedes avisarles  que estamos aquí? Digo, si no es mucha molestia.

El menor los miró un momento y sus ojos se fueron directo a sus manos entrelazadas. Negó con su cabeza y entró a la casa nuevamente.

Seokjin suspiró —Esto va a salir muy mal Tae.

—Pero es algo que tú quieres hacer cariño, además no estás solo. Mírame —Seokjin fijó sus ojos en los marrones que lo miraban y volvió a suspirar —Estoy aquí contigo Jinnie, no te voy a dejar solo ¿Si? No dejaré que te hagan sentir mal. Ya no tenemos dieciséis amor.

—Lo sé y gracias por esto. Sé que los odias.

—Puedo soportar esto y mucho más por ti. Te amo Jinnie.

Seokjin dejó un besito en los labios de Tae —Yo te amo muchísimo más bebé.

Taehyung sonrió ampliamente y su sonrisa se borró cuando la mujer que más detestaba en su vida estaba mirándolos desde el marco de la puerta.

Hye soo se acercó a abrir la reja y rápidamente les dio la espalda para entrar a la propiedad.

Seokjin tensó su agarre en la mano de Taehyung al ver esa casa. Habían pasado varios años y Seokjin recordó que la última vez que había ido a ese lugar había llevado a Yoongi con él.

Y ese almuerzo había sido lo peor que había hecho en toda su vida.

Hye soo los invitó a sentarse sin dejar de mirar las manos de los jóvenes entrelazadas.

—¿Y bien? ¿A qué debemos tu visita Seokjin?

El castaño tomó aire —Yo... Digo, nosotros —miró Taehyung y este le devolvió el gesto con una sonrisa tranquila en los labios —Nos vamos a casar y trajimos la invitación.

Hye soo alzó un ceja sin expresar emoción alguna mientras recibía la tarjeta de invitación a la boda.

—¿Matrimonio?, ya veo.

—Si, me gustaría que estuvieran ese día conmigo.

La puerta se abrió y Kim Dong hae hizo su aparición en la sala.

Seokjin sintió doler su estómago al ver a quien muchas veces llamó papá.

Miró a ambos hombres y los saludó con la cabeza.

—Seokjin se va a casar —dijo la mujer con malicia sabiendo la opinión de su marido sobre el matrimonio con personas del mismo género.

—¿Y desde cuándo los maricones se casan? —soltó sin más.

Taehyung tensó aún más su mandíbula y estaba listo para decir algo pero Seokjin se adelantó a él. Ambos se pararon del sofá en donde no habían estado sentados ni cinco minutos.

—Sí señor, los maricones, como usted nos llama también tenemos sentimientos y sí, me voy a casar en un mes y espero que puedan apartar un poco de su puto tiempo para estar ahí, así mismo como yo dejé de tener una adolescencia normal por estar con ustedes en esa jodida iglesia.

Seokjin respiró y sin soltar la mano de Taehyung caminó hasta la puerta pero antes de salir se giró hacia las personas que lo habían criado.

—¿Saben qué? Esto fue un error. —soltó la mano de Taehyung y se acercó a quien toda su vida llamó mamá y le quitó la invitación de las manos —Mejor no vayan, ¿para que mierda quiero que ustedes estén ahí cuando lo único que hicieron fue arruinar mi infancia con sus insultos y humillaciones? —sus ojos se aguaron pero no sé permitió botar una lágrima más en esa casa —Lo único que les puedo agradecer es el techo y la comida que me dieron, pero eso es lo único. Ustedes fueron la peor mierda que me puso haber tocado, ojalá me hubieran llevado a un maldito orfanato.

Los Kim mayores lo miraron y algo de culpa azotó los ojos de Hye soo, mas Seokjin lo pasó por alto.

—Al venir aquí con quién siempre ha sido mi compañero... ¿Se acuerdan de él? —Seokjin no miró hacia atrás porque sabía que su novio estaba justo detrás de él —Taehyung ha sido lo único estable en mi vida, el único que se preocupó de toda la mierda que me rodeaba aquí entre ustedes y por eso lo elegí... Sé que esto no les importa —el castaño sonrió con tristeza —nunca les ha importado lo que pase con mi vida ¿No?

