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—¿Donde vamos?

Jin apretó ligeramente las manos en el volante. Un gesto nervioso que esta vez pasó desapercibido para Taehyung.

—Te dije que es una sorpresa, pero habrá comida deliciosa.

—¿Cocinaste tu?

—Hice el postre —Jin rió.

—Oh, eso es perfecto. Aunque me gustaría ser el postre.

Seokjin lamió sus labios —Eres mucho mejor que un postre bebé.

Taehyung asintió satisfecho por la respuesta.

—¿Quieres hablar de lo que pasó con Yoongi?

—La verdad es que ya no viene al caso. Pasó hace tiempo, aunque me dolió un poco su traición, no te voy a mentir... Después de todo fueron dos años.

—¿Y sabes con quién?

Jin suspiró —Lo sé.

Taehyung se acomodó en su asiento mirando la costa ¿Iban a la playa?

—¿Quien es?

—Estás bien curioso hoy ¿Eh?

Taehyung bufó —Bien, no me digas.

—Oh dios, eres un bebé —Jin rió antes de cambiar de pista —fue Jungkook.

Taehyung giró tan rápido su cabeza que llegó a tronar los huesos de su cuello.

—¿En serio?

—Por supuesto, no es algo que se pueda pasar por alto, mi ex novio y mi novio actual se follaron a mi primo —dijo en tono pensativo —no, no es algo que vaya a olvidar fácilmente.

Taehyung se atoró con su saliva —Jinnie por dios.

—¿Que? ¿Te vas a sonrojar ahora? —Jin rió divertido.

—Como sea... Eso no es lo importante.

—Creo que en algún momento tendré que verlo ¿No? Hablar con él.

—No necesariamente cariño, pero si crees que es lo que tienes que hacer, está bien.

El castaño cambió la música. Y una suave melodía inundó la camioneta del azabache.

—Oh, me encanta tu playlist, amo esa canción.

—¿Te acuerdas que solías cantarla siempre?

—Si —Taehyung apoyó su cabeza y cerró los ojos mientras Gravity de Coldplay lo hacía recordar.

Jin miró de reojo a su novio y sonrió. Estaba tan feliz por lo que estaba sucediendo en su vida, estaba tranquilo y por primera vez podía decir con facilidad que su vida estaba en orden.

Estaba con el hombre que amaba y con el cual quería un futuro, conocer a su verdadera madre le había hecho sentir que su historia ya no era una nebulosa, ahora sabía de donde venía, sabía quien había sido su padre. Ahora tenía una historia para contarle a sus hijos, una historia triste y quizás un poco dramática, pero era su historia. No podía escapar de eso.

—Ya está oscuro cariño ¿Falta mucho?

—De hecho no, estamos a cinco minutos.

Taehyung lamió sus labios ansioso por saber que sorpresa tenía su prometido para él. Miró hacia los asientos de atrás pero no vio nada, una bolsa o algo que diga que iban a algún sitio.

—No trajimos ropa.

—Para lo que vamos a hacer no la necesitamos bebé —Seokjin le guiñó el ojo y Taehyung mordió su labio.

El castaño bajó la velocidad y giró hacia la izquierda para luego parar frente a un enorme portón de fierro. Digitó el código y entraron a la propiedad.

Taehyung arrugó su ceño, a lo lejos vio una enorme casa de color blanco, era preciosa.

—¿Qué es esto?

—Es la casa de la señorita K... Digo —Jin se golpeó la frente con su mano —mi mamá, es la casa de mi mamá.

—Wow... Esa mujer sí que tiene dinero.

—Ajá.

—Bueno, ahora tu también —sonrió.

—Y tú también cuando estemos felizmente casados.

Taehyung soltó su cinturón y pasó por sobre la caja de cambio para tomar el rostro de su novio y besarlo con tanto amor, con tanta devoción que Jin sintió sus ojos llenarse de lágrimas por lo perfecto que se sentía la boca de Taehyung sobre la suya.

Suspiraron en sus bocas y una sonrisa tiró de los labios del médico al abrir los ojos y ver a su novio con los ojos cristalizados.

—Te amo tanto Jinnie, fuiste y siempre serás mi mejor elección, amo amarte como lo hago y amo que ames como lo haces cariño. No te cambiaria por nada del mundo.

Seokjin tragó y se limpió una lágrima riendo por lo idiota que se sintió al estar tan sentimental por las palabras de amor de su futuro marido.

—Dios Tae, cuando dices esas cosas me siento como si mi corazón no pudiera dejar de latir así de fuerte —Jin tomó la mano del azabache y la apoyó en su pecho —Solo tú puedes acelerar mi corazón de esta forma. Con una sonrisa, con un beso... Te amo tanto —Seokjin lo besó despacio mientras acariciaba con sus pulgares su rostro.

Cuando se separaron ambos tenían lágrimas en sus mejillas. Se sonrieron y bajaron de la camioneta tomados de la mano.

—Yo vine ayer a dejar la comida y algo para tomar, quería que te des un descanso del hospital... Unos cinco días.

Taehyung paró en seco —¿Estás bromeando?

—No —Seokjin sonrió y besó sus nudillos —hablé con tu padrino y accedió —el castaño se encogió de hombros —te gusta la playa y a mí también... A no ser que quieras ir a trabajar mañana. —dijo burlón.

Taehyung echó su cabeza para atrás mientras reía —¡Como se te ocurre que iría a trabajar cuando arreglaste todo esto para nosotros! —levantó su mano y tiró de la camiseta de su novio para besarlo. Las manos de Seokjin lo abrazaron a su cintura mientras lo obligaba a caminar hasta acorralarlo en la pared, justo a un costado de la puerta de entrada.

—Oh, si amor —Taehyung jadeó.

Seokjin lamió su cuello y a regañadientes se separó de él.

—Entremos mejor.

Taehyung protestó pero se movió justo detrás de su novio. Seokjin encendió las luces y los ojos de Tae se abrieron en demasía.

—Esto es demasiado lujoso Jinnie.

—Lo sé, yo quedé peor ayer cuando vine.

Taehyung observó las dos salas, habían sofás como para un regimiento, una bonita chimenea, también se fijó en el enorme librero anclado a una de las paredes.

—Tu mamá si que sabe vivir cariño.

Seokjin lo abrazó por atrás Y habló cerca de su oído mandando descargas eléctricas por todo su cuerpo —Quiero que vayas a la habitación principal y te pongas la ropa que dejé ahí para ti. Tengo una cena esperando por nosotros en la terraza.

—Definitivamente me gané la jodida lotería contigo. —Taehyung acarició las manos de Seokjin y se separó para hacer lo que el castaño le había pedido.

Seokjin miró su celular y mordió su labio nervioso. Se dirigió hasta donde tenía su ropa colgada y se vistió rápidamente. Se miró en el espejo y asintió al ver su reflejo.

Revisó su celular y corrió hasta la puerta antes de que Taehyung saliera de la habitación.

Solo esperaba que su sorpresa sea del total agrado de su precioso novio.

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—Oh mierda —Taehyung revisó la bolsa de compras que estaba sobre la cama —¿Me estás jodiendo? ¿Gucci?

El azabache rió de felicidad al sacar la camisa con un bonito estampado y un pantalón negro. Era todo de su total gusto.

Se vistió en esa hermosa habitación y cuando estuvo listo paseó por esta embelesado por lo lujoso que era todo.

Se metió al baño y se arregló el cabello.

Aburrido miró la hora en su reloj y cuando estaba por salir de la habitación Seokjin entró a buscarlo.

—¿Vamos? Tengo todo listo y no quiero que se enfríe la comida.

—Oh si, muero de hambre amor —hizo un puchero exagerado.

—Yo también muero de hambre. Vamos.

Salieron de la mano y caminaron por toda la sala, luego pasaron por una clase de sala de juegos. Taehyung odiaba ir tan rápido, él quería ver la enorme mansión pero Seokjin lo tenía fuertemente tomado de la mano por lo que solo lo siguió hasta donde sea que se dirigieran.

Seokjin abrió lentamente la puerta corrediza y salió de la mansión. Tae seguía mirando las paredes, habían cuadros preciosos en ese lugar. Cuando finalmente dirigió su atención a la terraza su corazón saltó en su pecho.

Tragó saliva ¿Porque estaba su hermano con Jimin en ese lugar?
Entrecerró los ojos y miró por toda la terraza viendo muchas caras conocidas, lamió sus labios nervioso, mientras veía a su madre llorar y a su amigo de años Bogum con una enorme sonrisa en su rostro. Volvió a tragar saliva hasta que sus ojos dieron con Seokjin.

—¿Jinnie?

El castaño aclaró su garganta y  tomó sus manos para entrelazar sus dedos.

—Bienvenido a nuestro matrimonio amor. Hoy será el día que nos casaremos.

Las piernas de Taehyung se sintieron débiles. Todavía con la boca abierta miró a su novio.

Tenía que ser una broma

—Jinnie, si esto es una broma me la vas a pagar —se limpió las lágrimas que no dejaban de salir.

—No es una broma bebé ¿Quieres casarte conmigo esta noche? —preguntó casi en un susurro.

Taehyung no pudo reprimirse más y se lanzó a sus brazos llorando.

Todos los presentes sonrieron y también limpiaron las lágrimas que caían sin parar. La escena era tan bonita, tan íntima que todos se miraron preguntándose si era buena idea quedarse.

Los novios se separaron y por fin Tae encontró su voz —¿Cómo?

—Estas personas que están aquí me ayudaron a planear todo bebé ¿Te gustó mi sorpresa?

—Dios, creo que me va a dar un puto infarto —golpeó el brazo del castaño riendo.

—No puedes, no quiero quedar viudo antes de que me des el sí.

Taehyung sonrió y se volvió a limpiar las lágrimas —¿Y nuestra despedida de soltero?

—La haremos después ¿Qué te parece?

—El mejor plan de todos.

—Vamos Taetae, es hora de casarnos. —Seokjin tiró suavemente de su mano mientras caminaban por el hermoso jardín decorado.

Seokjin paró y lo miró a los ojos —Voy a estar allá —apuntó hasta el lugar en donde se encontraba el juez que los casaría —¿Quieres caminar hacia mi bebé? Una vez más, después de todos estos años y todo lo que hemos pasado juntos ¿Quieres llegar una vez más hacia mi?

Taehyung asintió con el nudo en su garganta cada vez más grande. Vio a Jin sacar una lágrima que había caído sobre su mejilla y le dió un corto beso en los labios.

Dio un paso atrás mientras Yongsun tomaba el brazo del castaño y comenzaban a caminar a través del pasillo de flores que había sobre el pasto. Sonrió al ver a su Jinnie junto a su madre.

Make You Feel My Love de Adele llegó a sus oídos. Su piel se erizó y miles de recuerdos llegaron a su cabeza.

Y todos ellos incluían a Seokjin.

Siempre él.

Miró hacia el jardín, ya la mayoría de los invitados estaban sentados en las sillas tan bonitas que tenían un lazo rojo atado a ellas. El lugar estaba bellamente decorado con pequeños faroles de colores. Taehyung sintió una pequeña mano apretar la suya y se giró para encontrar a su madre sonriendo como solo ella podía hacerlo.

—Vamos Tae, el amor de tu vida te está esperando.

Sí, el amor de mi vida. La persona más importante.

Mi Jinnie.

La voz de Adele inundó el lugar mientras Taehyung caminaba bajo las estrellas para encontrarse con quien era su mejor amigo, su amante, su confidente, su compañero de vida, su otra mitad, su complemento. Tenía tantas cosas que decir sobre Jin y es que se le estaba dificultando procesar todo lo que estaba sucediendo.

