Dimensión X
Luego de aquella llamada Leonardo continúo escribiendo, pero algo muy dentro de él pedía a gritos que volviera a llamar. No sabía que era, pero le estaba provocando una terrible jaqueca, suspiro un poco y tomó de nuevo su móvil, llamando de nuevo al último número.
Por quinta vez el buzón de voz, le daba la bienvenida, harto de aquello fue con su hermano genio, para saber la ubicación del menor de ellos. Al llegar tocó la puerta, pues aunque su prisa era fuerte, no quería ser invasivo, por otro lado Donatello solo dio un pequeño si, lo que le permitió adentrarse y preguntar.
Leo: hola, perdona que te moleste, pero quiero que localices el móvil de Mikey
Donnie: otra vez salió sin permiso? -tomando su laptop, luego de dejar los tubos de ensayo-
Leo: si, me llamo y me dijo que estaría arriba, pero siento que algo me ha escondido -suspira preocupado-
Donnie: bien -susurro mientras tecleaba- pues no está lejos, al contrario no se está moviendo
Leo: -mira el lugar- iré, te llamare -yéndose rápido-
Antes de salir le aviso a su padre, quien se disgustó un poco al saber lo que el menor había hecho, ya en la superficie se dirigió al punto donde estaba su hermano.
Narra Leo
No lo entiendo, porque siento esto, sé que Mikey se mete en problemas, pero él se las apaña solo... Ojalá no sea nada, no quiero que nuestra última vez allá sido con enojo.
Narrador
Luego de unos minutos llegó al lugar, reviso cada rincón, hallando únicamente el t-phone con la banda. Su peor miedo había sido real, su pequeño hermano no estaba y no sabía cómo buscarlo o donde empezar.
Llamo a Donatello y le dijo lo que encontró. El menor le pidió que volviera, que juntos lo buscarían. Corrió casi sin respirar a su hogar. Al llegar vio a su padre a quien le entrego aquel móvil atado con la banda.
Donnie: ya revise las cámaras, tengo el rumbo que Mikey tomo en su patineta -acercándose junto al de rojo-
Raph: el me llamo... y-yo no lo escuché -susurra apretando los puños-
Leo: lo encontraremos -serio siguiendo al de morado-
Yoshi: mí niño -viendo con pesar la bandana de su hijo- cuánto lo siento -susurra, yendo al dojo-
En otra parte, una joven castaña peleaba contra unas máquinas, mientras trataba de llegar a un triángulo rosado.
?: Déjenme en paz malditas cosas -golpeándolas con una barra de acero-
Lentamente y con gran esfuerzo llego al portal, al cual se lanzó sin pensarlo. Una vez del otro lado se echó a correr, estaba en un muelle o eso parecía según lo que pudo mirar y que también era de noche. Corrió sin detenerse, hasta que ya no vio aquel lugar, pero aun así siguió corriendo, hasta que ya no pudo más, se sentó y se apoyó comenzando a recuperarse.
?: "Donde estaré" -pensó mirando el alrededor- "vaya ciudad, parece un chiquero" -una pequeña risa se le escapa-
Una vez recuperada, comenzó a andar, el lugar también le resultó vacío o al menos eso pensó hasta que vio pasar a dos jóvenes por la otra acera. Le llamo la atención ambos jóvenes, algo le decía que los conocía, pero de donde y porque.
En silencio los siguió, hasta que en un punto los perdió de vista en un callejón, pero pudo oír voces bajo sus pies y sin dudarlo, abrió la tapa, algo que le resultó pesado y familiar.
Ya abajo, se concentró en escuchar las voces, una vez que las localizo fue tras ellas. A metros pudo ver al par de jóvenes, que veían una pantalla, los dos chicos empezaron a correr, la castaña suspiro y tranquila camino por allí. Algo le decía que conocía el lugar, pero no recordaba cómo.
Leonardo seguía con atención a su hermano de morado, realmente se maldecía por no prestar atención ante la voz de su menor, si tan solo no hubiera dejado que su ira saliera, lo habría evitado.
Al poco tiempo llegaron dónde se suponía había estado el más joven, miraron el lugar y pronto notaron aquellas marcas, un mar de emociones surgió en ellos, siguieron las pistas que sin duda los llevaría a dónde el mayor había encontrado el móvil.
Donnie: esto no tiene sentido, porque no activaría la señal, sabe bien que debe hacerlo si está en peligro -siguiendo las marcas de disparos que quedaron en las paredes del alcantarillado-
Leo: quizás lo olvido...
Raph: eso no es nuevo -gruñe bajo-
Leo: fue mí culpa, me enoje sin antes escucharlo -maldiciéndose mentalmente-
Luego de un rato llegaron al lugar donde Leonardo hallo el celular y la bandana, por más que mirarán no había nada que les dijeran hacia donde se lo llevaron.
Donnie: -suspira- me temo que usaron un portal, para llevárselo -viendo con un deje de tristeza a sus hermanos-
Raphael soltó un grito de enojo mientras pateaba los basureros. Leonardo buscaba estar tranquilo, lo cual le estaba siendo complicado.
Leo: vamos a casa, debemos ir a la dimensión y traerlo de vuelta -serio-
Donnie: si -susurra bajando-
Raph: juro que los destrozare si lo lastiman -bajando molesto-
El mayor miro un poco el cielo, rogando llegar a tiempo a su hermanito, bajo y juntos volvieron a casa. En el camino Donatello llamo April y le contó en breve lo que estaba pasando, la joven le dijo que estaba con Casey yendo a la guarda, que los esperarían allí.
Luego de unos minutos están todos juntos, planeando que hacer antes de entrar a la dimensión x, irán de a dos, pues el Maestro Splinter también deseaba ir por su hijo, aunque no conocía el lugar no podía darse el lujo de esperar.
Leo: bien, Don abre el portal, debemos entrar y salir sin muchos problemas
Donnie: -preparándose- de acuerdo, esto ya está -abre el portal-
Leo: -suspira- vamos, traigámoslo de vuelta -pasando el portal-
Tras el pasaron los otros, aparecieron cerca de la entrada, con cautela entraron al lugar, Donatello se conectó a una de las computadoras del Kraang, buscando información sobre su hermanito. Splinter miraba todo su alrededor, era la primera vez que veía algo así, aunque a estas alturas ya nada lo sorprendía.
Donnie: según esto está en el ala este -desconectando su móvil-
Leo: bien andando -serio sigue al de morado-
Pasaron cerca de diez minutos, en los cuales no habían visto un solo Kraang, lo cual les preocupo. Llegando al lugar, entraron a una de las salas, allí vieron tres jaulas una vacía y otra con dos mutantes.
??: Jaja, más tortugas -ríe cual loco-
???: Ignorarlo -sonríe leve- deber ser hermanos de la tortuga pecosa
Leo: dónde está? -acercándose y abriendo la jaula-
???: Ellos llevárselo -susurra y con temor sale- armas -señalando una de las mesas-
Splinter se acercó y tomo los nunchakus de su hijo, los guardo y suspiro suave.
Leo: sabes a dónde lo llevaron?
???: Con líder -suspira- perdón, pasar demasiado tiempo con ellos
Donnie: está bien, es comprensible -sonríe y suelta al otro mutante- los sacaremos de aquí, pero debemos encontrarlo
??: Huele perro -ríe-
???: -gruñe bajo- hiena tonta -olfatea la camilla y sonríe- dulce
Raph: me siento asqueado, pero si así lo hallarlas entonces lo superare -viendo serio al zorro-
???: Perdón -baja las orejas-
Yoshi: podrías, es muy importante para nosotros -viéndole con un poco de súplica-
El zorro asiente y saliendo olfatea el aire, pronto encuentran su rastro y lo sigue rápido. El resto va tras él, inclusive la hiena quien iba junto al de morado. Llegaron hasta los portales, lo cual les sorprendió.
???: Desaparecer aquí el olor -mirando nervioso-
Donnie: paso el portal, el volvió a casa -emocionado-
Leo: entonces hay que regresar -serio- si escapó, puede que lo estén persiguiendo
Donatello asintió y abrió nuevamente el portal, todos lo pasaron, apareciendo en un parque. La hiena y el zorro, miraban curiosos el lugar, pero pronto sus narices se movieron.
??: Este lugar tiene muchos aromas
???: Ser raros -mirando-
Leo: oigan, Casey y April los llevarán a un lugar seguro
April: -sonríe acercándose- vamos, estarán a salvo y ellos ya no los lastimaran
??: Bien, pero si nos engañas te comeré -ríe suave-
???: No hacer caso -dándole una palmada a su compañero- solo tener hambre
Casey: bueno, eso se solucionará, andando.
Ambos humanos se llevaron a los nuevos compañeros. Splinter miro el lugar y algo en su pecho le exigía volver a casa.
Yoshi: hijos míos busquen con cuidado, yo iré a casa por si él está allá.
Leo: llámenos padre, tan pronto lo vea -serio- vamos, tenemos mucho que cubrir -yéndose con sus hermanos-
Sensei se regresó rápido a su hogar, sintiendo más fuerte aquella sensación. Las tortugas por su parte se dividieron y buscaron por todos lados a su hermanito, aún sin saber si lo que ese can les dijo era cierto.
Esta es la hiena 👆
Y este el zorro 👆
Bueno aquí les dejo otro capítulo.
Espero que les guste.
Nos vemos ❤️
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