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Capítulo 10

Andrew está esperándome en el auto, estoy tratando de ponerme los lentes de contacto pero por los nervios no puedo, respiro profundamente e intento de nuevo, finalmente logro colocarlos en su lugar. Me pongo los lentes y salgo de la habitación hacía el estacionamiento.

- ¿Por que tardaste tanto? - Pregunta Andrew mientras entro al auto.

- No podía ponerme los lentes de contacto.

- Esta bien, ponte el cinturón ya vamos tarde.

Me pongo el cinturón y salimos del parqueo del hotel hacía la empresa de mi padre.

- J & M's Company. ¿Como puedo ayudarla? - Pregunta una de las secretarias.

- Mi jefe es Ronald Heart, esta aquí por los documentos que pidió.

- Ya casi están listos, en un momento se los traeremos, mientras tanto pueden tomar asiento.

- Gracias.

Regreso a donde está Andrew y me mira con curiosidad.

- ¿Donde estan los documentos?

- Aun no los tienen, los traerán en un rato.

- Esta bien, les doy quince minutos.

Tomamos asiento y saque mi celular. Había un mensaje de Richard así que lo abrí.

"Que no se te olvide nuestra cita de hoy bonita."

Decido responderle ya que no tengo nada que hacer.

"Como podría olvidarlo :) Te veo a las 7"

- ¿Por que sonríes?

- ¿Que?

- Estas sonriendo.

- Claro que no.

Mi celular vibra y lo reviso de nuevo.

"Ya no puedo esperar a verte, prometo que te vas a divertir."

Sonrio de nuevo y Andrew me ve con curiosidad.

- ¿Con quién estás hablando?

- Con Richard.

- Ya veo. ¿Podrías contestarle los mensajes al salir de aquí? Esto es más importante Emily.

- Lo se, lo siento.

Guardo mi teléfono y la secretaria camina hasta nosotros.

- Los documentos están listos, si necesita algo más solo pidalo.

- Gracias, eso es todo señorita. - Dice Andrew.

Ambos nos levantamos, tomé la caja con los documentos y salimos de la empresa de mi padre. Pongo la caja en la cajuela del auto y la cierro. Entro al auto y me pongo el cinturón.

- ¿Vamos a comer?

- Si, muero de hambre.

- ¿A donde vamos?

- No lo se, elige tu.

- Esta bien, iremos al primer lugar que veamos.

- Bueno.

Andrew conduce y encontramos un lugar para desayunar muy rápido, al entrar al lugar me da la sensación de que he estado aquí antes. Veo las mesas y me resultan muy familiares, nos sentamos en el lugar mas alejado de las ventanas y una mesera nos da los menús.

- Volveré en un momento para tomar su orden.

- Gracias. - Digo sonriendo.

La mesera se retira y comenzamos a leer el menú.

- Hoy saldré con Richard. - Digo de repente.

Andrew se queda en silencio por un momento observando el menú y luego me mira.

- ¿A donde te llevará?

- No lo se, es una sorpresa.

- Espero que se diviertan, pero no vayan a un lugar con muchas personas.

- Se lo diré luego.

La mesera regresa y toma nuestra orden. Observo todo el lugar y sigue pareciendo muy familiar, yo he estado aquí antes, quizás vine con mis padres alguna vez. No, espera. Comienzo a recordar, recuerdo a Terry sentado frente a mi, junto a una ventana.

- Emily, ¿Todo en orden? - Dice Andrew sacandome de mis pensamientos.

- Si. Todo esta bien. - Digo volviendo a la realidad.

- Estas muy pálida, seguro es porque no has comido nada.

- Estoy bien Drew, tranquilo.

La mesera regresa y nos sirve café.

- En unos minutos regreso con su comida. - Dice amablemente la mesera.

- Gracias. - Digo tomando el azúcar para ponerle un poco a mi café.

Andrew toma su taza y bebe un sorbo de cafe y la pone rápidamente sobre el plato.

- Esta muy caliente. - Dice llevando su mano a su boca.

