Maratón 3/3

No.

No podía ser posible. No podía haber pasado, ¿Cómo demonios llegó a ese momento? Y ¿Por qué? ¿Qué fue lo que hizo para que terminaran así?

No podía moverse, sentía que los latidos de su corazón eran más fuertes que la bulla que hacía las personas y sus nervios iban en aumento, ¿Qué se supone que debía hacer cuando sus labios estaban sobre los de Taehyung? Fue un accidente, pero eso no quitaba que la situación resultara complicada. ¿Qué debería decir ahora que se había separado de Taehyung y solo se encontraban viéndose directamente a los ojos?

Después de la semana de celo, las cosas habían cambiado un poco entre Taehyung y Jungkook. Tae había notado un cierto distanciamiento por parte de Jungkook, pero quería pensar que eso sucedía después de su semana de celo y no era porque hizo algo mal para que se comportara frío y distante.

Bueno, en realidad las cosas no eran como Tae pensaba; después de darse cuenta de que Taehyung era su destinado, Jungkook sintió como todo a su alrededor se desmoronaba, no odiaba estar enamorado de Tae; pero, sí que fuera su destinado, pues eso implicaba que podría morir por un corazón roto.

Antes podía pensar que encontraría a su destinado y superaría a Taehyung, quien sería solo un amor no correspondido más; sin embargo, ahora ese amor no correspondido también era la persona por la que podría llegar a morir si no era capaz de superarlo.

Quería dejar de sentir lo que sentía porque si no poco a poco enfermaría, pero era muy difícil, incluso mucho más de lo que fue aceptar sus sentimientos hacia el humano.

Si se alejaba por completo de Tae, eso le afectaría y estar todo el tiempo cerca de él siendo consciente que le gusta alguien más, también le haría daño, entonces ¿Qué debía hacer? ¿Qué era lo correcto? No era capaz de decirle que ya no saldría los fines de semana con él ni tampoco era capaz de estar sin que Taehyung fuera cariñoso con él como siempre solía hacerlo.

Horas antes...

—Jungkookie ¿Te duele la cabeza?— cuestionó Taehyung al ver una expresión de dolor y preocupación en el rostro de Jungkook, no sabía bien que le ocurría al híbrido, pero podía hacer algunas suposiciones.

—¿Eh? no— respondió luego de unos segundos, pues se encontraba algo ido en sus pensamientos y apenas había logrado escuchar bien a su hyung—. Estoy bien, solo algo cansado.

—Descansa, aún no es hora de que salgamos— con su mano desordenó los cabellos del híbrido y le ofreció una cálida sonrisa.

—Sí, voy a dormir un rato cuando llegue el momento me avisas para bañarme y cambiarme— pidió mientras ordenaba sus cabellos con un pequeño rubor adornando sus mejillas.

—Claro conejito, no te preocupes—Jungkook asintió, se despidió con un simple gesto de manos, subió las escaleras y entró a su habitación.

Jungkook suspiro pesadamente y se tiró boca abajo en su cama, pataleo por unos segundos y se mordió los labios para evitar gritar. Ahora mismo quería estar con Taehyung en su cuarto mientras era mimado por él, pero no debía. Tae tenía que estar con la persona que le gustaba, aún no entendía porque no hacía nada respecto a ese tema, pero al mismo tiempo eso le daba tranquilidad pues al menos sabía que no sufriría por verlo siendo tan cariñoso con otra persona, al menos no por ahora.

Decidió que lo mejor era dormir un rato, estaba lleno por el almuerzo y solo deseaba descansar. Así que se acomodó en la cama, abrazó su almohada y se dejó llevar, sus ojitos se fueron cerrando de a poco y un pequeño bostezo salió de sus labios antes de caer profundamente dormido en los brazos de Morfeo.

Unas horas después, anocheció, la media luna y las estrellas decoraron el cielo y unos pequeños golpeteos en la puerta de su habitación hicieron que levantará su cabeza en alerta.

—Jungkookie, ya es hora— exclamó Tae del otro lado de la puerta.

