13 "Tiempo de perdonar"
Ya de mañana, Yuu se despertó por un extraño olor, para nada agradable. Al abrir los ojos se encontró con Ryota, quien lo miraba fijamente, supuso que lo estuvo viendo dormir por varios minutos. No lo culpaba, el hizo lo mismo la primera vez que se quedó a dormir.
— Buenos días— Le saludó el alfa con una bella sonrisa en su rostro, besando suavemente sus labios. No tendría problemas con despertar de esa forma todos los días.
— Días... ¿Que es ese olor?— Preguntó en un bostezo, frotándose sus ojos con pereza.
— No lo se, supongo es un regalo de mi madre, alguna de sus creencias antiguas— Respondió restándole importancia— ¿Quieres tomar un baño?
— Si, me siento algo pegajoso.
— Iré a prepararlo, tu espera aquí.
Ryota se levanto de la cama y se fue directo a su baño privado. A los pocos segundos se escuchó el agua caer del grifo, Yuu supuso que seria otro baño en la tina. Aprovecho a estirarse y desperezarse, durmió muy bien entre los brazos del castaño, pero sentía sus músculos pesados y una leve punzada en la cadera, al menos no era tan dolorosa como el día anterior, pero supuso no se iría en lo que restaba del día.
Tras un par de minutos se levantó de la cama, tapando su desnudez con la amplia frazada de la cama. Busco su teléfono entre sus ropas en el suelo y luego se dirigió al baño. Al encontrarse con Ryota solo se le ocurrió abrazarlo por detrás, apegando su rostro contra la ancha espalda. Le gustaba la sensación que experimentaba cuando mantenían contactó con su alfa, su lobo aullaba con felicidad, contagiándolo hasta hacerlo sonreír.
— ¿Que pasa Yuu?— Preguntó Ryota, tomando las pequeñas manos en su abdomen y entrelazando sus dedos.
— Nada ¿Podemos bañarnos juntos? No es para otros fines, solo quiero estar contigo lo que resta del día.
Ryota se volteo a ver al omega, no es que le disgustara la propuesta, pero le sorprendía que él fuera quien lo propusiera. Hasta el momento Yuu no hizo mas que avergonzarse cada vez que lo veía desnudo, excepto durante el sexo, claro esta, y cuando le proponía bañarse juntos el mas bajo huía ¿Qué le hizo cambiar de parecer?
— ¿No te incomodara como las anteriores veces?
— La primera vez estaba frustrado sexualmente y verte desnudo no ayudaba. Ayer quise hacerlo, pero teníamos la fiesta y yo seguía en celo, no había forma de que no termináramos follando, era mejor prevenir.
— Me gusta cuando eres sincero— Comentó, dejando un beso sobre su frente— ¿Algo mas?
— También me gustó mucho la mano que me diste ayer— Agregó Yuu, refiriéndose a como lo ayudo a bañarse, cambiarse y a secar su cabello
— Eso puedo hacerlo cada vez que tu quieras. Dímelo y lo haré, solo para ti.
Yuu sonrió ante la propuesta, abrazándose mas al contrario. Cuando la tina se llenó lo suficiente, Ryota cerro el grifo. El primero en entrar fue el alfa, y una vez estuvo en su posición ayudo a su omega a sentarse entre sus piernas, recostándose sobre su pecho y Ryota sobre el respaldo.
— Ah, ahora que lo pienso, no me quité el collar— Murmuró Yuu, estirándose hasta su teléfono.
Por suerte lo dejó cerca de la tina, en un pequeño banco junto a algunas toallas. Con cuidado abrió la aplicación de seguridad de su collar y escribió el número de clave. A los pocos segundos se escuchó un pitido y el collar se abrió, quitándoselo con sumo cuidado y dejándolo junto a su teléfono en el mismo lugar que antes. Al terminar volvió a recostarse sobre el pecho de y se relajó ante el contacto del agua.
— Es la primera vez que te veo sin tu collar puesto— Comentó Ryota, abrazando por la cintura al omega.
— Suelo quitármelo a la hora de bañarme para limpiarlo y lavar mi cuello. A veces sudo demasiado y el collar me impide lavarme.
— Te ves bien sin el, pero te verías mejor con una marca.
Cuando Yuu iba a decir algo, sintió una leve mordida sobre la parte izquierda de su cuello. No pudo evitar jadear al sentir los dientes ajenos sobre su piel. Si bien la mordida no fue tan profunda como para crear un lazo, le gusto demasiado aquel contacto.
— Como creía, se ve mejor con una marca.
— ¿Tanto quieres marcarme? ¿Ayer no dijiste que esperarías todo el tiempo necesario?— Pregunto Yuu con ironía
— Lo haré, pero cuando estés totalmente seguro de que quieres pasar el resto de tu vida conmigo— Respondió, recostando su cabeza sobre el hombro del albino— Aún si nunca estas seguro como para que te marque, permanecer a tu lado de todos modos.
— ¿Y si te dijera que estoy seguro?
Esa pregunta descolocó a Ryota por un par de segundos, fijando su mirada en el mas bajó, pero luego volvió a su estado neutral, negando con la cabeza.
— Aún no lo estas, no bromees con eso— Respondió en un murmullo, cerrando sus ojos.
— ¿Como sabes que no estoy listo y que solo estoy bromeando?— Preguntó Yuu ya en un tono más serio, volteando a ver a Ryota a los ojos.
— ¿Recuerdas la promesa que te hice cuando decidimos salir? Explícitamente dijiste "te prometo que cuando yo me enamore de ti completamente, te dejaré marcarme". Aún no estas completamente enamorado de mi- Respondió, como si ni le tomase importancia al asunto.
— ¿Como sabes que no me siento así?— Volvió a preguntar— ¿Que harías si en este momento te digo que te amo y que eres la única persona con la que quiero pasar el resto de mi vida?
— No lo se.
Esa respuesta desconcertó a Yuu, pero al instante sintió la mano izquierda del alfa sobre su mejilla, sonrojándola con solo su toque. Ryota lo acercó hasta su propio rostro, dejando unos escasos centímetros de distancia entre ambos.
— Tal vez si me lo dices, sepas la respuesta.
— Idiota, como si fuese a decirlo con una respuesta como esa— Susurró antes de acortar la distancia.
[***]
Ya una vez fuera del baño, Ryota se encontraba, con secadora en mano, secando el cabello de Yuu. Le gustaba tocar su cabello, era tan suave y esponjoso que no podía evitar querer acariciarlo, y con ayudarlo a secarlo tenía una buena excusa para tocarlo.
Mientras tanto, Yuu se encontraba sentado en una silla de espaldas a Ryota, viendo todos los mensajes que recibió los últimos días que estuvo en celo. Algunos eran de sus amigas, tanto en chat privado como en grupo, algunos de Shiori, y como creyó, la mayoría provenían de su familia. Se disculpó con cada uno por desaparecer sin siquiera avisar que estaba a salvo.
— Ya esta— Dijo Ryota y apagó la secadora.
— Gracias.
El castaño guardo las cosas en sus respectivos lugares y luego ambos salieron de la habitación. El olor se intensificó aun mas, siendo mas repulsivo que antes, como si algo estuviese quemándose. Mientras más se acercaban el aire se volvía mas denso, hasta que encontraron humo saliendo de la cocina. Yuu se preocupó al pensar que algo malo estaba pasando, pero Ryota ya sabía de sobra lo que había pasado, y su sospecha se confirmó al ver a su madre dando vueltas en la cocina, con un montón de utensilios sucios por todos lados y humo saliendo de una cacerola. Vio como las cocineras la observaban preocupada, rara vez cocinaba, y siempre que lo hacía creaba un completo desastre.
— Hanako ¿Estas bien? — Preguntó Yuu con preocupación, ganando toda la atención de la alfa.
— Yuu-chan, me alegra verte— Dijo Hanako con algunas lágrimas en sus ojos, pero aún así sonreía.
— ¿Que pasó Hanako? ¿Estas bien?
— Me enteré de lo que te hicieron mi esposo e hijo. Yo no sabía nada, y tenía miedo de que estuvieras molesto con nosotros, por lo que quería cocinar algo para ti en forma de disculpas— Respondió entre lágrimas, mirando la cacerola que estaba a punto de combustionar.
