LidiaCanc primer voto del capítulo anterior, ¡gracias por tu apoyo! Y aprovecho para avisar que ahora la dedicatoria será para el primerx en comentar.

Ahora si, disfruten del capítulo.

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—Adelantense, olvidé mi celular —avisó Tae.

—No olvidas la cabeza porque la tienes pegada al cuerpo —se burló Yoongi.

—Vete a la mierda —dijo antes de regresar, escuchando las risas de fondo. 

Empujo la puerta y se quedó de pie atónito, viendo como Jimin y Jungkook se besaban, la respuesta de su cuerpo fue cerrar de nuevo casi por completo, los vio separarse y levantarse, se tomaron de la mano y caminaron a los baños.

—¿Nos bañamos juntos? —sugirió Kook.

—¿Necesitas que lave tu espalda acaso? —respondió con diversión.

—No sería mala idea, también puedo ayudarte si quieres —llevó su mano al trasero de Jimin.

—¡Eres un pervertido! —acusó quitando la mano de un golpe —ni siquiera te me acerques.

—¡Solo estaba jugando!, si quiero tu trasero pero se que todavía no es momento.

Fue lo último que escuchó Tae antes de que entrarán al baño, él se apresuró a tomar su celular y salir de ahí, sintiendo una extraña sensación en su pecho.

Antes de haber estado con Jin podría jurar que los hubiera enfrentado y los acusaría de ser unos asquerosos. Ahora no le resultaba desagradable, estaba sorprendido pero no asqueado, la rabia y odio que surgía de su interior no estaba en ese momento.

Caminó a la cafetería decidiendo no decir nada, aunque estaba seguro de que le iba a costar verlos y no recordar el besó que vio entre ellos. Negó alejando la imágen de su mente y cuando llegó vio a Yoongi junto a Hoseok comiendo unos fideos.

—Perdona que no te compraramos algo, pero no sabía si también querías fideos —se disculpó Hoseok.

—No importa, solo comeré unas galletas, debo irme a casa.

—Que sorpresa, eso es muy inusual de tu parte —dijo con sorpresa Yoongi.

—No me queda opción, hoy llega mi padre de su viaje y quiere mostrarme algo de su empresa, sigue con eso de que debo involucrarme más —bufó molesto.

—Eres el futuro dueño de esa compañía, debes aprender bien para que no lo eches a perder —dijo obvio Yoongi —también me gustaría asegurarme de que dejare en buenas manos el esfuerzo de tantos años si fuera tu padre, aunque para empezar no te dejaría a cargo a ti —se rió.

—No seas tan malo Yoongi, Tae puede hacerlo bien si se lo propone, quizá es porqué aún somos muy jóvenes que no nos interesa tanto involucrarnos en los trabajos de nuestros padres, yo sólo asisto con mi padre a sus reuniones.

—Pero a Tae no se le ve ni una pizca de interés por el negocio como mínimo, en la agencia de seguridad de mi padre yo ya me encargo de algunas cosas. 

—No es que no me interese la compañía de mi padre, pero lo difícil es tener que lidiar con él, su actitud es muy… complicada.

"Aterradora y amenazante" pensó. 

—Tómalo con calma, no es como que ya vayas a trabajar ahí, sólo a de querer que aprendas bien las funciones —tranquilizó Hoseok.

—¿De qué hablan? —preguntó Jungkook al llegar con Jimin a su lado, sus manos se separaron segundos antes de que todos los miraran.

—De Tae y su padre que quiere mostrarle más sobre su empresa, que suerte tienes tu Jimin, no debes lidiar con tener que ser obligado a pertenecer a algo, puedes elegir lo que quieras —dijo Hoseok.

—Supongo… Aunque aún no se que haré a futuro, ustedes ya tienen algo seguro en la empresa de sus padres, es una buena ventaja.

—Podrías ser un peleador sin problemas, sólo que de taekwondo ya que Jungkook te ganó con su box y en todas las materias te va bien, no debes preocuparte de eso. 

—Ya te habías tardado en mencionarlo, maldito Hoseok —se quejó caminando hacía la señora para ordenar algo con las risas detrás y Jungkook siguiéndolo.

—Te dejaré ganar a la próxima —murmuró Kook a su espalda.

—Ahora si me voy a enojar, no necesito tu jodida lástima —soltó molesto.

—No lo decía con mala intención, no te enojes conmigo Jimin.

—¿Aún queda Kimchi? —preguntó ignorando a Jungkook.

—Bebé, por favor —soltó y se tenso al darse cuenta de lo que había dicho, Jimin también lo hizo y se sonrojo mientras la señora le daba su plato ignorandolos.

—¿No vas a ordenar algo? —preguntó en cambio.

Jungkook asintió y ordenó lo mismo que Jimin, cuándo se dieron la vuelta vieron a Tae detrás de ellos con sorpresa y la duda de si había escuchado, mientras que él intentaba fingir que no lo había hecho.

—¿Se les olvidó pedir algo? —preguntó al verlos sin moverse. Ellos negaron y se hicieron a un lado con alivió, con sus platos en mano llegaron junto a los chicos para comer, ellos seguían hablando sobre lo que hacían ya en las empresas de sus padres.

—¿Por qué tienen esa cara de espanto? —preguntó Yoongi.

—Por nada —habló Jimin y no pudo evitar ver fijamente a Tae mientras tomaba asiento, con la inseguridad de creer que de verdad no había escuchado, pero sabiendo que hubiera empezado a hacer algún comentario despectivo de inmediato si lo hubiera hecho. 

—¡Deja de verme tanto, no es mi culpa que sean tan obvios! —soltó nervioso Tae llamando la atención de todos, Jimin sintió que se le baja el color del rostro.