—Me alisto y voy— respondió Jungkook de inmediato.

—Tómate tu tiempo, yo también lo haré— replicó y se fue a su habitación para alistarse también.

Jungkook se sentó, restregó sus ojos con sus manos en forma de puños, bostezó, se quitó la manta de encima y caminó hasta su ropero en busca de que ponerse, ya que comenzaba a hacer frío al estar cerca del invierno eligió ponerse una camiseta negra encima otra a cuadros azul con blanco y de manga larga, una chompa negra con capucha bk3, unos jeans negros y zapatillas también del mismo color. Se bañó y cambió, finalmente cuando ya estuvo listo salió de la habitación encontrándose a Taehyung saliendo de la suya también.

—Te ves muy lindo— halagó Taehyung quien traía una camisa blanca de manga larga, una corbata verde oscura con detalles negros, encima un abrigo trench largo de color negro y unos pantalones del mismo color, además de unos mocasines de color verde oscuro.

—Gracias, tú igual— le devolvió el halago.

—Bien, es hora de irnos— dijo y bajo las escaleras siendo seguido por Jungkook.

Viajaron en el auto de Taehyung hasta el lugar donde se celebraría el Seoul lantern festival, pagaron por su entrada y comenzaron a caminar por un sendero.

—Todo es tan precioso— habló Taehyung mientras su mirada se dirigía a las estatuas de monjes sobre un pequeño rio, brillaban gracias a unas luces que tenían dentro y no flotaban si no que estaban sobre madera; al final su mirada se posó en Jungkook, quien también miraba todo a su alrededor.

Aunque no fuera la primera vez que estaba allí, la mirada de Jungkook brillaba al ver cada estatua y estructura arquitectónica iluminar el lugar. Taehyung pudo notarlo y sonrió por ello, sentía algo cálido en su corazón, algo que no lograba entender y algo que no sucedía con la chica que se supone le gustaba, sin embargo, no creía que fuera el momento para cuestionarse nada. Solo quería disfrutar junto al lindo híbrido.

Habían estatuas grandes de diferentes animales, también habían de flores de loto y otro tipo de plantas, llegaron a ver un barco grande sobre el mar también, todo hecho de luces. También pasaron debajo de un puente hecho de luces amarillas, presenciaron un pequeño espectáculo que prepararon para el evento donde chicas y chicos bailaban con trajes antiguos de corea; después de unas horas el hambre llegó y compraron, en uno de los tantos puestos callejeros que habían, gimbap y de postre bungeoppang que es, en otras palabras, pastel con forma de pescado.

Al final del día llegaron a un patio donde a muchas personas les entregaban linternas flotantes rojas, amarillas y verdes, las personas comenzaron a encenderlas y dejarlas flotar en el cielo mientras su mente se llenaba de buenos deseos, cuando les llegó su turno, Jungkook le enseño a Taehyung como debía hacerlo y juntos encendieron sus linternas amarillas y dejaron que flotaran poco a poco hasta llegar al cielo junto con las otras e iluminar todo de una forma tan espléndida e impresionante. Taehyung se quedó embelesado por tan hermosa vista mientras que Jungkook tenía toda su atención en él y su adorable reacción, se veía tan encantador.

Fue en ese momento que dos pequeños niños, que se encontraban correteando, al pasar por dónde estaban Tae y Jungkook, por accidente empujaron a Jungkook haciendo que este cayera, pero por fortuna fuera atrapado por Taehyung.

Tae se había dado cuenta porque cuando volteo a ver a Jungkook vio a los niños acercarse a toda velocidad hacia donde ellos se encontraban. Al atraparlo por mero instinto, los brazos de Taehyung rodearon la cintura de Jungkook mientras que los de Jungkook cayeron alrededor del cuello de Tae, sus pechos chocaron al igual que sus labios, ambos tenían los ojos abiertos a causa de la sorpresa y ninguno sabía que hacer a continuación.