Llegaron hasta Seokjin y su madre lo besó en la mejilla dulcemente. Dejó otro beso en la mejilla de Jin y se alejó para tomar asiento con los demás invitados.

Taehyung apretó la mano de Seokjin. Estaba tan nervioso, su estómago dolía por la anticipación de lo que sucedería en minutos.

—Estoy tan nervioso —susurró mientras el juez arreglaba unos papeles sobre la mesa.

El castaño suspiró un poco más tranquilo, su plan había resultado perfecto y ahora estaba a minutos de convertirse en el esposo de su amado Taehyung.

—Yo también bebé, pero estoy malditamente feliz. —Jin lo miró y le sonrió. —Por fin serás mío legalmente.

Taehyung se rió bajito.

El juez aclaró su garganta mientras el volumen de la música bajaba un poco.

—Estamos aquí para unir en matrimonio a Kim Seokjin y Kim Taehyung. En primer lugar, voy a proceder a dar lectura al acta matrimonial: Siendo las 20:30 horas del día 15 de febrero del año 2019, comparecen quienes acreditan ser Seokjin y Taehyung, al objeto de contraer matrimonio civil. Quiero hacer constar que se han cumplido todas las prescripciones legales para la celebración de este matrimonio civil, sin que en la audiencia sustitutoria de edictos se haya presentado ni denunciado impedimento ni obstáculo para esta celebración.

Seokjin y Taehyung miraban al juez serios mientras escuchaban los flashes de una cámara cerca de ellos.

El oficial leyó los artículos del código civil, respecto a los matrimonios. Luego llamó a los testigos de ambos novios.

Jihyo llegó sonriente al lado de Seokjin y Namjoon lo hizo al lado de Taehyung.

—Kim Seokjin acepta por esposo a Kim Taehyung.

Jin tomó un respiro y se giró para mirarlo. Le sonrió dulcemente y con su mano derecha acarició su rostro —Acepto.

—Kim Taehyung acepta por esposo a Kim Seokjin —dijo el juez.

El mentón de Tae tembló cuando lo miró. Respiró y contó hasta tres para calmar los latidos de su corazón.

—Acepto.

—Bien, los anillos por favor.

Jihyo le pasó la caja a Seokjin y este los sacó. Le pasó el suyo a Taehyung.

—Tae, se que nuestra historia empezó de manera tan extraña, siendo solo unos niños yo me dí cuenta lo que era tener a alguien que se preocupaba por mi, fuiste mi mejor amigo y confidente por tantos años incluso ahora, siendo unos adultos sigo viéndote como la persona en la que más confío. Te amo por qué me enseñaste a amarme a mismo, me demostraste que puedo ser capaz de hacer lo que me proponga en la vida y me diste las alas que necesitaba para ser feliz y estar en paz con mi pasado. Este día daremos un paso más en nuestra relación, uno más importante y estoy seguro que tanto tú como yo queremos envejecer juntos. Te amo Taehyung, jamás podría haber encontrado un mejor compañero por que no hay nadie como tú bebé, nada se te compara—sus dedos temblaron cuando le puso la argolla de matrimonio al azabache. Escuchó unos sonidos a su alrededor, pero él ya no podía mirar a otro lugar que no sea Taehyung. Sus ojos marrones estaban tan brillantes, tan bonitos y expresivos, que Seokjin tuvo que contenerse para no tomarlo y comerlo a besos.

Taehyung aclaró su garganta mientras jugaba con el anillo de Seokjin en sus dedos.

—Jinnie —dijo con su voz más ronca a causa del llanto —amarte para mí siempre fue un privilegio, lo hice desde que me defendiste de quienes me molestaban... Tu nunca tuviste más que yo, pero aún así decidiste darme tu cariño y protección, ¿Como no me iba a enamorar de ti? Recuerdo la primera vez que lloré por ti... Tú habías conocido a un chico que era más alto que yo, rubio y era super atractivo. En ese momento me di cuenta que yo no quería que nadie más tocara tu mano, no quería que nadie te besara como yo lo había hecho. Te quería para mí, porque yo estaba seguro que nadie te iba a amar como yo. Te amo Seokjin y amaría poder vivir contigo hasta dar mi último suspiro.

