Desde el primer beso, Taehyung dejó caer todas sus barreras, no había momento del día en el que no aprovecharán para darse besos y mimos.

Un día, se levantó cariñoso, abrazando a Jungkook, fue todo un drama dejarlo ir a ducharse para ir a trabajar, quería estar junto a él todo el día.

Jungkook habló con el Doctor sobre el avance del Omega, obviamente sabía que ya no era necesario vivir juntos, no le dijo nada a Taehyung sobre esto, pues aunque ya estaba mejor, no quería que se fuera de su casa y si el Omega mintió, era porque él tampoco deseaba irse.

Con dificultad Jungkook salió del apartamento, ese día decidió que no iría a trabajar, se dirigió a la farmacia para comprar supresores, planeaba acompañar a Taehyung en su celo, pero tal vez no como el Omega deseaba.

No era necesario que Taehyung le dijera que estaba en celo, su aroma lo delataba y su excesiva necesidad de ser mimado.

Taehyung con molestia por la partida de Jungkook, decidió darse una ducha tibia en la tina, sentía calor y deseaba relajarse.

Al estar desnudo en la tina, el agua tibia rozaba su piel y debido a la sensibilidad empezó a acariciarse suavemente con la esponja, pequeños espasmos empezaron a recorrer su cuerpo, su miembro empezó a endurecerse, necesitaba de su alfa.

El aroma a fresas y vainilla se esparció por todo el apartamento, Taehyung frotaba sus manos en su erección, gimiendo y jadeando.

Cuando Jungkook volvió, el aroma del omega invadió sus fosas nasales, al entrar al apartamento fue inevitable no escuchar los ruidos provenientes de la habitación, del baño específicamente.

La dulce voz de Taehyung gemía mientras se daba placer a sí mismo, Jungkook quería huir, ese no era el plan que tenía para ese día.

Taehyung estaba envuelto en su propia burbuja, cargada de lujuria mientras sus manos acariciaban su piel, el aroma de su alfa llegó a él, esto lo hizo sobresaltarse en la tina.

-Alfa.. ayúdame..- Le suplicó con su voz ahogada en el placer.

Era la primera vez que Jungkook experimentaba aquellas sensaciones, nunca se permitió estar cerca de ningún omega, él solo quería a Taehyung.

Jamás pensó que el celo sería tan difícil de soportar.

Escuchar la voz de Taehyung clamando por él, era una tentación, deseaba hacerlo suyo desde que lo vio en aquella fiesta.

Su polla vibraba con cada llamado de su Omega.

-Alfa- Gimió con voz pausada y lenta.

Ante la negativa de Jungkook a su llamado, Taehyung salió de la tina en búsqueda de su alfa.

Si existiera un premio a la resistencia, Jungkook sería el ganador.

Ver a su amado totalmente desnudo, con gotas de agua y espuma recorriendo su cuerpo, fue demasiado para él.

El Omega lentamente se acercó y lo abrazó, restregó su cuerpo desnudo, provocando al Alfa.

-Volviste- Le dijo mientras le besaba el cuello. -Te necesito...- La voz del Omega se escuchaba en un susurro, un poco más grave de lo normal, debido a la excitación.

Jungkook intentó resistirse, cerró sus ojos. -Traje.. supresores... tomalos- Le extendió una bolsa.

-No quiero... te quiero a ti-

-Tae...- Intentó hablar, pero gimió al sentir las manos del Omega acariciando su entrepierna. -Yo.. no quiero tomarte así... no estás consciente-

-Si lo estoy, quiero que me folles Jungkook, eres mi Alfa-

Él quería hacerlo suyo, follarlo hasta que no pudiera pronunciar su nombre.

"Te amo tanto, pero no voy a aprovecharme de tu celo"

Jungkook comprendía que en este universo, los ciclos de celo hacen enloquecer a los lobos y que no son totalmente conscientes de sus acciones.

Por eso antes de ir al apartamento él había tomado unos supresores y eso había logrado mantener su compostura.

-¿Quieres que te bese Omega?-

-Si- Asintió feliz

-Tomate esta pastilla- Le ofreció. Taehyung la rechazó. -Hazlo por tu alfa, yo te daré besos y mimos-

-No-

Jungkook besó los labios del Omega con suavidad y Taehyung se derritió ante el tacto. -Tómala y te daré más besos-

Taehyung obediente y deseoso de más besos, tomó la pastilla.

-Buen chico, buen Omega-

Jungkook lo alzó como una princesa y lo llevó a la habitación, lo sentó en la cama, mientras se acomodaba. La espalda quedó recostada al espaldar de la cama, palmeó sus muslos invitando al Omega a sentarse en su regazo.

Taehyung feliz y ansioso se subió, con sus piernas abiertas se acomodó en medio de la cadera del alfa.

Jungkook le acarició la espalda desnuda, mientras le besaba el cuello. -Eres precioso Omega-

Con pequeños besos empezó a recorrer el cuerpo frente a él, dejando marcas a su paso, lamiendo los pezones con suavidad.

Las manos del Alfa agarraron las nalgas del Omega para amasarlas, los labios se encontraron nuevamente en un beso llenó de pasión y amor.

-Alfa.. te necesito-

Jungkook lo siguió acariciando, besando, una mano apresó el miembro del Omega, empezó a masturbarlo, minutos después Taehyung se corrió en el abdomen del Alfa, sin poder emitir ningún sonido y con sus labios abiertos, disfrutó de su orgasmo.

Cansado por las sensaciones se recostó en el cuerpo de Jungkook, la excitación bajó un poco al llegar al clímax.

Minutos después, la pastilla empezó a hacer efecto.

Taehyung se quedó dormido, Jungkook no lo abandonó en ningún momento, le trajo comida, bebida y cada que era necesario le daba la dosis del supresor.

Los días del celo terminaron, Taehyung empezó a recuperarse y ser consciente de lo que acababa de ocurrir.

Jungkook no se aprovechó de él y lo ayudó.

Los alfas aprovechaban los celos de los Omegas, era su pensamiento.

"Para eso sirven los Omegas"

Le dijo una vez un alfa con el que salía.

Aquel alfa idiota se enteró del celo del Omega y pensó que Taehyung le permitiría pasarlo con él, tan solo porque eran novios.

Taehyung al conocer sus intenciones, decidió irse a una cabaña lejos, paso su celo solo.

Desde esa vez, no volvió a tener novio.

Jungkook y él no tenían un nombre a su relación, se gustaban, habían tenido varias citas y al ser destinados, el lobo de Taehyung estaba decidido en entregarse al alfa.

Al despertar de su trance, sintió que su corazón palpitó más fuerte por Jungkook.

Aquella determinación del Alfa de no aprovecharse, le hizo ver que Jungkook era diferente.

-Gracias-

-¿Por qué me das las gracias?-

Ambos permanecían acostados, abrazados, Jungkook acariciando el cabello del Omega.

-Por.. no aprovecharte de mi celo-

-Yo quiero hacerte mío, pero te quiero totalmente consciente, que gimas mi nombre, que recuerdes cada beso y cada caricia-

Aquellas palabras hicieron que su corazón palpitará fuerte y rápido.

-Jungkook.. yo.. soy virgen- Le dijo apenado

-Con más razón, quiero que te entregues cuando estés listo- Le dió un beso en la frente.

-¿Tú eres virgen?- Le preguntó el Omega

Jungkook no supo qué responderle, por segundos que parecieron minutos, pensó en su respuesta.

-Lo soy-

Su alma no lo era, su mente tampoco, en muchas vidas había hecho el amor con Taehyung, pero en este universo su cuerpo, su piel, eran totalmente vírgenes.

Le pareció correcto contestar con la verdad, aunque fuera parcial.

Taehyung sonrió y se acomodó en el cuello del alfa, sintiendo la calidez de su cuerpo.

Se había enamorado totalmente de aquel hombre.

Dos semanas después de su celo, Jungkook lo acompañó al control con el Doctor, quien al ver que pasó el celo sin problema, les dijo que ya no era necesario vivir juntos (algo que ya le había dicho a Taehyung, el Doctor asumió que el Omega omitió).

Taehyung no pudo seguir sosteniendo la mentira para permanecer en el apartamento de Jungkook y retornó al propio.

Varios días habían pasado, Taehyung sentía que algo desgarrador en su cuerpo lo estaba consumiendo.

No vivir con Jungkook lo estaba destrozando, algo que lo inquietaba, ellos no tenían una marca, no estaban enlazados, no entendía porque se estaba sintiendo tan vacío.

Empezó a cuestionar cada sueño que tenía, en una libreta empezó a tomar notas, logrando encontrar diferencias y similitudes.

Identificó seis vidas al lado de Jungkook, y cada apunte que dejaba en aquella libreta lo convencía de que no eran sueños.

Quería hablar con Jungkook sobre sus sueños, pero no sabía si este lo tomaría en serio, luego recordó unas palabras que le dijo un día: "...Pienso que habernos conocido no es coincidencia..."

Esa noche tenían una cita, Taehyung estaba ansioso por verlo, se puso su mejor outfit.

Su estilo de vestir siempre era muy formal, vintage, acordé a su forma de ser.

Recibió un mensaje de texto indicando que Jungkook lo estaba esperando en el Lobby del edificio donde vivía.

Bajo y al llegar, no perdió detalle de la figura del Alfa.

Tan diferente a él, con un estilo informal.

Eran una pareja dispareja, eran perfectos.

-Hola, estas precioso- El alfa lo saludó con un beso en la mejilla.

-Hola- El Omega tartamudeó al tenerlo cerca. -Tú.. también te ves.. bien-

-Te extrañé- Le dijo mientras caminaban hacia el vehículo.

"Yo también" Quiso decir, se le dificultaba expresar sus emociones.

Jungkook lo llevó a un restaurante cerca del mirador de la ciudad, reservó la mesa con la mejor vista.

Taehyung se sentía feliz, el vacío no existía cuando Jungkook estaba a su lado.

-¿Cómo te ha ido en el trabajo?- Preguntó el Alfa

-Retomando poco a poco, Minjae me ayudó mucho durante mi ausencia-

-Son muy cercanos, Minjae y tú- El Alfa lo miró detalladamente, tratando de analizar las expresiones del Omega, empujó su mejilla con la lengua, tratando de liberar la ansiedad que le generaba saber que Taehyung compartía mucho tiempo con aquel Beta.

-Si, crecimos juntos, nuestros padres son muy amigos, es como un hermano para mi- Taehyung era consciente que Jungkook estaba celoso. -¿Como te va con Nayerin?-

Aquella Omega era el reemplazo de Lisa, Taehyung estaba tranquilo pues ella estaba enlazada con un alfa y estaba esperando cachorros, no era una amenaza para él.

Además Jungkook siempre le ha dejado muy claro que su interés está puesto sólo en él.

-Es muy eficiente, ha sido muy útil-

Durante media hora hablaron de trabajo, terminaron de cenar y se dirigieron al mirador.

Se sentaron en una banca, Jungkook entrelazo su mano con la de Taehyung, quien recostó su cabeza en el hombro del Alfa.

-También te extrañe- Le dijo con la mirada puesta en las luces de la ciudad.

Jungkook sonrió, estaba feliz, cada sufrimiento, cada lágrima, valió la pena, tenerlo ahí con él, era todo lo que anhelaba.

-Tae- Lo llamó y el Omega lo miró. -Llevamos poco saliendo, he sido totalmente sincero contigo, te quiero en mi vida-

-Jungkook.. me siento feliz contigo, yo también quiero compartir mi vida contigo-

-¿Quieres ser mi Omega? ¿Mi pareja?-

Taehyung unió sus labios con los de Jungkook en un beso suave, sin intenciones sexuales, solo había amor. -Si, si quiero- Le sonrió y mordió su labio inferior. -Quiero ser tu Omega-

Se abrazaron, oficialmente eran una pareja.

Durante el camino a la casa de Taehyung, el Omega decidió hablar con el Alfa sobre los sueños.

-¿Recuerdas los sueños que te dije que estaba teniendo?-

-Ajam, los que dices que sientes como reales-

-Si.. estos días.. me puse en la tarea de analizarlos, tome unos apuntes y creo que no son sueños... son recuerdos- Taehyung lo miró con duda, expectante a la respuesta del Alfa.

-¿Apuntes? ¿Qué tipo de apuntes?-

Taehyung continuó hablando, Jungkook parecía interesado y no le cuestionó si eran recuerdos o no.

-Trate de buscar similitudes en ellos y.. creo que son nuestras vidas pasadas-

Jungkook buscó un lugar donde estacionarse, para poder darle toda la atención que el Omega estaba necesitando.

-¿Crees en vidas pasadas?-

-Sé que suena algo loco, pero es que los sueños se sienten tan reales, siempre sueño lo mismo sin cambiar ningún detalle, como si los estuviera reviviendo en mi mente-

-Mencionas vidas... ¿Cuántas vidas has logrado identificar?-

-Seis-

Jungkook tenía el corazón acelerado, Taehyung recordaba, solo le faltaba creer totalmente, no sabía qué hacer para ayudarlo.

-¿Quieres contarme alguna?-

Taehyung lo miró, estaba tranquilo, confiaba en Jungkook.

-Si.. hay una vida donde.. yo muero de una enfermedad.. tú y yo somos amantes, pues el amor entre dos hombres no era permitido-

Para Jungkook recordar esa vida era muy difícil, su corazón aún dolía por el fallecimiento de su Taehyung.

-Suena triste-

-Parece, pero la recuerdo con felicidad, desde que te conocí en esa vida, todo cambió.. yo sentía un vacío, tú lo llenaste de amor en el poco tiempo que compartimos-

Jungkook jamás supo cómo se sentía Taehyung en cada vida, escucharlo le ayudó a sanar la herida por la pérdida.

-¿Estás convencido de que son recuerdos?-

-Quiero creer... sería maravilloso.. tan solo pensar que nos hemos encontrado en diferentes vidas o universos, es hermoso-

-Cuéntame de otra vida-

-Hay una.. que soñé antes del celo..-

-¿Dónde me accidente en la moto?-

-Si.. en esa vida, él que murió de enfermedad fuiste tú-

Era la única vida que Jungkook no recordaba.

-¿Fue una vida dolorosa?- Le dijo pues la expresión de Taehyung cambió al mencionar esa vida en particular.

-No.. en todas fui muy feliz, solo que en esa... perdiste la memoria, no me recordabas..-

-Debe ser un sentimiento horrible, que tu pareja no te recuerde- Él más que nadie conocía ese sentimiento.

-Si... Pero recuperaste la memoria luego de unos meses- Taehyung dudó en seguir hablando, pero Jungkook lo miraba con total disposición que decidió arriesgarse. -Adoptamos un hijo, realmente fuimos muy felices.. pero cuando falleciste me sentí solo.. yo..-

Jungkook ajustó la silla, deslizándola hacia atrás para hacer espacio e invitó a Taehyung a sentarse en sus piernas.

Lo besó y acarició durante unos minutos. -Esta bien si no quieres seguir hablando, si es algo fuerte para ti-

-No.. yo quiero- Jungkook asintió para que continuara. -Yo.. te amaba mucho- Sus mejillas se pusieron rojas, le daba vergüenza hablar sobre sus sentimientos -Y creía que había una conexión especial entre los dos, investigue un poco y... me di cuenta que somos Twin Flames..-

-Se oye hermoso-

Jungkook hacía todo el esfuerzo por contenerse y no demostrar su emoción.

-Lo es... Es un alma que se divide en dos para ser compartida por dos personas, se encontrarán en todas las vidas, en cualquier universo-

-Llevamos seis vidas según recuerdas-

-Siete con esta-

-Bueno siete- Le sonrió

-¿No piensas que estoy loco?-

-No.. ¿Por qué habría de pensar eso?-

-Pues, no es un tema común en una conversación-

-Me parece hermoso poder recordar todas las vidas en las que las almas se encuentran-

Taehyung sintió que su corazón se aceleró, al recordar cada vida, las emociones que sintió al lado de Jungkook estaban intactas.

Lo amaba.

-La verdad es que no debería de recordar.. normalmente las almas se encuentran y por la conexión se unen fácilmente..-

Taehyung sospechaba que Jungkook también recordaba, pero no sabía si preguntarle o no.

-Pero tú recuerdas- Jungkook sabía a donde estaba llevando la conversación, quería escuchar de los labios de Taehyung sobre el pacto.

-Si, porque yo hice un pacto para recordar... por algún motivo en las vidas anteriores no recordé, solo en esta-

Silencio

Solo el latir de los corazones se escuchaba en aquel vehículo.

-¿Tú recuerdas? ¿Cierto?- El Omega habló y lo miró fijamente. 

Jungkook sintió que su mundo se derrumbó.

No quería mentirle, pero no sabía si decir la verdad tendría alguna mala consecuencia.

Tenía miedo, mucho miedo de perderlo otra vez.

Recordó las palabras del brujo: "...Recuerda que nada es coincidencia, todas nuestras acciones siempre nos llevarán al mismo final sin importar el rumbo que decidamos tomar, tarde o temprano tu destino llegará tal cómo está prescrito..."

Jungkook hizo todo lo que debía haber hecho, se controló y le permitió a Taehyung su espacio para recordar.

Decidió arriesgarse.

-Si.. yo recuerdo- Le dijo y una lágrima recorrió su rostro, Taehyung observó el dolor que transmitía aquella escena. -Aunque no recuerdo la primera vida, donde hiciste el pacto-

El Omega comprendió que Jungkook recordó cada vida, y él no, conocía ese sentimiento, el corazón le dolió al pensar en todo el dolor que el Alfa tuvo que vivir durante esas vidas, donde Taehyung no lo recordó.

Decidió abrazarlo, brindarle el soporte que necesito en aquellos momentos.

-Te amo Jungkook- Limpio las lágrimas del rostro de su Alfa. -Te amo mi amor-

Un llanto incontrolable empezó a invadir al Alfa, sollozaba en los brazos de su Omega. -Te amo tanto mi vida, con toda mi alma-

Las almas se encontraron, se unieron, ahora serán una sola por toda la eternidad.



Se podían amar libremente, sin barreras, sin temores, solo el amor fluyendo de ellos.

No tardaron mucho en llegar al apartamento de Taehyung, durante el trayecto en el ascensor se besaron, se mimaron, sonreían felices.

Sólo ellos conocian el trasfondo de su felicidad.

Sin prisa, empezaron a retirar sus prendas, sus almas habían hecho el amor muchas veces, pero sería la primera vez en ese Universo.

Los aromas de Alfa y Omega se mezclaron, armonizando el momento en el que las almas se unirían una vez más.

Jungkook recostó el cuerpo desnudo de Taehyung en la cama, lentamente empezó a besar cada centímetro de piel.

Los labios recorrieron el cuello, las clavículas, los pezones, el abdomen, se concentró en la entrepierna y aunque Taehyung recordaba la sensación, tembló al sentir la boca envolver su miembro.

Su piel era virgen y no había nadie mejor que Jungkook de tener el honor de ser el primero.

Con movimientos lentos, Jungkook bajaba y subía, lamiendo desde la base hasta la punta, las manos de Taehyung se enredaron en la cabellera azabache, disfrutando de las sensaciones.

La lengua hizo un recorrido hasta la entrada, probando el dulce sabor del lubricante natural del Omega.

-Sabes delicioso-

-Mhgg.. mi amor..-

Jungkook besó los muslos, mordió con suavidad, amaba la piel canela de su amado.

Con una mano agarró el miembro y empezó a bombear mientras seguía lamiendo la entrada. Con la otra mano, introdujo un dedo para dilatarlo.

-Ahg..-

-Estas muy estrecho, voy a prepararte bien, prometo que no te dolerá-

Un segundo dedo entró, empezó a moverlo en círculos y en forma de tijera, el cuerpo del Omega se estremeció y arqueó su espalda al sentirse lleno con los dedos del Alfa.

-Alfa..- Rogó -Jungkook... quiero sentirte-

Jungkook retiró los dedos del interior del Omega, bombeó su erección, preparándose para entrar.

Se abrió paso entre las piernas de su amado, lo besó con delicadeza, lamiendo y succionando los labios gruesos del Omega, entró en él, lento.

-Ahhh... Taehyung.. te extrañé tanto-

La estrecha cavidad apresaba su miembro deliciosamente, era una sensación que le encantaba, nunca se cansaría de enterrarse en él.

El vaivén de las caderas empezó lento, Jungkook no quería lastimarlo.

Las uñas del Omega se clavaron en la espalda del Alfa, al sentirse lleno, era doloroso pero placentero.

Los cuerpos sudorosos se movían al compás, jadeando en medio de besos humedos.

El placer y la lujuria los consumió, el aumento en los movimientos y las estocadas certeras empezaron a enviar sensaciones de hormigueo y electricidad a sus miembros, anunciando la llegada del clímax.

Los dientes del alfa picaban por marcar a su Omega, el aroma de ambos se mezcló en la habitación, era embriagador, Taehyung ladeo su cuello deseoso y expectante por sentir los colmillos clavarse en su piel.

El dolor fue desgarrador, la piel se abrió cuando los colmillos se enterraron, fue una mordida profunda, se creó un lazo entre dos cuerpos, dos almas.

Jungkook explotó de placer al sentir la sangre correr por sus labios e instantáneamente a su mente, una vida se instaló en su memoria.

Ahora ambos recordaban todas sus vidas.

Permanecieron unidos mientras el nudo disminuía, un rastro de besos y caricias fue dado por parte del Alfa a su Omega, lamiendo la herida y adorando la piel canela frente a él.

-Te amo Bebé, mi amor, mi vida-

-¿Bebé?- Preguntó el Omega, pues así lo llamaba en aquella primera vida donde todo comenzó.

-Si mi Bebé-

-Me encontraste- Le dijo sonriente y con lágrimas en sus ojos.

-Te encontré-

Le hizo el amor, lo marcó, lo anudo, unieron sus cuerpos para que sus almas pudieran fundirse en una sola.

♡ FIN ♡

Gracias por acompañarme en esta bella aventura, en una hermosa historia de amor..

Tendremos un Extra, que probablemente subiré en una semana..

Los quiero.. Lore