Sus labios parecían encajar a la perfección, sus latidos parecían más fuertes que la bulla de las personas, parecía mágico, el cielo decorado y brillante, risas y sonrisas de pura alegría, todo parecía detenerse de a poco, era casi como magia, un momento realmente mágico que probablemente hubiese permanecido intacto por mucho más tiempo de no ser porque Jungkook empujó a Taehyung y luego de un minuto sin saber que decir y solo mantener la mirada conectada con la de Tae, salió corriendo y Taehyung, tras él.

Jungkook se escondió en un pequeño callejón solitario y se transformó en el bello conejito blanco que era, se oculto bajo su ropa y tan solo unos minutos después Taehyung llegó a donde el conejito estaba, supo que estaba allí pues lo vio removerse bajo la ropa, se acercó con cautela y se puso de cuclillas para hablarle de frente.

—Lo lamento, no fue mi intención- lo tomó entre sus brazos apenas vio su intención de escabullirse, se sentó con las piernas cruzadas y lo colocó cuidadosamente sobre estas— Yo quería atraparte no besarte, quiero decir, ibas a caer al piso si no te ayudaba y... pues, lo otro fue un accidente— acotó mientras acariciaba las orejitas de su kookie— No te molestes conmigo por eso, por favor— suplicó, mas no recibió respuesta alguna.

—Jungkookie, ¿En serio vas a quedarte así todo el resto del día?— preguntó al notar lo testarudo que se estaba comportando Jungkook. Si no se convertía y hablaban allí, pues lo harían en su casa.

—Bien, ya hay que irnos— sin previo aviso lo llevó consigo hasta el auto, entró en el asiento del chófer y mantuvo al híbrido junto a sus prendas de ropa encima de su regazo mientras conducía devuelta a casa.

Tan solo unos cuantos minutos después estacionó frente a su casa, tomó al conejito envuelto en la ropa en una de sus manos mientras que con la otra sostenía las llaves con las que abrió lo más rápido que pudo su casa, al mismo tiempo en que guardaba las llaves en el bolsillo trasero de su pantalón subió escaleras arriba hasta la habitación de Jungkook, entraron y lo dejó en la cama encima de la ropa que llevaba puesta antes de transformarse.

—Si no te transformas, nos quedaremos encerrados en tu habitación— dijo y alzó las llaves del cuarto que segundos antes había sacado del bolsillo del pantalón de Jungkook.

El conejito lo miro horrorizado y temeroso, no deseaba quedarse encerrado junto al humano, menos después de aquel beso, prefería estar solo y meditar lo sucedido y sus posibles opciones.

a) Huir

b) Empacar sus cosas y huir.

c) Empacar sus cosas, llevarse comida y huir.

d) Quedarse porque no tiene otro lugar a donde ir y porque si era sincero consigo mismo no quería estar lejos de Taehyung.

Luego vería que hacer, por el momento se transformó tal y como Taehyung deseaba, quedó de rodillas sobre las mantas de su cama e inmediatamente se tapó sus piernas con su pantalón, su torso con su camiseta y parte de su espalda baja, que aún se encontraba descubierta, con su chompa.

—¿Contento?— preguntó sin mucho ánimo de pelear, pero en un tono que parecía buscar eso.

—¿Seguirás enojado conmigo?— cuestionó entre triste y frustrado.

—No, solo prefiero olvidar el tema— contestó, quería restarle importancia al asunto.

—Me parece bien— estuvo de acuerdo Tae.

—No lo menciones jamás, ni tampoco me lo recuerdes si no quieres que en verdad me enoje— le advirtió de forma tajante.

—Esta bien conejito, será como si nada hubiese pasado— le entregó las llaves y abrió la puerta—. Descansa— se despidió agitando la mano y se fue a su habitación luego de cerrar la puerta de la de Jungkook.

Definitivamente las cosas no serían como antes, de hecho ya todo estaba comenzando a cambiar desde que Jungkook se había dado cuenta de que Taehyung no era solo un gusto pasajero, sino su destinado y desde que Taehyung comenzaba a dudar acerca de sus sentimientos por el híbrido.

°•°

Y eso es todo por las
actualizaciones de hoy

Espero les haya gustado

Con amor...

SweetbabyTJ <3