Parte 1
- Pero miren nada más a quien tenemos aquí - dejo todo su orgullo y fue a la casa de sus padres, haría lo que sea por Harry .
- Necesito ayuda - aunque quisieras golpear al tipo en frente suyo, no podía. Aún no
- Mira nenita, no me interesan tus problemas, te escaparse de casa - lo odiaba, odiaba tanto al novio de su madre, pero ahora hasta le rogaría a su peor enemigo.
- Tu Maldi... Mira, solo quiero hablar con mi madre, tomaré mi herencia y me iré para siempre - tenía suerte, almenos su fallecido padre le dejo dinero.
- Oh, Lou Lou - negaba con la cabeza y repetía su nombre -Encerio eres tan ingenuo, crees que después de hacerme quedar tan mal, yo no iba a hacer nada - no, no rogaba al cielo que no fuera verdad.
- Tu.. tu no - el mundo encerio lo odiaba.
- Ahora yo estoy a cargo del dinero de la familia, yo me casé con tu madre y ahora todo es mío - dijo con una gran sonrisa - y adivina que niño, jamás verás un solo centavo, ni tú ni el enfermo de tu novio - alzó los hombros y se giró para entrar a su casa - ah, casi lo olvido, ya hablé con los padres del muchachito ese y tampoco les importa si se muere en ese hospital - solo giró su cabeza y lo vio con asco, antes de cerrar la puerta Louis lo empujó.
¿Como se enteró? Escaparon tan lejos para que no los encontraran, pero claro no podían dejarlos en paz.
- ! Mamá! - grito al verla entrar a la cocina, ella tenía que aclarar todo - ! Mamá! Porfavor -
- Maldito mari.-
- Basta-
Su padrastro lo tenía agarrado del cuello y tenía su puño levantado, estaba a punto de golpearlo pero su madre intervino.
- ¿Clara?, Oh cariño, parece que tu hijo quiere decirte algo - lo soltó y fue hasta su esposa para susurrarle algo al oído y después subir las escaleras.
- Ma..-
- ¿Que haces aquí? ¿Creí que te fuiste y abandonaste a tu familia? No, claro que no, tenías que volver y contaminar a los demás, tu novio está en un hospital muriendo por tu culpa, ¿No te importa? - el odio y asco es su voz no cambiaba.
Tampoco las lágrimas, ni el rencor, ni el dolor en su garganta.
Ya no era un niño, se levantó del piso y salio de su antigua casa. Pero no sin antes arruinarle la vida a su madre, como tantas veces ella lo hacía con él.
- Yo de ti, sacaría a todos los enfermeros de esta casa, como ese que tienes de marido, ¿No lo sabías? No, claro que no, viste como besaba a su jefe y te quedaste callada - había algo en su tono, en su forma de moverse que hacía enfurecer a su madre. Y claro el echo de que le recordara al estupido que tiene de pareja .
-
- Hola, amor - estaba tan feliz, al fin Harry despertó, sus ojos estaban rojos por no dormir, había buscado en todos lados trabajo pero no lo consigo, estaba tan frustrado. -¿E..estás bien? - unas cuantas lágrimas caían de sus ojos, mientras que Harry le regalaba la más hermosa de las sonrisas.
- Mi.. Lou - cerró sus ojos y le tendió su mano a Louis, este la tomo con sus manos temblorosas, y la besó, puso su palma contra su mejilla. Tenía tantas ganas de llorar, el amor de su vida estaba tan enfermo.
- Ha..rry, lo siento, perdón, jamás debí dejar que escapadas conmigo - la idea de no tener a su esposo le atemorizaba tanto, pero que muriera era algo que le partía el corazón, y ahora solo podía llorar de impotencia.
- No, no Lou, amor no importa - Harry odiaba verlo tan destruido, haría lo que sea porque volviera a sonreír y planear como sería su nueva casa.
- Te amo - le besó su meñique - te amo - le besó su pulgar - te amo - le besó la palma de la mano - te amo - le besó su mano echa puño y volvió a poner su mejilla contra su palma, mientras silenciosa lágrimas salían de sus ojos cerrados, temblaba completo, pero ahora se sentía una paz única, con solo tener a su amado con vida.
Era una escena tan triste, la dolor y la pérdida se sentía en todo el cuarto blanco, Harry acostado y sin poder moverse por todos los cables que tenía conectados, sus ojos verdes perdiendo la vida a cada segundo, pero aguantaría cualquier dolor solo por qué Louis sonriera al ver que aún estaba vivo.
Y Louis, en una silla de plástico y con su cara apoyada en la mano de Harry, pero planeado como salir de esa situación.
Luchó tanto, dejo su maldito miedo atrás, dejo que la gente hablara, dejo a su madre, la que era su única familia, dejo a sus amigos, dejo una última rosa en la tumba de su padre, y tomo la mano de Harry, corrió con él, lloro con él y río con él, hicieron su propia familia.
Y si, talvez el mundo lo odiaba, pero el mundo aún no sabía lo que una persona enamorada podía hacer.
- Señores, buenas noticias - el mismo doctor entro, había esperanza en su voz, pero su cara no mostraba lo mismo.
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