32 ♡
El castaño, aun sin superar la muerte de su amado, decidió irse donde vivía su abuela, sus padres, aunque se negaron a un principio luego de que Jimin se fuera una noche sin que ellos se dieran cuenta, no tuvieron otra que aceptar eso; su padre incluso le ayudó a remodelar un poco la casa.
Le dio también unas gallinas y unas cabras para su consumo, además de darle también unas vacas para que tuviera leche.
Jimin había comenzado a crear un pequeño huerto para no depender del pueblo, ya tenía las verduras necesarias a la vez que con algo de esfuerzo se hizo un pequeño pozo.
Para él todo marchaba bien, vivía solo alejado de todas las personas, ya había pasado una semana y Jimin se sentía mal, había estado vomitando todo lo que comía, él tocó su vientre pensando, era imposible lo que pensaba.
Si hubo varias veces que ambos lo hicieron y no pasó nada, mordió su labio nervioso mientras terminaba de preparar una pequeña sopa de verduras.
—Si es verdad. —toco su vientre.—
te amare tanto como amo a tu padre.
Jimin a veces recibía las visitas de sus padres, aunque a veces las negaba, ahora las necesitaba, él se enteró de que había nacido siendo alguien especial y que su madre no quería al de piel canela por lo mismo, pues ahora ser un doncel era considerado brujería.
-Por la forma del vientre será un niño. -le dijo su madre.
-¿Nacerá sano? -preguntó.
-Aún no lo sé hijo. -respondió la mujer. -pero por ahora debes
alimentarte bien.
Jimin asintió mientras recostaba su cabeza en las piernas de su madre
y se ponía a llorar, pues en su vientre llevaba al fruto de su amor con el de piel canela.
Jimin cada vez que podía miraba hacia la luna recordando la promesa que Taehyung le había hecho, acarició su vientre mientras lágrimas resbalaban por sus mejillas.
-Tienes que volver. -dijo. -no importa si son diez años yo te esperaré, pero ahora más que nada tienes que volver.
Jimin se limpió las lágrimas mientras su vista se dirigía a la luna, la cual estaba creciente, levantó su mano como si fuera a tocarla y cerró los ojos.
-Fuiste testigo de nuestro amor. - susurro. -te pido que lo vuelvas a
traer a mi vida.
Bajo la mano, al sentir una leve brisa que lo hizo sonreír, sabía que esa era una respuesta, pero no sabía a cuál de las dos que estaban en su mente.
Si Taehyung estaba vivo o realmente estaba muerto.
.hobixbl
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro