십칠. real life
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Desde que había acabado la gira, Felix había pasado los primeros días durmiendo y haciendo cosas que no necesitaran mucho esfuerzo. Todos habían decidido tomarse unos días libres debido al cansancio que acumulaban después de tantos vuelos, así que había aprovechado para mirar las redes sociales, jugar videojuegos o mandarse mensajes con algunos amigos, siendo Sunhee una de ellos.
Desde el concierto, no había parado de pensar en ella, en cómo se había sentido en el instante en que la volvió a ver en persona después de un tiempo y se había dado cuenta de que la había extrañado, que no era lo mismo conversar a través de una pantalla que hacerlo cara a cara.
La joven se había convertido en alguien importante para Felix. Al principio solo era una conocida con la que podía ser él mismo y no tener que pretender la imagen que se les imponía a los idols, aunque poco a poco, se había ido haciendo paso en su vida y no le molestó para nada, si no todo lo contrario.
Aún recordaba lo que había ocurrido en los MAMA, cuando fastidió todo por no contarle a la joven sobre quién era y de la forma en la que se había enterado. Le dolió el no poder hablarle durante unas semanas, se sentía mal al imaginarse que la chica creyera que no confiaba en ella. Cuando todo se había arreglado entre ellos, supuso que no tendrían la misma relación, pero él se había propuesto en que lo volviera a ser y parecía que lo había estado consiguiendo.
En esos días, en los que había tenido tanto tiempo libre, había reparado en algo, en que poco a poco había comenzado a sentir cosas por la chica. En que siempre que veía su sonrisa, él copiaba el gesto de manera inconsciente, o que se fijaba en los gestos que hacía.
Estaba tan ensimismado en sus pensamientos que no se había dado cuenta de que alguien le tocaba el brazo repetidamente, hasta que no recibió un golpe.
—¡Auch! —Se quejó, tocando el área donde le habían pegado, mientras miraba a Minho, que había sido el causante y tenía una sonrisa ladeada.
—Gracias, Minho, lo siento por molestarte —se disculpó Jiyong a la par que el cantante empezaba a salir de la cocina, haciendo un gesto, quitándole importancia—. ¿Estás bien, Felix?
—Sí, noona —afirmó sin prestar atención a lo que Jiyong había dicho, ya que estaba pensando en lo que acababa de pasar—. ¿A qué ha venido lo de Minho? —cuestionó algo confuso.
—Estuve llamándote un rato y como no contestabas, vine a ver si te pasaba algo y te encontré viendo a un punto fijo, por lo que empecé a darte unos pequeños toques —empezó a explicar teniendo toda la atención del chico—. Minho me escuchó y llegó preguntado qué pasaba. ¿De verdad estás bien? Estaba preocupada.
—Sí, seguro—respondió asintiendo— y lo siento, estaba pensando en algunas cosas y no me di cuenta de nada.
—¿Quieres hablar sobre eso? —interrogó con dulzura a la par que se sentaba en una de las sillas, seguido de Felix.
Antes de contestar, se puso a reflexionar. Llevaba unos días con la cabeza hecha un lío y no había conversado con ninguno de los chicos sobre el tema, aunque ni siquiera se le había pasado por la mente hacerlo y ahora que había escuchado esa pregunta por parte de Jiyong, le había descolocado.
Pero sabía que la joven era la persona perfecta, ya que le ayudaría y además le aconsejaría sobre que sería la mejor elección y cuál no, por lo que al final decidió contárselo.
—Últimamente no paro de pensar en Sunhee y creo que sé por qué, pero no quiero... —se calló al no saber cómo continuar, dado que quería expresar las cosas bien.
—Perder su amistad —terminó Jiyong y Felix asintió tras escucharle.
—Sí, ya casi pasó una vez, no me gustaría otra —confesó intentando no recordar ese momento.
—¿Lo de los MAMA? —preguntó después de un rato en silencio—. Me acuerdo de que lo dijiste por el grupo y que cada vez que te preguntaba, me decías que no querías hablar del tema.
—No quería molestarte, además de que ya hiciste mucho con tu consejo —respondió de forma sincera.
