El lunes llegó demasiado rápido para mi gusto y no quería levantarme de la cama. Decidí acostarme allí por otros cinco minutos pensando en mi increíble fin de semana con Louis. Cuando regresamos del parque el sábado por la noche, terminé lo que había comenzado y luego pedimos la cena y vimos una película. Fue perfecto. Era tan fácil llevarse bien con Louis y todo lo que hacíamos juntos era emocionante simplemente porque lo hacía con él.

A lo largo del fin de semana llegué a la conclusión de que lo amaba y sabía que era demasiado pronto y no estaba pensando con claridad, pero no pude evitarlo. No sabía de sus sentimientos, nunca hablamos de ellos aparte del día en el bosque cuando me dijo que sentía algo por mí. No sabía qué tan fuertes eran, pero pensándolo bien, tampoco dije nada al respecto.

Tenía la sensación de que se sentía al menos un poco como yo, de lo contrario no arriesgaría su carrera y prácticamente su vida por mí, ¿verdad? Quería decirle cómo me sentía y quería saber qué pensaba de nosotros, pero decidí esperar unos días o semanas más porque no tenía las pelotas para sacar este tema. Era genial cómo era ahora, estábamos disfrutando de la compañía del otro y eso era todo lo que importaba en este momento.

Con un gemido me levanté de la cama y corrí al baño para hacer pis y una ducha rápida. Me había quedado en la cama más tiempo de lo habitual, así que tenía que apurarme un poco. Eché un vistazo a mi teléfono mientras me cepillaba los dientes para ver si Louis me había enviado un mensaje de texto y mi rostro se iluminó cuando efectivamente había un mensaje.

De Lou:

Buenos días, cariño. Espero que hayas dormido bien sin mí ;) No llegues tarde hoy, hasta luego. XX

Rodé los ojos con cariño y envié un mensaje de texto con una respuesta rápida. Era normal ahora que Louis me dijera apodos y yo no me quejaba en absoluto. Por el contrario, siempre tenía mariposas en el estómago cuando me llamaba amor, cariño o bebé. Era casi como si ya estuviéramos en una relación, aunque no lo estuviéramos.

Para Lou:

Buen día. No tan bueno como si lo hubiera hecho contigo :( Llegaré a tiempo, nos vemos luego. xoxo

Me enjuagué la boca y agarré mi mochila antes de bajar corriendo las escaleras. Mi mamá me había dejado una nota diciendo que tenía que llegar temprano al trabajo y que el almuerzo estaba en el refrigerador. Me sonreí porque a pesar de que mi mamá siempre tenía prisa, se tomó el tiempo de prepararme algo de comer. Rápidamente agarré mi almuerzo y lo metí en mi mochila antes de salir de la casa y cerrar la puerta. Silbé por lo bajo mientras caminaba hacia la escuela disfrutando del hermoso día, hacía bastante frío afuera pero el sol brillaba calentando mi rostro frío. Hice una pausa por un minuto y cerré los ojos solo tomando los rayos del sol e inhalando profundamente el aire fresco. Estaba de muy buen humor hoy, probablemente debido al fantástico fin de semana que tuve, pero se eclipsó cuando miré mi teléfono y vi un mensaje de Liam.

De Liam:

¿Dónde demonios estás?

Miré la hora y casi se me salen los ojos de la cabeza. La escuela había comenzado hace cinco minutos. Mierda. Corrí los últimos cincuenta metros hasta la escuela y corrí por el pasillo. Justo cuando me paré frente a la puerta del salón de clases, recordé que había olvidado mis libros y corrí a mi casillero para buscar los útiles que necesitaba. Cerré la puerta del casillero y corrí de regreso a la puerta del salón de clases y llamé suavemente. Escuché la voz de Louis llamándome para que pasara y abrí un poco la puerta, mirando alrededor de la esquina con una sonrisa tímida. Louis me miró con severidad, pero pude ver que estaba reprimiendo una sonrisa divertida.

"Entra Harry y siéntate". Suspiró dramáticamente señalando mi asiento y entré al salón de clases. Sin siquiera mirar a Niall y Liam me di cuenta de que me estaban sonriendo.

"Lo siento." Murmuré mientras pasaba junto a Louis, quien negó con la cabeza levemente y continuó con la lección.