— ¿Querías disculparte o asesinarnos a todos?— Preguntó Ryota mientras apagaba todas las hornallas encendidas antes de que algo explotara.
— ¡No seas irónico conmigo que soy tu madre! ¡Y no te pases de listo que también cargas una gran parte de la culpa!— Grito indignada, sorprendiendo a Yuu por la cantidad de feromonas que estaba soltando— Deberías estar avergonzado, mentirle así a tu pareja, incluso ponerlo a prueba ¡Yo no te crie para que hicieras algo así! Debiste decirme lo que estaba planeando tu padre así lo detenía. Yuu no merecía pasar por algo como eso, y deberías remendar tu error. Es más, merecerían que Yuu te dejara por eso.
— ¡No juegues con eso!— Dijo Ryota en un tono muy molesto, también soltando sus feromonas— Nunca vuelvas a decir algo como eso jamás en tu vida.
Yuu quería intervenir en la discusión, pero las feromonas de ambos altas lo habían inmovilizado, claramente querían dejarlo fuera de la pelea, aún cuando el era la razón de esta.
— Sabes bien que lo que hiciste no estuvo bien y todo tiene su consecuencia ¿Le preguntaste como se sintió Yuu al saber que todo el tiempo estuvieron poniéndolo a prueba?
Ryota guardo silencio, no lo hizo en absoluto, solo se centró en disculparse, sin preguntar lo que creía su novio. Eso enfureció aún más a Hanako, sus feromonas se espesaron, su ceño se frunció a un nivel que Yuu nunca creyó que vería en ella. Enfurecida, levantó su mano en alto, y cuando estaba por proporcionarle un buen golpe a su hijo, detuvieron su mano.
— Ok, esto ya está yendo demasiado lejos— Habló Daiki mientras bajaba la mano de Hanako, sin dejar de sostenerla fuertemente— En toda su crianza nunca le pusiste un dedo cuando estabas molesta, no veo la razón de que lo hagas ahora.
— Cállate, esto es tu culpa— Dijo en un tono lleno de molestia.
Era la primera vez que su hijo la veía tan molesta, tanto como para discutir con su propio esposo. Sabía que habían actuado mal, pero no creía que ella fuese a reaccionar así. Las cocineras huyeron al ver que la situación empeoró drásticamente.
— Hanako, tranquilizante, no le haces ningún bien a nadie poniéndote así— Murmuró Daiki con calma. Sabía que si el también gritaba, las cosas se pondrían peores— ¿Crees que Yuu esta feliz por verte así? No conseguirás nada.
— Tu iniciase todo esto— Dijo comenzando a llorar otra vez— Te dejé bien claro que no te metieras con el, y no sólo lo hiciste, también me mentiste, fallaste a tu palabra ¿Por que me ocultaste algo tan importante?
— No es que quiera hacerte enojar, pero sueles alterarte muy fácil, y lo hubieses arruinado si te lo contaba. Tienes una boca muy floja— Respondió neutralmente, tomando la otra mano de su esposa, a centímetros de impactar contra su rostro.
— No juegues conmigo, cuando nos casamos me prometiste que no te meterías en el futuro de nuestros hijos, que siempre me serias fiel y honesto.
— Y tu prometiste que nunca me someterías ni me levantarías la mano. Pero aquí estamos ahora, yo mintiéndote y tu con la intención de golpearme, ambos fallamos a nuestra palabra— Gritó molesto, ya perdiendo la paciencia— Lamento haberlo hecho, pero era necesario.
— ¿Para que? ¿Para mantener nuestro estatus? ¿Para no causarle vergüenza a tu familia? ¿Por que lo hiciste?— Preguntó colérica, tratando de zafarse del agarre de su esposo.
— Para protegerlos— Respondió, dejando estática a Hanako al igual que a ambos jóvenes— Tu sabes bien como son todos aquellos alfas, esperan la mínima anormalidad para hacer pedazos a su oponente. Aún si nosotros aceptamos a un omega de clase media como pareja de nuestro hijo ¿Crees que los demás alfas se quedarán sentados sin hacer nada? Claramente denigraran a Yuu por su origen y lobo, aún si esta sociedad esta siendo cada vez más comprensiva, los alfas de la alta sociedad no cambian tan rápido. Además, aún si le tienes confianza a Yuu, yo debía asegurarme que no se repitiera lo del pasado ¿Acaso deseas que se repita? ¿Que otra vez los omegas no puedan acercarse a esta casa? Para protegerlos a ambos necesitaba estar seguro que esta vez la pareja de Ryota era confiable, que Ryota esta listo pqra volver a tomar sus propias decisiones y enfrentar las consecuencias, y por sobretodo demostrarle a los demás alfas que quien acompaña a nuestro hijo es fuerte, inteligente y honesto, la mejor elección que pudo haber tomado. Se que no querrás entender en mis razones, pero cree en mi que no fue por una mala razón. Necesitaba actuar duro contigo al decirte eso para que no sospecharas y así poder terminar con todo cuanto antes. Odié tener que mentirte mientras te miraba a los ojos, faltar a nuestra promesa, pero no quería que las cosas terminarán mal para ambos. Desde que nacieron Ayaka y Ryota, te prometí que cuidaría de ambos y les daría lo mejor para que no sufrieran, por eso necesite hacer esto. Te amo, realmente te amo y no quiero perderte por un malentendido ¿Podrías perdonarme?
Hanako se echó a llorar, no por rabia, ni molestia, sino que se conmovió por sus palabras. Desde que su esposo tomó el mando de la empresa, rara vez hablaban o pasaban tiempo juntos. Incluso se consiguió un departamento cerca a su trabajo por tantas horas que ocupaba en la empresa, mientras ella se quedaba sola con sus hijos. Golpeó su pecho repetidas veces, mientras las lágrimas caían por sus mejillas.
— No vuelvas a actuar como si lo único que te importara fuese la empresa en todo lo que te resta de vida— Dijo entre dientes para luego abrazarse al cuerpo de su marido con necesidad— La próxima vez que lo hagas no dudaré en divorciarme de ti. No vuelvas a actuar como un estúpido que no le importa su familia ¿Me oíste?
— Lo hice— Respondió sonriendo levemente, devolviéndole el abrazo a su esposa.
Ryota suspiró aliviado, gracias a su padre la situación se había calmado, sin ningún daño físico. Miró a Yuu de reojo y se sorprendió al verlo llorando, con la mirada perdida al frente.
— ¿Yuu? ¿Estas bien?— Preguntó Ryota alarmado, tomando de los hombros al omega.
— Si, lo estoy— Respondió volviendo de su trance, secándose las lágrimas— Recordé a mis padres por un momento. Pensé "¿Que habrían hecho cuando te hubiese presentado como mi pareja?" ¿Se alegrarían? ¿Se preocuparían? ¿Se molestarían? Sentí envidia por un momento de que tuvieras tan buenos padres, y sin darme cuenta comencé a llorar. Perdona si te asuste.
— Esta bien. Perdóname por haberte hecho pasar todo ese sufrimiento— Dijo y abrazó al o tratando de reconfortarle y ser un apoyo.
— Te perdono, pero no lo vuelvas a hacer— Murmuró sonriendo, acurrucándose en el pecho contrario.
— Yuu— Llamó Daiki, y el nombrado se asomó por encima del brazo de su alfa— Quiero disculparme por el modo en que te puse a prueba, incluso le pedí a mi hijo que te engañara. No tengo palabras para explicarme correctamente.
— Lo entiendo, le perdono. No quiero pasar el resto de mi vida teniéndole rencor al padre de mi pareja— Respondió
— Te lo agradezco Yuu— Dijo con una leve sonrisa, sorprendiéndole lo parecido que se veía a Ryota cuando sonreía— Cuida de Ryota de ahora en adelante.
— Lo haré, gracias por aceptarme en su familia.
— No hay de que, es lo mínimo que mereces por todo lo que pasaste— Comentó algo apenado— Bueno, mejor voy a despertar a Ayaka para que almorcemos todos juntos. Cariño ¿Se salvó algo de lo que cocinaste?
— Pues...— Desvío la mirada hacia las cacerolas, viendo que aún salía humo de su interior— Salvarse si, que sean comestibles ya es otra cosa.
— Es un no— Afirmó Ryota ante las palabras de su madre.
— Bueno, supongo que deberemos pedirle a la cocinera algo para almorzar.
— Pero yo quería que Yuu-chan comiera algo hecho por mi— Se quejó Hanako en un puchero.
— Si no te molesta puedo ayudarte a cocinar, Hanako— Dijo Yuu mientras se acercaba a la nombrada- Puedo supervisarte mientras cocinas ¿Que dices?
— Yuu-chan...- Murmuró alegre y sin mas se abrazó al albino-albino— Realmente eres un ángel.
— Si, como digas Hanako— Agregó algo incómodo, palmeando la cabeza de la alfa— Mejor comencemos.
— Claro. Chicos, mejor retírense, quiero pasar tiempo a solas con Yuu-chan— Dijo la alfa, empujando a ambos alfas masculinos fuera de la cocina— Despierten a Ayaka y esperen al almuerzo. Ni se les ocurra entrar en el proceso.
— Pero...- Ryota iba a protestar, pero un portazo fue lo único que recibió como respuesta— Diablos, a veces actúa como una niña caprichosa.
— Déjala así, agradece que se calmara— Dijo su padre antes de dirigirse al cuarto de la menor de la familia, dejando atrás a su hijo.
— Tienes razón, pero no debía reaccionar así, incluso delante de Yuu— Comentó, alcanzando a su padre al instante— Exageró la situación.
— Eso lo dices porque no eres muy expresivo, y tu madre es un libro abierto. Tu crees que porque el te ama no se molestará y estará feliz mientras esté a tu lado, pero recuerda que tiene sentimientos. Dime ¿Porque no querías ponerlo a prueba? ¿No era porque no querías dañarlo?
— No era por eso— Respondió en un susurro, sorprendiendo a su padre, deteniendo el andar de ambos.
— ¿Es por lo otro?
— Que patético de mi parte ¿No? Dudando de mi pareja, aun cuando fue sincero conmigo desde el inicio— Comentó tras una carcajada apagada, desviando su mirada de su progenitor— Se que el problema es conmigo, y no tiene nada que ver con Yuu, pero aun así no puedo evitar pensar que en cualquier momento puede cansarse de mi, sobretodo cuando ese día llegue. No quería comprometerlo conmigo para que luego no se sienta obligado. No quiero ser el típico alfa que tiene a un Omega esclavo a su lado, quiero que este conmigo porque el también lo desea. Pero, por alguna razón una parte dentro de mi solo quiere monopolizarlo, y convencerlo de que soy su única opción, enlazarlo conmigo a cualquier costo para que nunca se vaya, y eso me asusta. No quiero ser posesivo, pero no tolero la idea de que me deje. Me aterra pensar así, sobretodo cuando ese día se acerca más y más. No quiero que me abandone como el...
— Eso no pasará, Yuu no es como él ni lo será. Ambos eran muy jóvenes, inexpertos, y lo que pasó no fue tu culpa, fue la nuestra por no haberlos expuesto a esa situación sin siquiera considerar si estaban listos. Y sobre la posesividad, no es tuya, es tu lobo reconociendo a su pareja destinada. Pronto se calmará, apenas pasó un mes desde que se conocieron, dale tiempo a acostumbrarse.
— No quiero dudar de Yuu, se que no es así, pero al recordar como fueron las cosas... Me aterra que pase lo mismo.
Daiki recordó los sucesos de hace un año y medio atrás. Abrazó a su hijo automáticamente, tratando de darle contención. Habían pasado por mucho, y no quería que volviera a pasar por lo mismo ¿Pero como asegurarle que no de repetirá? No era un mago, no savia lo que podía pasar el día siguiente, ni podían cambiar el pasado, solo les quedaba esperar a ver lo que pasaba.
Mientras tanto, en la cocina, Hanako se encontraba lavando todos los utensilios que uso en su intento de almuerzo, al igual que Yuu limpiaba las mesadas y tiraba toda la basura al cesto.
— Realmente me alegra esto— Comentó Hanako, acaparando la atención de Yuu— Pensar que estaría cocinando con la pareja de mi hijo y que resultaría ser quien había imaginado me alegra mucho, me hace pensar que todo es posible.
— Te agradezco por aceptarme en la familia, Hanako.
— ¿De que hablas? Yo debería agradecerte que nos hayas aceptado, sobretodo con lo que te hizo el estúpido de mi marido y mi hijo. Me molesté bastante al saber lo que habían planeado, sobre todo por entrometer a Shiori mientras debería haber disfrutado su vida de recién casada. Solo lograron causarle molestias a todo el mundo.
— Realmente no me molesto que me pusieran a prueba. Fue más la sorpresa y alegría de saber que no me separarían de Ryota que molestarme por mentirme. Lo único que necesitaba era explicaciones porque no podía procesar los hechos. Realmente me alegré una vez supe todo.
— Cuando digo que eres un Ángel realmente no me equívoco— Dijo Hanako, volviendo a su labor de lavar los utensilios— Cualquiera se habría molestado, incluso abandonado a mi hijo tras saber la verdad. Pero aquí estas, feliz por el compromiso. Se nota que realmente amas a Ryota. Diablos, me preocupa que abusen de tu bondad.
— Tranquila Hanako, realmente no me molesta. Te agradezco por preocuparte por mi, pero desearía que no vuelvas a enojarte así con Ryota ni con tu marido por mi culpa.
— No fue por tu culpa— Respondió Hanako, dejando poco convencido a Yuu— Digamos que estaba molesta con mi marido por bastante tiempo, y tu situación fue la gota que colmo el vaso. No pude evitar explotar. Sabes, cuando estaba en segundo año de preparatoria el me pidió matrimonio. No le conocía muy bien, además en ese tiempo era normal que los alfa se casaran con un omega de alta sociedad solo para asegurarse de la reproducción de alfas, rara vez encontrabas un matrimonio de alfas y siempre era para mantener la sangre y estatus, por lo que dudaba de la veracidad de sus palabras al decir que solo me quería a mi por ser yo. Pero me demostró que realmente era por eso, y acepté su propuesta de matrimonio. Era honesto, gentil, se preocupaba por los demás, era detallista conmigo. Me gustaba su forma de ser, no era el típico alfa capitalista que solo pensaba en obtener una buena posición en la sociedad sin importar el costo. Pero una vez el tomó el mando de la compañía, comenzó a encerrarse en su trabajo, ya no era el mismo hombre del que me había enamorado. Consiguió un apartamento cerca del trabajo, así no debía preocuparse por quedarse hasta tarde, rara vez venía a casa a ver a su esposa e hijos, o asistía a un evento escolar. Parecía que solo le interesaba su trabajo y posición. Me molestaba esa actitud, por bastante tiempo creí que solo se había casado conmigo para conseguir esa posición, y cuando me dijo que había encontrado varias candidatas para esposa de Ryota, para así mantener el estatus me molestó de sobremanera. Intensificó mis sospechas de que solo le interesaba la empresa y no su familia, que todas sus promesas fueron mentiras. Y empeoró todo cuando supe que solo estaban jugando con nosotros. Lamento haberte usado como razón de mi enojo, cuando en realidad el problema era nuestro.
— No tienes que disculparte— Respondió Yuu— Debo aceptar que me sorprendió verte así de molesta, incluso me asuste por un momento. Siempre te veía tan alegre y sonriente, que me parecía que nunca te enojabas, pero también eres humana. Me alegro que me defendieras aún así, pero no me gustó que culparas de todo a Ryota y que usaras tus feromonas y voz sobre el. Sentí bastante impotencia al no poder detenerlos, odié tanto ser un Omega en ese momento.
— Realmente lo lamento— Dijo Hanako preocupada— No pude controlar mi enojo, y les causé problemas a todos. Me desquité contigo y con mi hijo por problemas que debí solucionar hablando con mi esposo.
— Tranquila, esta bien. Habías cargado con mucho por tanto tiempo y cuando explotaste no pudiste contenerte. Lo entiendo. Solo aprende de esto, para no reaccionar de la misma forma la próxima vez.
— A veces creo que eres demasiado comprensivo Yuu. No puedo evitar preocuparme que te dañen por eso— Comentó Hanako tras un suspiro.
Una vez lavado todo, comenzaron a preparar todos los ingredientes. Hanako cortaba los vegetales mientras que Yuu de encargaba de las sartenes puestas en las Hornallas, asegurándose de que nada se quemara.
— Por cierto, Hanako, hay algo que me estuvo inquietando este último tiempo.
— ¿De que se trata?
— Veras, varias personas ya me comentaron de ese problema, pero Ryota aún no me lo ha contado, y quería saber si tu podías decirme algo— Miró a la alfa de forma suplicante, y esta asintió en respuesta— ¿Que fue lo que pasó con la primer pareja de Ryota?
Hanako abrió los ojos como platos, quedándose sorprendida de que Yuu sacará ese tema. Agachó la cabeza en silencio, cosa que preocupó a Yuu ¿Tan malo era ese asunto?
— Perdona, no es algo que me corresponda contarte. El único que puede responderte tus dudas es Ryota. Pero por curiosidad ¿Que sabes del tema?
— No mucho, solo se que habían sido pareja bastante tiempo, y que cuando entraron a preparatoria se separaron. Pero Ryota mencionó que había dañado a un omega durante su celo, además de que Daiki menciono el mismo tema, que aquel chico se aprovechó de Ryota para conseguir dinero. Aunque realmente no se la veracidad de sus palabras ya que todo resultó ser mentira por la prueba. Pero quería saber si el realmente hirió a ese omega y aquel chico se aprovechó de...
— ¡Las cosas no fueron así! — Gritó Hanako
Golpeó la mesada fuertemente, haciendo temblar todo lo que estaba encima de esta. Yuu se encogió del miedo, no pensó que molestaría a la mayor con aquel tema, ni ella creyó que volvería a asustar al menor con alguna reacción.
— Perdona, pero las cosas son más complicadas de lo que parecen. Lo que te enteraste tiene tanto veracidad como falsedad, aunque entenderás todo una vez sepas la historia— Dijo ya tranquila sonriendo amargamente— Solo te pido una cosa, Yuu, no vuelvas a tocar el tema hasta que Ryota este listo, por su bien.
— D-De acuerdo— Asintió Yuu, no muy convencido de las palabras de Hanako— Solo quiero saber algo y no preguntare más del tema... ¿Como se llamaba aquel omega?
Hanako lo miró, debatiéndose entre sí decírselo o no. Si su hijo aún no lo había nombrado era por una razón y la respetaba, no quería entrometerse en ese tema. Pero tampoco dejaría a Yuu con la duda, ella creía que al menos merecía saber eso. Suspiró y se preparó en pronunciar aquel nombre que creía nunca más diría.
— Asahi Honma, ese era su nombre— Dijo Hanako desganada al recordar a aquel chico— Mejor cambiemos de tema ¿Sabes? Ryota es alérgico a la acelga, lo descubrimos una vez cuando almorzamos en la casa de mis padres. Ryota tendría unos 4 años de edad, era una completa ternurita. En fin, cuando comió unas croquetas de acelga, comenzó a toser y a ponerse todo rojo. Realmente nos preocupó a todos, incluso mi esposo corrió con el en brazos hasta el hospital más cercano, y estaba a 2 kilómetros. Nos sorprendió a todos que llegará en 6 minutos a pesar de la distancia, los semáforos y todo. Supongo que a eso se refieren sobre la fuerza de los alfas.
— Ah, mira tu— Respondió Yuu.
La verdad no estaba escuchando la anécdota, estaba pensando en lo que Hanako había dicho anteriormente. Aún si el había dicho que no le importaba el pasado de Ryota, le preocupaba la situación. Ya varias veces habían nombrado a ese omega, además de que todos reaccionaban de mala manera cuando lo nombraban. Pero ahora tenía el nombre de aquel chico, de a poco iba consiguiendo más información. Quería saber la verdad de todo ¿Que había pasado realmente? ¿Donde estaba aquel omega? ¿Por que todos se lo ocultaban? ¿Por que Ryota había cambiado tanto después de su separación?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro