3 "Confianza"
— ¿No te pareció extraño?— Preguntó Yeonmin, a lo que el menor lo miro extrañado
— ¿Que cosa?
— Tu tío, el omega. Reaccionó extraño cuando supo mi apellido.
— Bueno, por lo que sé del tío Yoichi, sus padres murieron un poco antes de que mis padres se casaran, y por eso se mudó junto a su madre y hermanos a Corea del Sur y luego a Estados Unidos. Cuando volvió fue a buscarlo y desde ahi estan juntos. Tal vez le sorprendió escuchar de alguien que era cercano a su padre, luego de tantos años.
— Si, puede que tengas razón— Respondió no muy convencido.
— ¿Acaso crees que miente?
— No lo se, siempre senti una mala vibra de mi abuela, pero con esto, es aun peor.
— ¿Mala vibra? Nunca me lo dijiste
— Bueno... No ea facil de explicar— Dijo, sentandose en su cama— Sabes que odio me llamen Joe, es porque ella eligio ese nombre, y desde que me mudé con mi padre, ella esta intentando en "amerizanizarme". Me prohibia hablar coreano con papá, comer algo q lo que estaba acostumbrado, a responder a mi nombre extranjero, y por sobretodo, me prohibia hablar de appa.
— Eso no es mala vibra, Minnie, eso es rechazo con fundamentos. Es muy xenófobo de su parte.
— Lo se, pero es extraño. Si fuera xenofobia ¿Por que permitió que papá fuera a Corea? ¿Por que me permitió a mi venir a Japón? ¿Y por que tuvo negocios con japoneses? Es muy extraño.
"¿Por que esta de acuerdo con que te corteje?"— Se preguntó mentalmente, mirando al menor
— Si lo pones asi, ciertamente es raro, contradictorio incluso.
— Pero también esta la reacción de Ibuki, el se veía bastante impactado. Hay algo extraño alli, pero no se que es.
— ¿Acaso quieres descubrirlo? Puedo ayudarte.
— ¿Este no es el momento en que deberias aconsejarme dejar de pensar en eso y que juguemos videojuegos o algo?
— Para nada. Con lo que me dijiste ya odio a esa vieja, y si podemos develar sus razones y demostrar que es una bruja, mejor.
Yeonmin sonrió, eso era algo que le gustaba de Yuta. El no esperaba agradarle a los demás por aceptacion, prefería proteger a los suyos y dar todo lo que pudiera por ellos. Era como un perro guardian, cariñoso con su familia, pero no dudaría en morder si los lastimaban.
— Gracias, aunque dudo encontremos algo ahora— Dijo sonriente, levantandose de su cama— Voy a calentar mi hamburguesa ¿Quieres algo de la cocina?
— Leche de chocolate.
— Esta bien, ya vuelvo.
Tomo la bolsa de papel y salió de la habitación. Ojeó la habitación de la menor de la familia, jugaba con su primo a los legos, al parecer trataban de construir un castillo de cuentos de hadas, pero solo veia unas montañas de ladrillos. Sonrió para sus adentros, si que los niños tenían imaginación.
Bajó tranquilamente las escaleras, tarareando alguna melodía desconocida, pero al escuxhar las voces de la sala de estar se alarmó. Alguien lloraba, Yuu estaba llorando, y la pareja lo consolaba ¿Que estaba pasando?
No debía escuchar conversaciones agenas, en cualquier cultura estaba muy mal visto ¿Pero que se suponía debía hacer si su futuro suegro lloraba? Al menos debía saber la razón.
Se posicionó al lado del arco que daba a la sala de estar, desde su posición podía ver la mesa en la que los adultos estaban sentados. Yoichi estaba abrazando a su primo, sobando su espalda para contenerlo, mientras el otro omega tomaba su mano. Efectivamente trataban de apoyar y calmar al albino, y parecía ser grave.
— Tranquilo Yuu, todo estará bien— Murmuró el alfa, apegando mas a su primito en el abrazo.
— No deberías temer por esto, al contrario, deberías aprovecharlo para aclarar las cosas.
— ¿Como puedo aclararlo? Ryota apenas esta conmigo por trabajo o por los niños ¿Y enserio esperan que pase por esto? ¿Con un matrimonio tan monótono y distante? Pronto cumpliré 39, estas cosas no deberían pasar ya.
— Pues a nosotros nos paso... 2 veces— Comentó Yoichi
— Una vez, aun eramos jovenes en la primera— Refutó el omega, mirando mal a su esposo— Pero esto no debería preocuparte, creo que si lo hablas con Ryota, el te apoyará, incluso puedes decirle todas tus inquietudes y llegar a un acuerdo.
— No se si pueda, todo es diferente ahora...
¿Problemas maritales? Eso le sorprendió, aquella pareja siempre le dio buenas vibras, donde estaba uno, estaba el otro ¿Como podia ser que tuvieran problemas a nivel que Yuu llorara?
— Ire por un vaso de agua, ustedes esperen aqui.
Oh mierda, eso no era bueno. Sin pensarlo, corrio en dirección a la cocina, maldiciendose internamente una vez llego, estaba frito, Yuu se daría cuenta que los escuchó, y lo que menos deseaba era tener problemas con su futuro suegro y el hombre que cuidaría de él por 3 años.
Metió la hamburguesa en el microondas, pero no le daba tiempo a encenderla, por lo que cuando escuchó los pasos aproximándose, fingió estar buscando algo en las alacenas, abriendolas de par en par y rebuscando entre los paquetes de comida.
— Mierda ¿Donde estan?— Murmuró en un intento de convencerse a si mismo de su actuación, escuchando a los pocos segundos los pasos detenerse.
— ¿Yeonmin? ¿Que haces aquí?
Por el tono de voz del omega supo que estaba aterrado, debía comenzar a actuar y tratar de ser lo mas convincente posible.
— Oh, Yuu. Yo... Iba a calentar mi hamburguesa, y de paso Yuta me pidio una leche con chocolate.
— Las cajas de leche estan en el refrigerador.
"Perfecto Yeonmin, ya te exhibiste"
— Y galletas de arroz dulce— Agregó al instante, recibiendo una extraña mirada del mayor— Ya sabes, a Yuta le gustan los dulces, sobre todo las galletas de arroz dulce.
— Si... y hoy a la mañana le dije que se acabaron y compraría la siguiente semana, cuando fuera a hacer las compras del mes.
“Ya mejor matenme”— Lloriqueó el menor internamente.
— Oh, pudo habermelo dicho antes, y yo aqui buscandolas hace rato, ya hasta se enfrió mi hamburguesa— Fingió quejarse, esta vez encendiendo el microondas— Uno queriendo hacer detalles y pasan estas cosas.
— A veces Yuta olvida algunas cosas, espero eso no sea un problema para ti— Comentó el albino, sonriendo de medio lado mientras tomaba un vaso de las alacenas.
— No es razón suficiente para ser un problema. Y aun si lo fuera, lo quiero igual.
— Y te creo. Pero recuerda, todo a su tiempo.
— Lo se, no diré nada. Yuta aun tiene muchas cosas por aprender antes de entrar en una relación.
— Las tiene, ciertamente. Cuando Ryota y yo comenzamos a salir hubieron muchos cabos sueltos que si los hubiéramos resuelto antes, nuestra relación hubiera sido mas sencilla, pero a su vez, ambos nos dimos fuerza para afrontarlas— Explicó el mayor, sirviendose agua en su vaso— Con esto no estoy romantizando las relaciones con personas inestables, mucho menos la dependencia emocional. Ciertamente fuimos el empujón del otro para cambiar, pero entendimos que ese cambio debíamos hacerlo, para sanarnos a nosotros mismos.
— ¿Y estas mejor? Digo, desde que Ryota te dio el empujón.
