JongIn había preparado una noche muy especial para su amado esposo KyungSoo. 250 días de ardua investigación sobre las actividades de su esposo para esa fecha tan importante.

Y debía ser con seis meses de anticipación no solo porque el restaurante al que aspiraba era tan exclusivo que apenas y conseguiría una reservación de ese modo, también porque el bajito tenía una agenda muy ocupada, no solo en el trabajo sino también por las actividades extraescolares de sus dos hijos, de 7 y 9 años.

Porque si desean entrar a la universidad que quieren deben empezar desde pequeños decían; entre la escuela, el inglés, deportes, música y danza, sus pobres mocositos tenían el horario más apretado que el mismo presidente de la nación. Pero claro, era por su bien.

No es que JongIn sea un vago sin trabajo o que no ayude a acarrear de aquí para allá a sus hijos. Él se encargaba de eso los miércoles, jueves y viernes cuando su ojoncito tomaba dobles turnos en el hospital, ¿mencioné que nuestro sexy moreno era bailarín principal en una compañía importante y tenía de esposo a un ilustre psiquiatra? ¿No? Bueno, pues lo saben ahora.

A simple vista su vida es perfecta ¿no lo creen? A pesar de que el alto no tiene de que quejarse por el camino que tomaron, sus ajetreados itinerarios los dejaron a merced de la rutina. Con sus 10 años de casados, JongIn estaba pasando por lo que llamamos "la crisis de los 30" y haría lo que fuera por recuperar aquella chispa que sentía perdida.

♥♥♥

-Esta noche no amor...

El pelinegro frunció el entrecejo al verse privado de su teléfono celular, pero lo aceptó luego de ver con más atención a su alrededor. Aquello sin dudas superaba las veladas de años pasados: una cena en casa y 20 minutos en un hotel cercano. – ¿Puedo saber a qué se debe este cambio?

-¿recuerdas el día en que nos conocimos...?-

Una simple pregunta bastó para que el temple de KyungSoo cambie, sus ojos se iluminaron y sus comisuras se elevaron con sutileza al rememorar aquella singular experiencia.

♥flashback♥

KyungSoo regresaba de estudiar medicina en Estados Unidos, con su familia fuera del país por vacaciones, nadie lo recibiría en el aeropuerto.

Tras largas horas en aquel avión, lo único que pensaba era en asearse. Antes de buscar un taxi fue a los sanitarios la terminal para al menos lavarse el rostro.

Ese día el lugar estaba particularmente vacío, tanto que podía oír el eco de cada suspiro que dejaba escapar.

Se podrán imaginar el susto que se llevó cuando cierto moreno, un completo extraño en ese tiempo, irrumpió en su cubículo. El alto parecía huir de alguien, al esconderse allí se encontró con un muy sorprendido y asustado chico con ojos de búho, a punto de gritar.

Una reacción obvia teniendo en cuenta las circunstancias. Lo que no esperaba el bajito era la manera del desconocido para silenciarlo. Según JongIn, no pensaba con claridad por lo que el callarlo con un beso fue por mero impulso.

Culpemos a la adrenalina por lo que sucedió después: el que Kyung correspondiera el beso o que las manos de JongIn de pronto dejen de estar apoyadas a la pared para escabullirse debajo de la camiseta del bajito.

Tampoco recuerda en que momento exactamente el alto lo privó de sus prendas inferiores, es importante agregar que fue sin demasiada (más bien ninguna) resistencia. O cuando enrolló sus piernas alrededor de la cintura ajena, acomodándose como podían en el angosto espacio.

Ambos recuerdan perfectamente el delicioso dolor de la primera embestida, como sus caderas se movían en perfecta sincronía como si se conocieran de toda la vida y el indescriptible placer que sintieron cuando sus cuerpos llegaron al límite.

Podrían atribuir la culpa a la situación o fingir demencia, pero ninguno de los dos podría olvidar la vez que se conocieron: el 14 de febrero a las 6 de tarde, en el baño del ala oeste del aeropuerto central.

♥  fin del flashback  ♥

-Quiero volver a tener eso...- agregó el más alto tras ver el cambio en las expresiones de su esposo.

-¿Tener sexo con un desconocido en un baño público?- cuestionó entre risas.

-Si... ¡digo no! Me refiero a aquellas locas e impulsivas ideas y revivir el romance- explicó

KyungSoo percibió el brillo en los ojos de su esposo, tenía razón, los años y las responsabilidades les hizo descuidar aquellos detalles tan importantes. –lo intentare su lo intentas conmigo.- concluyó.

JongIn no pudiendo estar más feliz con la respuesta, asintió enérgicamente.

-Por cierto... nunca mencionaste de quien te escondías ese día.

-¿no lo hice?- el moreno rió apenado. –de mis padres, rehuí tantas veces de las citas que me preparaban que terminaron por cansarse y fueron por mí. Aunque de haber sabido seria contigo, no me hubiera negado desde el principio.

-¿te soy sincero? Así como nos conocimos, no lo hubiera querido de otra forma.

JongIn elevo una de sus cejas ante aquella confesión, no alcanzo a responder puesto que KyungSoo retomó su discurso.

-desde ese día, y aún más después de conocerte formalmente, tú fuiste mi Valentín... por siempre serás tú mi amor.

Mi Valentín.

Mis amores*-*/

Como lo mencioné en la descripción este Drabble participa el reto "Sugar Season" de 100Eclipses ♥  estuve tan cargada con trabajo que por milagrito alcance a participar;3;

Espero disfruten de esta cortísima historia y mil perdonen por los errores/-\ como terminé justo para la hora no alcanzó a pasar por los maravillosos dedos de mi linda beta;3; 

Feliz día del amor mis amores♥ nos leemos en los comentarios^-^/