—Tú nunca lo harías, ninguno de vosotros —apuntó seria al mismo tiempo que el idol bajaba la cabeza—. Me fastidiaría más que alguno de vosotros tenga un problema y no se atreva a decírmelo, aunque mire por mí al no hacerlo. Así que si la próxima vez, que esperemos que no haya y necesites hablar, sabes que aquí estoy.
—Lo sé, noona, y gracias —afirmó y al verla de nuevo, vio una de esas sonrisas, las cuales le daban tranquilidad y seguridad, por lo que decidió devolverle el gesto.
—Pero solo si tú quieres y no te preocupes por mí —apuntó Jiyong—. Ahora, volviendo al tema anterior, me has mencionado que no paras de pensar en Sunhee y que crees saber por qué, ¿qué piensas que es?
—Que, a lo mejor, podría estar sintiendo cosas por ella, algo que no quiero —respondió de manera honesta y antes de que la muchacha pudiera decir algo, añadió—: Me empecé a dar cuenta el día del concierto, cuando la vi, ya que comencé a ponerme nervioso y no pude evitar tener una sonrisa todo el tiempo, incluso cuando se marchó. —Terminó de hablar con la mirada perdida en sus manos.
Después de que Sunhee se fuera, cada uno siguió con su invitada, él y los maknaes fueron los únicos que se encontraron solos, por lo que habían decidido juntarse para hablar entre ellos. En un momento, fue Seungmin quien apuntó lo feliz que estaba Felix, y ambos habían centrado todas las burlas en él.
—Tu principal miedo es romper vuestra amistad, ¿no? —interrogó, a lo que el cantante asintió—, y seguro que en ningún momento ha pasado por tu cabeza el contárselo, ¿verdad?
—No, ¿por qué debería? —cuestionó sosteniéndole la mirada, observando que Jiyong tenía puesta toda su atención en él—. Lo único que puede ocurrir es que no me corresponda y seguro que es lo más probable. No quiero arruinarlo por mis sentimientos y además...
—Felix —interrumpió con delicadeza Jiyong, al oírle hablar cada vez más rápido—. No tendrías que temer de expresar lo que sientes, claro que puede tener consecuencias, como todo, pero lo mejor es soltarlo, no quedártelo dentro —aconsejó mientras que Felix estaba concentrado en lo que decía—. Tengo que añadir que no conozco mucho a Sunhee, pero recuerdo que cuando estabais conversando me fijé en vosotros y vi cómo te miraba. No estoy segura de que ella sienta lo mismo por ti, ya que como te he dicho solo hemos tenido contacto en el concierto y algunos mensajes, pero las miradas que te daba demostraban mucho y no como una amistad.
Escuchar aquello fue una sorpresa, nunca se le había ocurrido observar ese detalle, pero si se ponía a pensar, para él, Sunhee solo lo hacía como una amiga, no de la forma en la que Jiyong lo hacía con Chan o como el resto de las chicos con sus parejas, por lo que, según él, la actriz se equivocaba.
—No lo creo, noona —negó con la cabeza, mordiéndose el labio.
—Confía en mí, no eres el primero con el que hablo de esto —rio, a lo mejor recordando su charla con algunos de los niños, como los llamaba ella—. Todos empezáis a negar lo que es obvio y no os atrevéis a dar otro paso. Te voy a dar un consejo, ¿vale? y luego tú decides qué hacer —preguntó a lo que el rapero asintió—. La próxima vez que quedes con ella, fíjate en su mirada, los ojos son los que mejor reflejan lo que siente una persona, aparte de las acciones o actitudes —apuntó mientras Felix seguía dudando de aquello—. Ya verás como creerás que lo que vi, es verdad.
—Está bien, pero sigo pensando que no notaré nada diferente —apuntó, lo que hizo que Jiyong rodara sus ojos.
—Si vas con esa actitud, claro que no —mencionó, causando una pequeña carcajada de Felix—. No tengas esa idea, además, no fui la única que lo vio, Chan también. —El chico puso una cara de incredulidad al escuchar eso, no se esperaba aquel dato para nada—. Estuvimos hablando y pensamos igual, que los dos sentís lo mismo el uno por el otro, porque aunque no conozcamos mucho a Sunhe, hemos visto ese tipo de mirada en casi todos vosotros, por lo que no nos equivocamos al decir esto.