Seokjin vio a Mingyu entrar a la sala y su expresión era de asombro.

—Yo solo quería un poco de amor ¿Era mucho pedir? —ahora sí una lágrima se deslizó por su mejilla —solo quería un poco de la atención que tenía Mingyu, quería respeto, comprensión, pero, ¿Que obtuve a cambio?

Seokjin tragó y negó con la cabeza —Voy a buscar a mis padres biológicos y me quitaré la mierda de apellido que me dieron —Seokjin se giró y sus ojos se conectaron con los de Taehyung quien lo estaba mirando con una expresión que Seokjin ya había visto antes en él. Orgullo.

Taehyung estaba orgulloso de su prometido.

Ambos se pararon en la puerta y cuando Taehyung la abrió y salió Seokjin dijo una última cosa —Lamento que tu salud esté deteriorada Hye soo, de verdad que no le desearía a nadie pasar por algo así... Espero que mejores.

Y sin agregar nada más Seokjin cerró la puerta detrás de él.

∘ ◦ ° • ° ◦ ∘


Jimin observó las dependencias del hogar de niños mientras era conducido a una de las habitaciones del lugar. Tomó asiento frente al escritorio de la funcionaria a cargo de su petición de adopción.

—Revisamos sus antecedentes señor Kim.

Jimin se tensó al escuchar ese apellido, pero aún no estaban divorciados con Namjoon por lo que el apellido Kim lo acompañaría por un tiempo más.

—¿Está todo en orden?

—Está todo perfecto, lo que necesitamos es una reunión con su marido. Nosotros abogamos por las familias diversas y cariñosas. Y usted en la ficha de ingreso describió a su esposo como... —la mujer parecía revisar unas hojas y sonrió cuando encontró lo que estaba buscando —cariñoso y altamente responsable.

Por supuesto, pensó Jimin. Namjoon era eso y mucho más.

—Él tiene un trabajo muy ocupado la verdad.

—Y usted también, pero está aquí —dijo la mujer con una sonrisa en el rostro.

—Si... Es que yo puedo manejar mi tiempo —dijo rápidamente ante la mirada de la mujer.

—Bien, solo falta que pasen por nuestra psicóloga y podremos empezar a ver las mejores opciones para su nueva familia.

Jimin sonrió hermosamente, la palabra familia le hacia llenar de alegría su triste corazón.

—¿Ustedes me llamarán?

—Así es. Es una entrevista individual primero y luego usted y su marido.

—Entiendo.

Suspiró y estrechó su mano con la mujer.

Al salir respiró pesadamente el aire de la tarde. No sabía cómo haría para que Namjoon aceptara ser parte de los trámites de adopción si ellos ya ni siquiera vivían juntos.

Se subió a su automóvil y se dirigió al único lugar en donde encontraría las respuestas a las preguntas que lo tenían mortificado desde hace varias semanas.

∘ ◦ • ° • ◦ ∘

Seokjin se apoyó en la pared más cercana a la puerta de la oficina de Taehyung. Observó como este buscaba unos papeles en uno de sus cajones.

El castaño sonrió al verlo con su ceño fruncido, estaba completamente concentrado. Muy despacio Seokjin rodeó el escritorio y se puso detrás de él. Tomó sus caderas y masajeó su entrepierna contra el culo de su novio que estaba en una perfecta posición.

Un jadeo escapó de los labios del médico y Seokjin sonrió victorioso al no recibir una negativa.

Taehyung se incorporó y se giró para abrazar a Seokjin por el cuello.

—Estoy malditamente orgulloso de ti amor.

—Lo sé, lo veo en tus ojos —Seokjin comenzó a dejar besos por toda la perfecta mandíbula de Taehyung. —Gracias de nuevo por tu compañía —besó la comisura de sus labios y luego depositó otro beso en el lunar de su nariz —Amé tomar tu mano delante de esas basuras.

Taehyung rió y el sonido fue tan excitante para el castaño que tomó sus labios en un beso hambriento. Su lengua recorrió toda su boca mientras empujaba a su novio hasta que este estuviera sentado en su escritorio.

Taehyung tiró al piso todo lo que tenía alrededor de él sin dejar de besar los esponjosos labios del castaño.

