🍷❤✨
🔞🔞🔞
—Bebé, ¿cómo te sientes?
—Todavía no tomo tanto, tranquilo —se burló Jimin.
—Sólo quiero asegurarme, te dije que te quería comer entero y no bromeaba, pero no quiero que haya alcohol de por medio.
—¿Vas a comerme? —repitió con una sonrisa coqueta.
—Ese es mi plan, por eso yo sugiero irnos temprano de aquí, ya lejos le decimos a Jin para que se vaya al departamento de Tae para que no pueda hacer comentarios vergonzosos.
—Me gusta ese plan.
—Entonces nos vamos en veinte minutos —aviso y Jimin asintió, tomó un poco más sin excederse, bailó y cantó antes de ver a Kook levantarse en señal de que era hora —nosotros nos vamos chicos, diviertanse, ya transferí nuestra parte a Yoongi.
—¿Tan pronto?, ¿a dónde van? —cuestionó Jin.
—Jimin ya tiene sueño, así que iremos a dormir ya, pero ustedes sigan ¡diviertanse! —tomó la mano del castaño y se dieron la vuelta.
—¡LOS CONDONES ESTÁN EN EL BAÑO! —gritó a todo pulmón Jin y ambos se tensaron al sentir las miradas de todos los que estaban alrededor verlos al escuchar a Jin —¡TAMBIÉN HAY DE TU SABOR FAVORITO JIMIN!
Después escucharon varias risas y burlas por parte de los demás.
—Gracias por avisar, te aseguro que los disfrutaré —respondió Jimin.
—¡Pero no te los acabes!, esos también me gustan a mi —soltó sin pensar Tae.
—¿Compartes condones con Jimin? —cuestionó Yoongi.
—Si, ¿qué tiene de raro?, sólo nos rolamos para comprarlos, pero siempre se agotan los de cereza.
—¿Y tú cuándo probaste-…?
—¡Bien!, sólo tendrás que reponer los que usen, ¡adiós! —interrumpió Jin y ambos se fueron, esperando que el tema quedará ahí.
Hasta que Tae no quisiera decir por su cuenta su orientación sexual, los demás no lo harían.
—Mi plan se arruinó un poco pero todavía queda la mejor parte —consoló Kook.
—Dónde me comes entero, si —asintió Jimin, quizá si había tomado un poco más de lo que pensaba, lo suficiente para que esta situación no le importara tanto pero no para no recordarlo.
Así que se subieron al auto y Jungkook condujo hasta el departamento, mirando en ocasiones a Jimin.
—¿Estás bien?, ¿seguro que no tomaste de más?
—Sólo lo suficiente para no sentirme avergonzado por ser exhibido de esa forma frente a nuestros amigos y desconocidos del bar, me preocupare por eso mañana.
—Podríamos vengarnos pero es un completo desvergonzado.
—Incluso con sus padres, así que no hay forma de hacerlo —lamento Jimin.
—Ya pensaremos en algo, ahora… —dijo al estacionarse —hay un asunto más importante del cual ocuparse.
Bajaron del auto y entraron de la mano, la emoción recorría sus cuerpos y las ansias, que se desbordaron cuando la puerta del departamento fue cerrada con llave y sin resistir más sus manos tocaron el cuerpo del otro atrayendose en un beso necesitado mientras caminaban hasta la habitación de Jimin.
Dónde la ropa empezó a sentirse como un estorbo para tocar la piel, Jungkook de un jalón quitó la playera de Jimin, deteniéndose para observar el bien trabajado cuerpo de su novio, sin tanto músculo pero estaba bien definido.
—Definitivamente soy el chico más afortunado.
—Podría decir lo mismo pero todavía tienes ropa.
—Entonces quitamela.
Jimin no lo pensó dos veces antes de obedecer, retirando la camisa de Kook, acariciando desde los pectorales hasta el marcado abdomen, llegando a la cinturilla del pantalón que desabrochó y bajó el cierre, notando la punta del miembro sobre salir bajo la ropa interior.
—¿Ya estás duro? —preguntó con sorpresa.
—Tengo a mi sexy novio sin camisa en frente, ¿cómo no estarlo?
Jimin soltó una risa antes de acercar su mano y meterla bajo la ropa interior para empezar a masturbar al pelinegro, que no quiso quedarse atrás y también desabrocho el pantalón de Jimin para poder masturbarlo mientras se besaban, acelerando el ritmo de sus manos y haciendo más intenso el beso, cuándo empezaron a sentir que estaban por venirse se detuvieron y con la respiración agitada terminaron de desnudarse.
