Dieciocho
Taehyung llegó al hospital el día lunes casi corriendo. Jamás había llegado tarde pero justamente ese día no quería salir de la cama.
¿Quién querría salir de la cama teniendo a un hombre como Kim Seokjin en ella?
Nadie.
Aunque no era tan tarde, solo estaba llegando diez minutos atrasado para su turno en urgencias.
—Buenos días doctor Kim —lo saludó en enfermero Choi Soobin.
—Buenos días ¿Cuántos pacientes hay?
—Solo tres. No se preocupe, llegó a tiempo ¿Mucho tráfico?
—¿Eh?
—¿Qué si había mucho tráfico para llegar hasta aquí?
—Ah, si. Demasiado tráfico —mintió.
Caminó hasta la residencia pediátrica y dejó sus cosas. Antes de Seokjin Taehyung siempre llegaba con el estómago vacío, por lo que religiosamente tomaba una taza de té como primera cosa al llegar a hacer su turno, pero ahora no era así. Ahora Taehyung se levanta primero y hace el desayuno para él y su hombre. Luego lo lleva a la cama y lo toman juntos.
Ya no existía la regla de no comer comida en la cama.
Salió rápidamente porque ya era tarde y debía comenzar con sus labores.
∘◦♡◦∘
Seokjin se tomó un descanso a media mañana junto con Jihyo. Fueron hasta la máquina de café y buscaron una cantidad obscena de galletas de chocolate para acompañar.
—Entonces... ¿Cómo estuvo tu fin de semana Ji? ¿Algo que contar?
Jihyo peinó su cabello negro corto —Ninguna en realidad.
—Oh, vamos vi tu foto, las fotos que subiste el sábado.
—Ah, te refieres a eso —se encogió de hombros —nada tan interesante. Solo un amigo que tengo hace un par de años.
—¿Dónde lo conociste?
—Por Sana, estudiaron juntos en la universidad y seguimos viéndonos hasta los días de hoy.
Seokjin asintió mientras se comía la galleta —Pensé que eran algo más... Ya sabes.
—No —Jihyo rió —solo amigos. Él es genial.
—Ya lo creo —Seokjin se rió para sus adentros pensando que diría Taehyung al escuchar eso.
Taehyung. Seokjin de pronto quiso saber cómo estaría siendo el día de su prometido, todavía le costaba no sonreír como idiota cada vez que recordaba la noche del sábado.
Tomó su celular y se alejó un poco de su compañera.
—Buenos días Señor Kim.
—Buenos días doctor Kim ¿Qué tal tu mañana?
—Movida, pero tengo un incentivo en mi dedo anular izquierdo... Ya sabes cómo es eso —Taehyung resopló —cuando uno está enamorado las cosas son más manejables.
Seokjin se pasó la mano izquierda por su cabello sonriendo y escuchó un grito desde el otro lado de la sala en donde estaba la máquina de café y las galletitas.
Miró en dirección a Jihyo ya que eran los únicos que estaban ahí.
—¡Te vas a casar!
Seokjin rió —Cariño te tengo que dejar, creo que alguien se dio cuenta por fin que tengo un anillo en el dedo. Te amo, nos vemos en la casa a la noche.
—Eres malo, ¿No le contaste?
—Quería que se diera cuenta sola y creo que ya lo hizo.
—Bien, nos vemos a la noche, te amo hermoso.
—Te amo muchísimo más.
Jihyo pegó otro grito.
—Ahora si te debo dejar, me está mirando feo. Te amo bonito.
—Anda, no la dejes en su miseria... Yo estoy esperando a Bogum para contarle.
—Claro, el padrino... Ahora sí te dejo para que sigas en lo tuyo.... Besos... Te amo —sonrió mientras Jihyo saltaba en su lugar.
—Hablamos... Te amo.
Seokjin cortó y jamás había dicho tantos te amo en una sola conversación. Se acercó nuevamente hacía su amiga y está lo recibió con un abrazo.
—¡Felicidades! Eres un maldito ¿Porqué no me habías contado? —le pegó en el brazo —déjame ver ese anillo ¿Quién se lo pidió a quien?
—Fui yo. Yo se lo pedí.
—Wow. Estoy feliz por ustedes... Mi visualización va bien entonces... —dijo pensativa —¡ahora faltan los niños y los perros!
—Cálmate. Primero lo primero... Tenemos que planear la boda —Seokjin la miró —¿Tú quisieras ser mi madrina y firmar como mi testigo?
Jihyo asintió enérgicamente y lo volvió a abrazar —¡Claro que si!
Kim Yongsun entró en la sala y ladeó su cabeza al ver a dos de sus vendedores de seguro en ese lugar.
—Buenos días niños ¿Tomando un break?
—Buenos días señorita Kim —Seokjin la saludó con una pequeña reverencia y de paso golpeó el brazo de Jihyo para que saludara a la jefa.
—Buenos días señorita Kim.
—¿Porqué tanto alboroto? Tus gritos se escuchan hasta mi ofina Park.
—Disculpe señorita Kim —una enorme sonrisa apareció en su rostro —lo que pasa es que nuestro querido Kim Seokjin se ha comprometido —Jihyo aplaudió emocionada.
—Felicidades Seokjin, ¿Cuándo es la boda?
—Um, aún no hay fecha solo se lo propuse el fin de semana.
—Bien, te deseo felicidad, ojalá y no acabes separado al año como yo —Yongsun buscó un café en silencio y se marchó de lugar.
—Perra.
Seokjin se encogió de hombros y se terminó su galleta de chocolate.
—Tomar café con este calor debería considerarse suicidio.
—No con este aire acondicionado —comentó el castaño.
Volvieron a sus labores habituales. Jihyo miró a Seokjin mientras este se acomodaba en su escritorio.
—No escuches comentarios como los que dijo la bruja Kim, hay personas que nunca han encontrado a la persona indicada y andan por la vida haciéndolo saber. Ustedes se aman hace tiempo, se conocen, se respetan. Yo estoy segura que ustedes van a estar por muchos años juntos.
—Gracias. Te quiero Ji.
—Yo más cariño. Tienes que ser feliz de una vez por todas.
—Ya soy feliz en realidad, el matrimonio nunca fue un tema para mí... Con Yoongi jamás se me pasó por la cabeza hacerlo, pero con Tae es diferente... Quiero tanto hacer una vida con él, hacerlo feliz, siento que estoy con la persona correcta.
—Tan bonito pero ¿Porqué te demoraste tanto en darte cuenta?
Seokjin negó con su cabeza pensando —Realmente fui un idiota, me sentía inseguro la mitad del tiempo cerca de él, me negué a sentir algo más o en realidad me obligué a no mirarlo como un hombre, luego conocí a Yoongi y fue más fácil pasar de Taehyung, pero el deseo estuvo ahí siempre.
—Intenso...
—Si, él es médico, bueno eso lo sabes... Entonces yo me sentía tan inferior por eso. Él se ha rodeado desde hace algunos años de personas adineradas, su círculo es diferente al mío.
—Pero aún así él te ama ¿no?
—Él dice que me amaría incluso si no tuviera nada.
Jihyo gritó —¡Es muy tierno!
—Lo es.
—Ahora ¿Cuál es el siguiente paso?
Seokjin pensó un momento —Definitivamente debemos hablar con sus padres.
El celular de Seokjin sonó. Lo tomó y revisó el mensaje de Taehyung.
"Adivina quién sale de vacaciones este viernes"
Seokjin respondió enseguida.
"¿Nos vamos a la granja?"
Taehyung se demoró un minuto en responder.
"Así es, pide tus días a partir del lunes y nos vamos por una semana. Aprovecharemos de hablar con mis padres"
Seokjin envío un ok, seguido de un te amo y un corazón púrpura. Taehyung le respondió con muchos corazones púrpuras que hicieron sonreír a Seokjin.
Dejó el teléfono en el escritorio y se dedicó a escribir el correo a recursos humanos para poder al fin tomar unos días de vacaciones junto a su futuro esposo.
∘◦♡◦∘
—¿Sabes que tengo trabajo a esta hora cierto?
—Lo sé hermano, pero tengo algo que hablar contigo y ¿que mejor que en un almuerzo?
—Un almuerzo en el hospital —Namjoon se sentó y Taehyung hizo lo mismo frente a él.
—Sabes que no puedo salir a comer, tengo solo está media hora para almorzar.
—Lo sé, ahora cuéntame que está pasando la hora.
—Bien... —Taehyung mordió su labio —Es sobre Seokjin y yo.
Namjoon dejó de comer y lo miró sin decir una palabra.
—Nosotros estamos juntos...
—Eso lo sé, viven juntos.
—No seas idiota... Estamos saliendo, bueno durmiendo juntos... Estamos en una relación.
—¿Hace cuánto?
—Un mes.
—¿Desde que él está en tu casa?
—Si.
Namjoon se metió mucha comida a la boca y comenzó a masticar.
—¿No dirás nada?
—Estoy comiendo.
Taehyung revolvió su plato. Su apetito se había esfumado.
—Soy feliz Nam, él me ama tanto como yo a él... Estamos bien juntos, sé que debería haberte contado antes pero tenía un poco de miedo de tu reacción... Y parece que no estaba tan equivocado.
—Estas muy equivocado. Yo quiero que seas feliz, yo estimo a Seokjin y si en el pasado no tuve buenas palabras para él eso era porque te hacía sufrir... Yo no soporto verte llorar, menos si es por amor Taetae.
—Él nunca supo que yo estaba enamorado de él... Ahora es diferente, no es solo follar, desde el primer momento fue diferente...
—Está bien, sin detalles —Namjoon alzó sus manos.
El médico asintió y se quedó en silencio mirando su plato como un niño que recién había sido regañado por su padre.
—¿Dijiste que eres feliz?
—Lo soy.
—¿Qué pasa con lo que te gusta?... Eso que por años llamaste libertad, y que yo llamaba...
—Escapar... Lo recuerdo, tú decías que yo estaba escapando de mis sentimientos.
—Lo hacías, te revolcabas con cualquiera que te diera el paso, tomabas hasta vomitar cuando jamás has sido bueno para el alcohol... Qué hay del no quiero vivir con nadie o no quiero hijos, me bastan con los niños que atiendo.
—Eso ya no es parte de mi.
—¿No?
—No. Ahora sólo quiero estar con él, si quiero tomar hasta emborracharme quiero que sea con él haciéndolo conmigo, ya no quiero follar con nadie que no sea él... Jamás encontraría a alguien que lo hiciera mejor que él... Y niños si quiero tener... Cinco y Seokjin está de acuerdo.
Namjoon alzó una ceja.
—Vuelves a estar enamorado de tu mejor amigo...
—Estoy enamorado de Seokjin si, mi mejor amigo desde los catorce y mi amante en la adultez. Lo amo demasiado —Taehyung tomó un sorbo de jugo.
—¿Cuando es la boda? —el médico escupió sobre su plato.
—¿Qué?
—¿Crees que no me daría cuenta del anillo que tratas de mostrarme desde que llegué?
—No hay fecha, nos comprometimos el sábado.
—¿Jimin lo sabe?
—No. Quería hablar contigo primero.
—Levántate —Namjoon se paró y esperó hasta que su hermano menor también lo hiciera. Cuando estuvo frente a él lo abrazó —Te deseo mucho éxito hermanito, que sean muy felices, estar casado es complicado pero cuando amas a la persona, todo problema tiene solución.
Taehyung asintió sin siquiera aún procesar las palabras de su hermano. Él lo estaba aceptando. Las cosas no podrían ser mejores para Taehyung.
—Gracias hermano, tu apoyo es fundamental para mí, para nosotros.
—Tengo que hablar con Seokjin pero los apoyo.
—Oh dios no hagas eso, que vergüenza.
El abrazo se rompió y ambos volvieron a la mesa.
—Tengo que hablar con mi cuñado, aunque ya es mi cuñado hace muchos años ¿No? Me alegro que se hayan dado cuenta que debían estar juntos.
—¿No vas a decir que vamos muy rápido? —Taehyung estaba demasiado sorprendido.
Namjoon se rió mostrando sus hoyuelos —Jamás podría decirle a alguien que va demasiado rápido cuando yo me casé a las dos semanas de conocer a mi esposo. Ustedes se conocen de toda la vida, saben lo que están haciendo.
—Lo hacemos, si.
—¿Los papás saben?
Taehyung se removió incómodo en su silla.
—No. Este fin de semana vamos a la granja y hablaremos con ellos.
—Pase lo que pase Taetae, tienen mi apoyo y el de Jimin por supuesto.
—Dios... Ahora estoy más nervioso.
—Tranquilo, los papás lo aman, no habrá problema.
—Eso lo sé... Lo que me preocupa es Seokjin.
—¿Porqué? —Namjoon tomó su vaso de gaseosa.
—Hay cosas que lo tienen inseguro... Nuestra madre sabe cómo plantar ideas en las mentes de las personas.
—Esa mujer.... ¿Qué dijo ahora?
—Sobre la importancia de tener un buen futuro con alguien que tenga un título, ya sabes cómo es.
—Ahora entiendo cuando Jimin me estuvo comentando algo sobre eso, aunque nunca dijo que estaba hablando de ustedes —dijo pensativo.
—¿Puedes creer que Jinnie también me quería pero que no sentía que estuviera a mi altura y por eso nunca dijo nada?
—Lo creo y seguramente es culpa de mamá.
—¿Qué quieres decir?
—Mira, yo amo a mamá mucho tu lo sabes, es la mujer que nos dio la vida y bla bla bla, pero desde que la empresa que crearon con papá empezó a funcionar y comenzó a prosperar ella cambió. Ahora sólo habla de dinero, de lujos y cosas que antes ni siquiera estaban en su vocabulario —Namjoon ajustó sus gafas y siguió hablando —Jin vivió con ellos ese proceso, seguramente él ha visto el cambio y por supuesto que debe sentirse incómodo si nuestra madre siempre está hablando como si nosotros hubiésemos nacido siendo millonarios.
—El sábado fueron a almorzar y mamá insistió en lo mismo... Y lo peor es que metió a Jeon en todo el asunto.
—Dios, había olvidado que te acuestas con ese mocoso.
—Acostaba.
Namjoon hizo un gesto con la mano para restarle importancia a esa última información —Mi consejo y es lo último que diré porque tengo que volver a la oficina, es que hables con los papás y por sobre todo con mamá.
—Lo haré.
—Y hazlo pronto, los Jeon en la cena no dejaron de hablar de ti y de lo mucho que quieren que seas parte de su familia.
Taehyung se llevó su mano al puente de su nariz.
—Me voy hermanito.
Se abrazaron como despedida.
—Gracias Nam, te quiero grandote.
—Y yo te quiero a ti mocoso. Será raro verte casado.
Taehyung se rió y metió sus manos en los bolsillos de su bata blanca.
Namjoon finalmente dejó la cafetería y Taehyung se quedó con su corazón un poco más tranquilo sabiendo que tenía el apoyo de su hermano.
Volvió a la mesa y levantó sus bandejas para dejarlas en el mesón.
Salió del lugar para volver a urgencias y poder terminar su turno de buena manera.
∘◦♡◦∘
Seokjin no podía creer que estaba conduciendo un BMW.
Se miró en el espejo retrovisor.
Tan guapo.
Se rió y se acomodó en el asiento. Olió la fragancia a cuero y suspiró.
Tomó su teléfono y se tomó una foto. Se la envío inmediatamente a Taehyung y la respuesta no tardó en llegar.
Seokjin contestó la llamada.
—Sabia que te ibas a ver como un actor porno dentro de ese auto.
—¿Eso crees? —preguntó.
—No quieres saber lo que estoy pensando en este momento cariño.
—Claro que quiero saber.
—No me lo hagas decir, no puedo tener una erección en el trabajo Jinnie —dijo bajito Taehyung.
—En verdad no quiero saber de tu erección y que yo no esté ahí para solucionarlo.
—Dios, te extraño tanto.
—En dos horas más serás mío de nuevo.
Taehyung resopló —Estoy ansioso.
—Yo también —Seokjin encendió el motor y rugió tan exquisitamente que pensó que podría tener una erección con solo escuchar el ruido del motor —Te iré a buscar al hospital Taetae. Prepárate para inaugurar el auto.
—Mierda, ahora estoy duro, eres malo Seokjin.
—Te amo. Iré a dar una vuelta en mi regalo de cumpleaños.
—Bien, yo iré a trabajar como el esclavo que soy.
Seokjin se rió y después de muchas despedidas cortó la llamada.
Seokjin puso música y tan feliz como un niño con su juguete nuevo arrancó para dar un paseo largo hasta poder ir a buscar a su hombre.
∘◦♡◦∘
Taehyung golpeó el suelo con su pie. Eran más de las ocho y media de la noche y Seokjin aún no llegaba a buscarlo. Levantó su celular para llamarlo, en eso escuchó un ruido de música, demasiado alta para el estacionamiento de un hospital.
Un BMW gris claro se estacionó a un costado de donde él se encontraba.
Taehyung se subió rápidamente y le dió un beso hambriento a su novio.
Seokjin lo tomó del cuello y profundizó el contacto. Taehyung gimió cuando sus lengua se encontraron.
—Mierda, baja esa música por favor.
Seokjin hizo caso inmediatamente y bajó el volumen a su música.
—Quiero que vayamos a cenar o ¿estás muy cansado Tae?
—Vamos. Mañana tengo turno de noche así que puedo dormir en la mañana.
Seokjin asintió y le subió un poco el volumen a la radio para salir del lugar.
El restaurante era uno bastante popular y era el preferido de ambos Kim desde que eran muy jóvenes.
—Hace mucho que no veníamos.
—Hace más de tres años... —Taehyung sabía el tiempo exacto ya que los últimos tres años había tenido menos momentos para estar con Seokjin. Pero ahora era diferente. Ahora Seokjin era suyo.
Taehyung nunca tuvo la necesidad de decir al mundo que alguien le perteneciera. Le causaba escalofrío pensar así pero de alguna manera se sentía orgulloso del hombre que miraba el menú del restaurante frente a él y más orgullo le daba decir que era completamente suyo.
Todas sus noches eran suyas, sus besos, sus caricias, su atención...
Todo.
—¿Quieres tomar algo? Yo tomaré una gaseosa.
—También una gaseosa.
—Bien ¿Y para comer?
Taehyung miró el menú rápidamente —¿Pollo frito?
—¿Y unas hamburguesas?
Taehyung asintió —Mejor, si, hamburguesas y papas fritas.
—Bien. Iré a pedir.
Taehyung lo observó pararse y se lamió los labios. Ese día su futuro marido se veía más exquisito de lo que ya era.
Sí eso fuera humanamente posible.
Seokjin vestía un jeans negro ajustado, roto en las rodillas. Una camiseta a rayas blanco con negro y su chaqueta ligera en tono rosa.
Demasiado atractivo y completamente mío.
El castaño se acercó al médico y lo besó antes de ir hasta la barra para pedir sus comidas.
Taehyung observó sus movimientos y como la cajera le sonreía coquetamente.
Seokjin pagó la comida y se giró para hacerle señas, claramente su novio iba al baño.
Taehyung le asintió y observó cómo su prometido se perdía por el pasillo.
Movió sus manos y miró por el lugar, no habían tantas personas, seguramente por ser día lunes. Se humedeció los labios y se levantó de su silla.
Pasó cerca de un mesero y le pidió que dejara su mesa reservada.
Caminó con confianza hasta el baño.
Entró y observó a Seokjin lavándose las manos.
—¿Tae?
El azabache no le dio ni tiempo de respirar. Lo acorraló contra el lavamanos y atacó su boca, Seokjin pareció dudar un segundo antes de tomar su cabello y corresponder al hambriento y necesitado beso.
El castaño lo tomó de la cintura y lo metió a uno de los cubículos.
—¿Estás duro cariño? —Seokjin masajeó la entrepierna del pediatra.
—Te extrañé mucho hoy —gimió alto cuando Seokjin de un tirón le bajó su pantalón de tela.
—Que buena suerte para ti que ya estemos juntos —Seokjin lo besó rudo y caliente —girate Tae.
Taehyung tragó y se dio vuelta, apoyó sus manos en la pared mientras sentía a Seokjin posicionarse detrás de él.
Amasó su culo —Mío, todo mío.
El azabache jadeó mientras Seokjin chocaba su erección contra su culo.
—Chupa —Seokjin llevó dos dedos a la boca del médico y este los lamió y chupó como si su vida dependiera de eso —muy bien, así me gusta —gruñó.
Sacó los dedos y los llevó directo a la entrada de Tae.
—No hay mucho tiempo para la preparación cariño.
—No importa...
—¿Ansioso?
Seokjin llevó un dedo a su entrada y el médico dió un salto por la intromisión.
—Si, si, así me gusta.
Seokjin gruñó y metió el segundo. Movió los dedos en todas direcciones abriendo y cerrando. La idea era dilatarlo lo más posible, por ningún motivo le haría daño a su hombre.
El castaño metió su mano en uno de los pequeños bolsillos de su chaqueta y sacó un condón.
—¿Saliste con condones de casa?
—Si. Sabía que lo iba a ocupar, lo que no sabía era que no ibas a aguantar hasta después de la cena.
—Ya, cállate y házmelo de una vez.
—Como quieras cariño —Seokjin besó su mandíbula y se puso el condón.
Llevó su mano hasta el pene de su novio y comenzó a masturbarlo para poder usar su líquido pre seminal en su propio pene.
—¡Oh mierda! —Taehyung golpeó su cabeza en la pared al sentir la manos de su prometido trabajarlo tan bien. Tan delicioso.
Seokjin se escupió un poco la mano y con un poco del líquido se lubricó. Tomó las caderas de Tae y lentamente comenzó a empujar dentro de él.
Taehyung se echó para atrás y de una embestida Seokjin estuvo dentro de él completamente.
—¡Dios Tae! —Seokjin mordió su hombro para no gemir tan alto.
—Muévete por favor.
Seokjin se afirmó de sus hombros y comenzó a embestirlo primero lento y fue aumentando el ritmo a medida que los segundos fueron avanzando.
El castaño se acercó hasta su oreja —Bésame amor.
Taehyung giró su cabeza para encontrar la boca de su novio. Los chasquidos de sus lenguas y el sonido de sus cuerpos chocando era lo único que se podía escuchar en el silencioso baño. De pronto la puerta se abrió.
Seokjin le puso una de sus manos en la boca a Taehyung y siguió embistiendo.
—Estás tan duro Tae —susurró en su oreja —¿Te gusta que te lo haga en un lugar público?
Se echó hacia atrás sacando casi todo su pene del interior y volvió a meterlo lentamente mientras veía como su novio lo recibía completamente dilatado.
Era muy excitante.
Escucharon el agua del lavamanos y unos pasos hacia la puerta.
Seokjin quitó su mano de la boca y la bajó hasta el pene del azabache para comenzar a masturbarlo.
Por más que estuvieran pasándola bien, no estaban en casa por lo que debían terminar, aunque no quisieran.
—¡Jesucristo Jin! —Taehyung gimió alto.
Seokjin siguió penetrandolo hasta que una idea pasó por su cabeza. Se acercó nuevamente y susurró en su oído —Quiero que acabes en mi boca.
—Si.
Seokjin aumentó la velocidad. Taehyung aguantó hasta que el castaño acabó dentro del condón.
Seokjin apoyó su cabeza en el hombro de Taehyung para que su regular su respiración —Dios Tae... Cada vez es más... Te amo.
Seokjin se alejó para luego arrodillarse en el piso.
El médico estaba sudado, su cabello era un desastre. Se apoyó en la fría pared y se humedeció los labios ante la vista de tener a Seokjin arrodillado bajo él.
—Debería haberte pedido matrimonio así.
Taehyung se rió y agarró un poco de su cabello para que Seokjin lo chupara de una vez. Quería correrse pronto. Pero antes acarició con su otra mano la mejilla del castaño.
—Te amo más. Ahora hazme venirme quiero gemir como una gata en celo.
Seokjin se rió fuerte y sacó su lengua para pasarla por todo el rosado glande de Taehyung. Sintió temblar a su novio y se lo metió a la boca de una vez.
Se deslizó por su miembro y lo hizo rápido. Taehyung empezó a mover sus caderas para marcar el ritmo y Seokjin dejó que follara su boca.
—Tan bueno —gimió echando su cabeza hacia atrás.
Seokjin succionó un par de veces más y el azabache se corrió por toda su boca.
Se saboreó los labios mientras de tragaba todo el semen de su prometido.
Taehyung se tambaleó y se afirmó en la pared.
Seokjin se levantó de golpe y lo tomó de los brazos —¿Estás bien?
—Si, solo que cada vez que lo hacemos así de pie siento que mis piernas me fallan —Tae bajó sus manos para subir su ropa pero estaba temblando.
Seokjin arrugó su ceño y le subió la ropa interior y el pantalón. Hizo lo propio con su ropa.
Tiró el condón en el papelero. Y se giró para mirarlo.
—No te ves bien ¿Quieres ir a casa?
—No, estoy bien, seguramente es que no he comido nada en el día.
—¿Qué? ¿Cuántas horas llevas sin comer?
Mierda. No te enojes bebé.
—Almorcé...
—¿Y eso a que hora fue?
—A las dos.
Seokjin bufó —Son las nueve de la noche Tae. Son siete horas... ¿Porqué no me dijiste? Podríamos haber cenado primero.
Taehyung lo miró con sus ojos de cachorro arrepentido.
—No tuve tiempo para comer.
—Ya, por esta vez está bien... Apenas estemos en casa organizaré tus colaciones para la semana.
—No es necesario no estoy en primaria.
Ambos salieron del cubículo. Se acercaron al lavamanos y se mojaron el cabello para refrescarse.
—No, no lo estás, pero cuando vuelvas a cuidar de ti dejaré de hacerlo. Por mientras te llevarás la comida que te haré y por supuesto la comerás.
Taehyung se mordió el labio. El modo mandón de Seokjin era tan sexy.
—Bueno está bien. Prometo cuidarme más ¿Si?
—Tienes que hacerlo —Seokjin lo abrazó —no quiero quedar viudo tan joven.
Taehyung le pegó en el pecho pero se acomodó aún más en el cuello de su hombre.
—Vamos a cenar, no quiero que te desmayes por falta de comida y exceso de sexo.
Taehyung se separó y lo besó rápidamente.
Seokjin le guiñó el ojo y estiró su mano y Taehyung no dudó en tomarla entre la suya.
Sus dedos se entrelazaron.
Taehyung sonrió y salieron del baño para finalmente comer algo de comida.
∘◦♡◦∘
💜💜💜
_PinkiPai te he estado extrañando 💔
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