Abrió sus piernas para que Seokjin pudiera posicionarse entre estas. Un gemido escapó de su boca cuando su ropa fue prácticamente arrancada de su cuerpo.

—Tan hermoso bebé —Seokjin abrió el botón del pantalón del médico y lo bajó hasta los tobillos.

Deslizó una de sus manos sobre la erección de su prometido y rápidamente bajó el bóxer. Taehyung mordió su labio fuerte y se dio la vuelta para quedar de espaldas al castaño.


—Mierda amor, mirate... —el castaño se apegó a su cuerpo, llevó una mano hacia el pene del azabache y con la otra comenzó a desabrochar el botón de su jeans.

Suavemente movía su mano por la extensión de su hombre mientras lo escuchaba maldecir. Seguramente por lo lento de la acción, pero Seokjin tenía planes para su novio y al parecer estos estaban dando resultados.

Quería que rogara por él.

Y estaba seguro que su hombre amaba tanto sus juegos como él.

—Oh, mierda Jinnie, ¡más rápido!

Seokjin sonrió mientras chupaba su lóbulo —¿Que quieres amor?

Taehyung echó su cabeza hacia atrás para apoyarse en el amplio pecho detrás de él. Seokjin siguió bombeando la erección pero un ruido en el pasillo lo hizo detenerse.

Taehyung se quejó y miró en su dirección —No estoy de servicio amor, no hay forma en la que ellos... —un golpe suave se escuchó por la oficina y Taehyung suspiró —golpeen —dijo levantando su pantalón.

Seokjin hizo lo propio y mientras Taehyung terminaba de ponerse la ropa, este arreglaba el escritorio rápidamente. Una vez que ambos estuvieron decentes el azabache abrió la puerta.

—¿Yerim?

—Disculpe que lo moleste doctor Kim —la chica se veía preocupada —pero usted no estaba contestando su teléfono. Nayeon dijo que se encontraba aquí —se disculpó.

Taehyung lo buscó dentro de su bolsillo y se lo mostró a la enfermera —Está apagado. Lo siento, pero no estoy de turno.

—Doctor, su hermano tuvo un accidente automovilístico, está siendo llevado a pabellón en este momento.

La mano de Taehyung cayó hacia abajo y el celular caía al piso de cerámica quebrando toda su pantalla.

Seokjin llegó hasta la puerta y tomó a su novio de la cintura.

—Gracias Yerim por avisar —dijo a la enfermera.

Ella los miró con un dejo de tristeza en sus ojos y se alejó por el pasillo.

—Amor, mírame por favor.

El azabache lo miró y todo lo que Seokjin quería hacer en esos momentos era abrazarlo y no soltarlo nunca más.

—Jinnie —habló por fin.

El castaño lo abrazó fuerte contra su pecho para luego salir de la oficina y cuando llegaron al área de pabellones le dijeron que Namjoon tenía varias fracturas pero lo más preocupante era un traumatismo encéfalo craneano a causa del choque.

Taehyung asintió y sin más le pidieron que se sentara en la sala de espera como cualquier otro familiar.

Seokjin lo tomó suavemente de los hombros y lo llevó hasta la sala de espera. El castaño se sorprendió al ver a Jimin en ese lugar.


¿Cómo había llegado tan rápido?

El rubio abogado se lanzó a los brazos de Taehyung cuando lo vio entrar y llorando comenzó a hablar. Tae no entendía nada por lo que y, a pesar de su aturdimiento le pidió que se calamara.

Jimin seguía llorando mientras trataba de hablar.

El azabache lo tomó de los hombros y ahí recién pudo escuchar claramente lo que su cuñado quería decirle.

—Yo tuve la culpa Tae... Tú hermano chocó por mi culpa.

Taehyung no supo que decir, simplemente lo abrazó y esperó a que todo saliera bien para su hermano...

∘◦♡◦∘

Las visitas que tendrá ese hospital serán 🤦.

Nos leemos pronto, seguramente está semana actualice seguido 😚.

*No sé preocupen por Nam, él está bien 👌.

¿Que opinan de los papás de Seokjin? 😂

💜💜💜💜

Gracias x sus votos!

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