- Gracias por el dato. - Digo riendome de él.

La mesera regresa con la comida así que comenzamos a comer.

- ¿Crees que si Alexander Dawson despierta diga quienes fueron los que asesinaron a mi familia?

- No lo se Halley, creo que habrá que obligarlo, pero tendremos que protegerlo, las personas que asesinaron a tu familia querrán matarlo para que no hable.

- Quizás así podamos dar con ellos.

- ¿Tienes una idea?

- Si, poner cámaras en su habitación del hospital para saber quien lo visita.

- Ya que no tenemos nada que hacer por unos días iré a Kentucky para instalar las cámaras.

- ¿Iras solo?

- No te ofendas, pero trabajo mejor solo.

- Esta bien, lamento ser una carga para ti.

- No es eso. - Dice Andrew riendo.

- Lo se, solo quise ser dramática.

- ¿Estarás bien si me voy dos días?

- Si, se cuidarme sola.

- Le pediré a Richard que te cuide.

- ¿No crees que puedo cuidarme sola?

- Se que si, pero quiero irme tranquilo sabiendo que no estás sola.

- Esta bien.

Andrew levantó su mano para llamar la atención de la mesera, ella se acercó y Andrew pidió la cuenta.

- Espero tengas efectivo. - Dice Andrew.

- Claro que si. - Digo sacando el dinero de mi bolso.

La mesera regresa con la cuenta, pagué y nos fuimos de allí. Al llegar al hotel Andrew revisó los vuelos hacía Kentucky, uno de ellos salía en dos horas así que hizo su maleta y lo llevé al aeropuerto.

- Conduce con cuidado, te veré en dos días.

- Cuidate, hasta pronto.

- Llamaré a Richard. - Dice Andrew saliendo del auto.

- Esta bien.

Andrew entra al aeropuerto y conduzco hacía el centro comercial, por alguna razón recuerdo donde está.
Entro a muchas tiendas buscando un vestido para mi cita con Richard, me probé cientos de vestidos pero ninguno me gustó hasta que finalmente entré a una tienda y había un hermoso vestido negro en uno de los maniquíes, me lo probé y me fascinó aún más, lo compré y también compré unos zapatos. Luego me di la tarea de buscar un regalo para Richard, paso junto a una tienda y veo un reloj en una vitrina.

- Es perfecto.

Entro a la tienda y lo compro, veo la hora y son las 3:23 pm. Subo por el ascensor hacia el área donde estan los restaurantes, como algo y luego voy al salón de belleza, después de que me peinen, me pinten las uñas y me maquillen, regreso al hotel, son las 6:39 pm. Así que me pongo el vestido y los tacones, me pongo un collar y unos aretes.

Alguien toca la puerta así que me voy a la entrada y abro la puerta.

- Hola Halley, te ves hermosa. - Dice Richard sonriendo.

- Gracias. - Digo sonrojada.

- Por cierto, Andrew me llamó, me pidió que te cuide mientras no está.

- Lo sé. No tienes que hacerlo, estaré bien.

- Voy a cuidarte Halley, vendré aquí mañana desde muy temprano y hoy cuando regresemos revisare la suite para asegurarme de que estes a salvo.

- Está bien. - Digo aún que creo que es algo exagerado. - Te tengo una sorpresa.

Voy a mi habitación, tomo la caja donde está el reloj y regreso a la entrada.

- Espero que te guste.

- No tenías que comprarme nada. - Dice mientras abre su regalo.

- ¿Te gusta?

- Me encanta. - Dice mientras me abraza.

- ¿Ya nos vamos?

- Si, dejé mi auto en el estacionamiento.

Bajamos al estacionamiento, Richard abrió la puerta del copiloto para que yo entrara, luego rodeó el auto, entró y salimos del estacionamiento.

- ¿A donde iremos?

- Te llevaré a la feria. - Dice Richard sonriendo. - A las nueve tenemos una reservación en un restaurante, se que te gustará.

- ¿Una feria?

- ¿No te gustan las ferias?

