Maratón 3/5

Por fin el día que soñaron durante meses llegó, no aguantaban otro día más.

Después de la espontánea fiesta que tuvieron, no dudaron en recargar todas sus energías. Tranquila estuvo la noche y parte de la madrugada, a pocos minutos de amanecer.

En los pasillos de la casa la joven morena tarareaba en forma de susurro una melodía, no quería despertar a sus amigos ni menos quería que ellos notaran que no había dormido. Por más que intentó no pudo, su emoción de salir al igual que un extraño presentimiento del día, hacían que estuviera ansiosa y nerviosa.

Las palabras que pasaban por su mente más la melodía que hacía, iban formando una canción que describía como se sentía-....It's our time, we up next...My crew's as real as it gets...-cantó al encontrar las palabras. Miró hacia la ventana de la sala, era hora. Las primeras luces del día iban saliendo, la emoción era tanta que se le olvidó cantar en quedito-The worst is now the best...and leaving us here will be their last regret!-si pudiera tener la oportunidad de matar a las personas que comenzaron todo, lo haría con placer. Aunque un cierto alivio tenía pues esas personas pagaron con su propia sangre, pero aún no le quita las ansias de enfrentarlos-What's my name what's my name?.

El enojo la consumía.

-¡Tzuyu!-la voz del chico con dientes de conejo, hizo que la pobre quedara atónita, era la persona que menos quería despertar por su ruido.

-Jungkook... ¡Buenos días!-trató de sonar lo más amistosa y cariñosa posible.

-Tzuyu...-la mirada de él no parecía nada amistosa-Quedamos en que ibas a dormir.

-¡Y dormí!-rezongó con los ojos abiertos.

-No dice lo mismo Nayeon.

-Maldita...-munsitó entredientes.

-Te dije que debías de dormir, será un día cansado y agotador.

-¡Dormí en la sala!-trató defenderse.

-Tus ojeras no dicen lo mismo-Jungkook tomó con firmeza el mentón de ella y levantó su cara para mirarla fijamente.

-Estaba vigilando, era mi turno-su mirada se perdió en los ojos oscuros del chico. Habían veces en las que Jungkook solía preocuparse bastante por ella, algo que solía incomodarla a cierto punto.

-Tzuyu, acordamos que nadie iba a vigilar. Todos teníamos que descansar-munsitó.

-No pude.

-No eres la única...-soltó Haeun bajando con su cobija en la mano-No estoy lista...me da miedo dejar la isla.

Los dos jóvenes fruncieron el ceño mirando como la niña se acercaba a ellos.

-No te entiendo Eun-ah-suavizó su voz Jungkook.

-Nunca he salido de la aquí, y mis pocas clases de historia no me decía sobre el mundo allá afuera. ¿Y si es peor que aquí?.

Sabían perfectamente que el virus no había afectado a todo el mundo. Ventajas de que Auradon estuviera aislado, supongo.

-Será cosa de acostumbrarnos. Dudo que allá afuera haya personas deformes que que quieran comernos.

[...]

-¿Nos vamos?-esas palabras provenientes de Jimin debajo del marco de la puerta, hicieron que Jeongyeon apagará las luces de la sala. Miró por última vez su casa, su preciada y amada casa. Tal vez su vida ahí no fue buena, pero extrañaría ese olor que le recordaba a su familia.

Antes de irse tomó una foto de ella de pequeña y la guardo en su mochila. Tomó la mano de Jimin y salieron por fin de ese lugar.

Todos los demás ya iban adelantados, el día no era eterno y debían de llegar a las Bahías.

Ese lugar donde comenzó todo que traía bastantes recuerdos, buenos y malos. Ahí empezarían su búsqueda, justo donde la verdad se descubrió, en la playa.

-Por la izquierda-indicó Jungkook un paso enfrente que todos, los mapas eran lo suyo y ubicarse también.

Iban en silencio, matando a uno que otro caminante que aparecía, ya no era un problema. Hasta Haeun aprendió a disparar.

-¿Y si hay más sobrevivientes?- cuestionó al aire Chaeyoung, tratando de conectar con alguna mirada de sus amigos-Y si están escondidos, tratando de buscar ayuda.

Cierta culpabilidad la comía viva.

-¿Quieres posponer esta misión?-enfadado bufó Jimin deteniendo al grupo.

-Es que no es justo que por mi culpa ellos estén sufriendo. Es lo menos que podemos hacer-bastante tiempo ya tenían caminando como para empezar una discusión.

Yoongi que también ya estaba cansado se frotó los ojos e intentó ser un poco más amable con su voz de lo sería Jimin-Chaeyoung, eres una persona maravillosa, no tengo dudas de eso. Pero entiende que no hay nada que podamos hacer.

-Si la hay.

-¿Qué? Quieres hacer una búsqueda masiva es todos los lugares de Auradon tratando de buscar vidas arriesgando las nuestras-Nayeon se unió-No es justo para tu hermana que lo hagas, ni a nosotros.

-Hay personas que corren con más suerte que otras-dijo Jimin entredientes señalando a un punto-Ustedes deciden si se van a pudrir en este infierno ¿Alguien quiere quedarse?-directo y serio, fue lo último que dijo antes de volver a caminar.

Todos negaron y nadie volvió hablar.

-Por aquí-gritó Jungkook rompiendo aquella tensión.

El fin del bosque se vio cuando miles y miles de granos de arena se hacían presente en el camino, poco a poco iban a llegando.

Haeun y Dahyun corrieron a la playa, la última con mucha más dificultad al caminar, eran tan inocentes e inperectivas que después de un gran rato de caminar, solo querían jugar.

La pequeña niña dejó caer su cuerpo a la arena, estaba cansada de solo caminar dos metros. Se río al final y con sus pequeños puños tomó la arena y la aventó a todos lados.

Haeun por su parte estaba justo enfrente del mar, sus pies se mojaba cada que las olas pegaban, y con la brisa en su cara con pequeñas gotas. A pesar de los gritos de todos paniqueados, ella respiro profundo y cerró los ojos.

-¡Haeun no puedes correr de esa manera! ¡Y si un caminante llega! ¡Sabes perfectamente que Dahyun sigue todo lo que haces!-la regañó Chaeyoung tomándola de la mano para seguir con la búsqueda, ella hizo peso, quería quedarse ahí-¡Haeun!.

-Chaeyoung, yo veo a las niñas...-habló Jin unos pasos atrás sentado junto de la bebita.

-¿Crees que te confiaré la vida de mi hermana?.

-Yo los cuido-habló justo detrás de él, Nayeon-Ayuda a los demás, te necesitan.

Sintió un poco más de alivio. Si quieren apresurar su salida debían de descifrar el otro acertijo.

Si sus cuentas no fallaban, lo que debían de estar buscando se encuentra justo donde encerraron a Chaeyoung y a Mina, que de hecho era el lugar donde estaban situados.

-Chaeyoung relájate, es solo mar...- habló su mejor amiga justo detrás de ella, viendo como Chaeyoung miraba a su hermana preocupada-No creo que Nayeon no sepa nadar-vio como la recién mencionada entró junto a Haeun al mar.

-Siento que no lo lograré.

-¿A qué te refieres?.

Curiosa Mina miró a Chaeyoung tratando de descifrar lo que su expresión decía.

-No voy a poder cuidarla. Aún siento que me odia por no decirle la verdad.

-No serás una perfecta madre para ella, pero trataras de ser una mejor hermana. Comprendela, intenta ponerte en su situación. Ella está aún pequeña para comprender la magnitud de todo esto.

-Es que los veo como la tratan y la cuidan-miró al suelo apretando sus labios. Era increíble como les cambió la vida en meses-Mina, no puedo hacerlo.

-Chaeyoung, sabrás como hacerlo. Solo tu eres capaz de educar y cuidar alguien de tu misma sangre. Solo confía más en ti, y en tus instintos. Que no dudo que Namjoon te ayude en eso.

Sin dudarlo abrazó a su mejor amiga, se dejo caer en los brazos de ella. No importaba cuantas veces se abrazaban, cada que lo hacían era una sensación mágica y perfecta.

-¡Jin no dejes que se coma la arena!-Jimin gritó alterado al ver como Dahyun tomaba de su puño arena y lo intentaba introducir a su boca-¡Jin!.

Lo sacó de su mundo y el rápido de un golpe le quitó la arena de su mano. Un golpe no tan fuerte pero para una bebé era demasiado, pues empezó a llorar.

-¡Jin!-corrió Jeongyeon, ya que él, la intento levantar pero la niña no dejaba de patalear.

-¡No hice nada!-se excusó levantó las manos.

-Roble encima del mar...-repitió las palabras Jihyo una vez que Yoongi se sentó en la arena a ver el pergamino, ignorando los gritos y regaños de Jeongyeon y Jimin.

Mina se asomó también tratando de ayudar. Miró hacia el mar, no encontraba nada que le dijera que eso era. ¿Y si estaba abajo de mar? ¿Y si se encontraba en el otro extramo de la isla? camino mas a la orilla y entrecerro sus ojos al ver algo muy lejos de donde estaban. Y volvió a repetir lo dicho por Jihyo...

-¡Lo tengo!-gritó exaltada para ella corriendo hacia ellos-¡Lo tengo!-Yoongi y Jihyo levantaron de golpe, llamando a los demás que estaban exparcidos por toda la playa.

-¡Chicos, chicos chicos!-también gritaba Taehyung a lo lejos viniendo de un árbol-¡Debemos irnos ahora!.

Todos los miraron extrañado y a la vez preocupados.

-Es una pesadilla-él se esperó a que Nayeon viniera con Haeun en brazos-Cuando fui al baño detrás de los árboles, escuché varios gritos y logré ver a lo lejos una orda de caminantes... son demasiados para nosotros.

-Tranquilo Taehyung, ya hemos lidiando con eso-la preocupación no era mucha, una tarea de todos los días.

-Dos veces de hecho-agregó Jihyo al comentario de Namjoon.

-Más de eso, era nuestra rutina-aclaró Yoongi un tanto obvio.

-Créame que algo me dice que no será igual a esas veces. Véanlo por ustedes mismos, son miles de caminantes, al parecer ya lograron infectar a toda la isla.

Se escuchaba su preocupación y su pánico ¿Debían de preocuparse? Si querían salir todos vivos, sí.

-¿Cuánto tenemos?-alzó a decir Nayeon una vez que bajó a Haeun.

-No mucho. Tal vez minutos antes de estar cundidos.

Un disparo se oyó enfrente de ellos, era la pistola de Jeongyeon-No exactamente minutos.

Habló cuando el caminante estaba próxima a atacarla.

-Síganme y corran-habló Mina invadiendo el campo de visión de todos y salió corriendo hacia donde ella decía, todos le siguieron el paso.

Uno que otro caminante salía del bosque, se detenían justo en la línea que dividía el pasto y la arena, era nuevo el lugar para algunos y sólo se quedaban ahí parados. Otros ya adaptados se metían y tocaban la arena. Más y más sujetos salían viendo a lo lejos a sus próximas presas.

Listos para atacar a esos 14 jóvenes.

Y su única esperanza era esa chica rubia que decía tener la salida.

"¿Todo listo? ¿Todo resuelto? Tienes que ser listo que no queda tiempo..."