Mientras miraba a mis mejores amigos, estaba en lo cierto con mi suposición. Me estaban sonriendo y cuando me senté, Liam sacudió la cabeza divertido.

"¿Cómo es que siempre llegas tarde?" Él se rió.

"Honestamente no lo sé. Salí de mi casa a tiempo pero me perdí en la belleza de la naturaleza y boom: llegué tarde". Dije todavía confundido cómo sucedió en primer lugar.

"¿De qué mierda estás hablando?" Niall exclamó y, como siempre, no podía mantener el volumen bajo y toda la clase nos miraba de nuevo.

"Está bien, ponganse a trabajar ahora. Tienen quince minutos y luego discutiremos sus respuestas". Louis dijo ignorándonos por el momento, pero como lo conocía, no iba a dejarlo pasar.

"Niall, ¿por qué es tan jodidamente difícil hablar en voz baja?" Liam siseó, mirando al frente del salón de clases para ver si Louis nos estaba mirando, pero estaba ocupado buscando algo en su bolso.

"No sé." Niall se quejó. "Es contra mi naturaleza".

"Oh Señor." Gemí, sacudiendo mi cabeza hacia él.

"Mierda." Liam maldijo y bajó los ojos a su escritorio y yo lo miré inquisitivamente. Señaló sutilmente con los ojos el frente del salón de clases y yo seguí su mirada al ver que Louis caminaba hacia nosotros con algunas hojas en sus manos.

"Oh, no." Murmuré mientras caminaba hacia nuestra mesa y se paraba frente a nosotros con los brazos cruzados sobre el pecho. Todos estábamos mirando la mesa con la cabeza baja porque sabíamos que estábamos en una mierda profunda.

"¿Cómo es que no pueden mantener la boca cerrada durante una lección, eh?" Louis preguntó retóricamente en voz baja y solo nos mirábamos sin saber qué decir. "¡Dejen de mirarse el uno al otro y mírenme a mí!" Espetó y nuestras cabezas se giraron hacia él en un destello de luz. "Felicitaciones chicos, no pensé que serían tan estúpidos de no escucharme incluso después de haberles advertido tantas veces y poco a poco me estoy cansando de su actitud en clase. Así que creo que saben cuál será su castigo" Nos miró intensamente a mí y a Liam y sabíamos exactamente de lo que estaba hablando. Acababa de advertirnos el viernes, pero los idiotas no lo tomamos en serio entonces y ahora lo lamenté más que cualquier otra cosa.

"P-por favor no hagas eso. Nos mantendremos callados, lo prometo". Liam rogó con grandes ojos de cachorro, pero Louis se rió sarcásticamente.

"Demasiado tarde, Liam. Cada uno de ustedes escriba un ensayo de veinte páginas sobre la Segunda Guerra Mundial y debe entregarlo hasta la próxima lección". Louis puso un papel sobre la mesa para cada uno de nosotros donde se explicaba la tarea.

"P-pero la próxima lección ya es el viernes. ¿Cómo deberíamos escribir veinte páginas?", Preguntó Niall con los ojos muy abiertos.

"¿Ah, de verdad?" Louis arqueó una ceja, su rostro gritando sarcasmo. "Bueno, entonces tienen tiempo hasta este miércoles". Se encogió de hombros y todos jadeamos.

"¡No puedes hacer eso!" exclamé y él me sonrió poniendo sus manos sobre mi mesa e inclinándose hacia adelante.

"Puedo y lo haré." Dijo en voz baja antes de levantarse de nuevo. Estaba a punto de irse cuando se volvió hacia nosotros, mirándome directamente. "Oh, y Harry, no creas que este será tu único castigo". Él sonrió y mi boca se abrió. "Ahora ponte a trabajar y cállate." Dijo mientras se alejaba casualmente de nuestra mesa.

"Mierda, eso estuvo caliente". Niall susurró y me giré hacia él disparándole dagas.

"¡Cierra la puta boca!" Siseé, pero probablemente no tuvo el efecto requerido que quería porque mis mejillas estaban calientes y apuesto a que estaba rojo carmesí. Lo peor probablemente fue que Niall tenía razón, hacía muchísimo calor y mi amiguito estaba de acuerdo conmigo.