- Creo que nunca he ido a una.

- Te prometo que será divertido.

Llegamos a la feria, Richard estaciono el auto y bajamos. Habían luces por doquier, por donde quiera que viera habían personas sonriendo y divirtiéndose.

- ¿Que quieres hacer primero?

- No lo se. Escoge tu.

- ¿Vamos a la rueda de la fortuna?

- Si.

Richard compró muchos boletos, primero subimos a la rueda de la fortuna, desde arriba se miraba toda la feria, y había una hermosa vista de la playa y la ciudad, luego jugamos en los carritos chocones, a tirar los vasos, a golpear ardillas con unos masos, a atrapar peces con una caña de pescar y a la casa de los espejos, estando allí, Richard y yo nos separamos para ver quien encontraba la salida primero, caminé entre los espejos y choque contra uno, caminé hacía la derecha y vi la salida, caminé hasta la salida y alguien me tapó la boca y me agarró por la cintura.
Estaba aterrada, mi corazón comenzó a latir muy rápido, mis manos se pusieron frías y mi respiración se agitó, el hombre quitó su mano de mi boca y me dio la vuelta.

- Me asustaste Richard. - Digo golpeando su pecho con mis manos. - Nunca vuelvas a hacer eso. - Digo molesta.

- Lo lamento, fui un idiota. Perdóname.

- Esta bien, solo salgamos de aquí.

- Si claro, vamos a cenar.

Nos marchamos de la feria y fuimos al restaurante.
Yo he estado aquí antes, lo recuerdo muy bien.

- Aquí me trajiste para nuestra primera cita. ¿No es así?

- ¿Lo recuerdas? - Dice tomando mis manos.

- Si. - Digo sonriendo.

- Gracias por aceptar salir conmigo.

- Gracias por invitarme, ha sido una gran noche.

- De nada. - Dice Richard sonriendo.

Ambos miramos el menú y le indico a Richard lo que quiero, él ordena la comida y nos la traen en menos de veinte minutos.

- Hola Richard. - Dice alguien de repente.

Richard luce algo asustado, se levanta y habla con aquel hombre.

- Hola Terry, Ashley.

- Hola Richard. - Dice Ashley saludandolo con un beso en la mejilla.

- ¿Tienes una cita? - Dice Terry viendome de reojo.

- Si, ya tengo que regresar con ella. Nos vemos otro día.

- Sí claro. Ya nos vamos.

- Está bien, adiós.

Los vi marcharse, ella tenía un anillo en su dedo, lo que dijo Richard es verdad ¿Cómo pude ser tan tonta?
Terry volteó a ver hacía donde estabamos antes de salir.

- ¿Crees que me haya reconocido?

- No creo, te habría saludado o ya nos hubiera gritado por que regresaste.

- Sí, tienes razón.

Seguimos comiendo, hablando y riendo. Richard es muy dulce y tierno, creo que puedo verme con este hombre en el futuro. Es perfecto.

- ¿Quieres algo más?

- No gracias.

- Esta bien, pediré la cuenta. - Dice levantando su mano.

Richard le indica al mesero que quiere la cuenta, éste se la trae de inmediato. Saco la billetera de mi bolso y le doy el dinero de la cuenta a Richard, pero no lo acepta.

- Yo pago Halley.

- Déjame pagar algo. Al menos la mitad.

- No. Yo pago. - Dice devolviendome el dinero.

- Esta bien. - Digo guardando el dinero en la billetera.

- ¿Nos vamos?

- Si, vamos.

Richard me ayuda levantarme de la silla y nos vamos del restaurante.
Son las 11:56 pm Richard está revisando cada rincón de la suite, quiere asegurarse de que no estoy en peligro.

- Todo está bien. ¿Segura que no quieres que me quede?

- No, estaré bien. Te veo mañana.

- Hasta mañana. - Dice dandome un beso en los labios.

- Gracias por todo, me divertí mucho. - Digo rodeando su cuello con mis brazos y él toma mi cintura.

- De nada. - Dice volviendo a besarme.

Nos besamos una, otra y otra vez, este hombre es maravilloso, pienso mientras nos besamos.

- Hasta mañana. - Digo despidiéndome con otro beso.

- Hasta mañana. - Dice mientras camina hacia el elevador.

Cierro la puerta, me siento en el sillón para quitarme los zapatos.
Alguien toca la puerta, así que vuelvo a abrocharlos, asumo que Richard olvidó algo, abro la puerta, alguien me empuja hacía adentro.

- ¿Que haces aquí Halley?

- ¿Terry? ¿Como me encontraste?

- Los seguí desde el restaurante.

- ¿Y tu novia? - Digo muy molesta.

- La dejé en casa.

- ¿Qué haces aquí?

- Eso debería preguntarte ¿No es así?

- Eso no es de tu incumbencia.

- Claro que si.

- No tienes derecho siquiera a preguntar. - Digo empujandolo.

- Tranquila Halley.
No sabes lo difíciles que fueron estos dos años para mi.

- ¿Difícil? ¡Te vas a casar Terry! Me fui y conseguiste a alguien más.

- No Halley, no es así.

- ¿Entonces? ¿Cómo es?

- Cuando tú te fuiste me dediqué a tomar, tomaba todos los días después de cada turno, no sabía qué hacer sin ti.
Un día me desperté y Ashley estaba junto a mí, unos días después llegó a la estación para decirme que estaba embarazada así que hice lo correcto y le pedí que se casara conmigo.

- ¿Unos días? ¿Cuántos días?
¿Cómo pudo saberlo tan rápido?

- No lo sé, solo llegó a la estación y me lo dijo frente a todos, ya habian pasado tres semanas.

- ¿Ni siquiera le pediste que se hiciera una prueba de embarazo? A demás si está embarazada podría no ser tuyo.

- Una vez se la pedí y se molestó, me dijo que si no confiaba en ella se iría y no podría ver a mi hijo jamás. Días más tarde llegó con una prueba de embarazo a mi casa.

- Eso es chantaje. Terry, al menos dile que la acompañas a un chequeo medico y que le hagan la prueba allí o al menos frente a ti ¿Eres idiota o que?

- Lo haré. - Dice molesto. - Ahora responde ¿Qué haces aquí?

- Richard fue por mi a Alemania, dijo que van a cerrar el caso de homicidio de mi familia, también volví para recuperar la empresa de mi padre.

- ¿Richard? Lo asesinaré cuando lo vea.
Es muy peligroso Halley, deberías volver.

- No. Deja a Richard fuera de esto.
Esta vez no me iré sin que los que asesinaron a mi familia estén en prisión.

- Halley, no hagas esto. Pueden asesinarte y no podría con eso. - Dice Terry tomándome por los hombros.

- Deberías irte Terry.

- No, espera.

- ¿Qué quieres? - Digo cruzada de brazos.

- ¿Qué haces con Richard? ¿Te gusta?

- No voy a hablar contigo sobre eso Terry.

- Por favor, solo dime ¿Te gusta?

- Es un chico muy tierno, caballeroso y lindo. Es maravilloso.

- ¿Pero te gusta? - Dice acercándose más a mí.

Nuestros labios están solo a centímetros, nuestra respiración se sincroniza y nuestros ojos están fijos en los del otro.

- Si. - Digo con la voz entrecortada.

- Sé que no me has olvidado. - Dice con lágrimas en sus ojos.

Por supuesto que no lo he olvidado, pero ahora estoy con Richard y él con Ashley así que nada de esto tiene sentido.

- Te olvidé Terry - Digo viendo hacía el suelo.

- No digas eso. - Dice mientras me sacude ligeramente por los hombros. - Se que mientes. - Dice mientras una lágrima rueda por su mejilla.

- Lo siento. - Digo con la voz entrecortada.

No puedo verlo llorar, se me parte el corazón al verlo así, un recuerdo vuelve a mi, un lugar muy oscuro, un disparo ensordecedor, Terry está en el suelo yo tomo su arma y disparo hasta descargar el arma.

