-¿Qué has dicho?- preguntó en shock -¿que yo soy Minji?, que gran broma- soltó una risa nerviosa -una muy mala en realidad, no digas tonterías-

-No estoy bromeando, puedes confiar en mi Jimin, se que eres Minji-

-Estas equivocado-

-¿De verdad?, si eso fuera cierto no estarías tan pálido-

Jimin apretó los puños sin animarse a mirar a Jungkook.

-¿Cómo lo descubriste?- preguntó en cambió resignado, con el corazón acelerado y un nudo en el estómago.

-Creo que es bastante obvio, evadidas mucho la pregunta sobre dónde trabajabas así que empecé a preocuparme y... te empecé a seguir- admitió -pero siempre te perdía después de cierta cafetería, vaya casualidad-

-¿Me seguiste?- repitió sorprendido.

-Solo quería asegurarme de que no estabas metido en nada ilegal o cosas de otro tipo, tu me entiendes-

-Pensabas que podría prostituirme- soltó y su indignación pasó a segundo plano al pensar que Kook se había preocupado por él.

-Si... no sólo yo, Yoongi quería conseguir a un detective y le dije que no había necesidad de llegar a esos extremos, tú nos llevaste a la cafetería y sólo fue cuestión de observar para empezar a sospechar, entiendo porque no quieres decirlo, sería muy incómodo que todos en la escuela lo supieran así que es por eso que no te pregunte nada al respecto-

-Hasta ahora- suspiró -solo di que quieres a cambio-

-No quiero nada a cambio-

-Nadie hace nada sin querer algo a cambio- bufó -solo dilo, tengo que mantener tu boca cerrada de alguna forma-

-Jimin... yo no-...

-Deja de hacerte el digno conmigo- lo miro -todos ustedes son iguales, mientras algo les sirve o los entretiene lo tienen cerca y cuándo se aburren o deja de interesarles lo desechan como si fuera insignificante, incluso a las personas...-

-¿Te refieres a la gente con dinero?- cuestionó.

-Exactamente-

-No creo que sea justo que juzgues a todos de ser lo mismo por algo que te hizo alguien que casualmente tenía dinero pero si tanto insistes en querer darme algo ya te lo dije, quiero una cita-

-¿Una cita?- repitió incrédulo.

-Si, así como escuchas, una cita a cambió de no decir tu secreto-

-¿Sólo eso?-

-Sería sólo eso si no me hubieras tachado de ser la misma mierda que los demás riquillos, así que no, a partir de hoy Park Jimin, harás lo que yo diga si quieres que todo siga como hasta ahora, sin que nadie pueda saber sobre tu trabajo como maid en la cafetería más popular por lo chicos, estoy seguro que a más de uno le podría interesar el hecho de querer verte como una linda chica-

-Bien, ¿cuando quieres esa maldita cita?- soltó molesto.

-En dos días-

-No puedo-

-¿Por qué?-

-Eso no te importa, sólo no puedo-

-¿Escondes algo más aparte?, si ya se que eres una maid podrías contarme cualquier cosa-

-Con que hayas descubierto eso es más que suficiente-

-Como quieras, entonces será el próximo fin de semana y desde ya te digo... irás como Minji-

-¡Estas demente!, no pienso hacer eso-

-Entonces dime por qué en dos días no se puede- se cruzó de brazos mirándolo tranquilo.

-¡Agh!, maldita sea... ¡Bien!, iré de mujer-

-Como quieras- se encogió de hombros -ya te diré a dónde iremos, pasaré a recogerte del trabajo- encendió su auto -sera divertido, puedo asegurarlo-

-Para ti tal vez- bufó y el auto avanzó, ninguno habló el resto del camino y Kook sabía que Jimin había tenido suficiente por ese día así que condujo hasta el edificio donde vivía el castaño y se detuvo cuando llegaron, sentía un poco de culpa y pensaba decirle a Jimin que sólo estaba jugando...

El realmente no diría nada aunque no recibiera algo a cambio, pero fue interrumpido.

-Me alegra que al final decidieras ser sincero y dijeras que si querías algo a cambio, como todos- suspiró y salió del auto -adios- cerró y entró sin mirar atrás.

-Yo no quería nada a cambio... tu fuiste el que insistió en que pidiera- murmuró molesto y se fue de ese lugar, directo a su casa, estaciono y salió sin mirar a nadie, caminando directo a su habitación, donde apenas llegó, arrojó su mochila a la cama y empezó a golpear el saco de boxeo que tenía, lastimando sus manos pero con la necesidad de descargar su molestia y frustración.

-¡Wow!, ¡tranquilizante un poco!- hablaron tras de él -vas a hacer mierda tus manos, ¿que sucede?-

-Nada-

-Nadie se pone así por nada, así que habla con tu querido primo Nam- se acomodó en la cama y esperó.

