Este capitulo va dar giros inesperados!

A la mañana siguiente, todos estaban listos. Se reunieron en el punto indicado en el video de Ivan. El lugar era una bodega abandonada, con paredes desgastadas y un techo con huecos que dejaban entrar la luz tenue del amanecer.

Santi, nervioso, susurró:
Santi: "Esto no me gusta nada... parece una trampa."

Santica, con una pala en mano y emoción en el rostro, avanzó con decisión.
Santica: "Si es una trampa o no, da igual. Si Ivan está aquí, lo sacamos a golpes."

Nabriela la sujetó del brazo.
Nabriela: "Es muy pronto para atacar. Puede que no sea él."

Pero Santica no le hizo caso. Se soltó y corrió con la pala levantada, lista para golpear la silueta que se veía en el fondo de la bodega. Con toda su fuerza, lanzó un golpe...

¡CRACK!

El sonido hueco del impacto retumbó en la bodega. Pero al mirar bien... no era Ivan.

Era un muñeco.

De repente, un ruido metálico sonó sobre ellos.

Santica miró arriba, pero fue demasiado tarde.

¡CLICK!

Una cuerda cayó del techo, envolviendo su pierna y elevándola en el aire.

Santica: "¡¿Qué caraj...?! ¡SUÉLTENME!"

Todos reaccionaron de inmediato. Pero en cuanto dieron un paso, el suelo crujió.

Celynnei: "¡Es una trampa!"

Demasiado tarde.

Click, click, click... BOOM!

El suelo se abrió en varias partes, liberando trampas de todo tipo. Picos emergieron, redes cayeron y cuchillas giratorias comenzaron a moverse por la bodega.

Nabi esquivó un cuchillo por poco.
Nabi: "¡Mierda! ¡Santica activó todas las trampas!"

Pau vio cómo Celynnei estaba a punto de caer en un agujero con púas.

Pau, sin pensarlo, corrió hacia ella.
Pau: "¡Celynnei, cuidado!"

La empujó fuera de la trampa... pero cayó en su lugar.

Pau quedó atrapada en una red colgante.

Celynnei, horrorizada, se levantó de inmediato.
Celynnei: "¡Pau!"

Pau, atrapada en la red, sonrió de forma cansada.
Pau: "Me debes una, eh."

Mientras todos trataban de esquivar trampas y liberar a Santica, una risa profunda resonó en la bodega.

Ivan apareció en la entrada, sosteniendo algo en su mano.

Era... una bomba.

Ivan: "Si fuera ustedes, correría."

El grupo se congeló.

Santi, con los ojos llenos de pánico, corrió hacia Santica, tratando de desatarla.
Santi: "¡No te dejaré aquí! ¡Aguanta!"

Pero los nudos eran demasiado fuertes.

Santica, con una mirada seria, sacudió la cabeza.
Santica: "No. Escúchame, Santi. Tienes que correr."

Santi: "¡NO! ¡No te voy a dejar aquí!"

Santica forzó una sonrisa.
Santica: "Voy a estar bien. Solo vete, ¿sí? Por favor."

De repente, Nabi agarró a Santi por la cintura y lo jaló con fuerza.

Santi: "¡NOOO! ¡SUÉLTAME, NABI!"

Nabi: "Lo siento, pero no podemos hacer nada."

Mientras tanto, Celynnei trataba de liberar a Pau, pero ella la detuvo.

Pau: "No. No puedes."

Celynnei, con lágrimas en los ojos, negó con la cabeza.
Celynnei: "No voy a dejarte."

Pau, sonriendo débilmente, la miró a los ojos.
Pau: "Te amo, Celynnei. Siempre me gustaste. Pero quiero que vivas."

Antes de que Celynnei pudiera reaccionar, Omenazo la agarró del brazo y la sacó a la fuerza.

Celynnei: "¡NO! ¡Pau!"

Ivan vio cómo todos escapaban y rió.

Ivan: "Cobardes. Disfruten el espectáculo."

El grupo corrió fuera de la bodega.

¡BOOOOOOM!

La explosión iluminó el cielo.

Los gritos de Santi y Celynnei se escucharon mientras Nabi y Omenazo los sujetaban para que no corrieran de vuelta.

Cuando todo terminó, el grupo regresó a la casa, exhausto y con el corazón destrozado.

Santi no decía nada, con la mirada vacía.

Celynnei se abrazaba a sí misma, llorando en silencio.

Nadie podía creer lo que había pasado.

Habían fallado.

Habían perdido a Santica y Pau.

Y lo peor... Ivan seguía con vida.

...

El ambiente en la casa era pesado. Nadie hablaba. Santi estaba sentado en el sofá, mirando al suelo sin decir nada. Celynnei tenía los ojos rojos de tanto llorar.

De repente...

¡Ding!

Un sonido de notificación rompió el silencio.

Todos miraron alrededor hasta que Santi revisó su celular. La pantalla mostraba una notificación de un nuevo mensaje.

Era un video.

El remitente: Ivan.

Santi, con un mal presentimiento, presionó play.

En la pantalla apareció Ivan, con su expresión burlona de siempre.

Ivan: "Al parecer, Santi, me mentiste... Me dijiste que ibas a venir solo, pero trajiste a todos tus amiguitos."

La cámara se movió y mostró a Santica y Pau, atadas a unas sillas, con los ojos vendados y amordazadas.

El grupo se quedó en shock.

Celynnei: "¡Siguen vivas!"

La esperanza iluminó sus rostros... pero solo por un segundo.

Ivan, arruinando todo como siempre, sonrió y continuó:

Ivan: "En fin... Como soy generoso, las voy a dejar libres. Pero a cambio... ¡te quiero a ti, Santiago!"

El video se cortó abruptamente.

La felicidad se desvaneció en un instante.

Santi sintió un escalofrío recorrer su espalda.

Celynnei apretó los puños con rabia.

Pau y Santica seguían con vida, pero ahora Santi era el objetivo.

Santi, aún en shock, no respondió.

Nabi, tomando el control de la situación, habló con seriedad:

Nabi: "Todos a la mesa. Ahora."

Sin discutir, el grupo se reunió rápidamente.

Nabi se apoyó sobre la mesa y miró a todos con determinación.

Nabi: "Escuchen bien. No podemos caer en el juego de Ivan. Quiere manipularnos y ponernos en desventaja."

Omenazo, cruzado de brazos, bufó con molestia.
Omenazo: "No tenemos opción. Si Santi no va, las matará."

Nabriela, con un tono pensativo, murmuró:
Nabriela: "Pero si Santi va solo, lo atraparán a él también."

Celynnei, golpeando la mesa con frustración:
Celynnei: "¡Entonces tenemos que hacer algo! ¡No podemos dejar que las mate ni que se lleve a Santi!"

Nabi tomó aire y les hizo un gesto para que se calmaran.

Nabi: "Tranquilos. Ya tengo un plan."

Todos lo miraron expectantes.

Nabi, con una mirada afilada, apoyó ambas manos en la mesa.

Nabi: "Vamos a darle a Ivan lo que quiere... pero en nuestros términos."