—¿De qué hablas, Tae? —preguntó Yoongi.

—Este par de idiotas, parece que son pareja y por más que trate de no decir nada es imposible con lo evidentes que son.

—¿Entonces si son novios? —preguntó Hoseok.

—¡¿Por qué no estás sorprendido?! —medio gritó Jimin.

—Me daba esa vibra cuando estaba con ustedes, parecen bastante cercanos y el día que se fueron al baño regresaron con los labios muy rojos, no se necesita ser un genio para poder saber la razón —se burló —sólo esperaba a que ustedes quisieran decirlo, aunque lo que me sorprende en realidad es que Tae no empiece con sus comentarios. 

—Es su culo, no el mío —se limitó a decir —ahora déjame comer tranquilo, me pones de nervios —señaló a Jimin. 

—¿Ya te dieron por el culo, Tae?, de otra forma no comprendo tu tranquilidad al saber que eres amigo de "unos asquerosos homosexuales" —dijo Yoongi imitando su tono de voz.

—Lo que yo haga con mi culo no es asunto tuyo, idiota.

—No lo negaste.

—¡Es obvio que no lo he hecho!, camino perfectamente. 

—Tae recibiendo sin problemas el comentario de que le dieron por el culo sin ponerse a gritar, ¡esto si es más que sorprendente! —se rió Hoseok.

—Entonces ya no tenemos que ocultarnos Jimin —dijo feliz Jungkook y se acercó rápido para robarle un beso en sus labios. 

—¡¿Pero qué…,?! —dijo avergonzado.

—¡Tampoco se pasen!, no deseo ver sus muestras de afecto en primera fila —se quejó Tae.

Los otros dos empezaron a burlarse de la cara roja de Jimin y la reacción de Tae, por primera vez se sintió libre de expresar que era gay sin el miedo de ser juzgado.

"No puedes considerar amigos a quienes no te aceptan como eres" recordó y una calidez se instaló en su pecho al pensar que lo habían aceptado al final.

"Novio y amigos… ¿Lo puedes ver mamá?, tu hijo no está sólo" 

—No tienes que llevarme a la cafetería —mencionó avergonzado.

—Pero quiero hacerlo, es muy satisfactorio caminar contigo de la mano, ya ni siquiera debemos preocuparnos por los chicos, lo saben y no les importa mientras no seamos tan cariñosos, ¿no es genial?

—Si, aunque la actitud de Tae si me sorprendió, empezaré a tomar más en cuenta las palabras de Jin.

—Es verdad, aunque lo sorprendente es que su actitud tan agresiva haya cambiado después de eso.

—Jin también dijo eso, que a los gays de closet se les quita esa actitud de mierda después de hacerlos chuparle el pene.

—El pene de ese hombre es milagroso.

—Eso parece.

Ambos empezaron a reír, Jimin dejó pasar a Jungkook a los vestidores con él sin importarle que lo viera cambiarse, sacó un sobre de su mochila antes de guardarla en su locker y se la dio a Kook.

—¿Qué es?

—La invitación para tu tío al torneo, se me había olvidado entregártela. 

—¡Oh, cierto!, también lo había olvidado. 

—Pensaba que el simple hecho de ganar el torneo era muy poco como para pagarle el haber cubierto mis deudas, pero ahora empiezo a sentir que será más complicado de lo que parece.

—No, no, claro que no, te sientes comprometido y eres muy bueno, desde que entraste a la escuela no ha perdido nunca, hoy fue diferente, que nuestra pelea no te haga sentir inseguro, yo sólo quería ganar nuestra apuesta —se levantó y se puso delante de él.

—Parece que no soy un buen perdedor después de todo —suspiró, Jungkook sonrió y le acomodó la peluca antes de tomarlo de su rostro y acercarse para darle un beso.

—No estás acostumbrado a perder, pero te aseguro que con el único que lo harás será conmigo y puede que no siempre. 

—¡Atrapadas~!..., con razón estabas tardando más de lo normal, que la lujuria no te gane Minie, se que la idea de hacerlo en los vestidores es tan excitante pero resiste un poco, recuerda que eres muy ruidoso.

—¡Callate joder! —gritó avergonzado, se separó de Kook y volvió a verse en el espejo para terminar de arreglarse, tomando las sombras para maquillarse.

—Primero van los pupilentes Minie, luego el maquillaje y que no te avergüence ser ruidoso, es normal en esas situaciones.

—¿Quieres retirarte?, enseguida salgo. 

—No hay mucha gente dentro, es más divertido molestarte y aprovechare para ayudarte, todavía no te queda bien el delineado. 

—Yo me iré de una vez, le entregaré la invitación a mi tío, nos vemos mañana y no seas tan inseguro, estoy seguro de que vas a ganar. 

—¿No le darás un besito de despedida? —preguntó Jin.

—Claro que me dará mi beso —respondió Jimin antes de acercar a Kook y darle un beso más profundo de lo que el pelinegro tenía pensado.

—Como te gusta comer enfrente de los pobres —se quejó Jin —presumido.

—Así como a ti andar jodiendo, ahora puedes irte Kook, debo terminar de arreglarme para empezar a trabajar.

—No me molestaría que Jin siga con sus comentarios si obtengo besos así.

—¡Adiós! —dijo y Kook se rió mientras se iba.

—Aunque no lo creas soy muy feliz de verte tan animado y con ese brillo en tus ojos, estoy seguro de que tu mamá está feliz y tranquila de verte así, puedo soportar ver un beso de ese estilo, incluso si los encontrará cogiendo sólo me quedaría viendo el show.  

—Solo tú puedes pasar de ser lindo a un pervertido de esa forma —negó divertido. 

—Soy único en mi clase, ahora ven aquí para terminar de maquillarte. 

—Sí señora.