-Es una tontería...-

-No hay cosa que me digas y no sea una tontería, te gusta ahogarte en vasos de agua así que habla-

-Es sobre... un chico-

-Bueno esto si es nuevo, ¿qué sucede con él?-

-Descubri algo de él y en lugar de confiar en mí me tacha de ser lo peor, me estuvo insistiendo en pedirle algo a cambio de que no dijera nada a nadie y hasta que no acepté se tranquilizó pero ahora quedé como un idiota interesado por pedirle algo- bufó -solo lo hice por su insistencia, no porque realmente quisiera-

-¿Y el problema es...?-

-Que me gusta y ahora no veo forma de lograr que algo suceda entre nosotros- suspiró -pensé en esto como una forma de acercarnos y sólo puse una muralla entre nosotros-

-Bien... estas jodido-

-¿En qué parte está la ayuda?- reclamó.

-Estoy jugando- rió -un poco al menos... es complicado pero no imposible, sólo tienes que actuar como siempre-

-¿No estás escuchando lo que dije?-

-Si, escuché, él piensa de ti en forma negativa, demuestra que no eres así, tómalo como una oportunidad para cambiar su perspectiva de ti y darse cuenta de que no eres uno más-

-¿Cómo haré eso?-

-Ya te lo dije pequeño cabeza hueca, se tu mismo, eres un buen chico Kook eventualmente se dará cuenta-

-Ser yo mismo...- repitió.

-Exactamente y si eso era todo ire a comer, muero de hambre- se levantó de un salto y salió de la habitación.

Dejando con un poco de nueva esperanza a Kook y trazando un plan en mente para sacar provecho de la situación de una buena manera.

Jimin entró al apartamento molesto, abrió y cerró la puerta con un poco de fuerza de más, llamando la atención de Jin que despegó su vista de su novela para ver a Jimin.

-¿Problemas en el paraíso?- cuestionó -la puerta no tiene la culpa-

-Lo sé, lo siento- suspiró frustrado y avanzó hasta sentarse al lado de Jin.

-¿Tan mal estuvo la cita?-

-Algo incómoda pero bien, ese no fue el problema realmente-

-¿Entonces..?-

-Tenías razón... Jungkook sabe que soy Minji-

-¡¿Enserio?!- preguntó con sorpresa -aveces soy una cosa pero bárbara- se halago -¿y que te dijo?, ¿lo viste hoy?-

-Si, estaba en el cine cuando salimos, quiere una cita a cambio de no decir mi secreto a la escuela entera- bufó.

-No le veo lo malo-

-Tengo que ir vestido de Minji-

-Bien, eso si es malo- asintió -no pensé que fuera el tipo de chico que te chantajea-

-Solo se hizo del rogar un rato y después dijo lo que quería, nadie hace nada gratis Jin, ya sabía que pediría algo, sólo tuve que decirle que dejara de fingir-

-¿Tuviste que decirle?- repitió confuso -entonces lo obligaste-

-¡Claro que no!, era obvio que iba a querer algo y prefería que lo dijera de una vez a que se hiciera pasar por el que hace todo por caridad-

-Jimin... si hubiera querido algo entonces te lo hubiera dicho enseguida, ¿no crees?-

-Lo iba a hacer de todos modos, lo se, recuerda que es uno de ellos también-

-No porque tu padre haya sido un millonario hijo de puta significa que los demás serán igual- dijo obvio -Namjoon es un riquillo pero te agrada y es mi amigo-

-No todos pero si la mayoría- se cruzó de brazos -como sea, ya pidió algo a cambio y ahora no me queda de otra que hacerlo, tendré que conseguir ropa de mujer-

-Puedes pedirla prestada a las chicas- sugirió -y tu te lo buscaste por insistir, así que no te quejes-

-¿De qué lado estás?- lo miró mal.

-De ninguno, me gusta joder en ambos lados- sonrió y regreso la vista a su novela -asi que no lo tomes personal-

-Que lindo- suspiró y se puso a ver la novela también, pensando en que sería lo que le esperaba ahora que alguien sabía su secreto y sintiendo desde ese momento que lidiar con Kook no sería tan sencillo.

Y así era

Apenas llegó a la clase Kook le sonrió mientras le saludaba como si fueran los mejores amigos, decidió ignorarlo pero justo frente a Tae, Yoongi y Hoseok él se acercó para poner su brazo en su hombro en un incómodo abrazo, llamando la atención de los tres antes mencionados que los miraban confundidos 

-Hola Jimin, ¿amaneciste bien?- preguntó sin soltarlo 

-Si...- murmuró confundido.