Maldije a Louis por eso y cuando miré hacia adelante me estaba sonriendo, casi como si supiera lo que me hizo. Tomé mi teléfono y abrí nuestros mensajes de texto.

Para Lou:

¡Te odio tanto!

Puse el teléfono en mi regazo y volví a nuestra tarea cuando segundos después sonó. Miré hacia abajo y casi me atraganté con mi propia saliva.

De Lou:

No, no lo haces. Estas duro, ¿no? ;)

Para Lou:

Vete a la mierda. En serio.

"Lo odio tanto". Siseé y Liam y Niall me miraron antes de notar mi teléfono y se inclinaron para leer los mensajes de texto. Apretó los labios para no estallar en carcajadas y miraron las al frente en busca de distracción, con los hombros temblando.

De Lou:

Prefiero follarte. Ahora vuelve al trabajo.

Mi cabeza se disparó con horror y él todavía me miraba, su estúpida sonrisa todavía prominente cuando mis ojos se encontraron con los suyos y tragué saliva.

"¿Señor Tomlinson?" Anthony llamó con una mano levantada. La cabeza de Louis se giró hacia él y su sonrisa cayó. Se puso de pie y caminó hacia él, pero no antes de que me guiñara un ojo y en serio quería estrangularlo en este momento porque lo que había sucedido en los últimos tres minutos no estaba ayudando a mi problema en absoluto. Intenté con todas mis fuerzas pensar en otras cosas, cosas asquerosas para deshacerme de mi erección, pero nada ayudó. Mi mente volvió a Louis y las cosas que habíamos hecho hasta ahora y las cosas que íbamos a hacer y antes de darme cuenta la campana estaba sonando y yo todavía estaba duro.

Lentamente recogí mis cosas con la esperanza de que pasara en el próximo minuto mientras Liam y Niall ya estaban parados frente al escritorio esperándome. Cuando acepté mi destino de quedarme atrapado aquí por unos minutos más, suspiré y los miré.

"Pueden seguir adelante. Estaré allí en unos minutos". Dije derrotado y simplemente me sonrieron y se fueron sin una palabra por lo que estaba agradecido. Entonces, mientras esperaba que mi erección se desvaneciera, vi a los estudiantes salir del salón de clases. En un minuto yo era el único que quedaba, con Louis por supuesto, quien también estaba a punto de salir del salón de clases cuando me notó.

"Harry, ¿qué haces todavía aquí? Tienes otra clase a la que asistir". Dijo con severidad.

"Bueno, lo haría si pudiera. Pero no puedo". Le espeté y él se rió suavemente acercándose a mí.

"Lo lamento." Él se rió y yo rodé los ojos.

"Sí, por supuesto que lo haces". Crucé los brazos sobre mi pecho mientras tomaba el lugar de Niall a mi lado. Apoyó la cabeza en su mano derecha, que estaba apoyada en la mesa, mirándome casualmente, pero mi respiración se detuvo cuando sentí que su otra mano abría mis pantalones y agarraba mi pene debajo de la mesa.

"Lou, qué-" dije con los ojos muy abiertos pero él me hizo callar.

"Shh, cariño. No querrás que nos atrapen, ¿verdad?" Susurró y me bombeó lentamente.

Gemí ante su toque y solo quería que me follara sobre la mesa, pero sabía que no podíamos hacerlo aquí y me frustraba, pero sentir su mano alrededor de mí era mejor que nada. Apresuró el paso y me mordí la mejilla para reprimir un gemido y apreté los labios con fuerza.

"Tan bueno para mí bebé. Escucharme y estar callado". Me elogió y yo gemí por lo bajo. Me encantaba cuando me elogiaba y esa voz áspera que usaba cuando hacíamos algo sexual, me estaba volviendo loco. Puse mi brazo sobre la mesa y hundí mi cara en él, mordiéndome fuerte en el hueco de mi brazo para mantenerme callado. Louis rozó su pulgar sobre mi glande y siseé antes de que me bombeara rápido y sentí el calor burbujeando dentro de mí. Louis lo sintió y apretó mi pene ligeramente. "Córrete para mí, bebé". Eso fue todo lo que necesité para disparar mi carga contra la mesa y al suelo. Louis me bombeó unas cuantas veces más para guiarme a través de mi orgasmo y respiré pesadamente bajando de mi altura.