Taehyung finalmente le puso la argolla en su dedo y ambos se abrazaron para luego besarse delante de todos sus invitados.

Escucharon aplausos y el juez aclaró su garganta.

—Bien, los testigos de esta unión deben firmar aquí —Jihyo firmó rápidamente y luego fue el turno de Namjoon. —Ahora los novios.

Seokjin firmó primero sonriendo tanto que sentía su rostro entumecido, pero poco le importaba. Estaba feliz.

Taehyung firmó luego y lo hizo rápido para poder escuchar las últimas palabras del juez. Esas que los declarara esposos con su Jinnie.

—Bien, y esto es una mera formalidad, Seokjin y Taehyung, los declaro esposos.

Taehyung se abalanzó sobre Seokjin y lo besó por un largo rato mientras todos aplaudían y gritaban en honor a los ahora esposos.

Todos sus amigos se acercaron a abrazarlos y felicitarlos por su unión.

Taehyung miró su argolla que ahora descansaba sobre su anillo de compromiso y sonrió tan feliz, tan contento por el hombre que la vida le había enviado.

Seokjin terminó de abrazar a sus amigos y su madre y tomó a Taehyung de la mano para alejarlo un poco del ruido.

Caminaron tomados de la mano hasta el borde del jardín, desde ahí podían ver las olas del mar romper en las rocas.

Seokjin rió quitándose todo el estrés de esa última semana. No podía creer que lo que había empezado como una idea tan loca había llegado a resultar tan bien.

—Me sorprendiste tanto amor, todavía estoy temblando —Taehyung rió. Su brazos rodearon la cintura de su esposo y Seokjin por supuesto que también lo abrazó.

Ambos miraron el mar y sintieron la calma inundar sus corazones.

—Siento que todo está en orden bebé.

—Yo también. Como siempre que estoy contigo.

Seokjin besó su cabello —¿Te gusta esta vista?

—Es preciosa, ¿Te imaginas lo que sería despertar cada mañana viendo el mar?

—Podremos hacerlo. No estamos tan lejos de la ciudad.

—¿Que estás diciendo Jinnie? —Taehyung se separó un poco de él para mirarlo.

—Esta casa no es de mi mamá, es nuestra. 

—Ay dios, ¿Me estás jodiendo?

—Mmm, me gustaría pero tenemos que comer con nuestros invitados ¿No crees?

—¡Kim Seokjin!

—Es su regalo de matrimonio ¿Te gusta?

Taehyung lo abrazó fuerte y enterró su nariz en su cuello —Amo la casa, aunque podría vivir bajo un puente y no me importaría porque estaría contigo.

—Te amo tanto bebé —Seokjin besó su lunar de la nariz y se quebró.

Finalmente podía dejar salir sus emociones y lloró en el hombro de su esposo. Las lágrimas caían libremente por sus mejillas, pero no importó ya que estas eran lágrimas de felicidad.

Taehyung se unió a él y ambos dejaron salir fuera todas las preocupaciones que habían sentido, todas sus penas, porque a partir de ese momento Taehyung y Seokjin iban a escribir una nueva historia pero sin olvidar su pasado.

Limpiaron sus lágrimas y abrazados volvieron a la fiesta. Después de todo tenían una celebración que liderar.

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¿Que bonita sorpresa cierto?
Llorando ando.
Bien, la próxima será la despedida de solteros. Tae y Jin hacen todo al revés así que 🤷.

Dejo un abrazo a todas mis fieles lectoras, espero que esté capítulo haya sido de su agrado y las haya emocionado tanto como yo me emocioné al escribirlo.

Las amo mucho 💕