Se subieron a la cama y Jungkook llevó su rostro a la entrada de Jimin para empezar a prepararlo con su lengua, sacando gemidos del castaño al introducir también sus dedos y moviéndolos en ligeras embestidas, Jimin se aferró a la sábana con una mano y la otra la llevo al cabello de su pareja para obtener más, moviendo de paso sus caderas y gimiendo por la sensación.
—Mete otro —pidió y Jungkook obedeció, sacó su lengua y empezó a lamer los testículos y miembro —¡joder! —gritó cuándo sintió la succión en su glande —s-si continuas voy a correrme —advirtió.
—Hazlo, será la primera de la noche —sonrió y volvió a meterse el miembro a la boca, subiendo y bajando más rápido su cabeza y acelerando las embestidas con sus dedos hasta que Jimin no pudo resistir más y terminó corriéndose en la boca de Kook, que trago y saboreo, se acercó al rostro del castaño.
—¿Que tan morboso eres como para probarte a través de mis labios? —preguntó y la respuesta de Jimin fue atraerlo para besarlo mientras sus lenguas se entrelazaban, ambos gimieron en la boca del otro y Kook aprovechó para mover sus caderas y hacer que su miembro se friccionara con el de Jimin, buscando que volviera a ponerse duro, cosa que no tardó en suceder.
Sin querer separarse estiró su mano y alcanzó el lubricante, lo acercó hasta dejarlo a su lado, mientras bajaba sus besos al cuello de Jimin, pectorales, sin perder la oportunidad de lamer sus pezones, el definido abdomen y dejó un último beso en su miembro antes de separarse para abrir la botella y esparcir sobre su miembro y entrada del castaño, que por la dilatación anterior no necesitaba mucho.
Acomodó su miembro en la entrada y empujó para meterlo por completo, sacando en ambos un gemido por la sensación y cuando Kook sintió las caderas de su novio moverse comenzó a embestir.
Acelerando conforme daba cada una y estimulado por los gemidos de Jimin en su oído, las manos que se aferraban a su espalda y las piernas que lo abrazaban con fuerza como si buscará no dejarlo ir.
—K-Kook… bien… s-se siente bien —murmuró Jimin.
—Estas tan apretado bebé —gimió.
—Tan profundo, ¡agh!
El orgasmo empezó a formarse poco después, el primero en correrse fue Jimin sobre su abdomen y salpicando a Kook, apretando su interior y haciendo que le siguiera casi enseguida el pelinegro.
—Joder, no sabes cuanto te amo bebé.
—También yo amor —aseguró Jimin con una sonrisa cansada, tomó entre sus manos las mejillas de su novio y lo besó, hasta que un movimiento en su sobre estimulada próstata lo hizo separarse por gemir.
—Tenemos el departamento sólo bebé, así que no pienso dejarte dormir.
—No pensaba negarme de todas formas —rió, pero enseguida dejó de hacerlo cuando fue puesto boca abajo y embestido de nuevo, rápido y duro, dejándolo incapaz de hablar por que cada empuje iba directo a su próstata.
Aprovechando la flexibilidad de Jimin hizo que abriera sus piernas y levantara sólo su trasero, llevó una mano a la espalda y omóplato para sostenerse mientras que la otra fue al miembro para masturbarlo, el castaño solo se aferró a las sábanas con fuerza y amortiguaba sus gemidos con la cama.
—¡M-me vengo!, ¡Kook! —gritó cuando sintió el hormigueo en su vientre, pero el pelinegro se detuvo y salió de su interior, sin darle oportunidad de quejarse a Jimin cuando fue levantado y puesto sobre él.
—Montame —ordenó.
Y a Jimin le recorrió un escalofrío por el tono de voz utilizado, sin negarse a hacerlo se empalmo y ambos gimieron por la sensación.
—Ah~... Se siente más profundo…
Dijo antes de empezar a dar ligeros saltos, sus brazos usaron de soporte los hombros de Kook que aprovechó la posición para acercarse y darles atención a los pezones del castaño, lamiendo la areola en círculos, succionando suavemente y mordiendo un poco, mientras sostenía la espalda y daba caricias en ella con su mano izquierda y con la derecha masajeaba el miembro al ritmo de los saltos que daba.
Dejando de un color rojo ambos pezones se alejó y puso ambas manos en las caderas del castaño para ayudarle y acelerar las embestidas, hasta que el orgasmo empezó a sentirse y una vez más se vinieron, Jimin cayó sobre Kook con la respiración agitada, sin importarle lo pegajoso de la piel por el sudor y su corrida en ambos abdómenes, así como la sensación del semen salir de su entrada.
—Me dejaste muy lleno…
—Y todavía falta —mencionó divertido y Jimin sólo suspiró.
Al día siguiente ninguno sentía las piernas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro