Sus párpados se cerraban con pesadez, el movimiento del microbús sin querer lo adormecía por su lento andar. Se aferró más a aquella pequeña caja de cartón que traía y se incorporó en su asiento en un mal intento por espabilar el sueño.

Seungmin reviso la hora en su teléfono, siete con cuarenta y tres minutos, bien, Chan hace más de una hora que debía estar en su casa. Ese caluroso martes era su aniversario de ocho meses.

La pareja no dejaba pasar desapercibido ninguno de los meses, salían a comer y se daban pequeños regalos, aunque bueno, los regalos de Christopher eran pequeños en tamaño, porque algunos (por no decir todos) eran bastante costosos.

El omega siempre se quejaba, pero Chris terminaba soltando freses cursis por las cuales el menor merecía los regalos lujosos.

Muchas veces el chico debido a esto se sentía mal. Seungmin aún dependía económicamente de sus padres, estos no lo dejaban trabajar para que no se distrajera de los estudios y a pesar de que tan solo quedaban dos hermanos que dependían de sus padres (él y Jungeun), la situación económica de la familia Kim apenas rozaba la clase media-baja.

Con mucho amor y esfuerzo hace no muchos sus padres habían logrado poner su propia panadería, era una meta que tenían desde Heechul estuvo pequeño y por fin lo habían obtenido.

Seungmin jamás pidió de más. Estaba muy consciente de que sus padres no podían pagarle ciertos caprichos y un regalo de aniversario no era algo indispensable para sobrevivir.

Durante unos dos meses había ahorrado para comprarle un buen regalo a su pareja y aunque había logrado completar la cifra estimada para poder comprarle un reloj de marca en descuento. Justo el día anterior gracias a un proyecto por parejas, había tenido que usar parte de su presupuesto para poder completarse. Sabía que recuperaría ese dinero el día que sus padres le depositasen que era a principio de mes, pero para eso aún faltaban doce días y no estaba seguro de que aquel reloj durase tanto en exhibición.

Kim le había mandado un mensaje a Chan diciéndole que debido a su proyecto no se verían y se tiró a su cama a llorar varias horas. Porque si, Kim Seungmin le estaba llorando a 40000 wones. *

Al día siguiente se dijo así mismo que era mejor no dejar que aquel día pasase desapercibido. Antes de regresar a su cuarto paso por una papelería compro varias opalinas y un lindo papel decorado de deadpool porque este era el antihéroe favorito de su novio.

Ya en su habitación saco sus lápices y colores de su mochila comenzando a hacer una manualidad: "vale por." En total hizo quince vales, dejo tres de ellos en blanco para que Chan los llenase con lo que más le apeteciera.

El trayecto a casa de Chan era largo, pero finalmente noto que su destino estaba cerca se levantó de su asiento y toco el timbre del microbús, este poco después se detuvo dejando a Seungmin enfrente del sitio al que iría. Subió unas cuantas escaleras para llegar a la residencia S29.

Toco el timbre, espero un par de segundos hasta que el dueño del departamento decidió abrirle, Seungmin analizo a su novio, playera sin mangas negra, un short desgastado igual negro y unos tines de color rosa fosforescente y en la mano traía su cartera.

- Hey, amor. - Saludo Bang besando castamente los labios contrarios.

El omega olor a fresas sin decir nada extendió las manos ofreciéndole aquella pequeña caja. Seungmin por vergüenza jamás lo admitiría, pero amaba la forma en la que Chan se emocionaba al recibir sus regalos, a un principio Seungmin creyó que Chan tenía muchas expectativas en estas, más al pasar los meses Kim se percató que esa era la manera genuina de demostrar cuanto amaba a Seungmin.

- ¿Pediste comida? - Pregunto pasándose al departamento y quitándose los zapatos.

- Lo hice. Pedí fideos, bulgogi y arroz.

- Pediste demasiado.

- Pretendía que la comida durase hasta mañana.

El menor asintió, dejándose caer en el mullido sofá, diviso el televisor y observo la serie pausada que estaba en la pantalla, al ver que se trataba de Black sintió una ligera traición puesto que esa serie habían quedado en verla juntos. Christopher cerró la puerta y se aproximó también al sofá, se sentó al lado de su novio abrazándolo instintivamente. Tomo su teléfono celular para pedir más cosas por delivery.

- ¿Estás viendo la serie sin mí? - Puchereo el pelinegro provocando que el australiano plantase un beso en este.

- Lo siento, amor, caí en la tentación.

- Bien, ya no veremos series juntos.

Chan río conectando sus narices en un beso esquimal, después tomo la mano de Seungmin elevándola por el aire, observo el hermoso anillo de plata que su pareja portaba sintiéndose orgulloso, cuando cumplieron seis meses le había regalado un anillo a su novio y uno para él, porque si, Chan era tan cursi como para portar anillos de pareja con su novio.

A los pocos minutos el chico de las entregas llego dejando la comida, aunque ninguno de los hombres le hizo mayor caso, lo que si agarraron fueron las frituras. La serie había quedado en segundo plano, en ese instante estaban viendo una serie cursi y cliché de la cual ni siquiera habían prestado atención en el nombre.

No obstante, la película tampoco importaba demasiado, porque la pareja había unido sus labios en un beso bastante intenso y ninguno tenía mucha intensión de separarse.

Seungmin se subió encima de Chan, el mayor apreso las caderas del coreano con un poco de fuerza. Kim sin perder el tiempo comenzó a moverse generando fricción entre ellos, el lobo del alfa daba vuelvas emocionado mientras que las feromonas de ambos se mezclaban.

Al sentir la dureza de su novio, el omega no pudo evitar gemir en la boca del mayor, separo sus labios de aquella boca comenzando a trazar una línea de besos por el cuello del abogado. Chan apretujo las caderas de Kim deteniendo todo tipo de movimientos.

- La comida se está enfriando. - Dijo depositando delicadamente a su novio nuevamente en el sofá.

El treintañero se levantó de su lugar yendo hasta la cocina, Seungmin lo siguió sintiéndose frustrado.

La vida sexual de Seungmin antes de Chan era bastante activa y no le importo pausarla en todo el año que estuvieron él y Bang en citas, pero eso había sido hace casi dos años, el más alto sabía que su novio era respetuoso, más no imagino que cuando ya fueran pareja Chan aún se negaría a siquiera quitarle la camisa.

Mordía su lengua reteniendo las ganas de llorar y discretamente se olio para comprobar si no olía mal. Seungmin y su lobo se sentían bastante rechazados. *

Ambos comieron en silencio, aunque Chris sabía lo muy enojado que su novio se encontraba, lo sabía por su expresión, por la manera rápida en la que comía y como no alzaba su mirada, también porque su lobo le reclamaba que le dijera al omega que no lo había rechazado por temor a que Seungmin los dejase.

Tras terminar de comer, el universitario se acercó hasta el fregadero lavando su tazón y cubiertos, Chan se levantó como resorte de su asiento dispuesto a seguir a su pareja. El de pelo negro se acercó a la puerta comenzando a ponerse sus zapatos.

Bang busco las llaves de su coche y cartera de manera rápida.

- Bien, hyung, nos vemos pronto. - Se despidió cerrando la puerta detrás de sí.

Christopher se puso sus tenis y corrió detrás de su novio, aunque sabía que la había cagado en grande porque Seungmin solo le decía "hyung" cuando estaba muy molesto.

Para mala suerte de Chan, Seungmin era bastante escurridizo y cuando salió de su casa aquel martes ya no había podido encontrar a su novio.

El teléfono de Seungmin volvió a sonar más este simplemente cortaba la llamada. Han arto de la situación dijo:

- Llevan cinco días así, ¿cuándo planeas responderle?

- No lo sé, cuando se me pase el coraje.

El teléfono sonó nuevamente, pero esta vez sí fue atendido, Seungmin intercambio un par de palabras con quien estaba del otro lado de la línea y colgó, tomo uno de sus hoddies saliendo de su habitación.

Chan estaciono su carro afuera de aquella residencia estudiantil, salió del coche sacando consigo las margaritas que le llevaba a su novio. Observo una silueta bastante familiar y se acercó a estos.

Ahí pudo notar como una sonrisa boba se colaba en los labios de Kim, se aproximó aún más oliendo a ambos, feromonas de felicidad olor fresa y gasolina.

Seungmin se siente rechazado puesto que la marca mayormente se hace cuando las personas tienen sexo y con Chris negandose a tenerlo siente como si este no quisiera marcarlo

40000 wones

Peso mexicano: $690 aproximadamente.

Sol peruano: $134 aproximadamente.

Peso argentino: $3440 aproximadamente.

Peso chileno: $28575 aproxidamamente.

Dolar estadounidense: $34 aproximadamente.