Levanté la cabeza y observé cómo Louis se llevaba la mano a la boca y lamía el semen con un zumbido. Me entregó un pañuelo para limpiar el desastre que hice y cerró mis pantalones después.

"De nada." Louis dijo descaradamente, levantándose cuando terminé.

"Tú me metiste en esta situación en primer lugar, así que no te lo agradeceré". Resoplé y él se rió.

Louis caminó hacia su mesa sacando una hoja de su bolso y garabateó algo antes de entregármelo.

"Dile a tu maestro que hablaste conmigo y dale esto, entonces deberías estar bien". Miré la hoja y luego de nuevo a él.

"¿Por qué?" pregunté desconcertado.

"Porque llegas tarde por mi culpa. Eso es lo menos que puedo hacer". Él sonrió suavemente.

"Será mejor que me liberes de mi ensayo." Le sonreí inocentemente y él resopló, su sonrisa cayó.

"No sobreestimes tu suerte. Puedo recuperarla fácilmente". Señaló la hoja que sostenía, pero se la arrebaté.

"No. Demasiado tarde". Dije infantilmente y él puso los ojos en blanco con cariño.

"Ahora vete, alborotador". Me sonrió y yo quería besarlo tanto. Como si pudiera leer mi mente, miró a su alrededor para asegurarse de que nadie nos viera y se inclinó para darme un rápido beso en los labios. "¿Vendrás más tarde?" Susurró y yo asentí.

"Si, si tu quieres." Sonreí.

"Siempre." Él sonrió y me puse rojo, otra vez. Se rió entre dientes cuando rápidamente me di la vuelta y salí del salón de clases.

Corrí por los pasillos para llegar a biología y por supuesto la clase ya había comenzado. Llamé a la puerta y el profesor me llamó para que pasara.

"¿Te importaría explicar por qué llegas tarde?" Me miró severamente y arqueó una ceja.

"Uh, tuve una conversación con el Sr. Tomlinson. Lo siento, señor". Dije enderezando mi espalda.

"Sí, por supuesto que lo hiciste. ¿Crees que no he escuchado esa excusa muchas veces?" Estaba realmente enojado ahora, no le gustaba cuando los estudiantes le mentían. Di un paso adelante y le mostré el papel que Louis me había dado.

"Me dijo que le entregara esto." Solo dije y el profesor lo tomó rápidamente repasándolo.

"Está bien, Styles. Siéntate, por favor". Su comportamiento cambió a uno más satisfecho y suspiré aliviado. Cuando me acerqué a Liam y Niall, ya me miraban sonriendo.

"¿Qué estuviste haciendo tanto tiempo?" Liam preguntó divertido.

"Solo hablando." Murmuré y Liam resopló.

"Sí, claro. Por eso estás rojo como un tomate. No puedes mentirnos, Haz".

"Él me ayudó con mi problema, si tanto necesitas saberlo". Rodé los ojos y me concentré en el profesor.

Niall y Liam se rieron antes de volver a prestar atención a la lección. Después de la escuela volví a casa para pasar un rato con mi madre antes de empezar con mi tarea. Cuando casi había terminado, recibí una llamada de Louis.

"Hola, Lou". Sonreí al teléfono después de contestar la llamada.

"Hola, cariño. ¿Qué estás haciendo?"

"Terminando la tarea, ¿tú?" Giré en mi silla giratoria mirando hacia el techo.

"Buen chico." Podía escuchar a Louis sonriendo. "Acabo de llegar a casa de la escuela". Miré el reloj y fruncí el ceño cuando ya eran las seis y media. "¿Todavía quieres venir?"

"No lo sé, Lou. Tengo que empezar con el ensayo". Me quejé porque era su culpa que tuviera que hacerlo cuando solo quería pasar un rato con él. Lo escuché reírse y algunos crujidos, probablemente estaba sentado en algún lugar.

"Puedes hacerlo en mi casa si quieres". Louis dijo con indiferencia y mi rostro se iluminó.

"Está bien." Salí corriendo y Louis se rió de mi aprobación instantánea.

"¿Te recojo en diez?" Louis preguntó y acepté y colgamos. Bajé corriendo las escaleras y me tiré en el sofá junto a mi madre, que estaba leyendo un libro, con una copa de vino sobre la mesa de café frente a ella.

"Mamá". Gemí y me acurruqué a su lado mirándola. Ella me miró de reojo y sonrió, depositando un beso en mi cabeza.

"¿Sí, querido?" Ella preguntó.

"¿Puedo ir a casa de mi chico? Solo por unas horas. Ya terminé mi tarea". Dije con ojos de cachorro. Ella me sonrió y puso los ojos en blanco con cariño.

"Está bien, Harry. Pero-" Dijo con severidad, pero con una sonrisa en su rostro. "-El hecho de que estés en una relación ahora no significa que ya no haya nada más importante. Quiero que aún te concentres en la escuela y en tus otros amigos, ¿de acuerdo? Y no va a ser algo diario que te quedes todas las noches hasta tarde". Asentí frenéticamente ante sus palabras.

"Sí, lo sé mamá. Mis calificaciones siguen siendo altas y paso mucho tiempo con Ni y Li e incluso con mis otros amigos en la escuela".

"Bien. Ahora ve con tu chico y regresa a las doce, ¿de acuerdo?" Ella me sonrió y la abracé con fuerza.

"Gracias, mamá. Adiós". Sonreí y corrí escaleras arriba para empacar mi bolso antes de salir de la casa y Louis ya me estaba esperando en el auto.

"Hola, cariño." Sonrió cuando subí al auto y le di un beso en los labios. Le devolví el saludo felizmente y condujimos hasta su apartamento hablando de nuestro día.

"¿Estamos solos?" Me pregunté cuando entramos en el piso oscuro.

"Sí, Zayn está en algún lugar con Liam, pero debería estar en casa más tarde". dijo Louis mientras nos quitábamos los abrigos. "¿Quieres algo de beber o comer?"

"Estoy bien, gracias." Le sonreí y nos acercamos al sofá y nos sentamos. Louis puso su brazo detrás de mí en el respaldo y me acurruqué contra él contento. Nos abrazamos durante media hora simplemente disfrutando de la cercanía del otro cuando Louis me dio un codazo.

"Deberías comenzar con tu ensayo". Él se rió y yo gemí.

"¿Realmente necesito hacer eso? Ya soy bueno en Historia, sé lo que sucedió durante la Segunda Guerra Mundial". Resoplé.

"Entonces no deberías tener problemas para escribirlo". Louis señaló y gemí de nuevo. "Harry, no voy a discutir sobre eso. Te lo advertí y no voy a retroceder".

"Bien." Resoplé y me levanté para agarrar mi mochila y me senté en el suelo en la mesa de café para empezar.

Louis encendió su playstation pero silenció la televisión para no molestarme. Puso el disco FIFA y empezó a jugar en silencio. De vez en cuando le lanzaba una mirada cuando murmuraba palabrotas y podía ver que tenía muchas ganas de gritar y maldecir, pero se mantuvo firme para que yo pudiera trabajar en paz. Cuando estaba en la quinta página, mi teléfono sonó y salté un poco por el ruido. Lo cogí de la mesa y vi el nombre de Niall parpadeando en la pantalla.

"¿Sí?" Le pregunté al teléfono y lo puse en altavoz porque estaba tan absorto escribiendo que no quería salirme del flujo de trabajo, así que seguí escribiendo mientras hablaba con Niall.

"Te juro por Dios que tu novio es jodidamente malvado. Este ensayo será mi muerte. Ni siquiera sé tantas palabras". Empezó a quejarse de inmediato y me hubiera reído de él si no me hubiera congelado por esa palabra que había dicho. Miré a Louis, pero sus ojos estaban fijos en la televisión. Ni siquiera sabía si estaba escuchando nuestra conversación o no.

"Entonces consíguete un diccionario". Me reí.

"Ja, muy divertido, Harold. ¿Qué tan lejos estás?" Preguntó.

"Ya he hecho cinco páginas, ¿tú?" dije mientras garabateaba algunas fechas.

"¿Cinco? ¡Jesús, estoy en mi primera página! ¿Crees que Louis se dará cuenta que te copie?" Se preguntó y me eché a reír. Antes de que pudiera responderle, Louis habló sin apartar los ojos de su juego.

"Creo que lo hará." Dijo con indiferencia y la otra línea se quedó en silencio abruptamente.

"¿E-estás con... es-? Oh... Mierda... uhm, solo estaba bromeando y ya he escrito doce páginas. Yo, uhm, me tengo que ir. Mi tostadora está en llamas. Adiós." Niall tartamudeó y colgó rápidamente.

Negué con la cabeza a mi mejor amigo y volví a mi ensayo riendo un poco para mí mismo.

"Este tipo, lo juro".

Estaba empezando una nueva oración cuando sentí ojos en mí. Levanté la vista y me encontré con los ojos curiosos de Louis, su juego estaba en pausa y el control estaba junto a él en el sofá.

"¿Qué?" Pregunté con cautela cuando él no dejó de mirarme.

"No lo has negado". Louis declaró y me hice el tonto.

"No sé a qué te refieres". Fruncí el ceño. Me estaba poniendo nervioso y mi interior estaba ardiendo por el calor y no me sorprendería si mostrara que estaba sudando.

"Sabes exactamente lo que quiero decir". Me miró fijamente. ¿Quería que estuviéramos juntos o era lo último que quería? Tenía tanto miedo de su opinión sobre esto, así que hice lo mejor por ahora, al menos eso es lo que me dije a mí mismo, y me retiré. Quería tener esta conversación, pero ahora que tenía la oportunidad perfecta, no tenía las pelotas para hablar de eso, tenía demasiado miedo de que me rechazaran.

"Uh, ¿podemos hablar de esto más tarde? Tengo muchas ganas de escribir al menos unas cuantas páginas más". Declare y sus ojos se oscurecieron ligeramente y frunció el ceño antes de que su rostro se volviera neutral.

"Está bien." Simplemente dijo y volvió a su juego, ignorando por completo mi presencia desde entonces. Algo en él cambió después de eso. Su rostro no mostraba ninguna emoción, pero sus ojos me dijeron algo más, pero no pude señalar qué era. Después de este incómodo encuentro, ni siquiera se contuvo más y pronto comenzó a gritarle a la televisión y a encender el sonido. No me molestó, pero me preguntaba qué estaba pasando ahora. ¿Cuál era su problema?

"¿Está todo bien?" Le pregunté después de dos horas sin hablar en absoluto. Ya he escrito trece páginas y quedé satisfecho con mi trabajo. Solo quedaban siete, pero las haría mañana, estaba demasiado cansado.

"¿Si, por qué no?" preguntó Louis sin apartar los ojos de la televisión.

"Solo preguntaba." Me encogí de hombros, cerré mi cuaderno y lo deslicé en mi mochila. Louis suspiró y salió del juego, antes de volverse hacia mí y abrir la boca para decir algo justo cuando yo miraba mi teléfono. Ya eran las doce menos diez y mis ojos se abrieron como platos. "Mierda, tengo que estar en casa a las doce". Dije con los ojos muy abiertos y miré a Louis, quien volvió a cerrar la boca.

"¿Entonces?" Preguntó con una ceja levantada, tragando saliva.

"Es en diez minutos. ¿Me llevarás a casa?" Pregunté y Louis me frunció el ceño. No entendí cuál era su maldito problema de repente, pero no tenía tiempo para eso ahora. "¿O debo caminar? Pero necesito una respuesta ahora. Realmente tengo que irme". Presioné ya levantándome y poniéndome el abrigo.

"No. Por supuesto que te llevo". Louis negó con la cabeza saliendo de su trance y levantándose también. Cogió su abrigo y salimos del piso en silencio. También condujimos en silencio, estaba demasiado cansado para confrontar a Louis con su comportamiento toda la noche. Cuando estábamos a una calle de mi casa, Louis estacionó su auto en la acera y apagó el motor.

"¿Estamos bien?" pregunté antes de que un bostezo escapara de mis labios. Louis me miró y puso una sonrisa en su rostro aunque pude ver que era falsa.

"Seguro." Dijo con los dientes apretados. Se inclinó y me dio un beso en la mejilla y fruncí el ceño ante el gesto. Normalmente siempre me besaba en los labios.

"Está bien." Forcé una sonrisa y abrí la puerta. Cuando me alejé del auto, saludé a Louis y se alejó con una sonrisa forzada en su rostro. Caminé los últimos metros hasta mi casa y cuando entré inmediatamente subí a mi habitación para prepararme para dormir y caí en un sueño sin sueños.

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Avisen si hay errores. Besos♡