— ¡Bájame SeungCheol! — Gritaba Jihoon a todo pulmón, golpeando la espalda del peligris, mientras que este subía los escalones con él en los hombros.

— Guarda silencio — Ordenó con voz calmada, acomodando a Jihoon como si fuera un costal de papás.

— ¡Que me bajes Choi SeungCheol!

Él peligris ignoraba los reclamos y gritos del pelinegro, saco la llave de su departamento del bolsillo de su pantalón y abrió la puerta.

Al entrar la cerró de una patada, camino hasta su habitación y dejo a Jihoon  sobre la cama.

Jihoon, se acomodo él cabello y resoplo furioso al ver a SeungCheol como si nada estuviera pasando.

— ¿Por qué me trajiste a tú casa? Estabas muy bien acompañado, ni siquiera necesitaba tu ayuda — Dijo Jihoon parándose de la cama para salir de ahí.

— No iras a ningún lado — Grito SeungCheol, tomándolo de los brazos, arrojándolo de vuelta a la cama, colocándose enzima de Jihoon para que no intentara escapar.

Juntando ambas frentes, respirando tan cerca del otro, escuchando el corazón acelerado del pelinegro.

— Wonwoo es solo mi amigo.

— Por eso estabas muy cariñoso — Expresó con voz agitada.

— Quería darte celos, pero termine volviéndome loco — SeungCheol no lo soportó más y termino con esa pequeña distancia que los separaba, estrechando sus labios con los de Jihoon.

Devorando cada rincón de ellos, estirando un poco la piel, sacando algunos quejidos bajos.

— Mingyu, él... fue un mal en-tendido — Explico con dificultad sobre los labios del peligris.

—No me interesa, nada me interesa, solo me importas tú y lo mucho que te he necesitado — Confeso, bajando lentamente sus labios hasta la mandíbula del pelinegro.

— Me gustas SeungCheol. Te extrañe mucho.

Una sonrisa se ilustró por unos segundos en el rostro del mayor, los besos fueron bajando hasta él cuello del pelinegro.

Jihoon arqueo su espalda al estar recibiendo estimulación por los labios y la lengua traviesa de SeungCheol.

— Te quiero para mi, precioso — pronunció desesperado.

Necesitado en besar y tocar un poco más a la persona debajo de el, impaciente por Lee Jihoon 

— Quiero ser tuyo — Sonrió malicioso, dándole acceso a SeungCheol, removiéndose un poco para chocar su dura erección con la del peligris.

Él mayor soltó el agarre, y deslizó sus manos desde su cuello hasta el botón del pantalón del pelinegro.

Sus miradas se cruzaron, y sus ojos reflejaban lujuria, pero también amor.

En minutos la ropa se encontraba en él suelo, rompiendo esa única barrera que les estorbaba para sentirse libres.

Libres de estudiar cada rincón del cuerpo ajeno.

Un beso tierno que tomaba fuerza a cada segundo. SeungCheol bajaba sus labios disfrutando, marcando y conociendo la suave piel de Jihoon, dejando un camino de besos por todo su cuello, deteniéndose en sus pezones.

Utilizando su lengua para Jugar con ellos y excitarlo, dibujando un circulo húmedo alrededor de ellos, mordisqueando un poco. Dejándolos de un color rojo.

Sus erecciones chocaban, provocando gemidos ahogados en ambos.

Beso sus clavículas hasta llegar a su ombligo, fingiendo Penetraciones con su lengua.

Las hormonas parecían llamas, llamas que hacían su sangre arder, deseoso de estar dentro de Jihoon.

— Te amo — Pronuncio el peligris antes de darle atención inmediata a su dura erección.

Lamiendo el glande, succionándolo poco a poco hasta tener su pene dentro de la boca, masturbándolo.

Jihoon apretaba las sabanas, dejando salir tantos gemidos posibles por tanta estimulación que estaba recibiendo.

“¿Esto es? ¿Así se siente tener tu primera vez? Si es así, no me arrepiento, SeungCheol es”

— ¡Aahg! — Sus pensamientos fueron interrumpidos por la tortura a la que estaba siendo sometido.

— SeungCheol, te necesitó — Gimió acariciando la fornida espalda del mayor.

— Tranquilo mi amor.

Él peligris, tomo el miembro del bajito en una de sus manos, acariciando la punta con sus dedos. Formando un anillo alrededor de el con su dedo pulgar e índice, aplicando presión desde él glande hasta él tronco del pene.

— ¡Mierda! ¡Cheol! ¡Amm!

SeungCheol se detuvo, separo las piernas de Jihoon, arrodillándose en el suelo, observando la rosa entrada del pelinegro, penetrándola con su lengua.

Lamió tres de sus dedos, y cuando estaba listo, sin previo aviso introdujo uno en él interior de Jihoon, haciendo que se removiera sobre la cama.

Lo movió de manera circular dilatando un poco.

Un segundo y un tercer dedo entraron, arrebatándole grandes gemidos a Jihoon.

Ser apretado por sus paredes anales, no le impidió, fingir penetrarlo con ellos.

Los retiro, posicionando su miembro en la ya dilatada entrada.

Penetrándolo lentamente, escuchando los quejidos de Jihoon, deleitándose con tanta belleza, con la piel mas blanca y pura, con el chico más hermoso de su mundo.

— ¡Te amo SeungCheol, te amo!

Él mayor espero un poco antes de comenzar a moverse, observando el rostro sonrojado de Jihoon, su cabello desordenado, sus labios hinchados y rojos. Sus ojos eran deslumbrantes, su mirada suave, llena de amor y ternura, pero al mismo tiempo llena de deseo y pasión.

Jihoon comenzó a moverse dándole a entender que estaba listo.

SeungCheol sacó su miembro y lo hundió lentamente, doblando su cabeza hacía atrás, dejando salir un suspiro placentero.

Repitió el mismo procedimiento hasta que Jihoon se acostumbrara.

Las estocadas fueron aumentando, siendo más rápidas y certeras.

SeungCheol apoyaba sus manos en el colchón, sosteniendo su cuerpo. Manteniendo él contacto visual.

El bajito mantenía sus caderas levantadas, siendo un desastre de bajo del peligris.

Sacando el miembro de SeungCheol de su interior. Escabulléndose del agarre, caminando sobre la cama. Seduciéndolo hasta al borde de esta.

Él peligris iba a pararse pero un dedo lo empujo, haciendo que perdiera el equilibrio y terminara sentado en la cama.

Sus ojos se abrieron enormes cuando Jihoon se puso de espalda, colocando ambas manos en sus piernas, frotando su trasero con su dura erección.

— ¡Honnie! — Gimió con voz ronca.

— Disfruta cheollie.

Estaba siendo torturado por ese definido trasero, observando como Jihoon movía sus caderas de manera fantástica.

Él peligris tomo su miembro y lo hundió en el interior del bajito.

Jihoon no espero a que SeungCheol se moviera, él comenzó a brincar sobre su pelvis, desde la punta hasta al tronco. apretó sus nalgas para hacer las penetraciones más placenteras, moviéndose en circulo, volviendo loco a su pareja.

Un gemido fue arrancado de sus cuerdas vocales, cuando la punta del miembro de SeungCheol, toco su punto dulce.

Él mayor lo tomo de los cabellos, cambiando posiciones, poniendo a Jihoon de rodillas sobre la cama.

Penetrando con rapidez y fuerza, una pierna sobre la cama mientras que la otra sostenía su cuerpo, sus manos masajeando el trasero del bajito.

Llevándolas hasta su solida erección, masturbándolo.

Sus respiraciones agitadas y los gemidos eran una melodía encerrada en una habitación, haciendo eco por todo él lugar.

Llegando a su esperado orgasmo Jihoon mancho las manos y las sabanas que cubrían el colchón de SeungCheol.

Una ultima estocada hizo que SeungCheol llenara él interior de Jihoon, sintiendo el liquido caliente escurriendo por sus piernas, echando su cabeza hacia atrás, removiéndose un poco sin salirse de su interior.

Un momento único, un momento dónde dos almas se entregaban por completo y sellaban el amor en sus corazones. Dónde no había lugar para nada ni nadie más que no fuesen ellos haciendo el amor, convirtiéndose en uno sólo.

Perdonen él intento de Lemon (≧∇≦)/