-Me alegro, yo tuve una buena mañana también, aunque siento un poco de nervios por el exámen, ¿sabes?-

-¡¿Hay examen?!- casi gritó Tae asustado.

-Si, estudie pero los nervios traicionan- dijo Kook.

-A ustedes siempre les va bien- bufo Hoseok -dejen eso para nosotros-

-¿Desde cuándo son tan cercanos ustedes?- cuestionó Yoongi.

-Desde hace unos días, por cierto Yoongi, ¿quien crees que consiguió una cita con Minji?- mencionó cambiando el tema.

-¡¿QUÉ?!- gritó ahora sí Tae -¡yo aposté a que los mandaba a la mierda a los dos!-

-¿Conseguiste una cita?- preguntó con emoción Yoongi.

-Exacto, volví a preguntar y aceptó esta vez, soy afortunado, ¿no crees Jimin?-

-Sin duda- murmuró mientras intentaba poner distancia entre él y Kook pero el pelinegro lo acercó más hacía él, rozando sus mejillas.

-Mierda... me alegro por ti pero acabo de perder 2000 dolares- habló Hoseok -necesitamos fotos de esa cita-

-Y yo necesito el dinero en efectivo- estiró la mano Yoongi sonriendo -nunca dude de ti Kook, el rompe corazones no iba a fallar-

-Hasta no ver las fotos yo no daré nada- se cruzó de brazos Tae quejándose.

-Como sea, ese dinero es mío ahora- festejó Yoongi -ya quiero que se llegue el día de esa cita-

-Yo también Yoon, definitivamente- murmuró haciendo que su aliento rozara el oído de Jimin causándole un escalofrío y provocando un gran sonrojo en su rostro.

-¿Estás enfermo Jimin?, tu cara está roja- preguntó Hoseok.

-Si, no me siento muy bien, iré al baño- se levantó de golpe alejando el brazo de Kook y caminando de prisa, abrió la puerta y fue directo al lavabo para echarse agua en el rostro, suspiró aliviado por el frío líquido y se miró.

Ni siquiera un día y ya sentía que no iba a poder.

La puerta de los baños se abrió y Jungkook apareció, lo miraba curioso, se detuvo justo a su lado sin mencionar una sola palabra, sólo mirándolo y desesperando a Jimin, que lo vio con intenciones de acercarse más.

-Detente- habló Jimin -¿qué es lo que pretendes?-

-Nada realmente- se encogió de hombros.

-Entonces deja de actuar como un acosador, vas a tener tu estúpida cita, ¿no puedes ignorar mi existencia aquí?, tal como antes-

-No puedo- negó -es imposible en realidad-

-Antes no te costaba hacerlo- frunció el ceño

-En realidad si, desde hace un tiempo el ignorarte se ha vuelto una tarea difícil- suspiró -pero no tiene caso explicarte si no vas a creer lo que te digo-

-Claro que no lo haré, sabía que esto pasaría y alguien se daría cuenta, intentaría chantajearme y esto se volvería tedioso... pero no puedo dejarlo así que sólo me queda soportar-

-¿Por qué no puedes?-

-Esta escuela no se paga por harte de magia genio-

-Tienes una beca que cubre la gran parte de los gastos y las inscripciones son anuales, tiempo suficiente para ahorrar y que te sobre, tu tienes más gastos- aseguró.

-Claro que tengo más gastos, un riquillo como tu no conoce de esas cosas, todo lo tienes en bandeja de plata-

-No exactamente, pero tienes razón en que yo no me preocupo, aún así...-

-Mis asuntos personales no te incumben, así que te agradecería que no preguntes más por eso-

-Bien- apartó la mirada -esperare a que estés listo par decírmelo-

-Como si eso fuera a suceder- bufo -y no actúes como si fuéramos los mejores amigos-

-No actuó, somos amigos, salimos y nos divertimos y aunque ya sabía tu secreto no le dije a nadie-

-Tal vez pudimos serlo pero ahora definitivamente no seremos nada- declaró -haré lo que pides para que no digas nada pero...-

-¿Todo lo que pida?- interrumpió.

-Como si tuviera opción de poder decir no-

-La tienes, pero si no quieres negarte es tu decisión- se encogió de hombros y se acercó lo suficiente como para sentir la respiración de Jimin, ninguno apartó la mirada -ya que no escuchas las palabras voy a tener que intentar mostrarte con acciones mis intenciones- murmuró y se alejó -llegaras tarde a clase si demoras más Jimin- dijo antes de dar la vuelta y alejarse.

Jimin soltó el aire contenido y llevó una mano a su pecho, sintiendo los latidos acelerados de su corazón, confundido por lo que empezaba a sentir.