La oscuridad se extiende en el exterior e inunda el interior de la sala, siendo iluminado únicamente por la tenue luz de la vela que de a poco se consume. Sentada junto a la ventana, sin apartar la vista del objeto en su mano, murmura en algo similar a un gruñido algunas palabras. En sus manos descansa un muñeco elaborado con paja y hojas de plantas tejidas, entrelazadas hasta dar la forma más similar a un cuerpo humano que el material permite, en el lugar donde habría de estar colocado un corazón se encuentra un trozo de tela de un tono grisáceo desgastado, apenas sujeto por un hilo negro amarrado en una de las ramas.

Frente a la bruja del Otro Mundo, a la cual refieren como Beldam, se encuentra el demonio del Mind Scape, de pie mirando con impaciencia la escena que se desarrolla frente a él. Bill Cipher, cuya forma habitual asemeja al triángulo usado por las sectas que le veneran, había llegado al Otro Mundo sin previo aviso o así lo percibía la bruja.

Ambos recordando con evidente desagrado la injusta derrota de sus objetivos, ambos observando, con cierta curiosidad y malicia en sus rostros, a la pobre víctima que permanece en suelo gritando de dolor. Un encantamiento simple, así se lo llamó la bruja; un castigo adecuado, había dicho el demonio. Ambos sabían lo que hacían y ninguno de los dos se arrepentiría de ello.

—Ya esta listo.—la voz profunda y burlona del demonio lleno la habitación, aunque cualquiera que conociera a Bill Cipher podría notar su desesperación y aburrimiento. Tres días han pasado desde que empezó el ritual, tres días viendo como el niño que había logrado atraer al Otro Mundo rogaba por detener el dolor que la maldición le provoca. Pero todo valdrá la pena, es lo que la bruja le ha repetido incansablemente en estos días.

—Así es, el momento ha llegado.—Sonríe la bruja poniéndose de pie, sin dejar de sujetar el muñeco en su mano, camina tranquilamente haciendo que sus extremidades metálicas, semejantes a las patas de una araña, perforen a cada paso el suelo de madera oscura.

Soltando un "Al fin" el demonio corre detrás de la bruja, percatándose de la notable diferencia de alturas. Incluso si se arrepiente por no darse una altura mayor al no haber robado un cuerpo más grande, no puede hacer más que aceptar el golpe a su ego. Es tarde para arreglar eso, además, su venganza no es contra una patética bruja devoradora de almas, claro que no, su venganza va más allá, un castigo adecuado para la despreciable familia que lo condeno a estar atrapado en el Mind Scape.

Beldam toma una hoja de entre todos los papeles colocados de forma ordenada en un escritorio alto de madera clara, Bill observa el papel que la bruja sin ojos sujeta intentando entender porque ese y no alguno que no estuviera quemado. "Jamás entenderé a las mujeres" fue la única respuesta aceptable que encontró al asunto; volviendo su atención a las acciones de la bruja, observa como ésta escribe con un tinta roja en la hoja...no, espera un momento, eso no es tinta y el olor ferroso lo comprueba.

—Sangre.—la bruja trata de esconder una sonrisa ante el comentario de su "compañero".

Si no estuviera tan desesperada por salir de aquí no tendría que tolerar a un demonio tan imbécil, menos aun malgastar los pocos recursos que le quedan en una estúpida venganza infantil; claro, debía admitir que cuando el demonio de la mente llegó con un plan que incluía el sacrificio de la niña que la encerró en este Otro Mundo para recuperar a su pequeño no pudo negarse a la propuesta, ¿dejar pasar una oportunidad así? Ni en sus peores pesadillas, y si el precio a pagar por ello era soportar al infantil demonio estaba más que dispuesta a pagarlo.

-"Nueve veces en papel el nombre has de escribir ,

entre aceites y esencias lo he de sumergir,

Un zapato de caballero usaré,

Y al fin a mis pies te tendré".—al terminar el hechizo en rimas, la bruja toma el trozo de papel y de forma precisa lo rompe a la mitad, le entrega sin mucho interés uno de los trozos a Cipher antes de enterrar el otro pedazo en el muñeco de paja, usando un alfiler oxidado para lograrlo.

—Ponlo en tu zapato, hasta alguien como tú podría hacerlo.—gruñe la bruja caminando lentamente hasta llegar a donde el niño se encuentra tratando de respirar sin mucho éxito. —Y hazlo rápido, debe completarse el encantamiento antes de que la Lamia termine su labor.

—Si mamá, —dice Bill con cierta burla— maldita bruja. —murmura mientras coloca el papel en la suela de su zapato, no sin antes haberlo lamido, ¿de qué otra forma podría adherirlo sin dañar su calzado?

Un golpe en la cabeza con una regla de costura movida con magia y un quejido después, el hechizo esta más que terminado. Ahora solo había que probarlo. Entre el silencio, un tintinear de cascabeles quedo acompaña el tararear suave de la bruja, quien, con movimientos suaves se sienta en el suelo junto al pequeño que lentamente deja de moverse. Con el tacto cuidadoso, característico de una madre, toma la cabeza rubia del pequeño y parte de sus hombros, envolviéndolo en un abrazo, que si Bill no hubiera sido quien secuestro al niño habría creído que se trataba realmente de una madre acunando a su hijo.

"His smile fair as spring, as towards him he draws you;

His tongue sharp and silvery, as he implores you;"

El cántico de la bruja es dulce, una voz calmada y adormecida arrulla al niño quien lentamente cierra los ojos, dejándose envolver por las palabras que ignora pero que de algún modo resultan tranquilizadoras. Bill desde lejos puede ver como el cuerpo del niño es cubierto por una fina capa de polvo grisáceo y la piel comienza a tornarse en un suave color azul cuando la temperatura en la habitación desciende.

"Your wishes he grants, as he swears to adore you

Gold, silver, jewels...he lays riches before you

Dues need be repaid, and he will come for you;"

Bill se abraza en un intento de mantenerse caliente, dando un chasquido cambia su frac negro a rayas por un suéter amarillo a cuadros y unos pantalones negros más cálidos. Probablemente la mejor decisión para ese momento, pues el frío que inunda la habitación comienza a formar una fina capa de hielo y las telarañas que empiezan a cubrir el frágil cuerpo del pequeño en el suelo, mientras que la habitación se cubre de polvo.

"All to raclaim, no smile to console you

He'll snare you in bonds, eyes glowing', a fire

To gore and torment you, till the stars expire"

El niño deja de moverse, la respiración tranquila parece darle alivio después de los tres días que permaneció ahí, las lágrimas cubren sus mejillas, abre lentamente sus labios dejando que una serpiente negra salga y se arrastre por su rostro dormido siendo sujetada por la mano metálica de la bruja, quien sonríe cruelmente antes de arrancar la cabeza del reptil.

Bill la mira durante un instante, con una clara pregunta en su rostro "¿funcionó?"; la bruja sonríe y le entrega el muñeco de paja al demonio. Bill lo toma con cuidado observándolo sin estar impresionado, un muñeco de brujería no es algo que no haya visto antes, sin embargo, observa como al momento de apretar con fuerza el extraño ser de paja las marcas de sus manos aparecen en el cuerpo inherte que sostiene la bruja. Una mirada con su único ojo acompaña a la sonrisa cruel en labios de la bruja, tantos años de espera y al fin podrían obtener su venganza.

—Estamos listos, Cipher. —la bruja dice dejando la cabeza rubia del niño en el suelo con cuidado. Al ponerse de pie arregla un poco su cabello, camina de vuelta al escritorio donde su material de costura permanece. Busca un poco entre los objetos que tiene, hasta dar con el elegido para acabar su labor.

—¿El ritual funcionará con alguien más?—cuestiona el demonio extasiado, jugueteando con el muñeco entre sus manos, moviendo de forma violenta el cuerpo en el suelo. —¡Hey!—reclama cuando la bruja le arrebata el muñeco de sus manos.

—El ritual será concretado siempre que la Diosa apruebe nuestro sacrificio, más te vale no haber cometido un error al escoger los corderos.—gruñe la Beldam al dejar la muñeca recostada en el suelo justo donde el cuerpo cae de golpe.

—Tranquila, si algo sé hacer es escoger mis marionetas.—comenta aburrido Bill deambulando de un lado al otro, probando el peso de distintos objetos, probablemente con la intensión de golpear a la bruja y huir con el cuerpo.

-—No hay nada más valioso para una madre que sus hijos, así que no toleraré un error de tu parte.—dice la bruja tomando entre sus manos unas tijeras del escritorio, las clava en el pecho del niño, quien suelta una última lágrima antes de morir; la sangre que brota del cuerpo se extiende en el suelo formando la runa Caim, un círculo de protección cuyo patrón da la impresión de estar tejido, a su alrededor.

—Ni hay algo más valioso para un demonio que su presa.—dice Bill emocionado, entendiendo finalmente lo que preocupa a su "compañera". Se permite disfrutar la agradable sensación de la desesperanza y anhelando ver su expresión cuando descubra el verdadero propósito tras el ritual. —Descuida, no tengo motivos para mentirte. Ahora, madame, ¿qué le parece si ponemos en marcha nuestra venganza?

—¡NO!

El grito en la parte trasera del auto despierta al resto de la familia del chico, incluso a su padre al volante, quién estaba por quedarse dormido.

—¡Norman!—Sandra Babcock despierta sobresaltada, volteando a ver a su hijo para asegurarse de que esté bien.

—¿Ahora qué fue? ¿Un fantasma o un zombie?—gruñe Perry Babcock con cansancio, agradeciendo internamente que aquel grito le despertó, lo último que necesita es una multa y una noche en prisión debido a que atropelló a alguien.

—Un niño...y la bruja lo...y el demonio...Samhain...yo... él...—el llanto le interrumpe, tal vez fuese solo un sueño pero el dolor en su pecho se siente tan real que apenas recordó como se respira. —Ella viene por mi, viene por mi...

¡Ya llegó por quién nadie lloraba! Tarde pero aquí está el capítulo 0 de esta historia (o prólogo, como gusten llamarlo), ¿Qué estará planeando Bill? ¿A quién quiere recuperar la bruja?

Algunas palabras pueden resultar extrañas o desconocidas, así que les dejo el léxico de este capítulo:

✏Beldam: palabra antigua que refiere a "bruja", también puede hacer referencia a una anciana, especialmente una mujer "fea".
✏Mind Scape: Plano físico de la mente de cada persona. Concepto usado en Gravity Falls.
✏Lamia: Criatura femenina de la mitología, caracterizada por asustar niños y seducir hombres. Antecesora de la vampiresa moderna. Puede ser representada con serpientes.
✏Caim: Originalmente el nombre del ángel protector. Círculo protector dibujado a mano alrededor de un cuerpo.

No olviden dejar su comentario y votar si les gusto este capítulo. Y eso es todo, nos leemos en el próximo capítulo.