- ¿Estás bien? ¿Halley? Estás muy pálida.

- Estoy bien. Solo recordé algo.

- ¿Qué recordaste?

- ¿Te dispararon?

Terry se quita la camisa dejando ver la cicatriz de su herida de bala en el pecho. Me acerco a él y pongo mi mano en la cicatriz. El recuerdo sigue fluyendo, Richard me quita el arma y se dirige a ayudar a Terry, llamo una ambulancia, los paramédicos llegan muy rápido. Richard me lleva en su auto al hospital, siento la desesperación del momento, cada segundo lleno de agonía, el sufrimiento de no saber que es lo que sucede.

- ¿Halley? ¿Te sientes bien? - Pregunta mientras se pone de nuevo la camisa.

- Si. - Digo sentadome en el suelo.

Terry me lleva hasta el sofá, me quitó cuidadosamente los tacones, para por fin poder descansar mis pies.

- Deberías irte.

- No me iré hasta que no me digas la verdad.

- ¿Cuál verdad?

- ¿Lo amas?

- Terry, no tienes derecho a preguntar eso.

- Esta bien, al menos dime ¿Me amas?

- Terry, yo... - Respiro profundamente y pro sigo - No he podido olvidarte, cada día solo pensaba en ti, en que esperaba que estuvieras bien, pensaba en llamarte y tal vez en convencerte en mudarte allá, tu eras en lo primero que pensaba al despertar, y a veces pensaba que tu irías por mi, pero no fue así, Richard fue por mi a Alemania, el hizo lo que tu no hiciste, me dijo que me extrañaba y que quiere estar conmigo, también me contó sobre tu compromiso y allí murió mi amor por ti. Me sentí como una idiota, todo lo que recuerdo que me dijiste es una mentira, jamás me amaste, solo buscaste el reemplazo de Ashley en lo que ella regresaba contigo.
Por favor, no quieras confundirme más de lo que ya estoy, ahora Richard y yo estamos juntos y tú tienes a Ashley, así que espero que sean felices, Richard y yo lo seremos.
Espero que eso responda a tu pregunta.

- No, no lo hace. - Dice sentándose junto a mi. - ¿Me amas?

- No hagas esto más difícil para mí. Por favor. - Digo llorando.

- Halley, no llores. - Dice limpiando mis lágrimas. - Solo responde por favor, si es un no solo dilo y no volveré a molestarte nunca. Bueno te ayudaré a buscar a los que asesinaron a tu familia y luego me iré y jamás me volverás a ver.

- Vete. - Digo levantándome del sofá.

- Por favor responde. - Dice tomando mi mano. - Por favor.

- ¡Si Terry, te amo! - Le grito de repente.

No puedo creer lo que dije, soy una tonta, me quedo perpleja ante mi repentino estúpido impulso.

- Yo también te amo. - Dice acercándose cada vez más a mi.

- Vete de aquí Terry.

- ¿Y por que estás con Richard?

- Por que quiero amarlo como él me ama a mi, se lo merece. Sé que seremos felices.

- Creo que quisiste decir que él será feliz.

- Mi felicidad no importa, mi felicidad se acabó el día en que asesinaron a mi familia.

- No digas eso, prometo que te haré feliz.

- ¡Terry tu tendrás un hijo! Por favor para. Ya no puedo seguir hablando sobre esto, no tiene sentido. Ya te lo dije, Richard y yo estamos juntos y tu tendrás un hijo con Ashley, así que no hay nada más que hablar y no me hagas mas promesas. Por favor vete o llamo a la policía.

- Está bien, ya me voy. - Dice cabizbajo. - Regresaré mañana para darte el informe del homicidio de tu familia.

Sin más, se marcha. Es la 1:43 am. Voy a mi habitación para ponerme mi pijama, me recuesto en la cama y lloro hasta quedarme dormida.

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Se que nunca escribo notas pero quiero hacerles una pregunta:

¿Quien les gustaria que se quedara con Halley? ¿Terry o Richard?

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