—¿De verdad? —preguntó con un poco de ilusión, creyéndolo un poco.
Al principio, había dudado cuando Jiyong comentó aquello, ya que había sido la única en notar aquel detalle y además, él seguía pensando en que solo lo hacía como una amiga, pero al enterarse de que Chan también, no pudo evitar emocionarse.
Una parte de Felix, confiaba en ambos, ya que habían visto a la mayoría de los chicos pasando por lo mismo que él, pero otra, temía a que se hubieran equivocado y hacer algo de lo que luego se arrepentiría.
—Sí, pero haz lo que tu corazón diga, no te dejes llevar por lo que yo u otra persona te diga, lo único que quiero es que seas feliz —admitió Jiyong con una sonrisa, Felix iba a añadir algo, pero el sonido del teléfono le indicó que había recibido un mensaje, por lo que fue a ver quién era—. Es Sunhee, ¿verdad?
—Sí, ¿cómo lo sabes? —interrogó confuso, ya que no se esperaba que la actriz lo supiera, dado que no había dicho nada.
—Por tu cara, se te ha iluminado cuando has visto la notificación —respondió mirándole con la cara apoyada en su mano—. Habla con ella, yo estaré con el resto de los chicos para no molestar.
—No, le respondo luego, ya que has venido a visitarnos, quiero pasar tiempo con todos —afirmó al ver cómo Jiyong se levantaba—. Ah, ahora que me acuerdo, Sunhee no me ha pedido que te lo diga, pero sé que le gustaría que te diera las gracias de su parte.
—¿Por qué? —preguntó con la cabeza ladeada, indicando que no lo entendía.
—Por haber sido la primera en hablarle y de no hacerla sentir apartada —confesó recordando los mensajes, en los cuales le había comentado eso—. Estaba muy nerviosa por conoceros a todas, aunque yo le aseguraba todo el tiempo que iba a ir bien y más al saber que ibas a estar tú, pero seguía igual.
—No tiene que agradecerme nada, ninguno de los dos —sonrió de manera dulce—. En cuanto entró por la puerta y vi que todas nos habíamos quedado mirándole, pude notar que estaba nerviosa y algo incómoda por la situación, así que quise que se sintiera a gusto y poco a poco fue perdiendo la timidez, sobre todo con Ayaka, pero creo que eso le pasa a todo el mundo —rio, seguro al recordar esos momentos.
—¿Vamos con el resto de los chicos? —Cambió de tema el cantante, causando una pequeña carcajada en Jiyong a la vez que asentía.
Ambos se dirigieron a la sala, aunque la actriz fue antes a avisar a los demás, los primeros en llegar fueron Minho y Seungmin, Jeongin tardó un poco, dado que había estado haciendo algunas cosas.
—Hyung, ¿ya has hecho los brownies? —Al escuchar eso, Felix no pudo evitar abrir sus ojos como platos, se le había olvidado que el maknae se lo había pedido y él había aceptado.
—Lo siento, Innie, los hago ahora —respondió mientras se levantaba, ignorando que el joven le decía que no hacía falta.
Mientras empezaba a preparar todo, no pudo evitar pensar en qué hacer con el tema de Sunhee, pero hablar con Jiyong le había ayudado mucho.
Seguiría el consejo que le había dado, pero lo único que tenía en mente era no hacerse ilusiones, no cuando aquello podría mandar su relación a la basura.
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Hola!! Bienvenidxs a un nuevo capítulo de My Universe, ¿qué tal os ha ido la semana? La mía empezó bien y ha acabado algo mal, espero que la próxima sea mejor.
Sinceramente, AMO los momentos entre Jiyong y alguno de los chicos, es que es momento madre e hijo y me encanta eso.
AAAAAAH, que Felix ya se ha dado cuenta de sus sentimientos por Sunhee (eso sí, hagamos los sorprendidos), a ver cuándo lo hará ella....
También quería recordaros que tenemos un server de Discord, si queréis entrar, mandadme un mensaje por privado y os pasaré el link. Somos muy majos todos.
Espero que os haya gustado el capítulo, os deseo una gran semana y nos leemos el próximo domingo o el miércoles en Going Dumb💕
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