Por fin cumplí mis quince añitos y ya era toda una adolescente. ¿ qué cambio ? La forma en la que pensaba, mis sonrisas fueron disminuyendo por sonrisas amargas y falsas, según ellos me volví amargada, solo porque estaba harta de los regaños, de las exigencias, me dolía y no solo eso porque toda la confianza que tenía con mi mama, esa torre se empezó a desmoronar poco a poco y dolía demasiado, ya no tenía a quien contarle lo que me pasaba, ya no me entendía, aveces intentaba aguantar ese castillo de amistad con mi mamá, mi diario que contaba con cada página un lindo consejo, pero a pesar que intentaba escribir en el, era como si la punta del lápiz se rompiera en cada palabra y todo terminara en gritos y regaños. Cada vez más obligaciones y estaba 100 % segura que ya no era una niña. De repente vinieron los castigos, que te arrancan lo que más quieres para que supuestamente aprendas,¡ que equivocados ! Así no se hace, ¿ como nos van a quitar lo que más nos gusta solo pq ellos están molestos ?  Eso lo que hace que nos de más rabia y nos molestemos ( si porque aquí empezamos a cuestionarnos si de verdad somos felices ) ... a sentirnos deprimidos y que nada cambiara, como una estúpida cárcel y aprender a ocultar tu tristeza con una sonrisa falsa....