— El es un gran compañero. Yo era un inexperto en las relaciones, pero siempre se aseguraba de mi bienestar, y si queria ir un poco mas rapido, me lo preguntaba. De a poco fuimos entendiendo que es lo que esperaba cada uno de nuestra relación, y creo no hay mejor pareja para mí alli afuera que él, no porque sea conformista, si no que realmente, el supera todas mis expectativas.
— ¿Aun despues de tantos años?
Yuu torció el gesto ante la pregunta, y Yeonmin quizo golpearse por ello. Acababa de escuchar que el omega estaba dudando de su relación e iba y se lo preguntaba ¿Acaso era idiota?
— Es decir, mis padres se divorciaron a los 2 años de casados, no es como que recuerde su relación pero supongo que por algo se divorciaron, y papa tardó mucho en establecerse con Sasha. Incluso viendolos ahora no se ven tan felices como ustedes dos, y me pregunto como es que pueden verse asi despues de mas de 20 años de relación.
— Oh, a eso te referías. Bueno, todo se basa en la confianza. El lazo ayuda bastante, pero justamente puede mantenerse por la confianza que nos tenemos. Creo que las únicas veces en que dudé de Ryo fue cuando estaba embarazado, pero eso fue por las hormonas que nublaban mí juicio y al de mi omega— Explicó entre risas, recordando como se encerraba en el closet y Ryota trataba de convencerlo de salir—Ambos confiamos en el otro, y eso es lo que nos mantiene como estamos. Claro, el amor es fundamental, pero no sirve de nada si no confías en tu pareja. Ryota jamas me ha hecho una escena de celos, tal vez marcaba territorio cuando alguien quería pasarse de listo conmigo, pero jamas tuvo que "recordarme" que estoy con él ni me trató como un objeto de su propiedad. Esa es una de las cualidades que mas amo de él, me ve como su igual y sabe que lo amo de la misma forma.
— Ya veo. Se ve que se aman demasiado.
— Asi es... Gracias.
— ¿Por que?
— Por recordarme como es el amor de mi vida.
— No creo debas agradecerme por eso.
— No, no debo, pero quiero hacerlo— Dijo el mayor, sonriendo sinceramente— Tal vez hayan momentos en los que dudes de tu pareja, pero siempre debes recordar como es, no importa la distancia. Me recordaste que mi esposo es alguien de confianza, y por eso te agradezco.
— Entonces... Supongo que debo decir "de nada". No se realmente que decir, nunca pase una situación como esta.
Yuu rió ante el comentario del menor, acariciando su cabello, como si se tratara de su hijo.
— Realmente espero Yuta sienta lo mismo que tu sientes spor él, serías un buen yerno.
— ¿Tu yerno favorito?— Preguntó ilusionado.
— No se lo digas a Ryota, pero si, mi yerno favorito— Dijo sonriendo con gracia, confundiendo al peliazul.
— ¿Por que no debo decirselo a Ryota?
— Porque su favorito es Kakeru.
— ¿Tambien lo saben?— Preguntó sorprendido, rrcibiendo una carcajada del albino como respuesta.
— Por favor, no hay nada mas obvio que un niño enamorado, y si a eso lo multiplicamos por dos, el resultado es 4 adultos esperando a que alguno de sus hijos pida la mano del otro— Explicó Yuu, lavando su vaso y luego dejandolo secar— Los dejaste solos ¿Verdad?
— Me exhasperan.
— Si, a nosotros tambien. Hace 12 años estamos esperando que esta relación se concrete.
— ¡¿Tanto?!
— Si, cuando Kakeru entró a primaria, Mayumi se puso a llorar, porque su mejor amigo no pasaria tanto tiempo con ella, y la dejaría por otras niñas de su edad. Si lloraba asi con casi 4 años, no me quiero imaginar su reacción cuando Kakeru entre a la universidad, algo me dice que por eso no se confiesa.
— Ni que fuera una universidad estadounidense.
— Ciertamente, no es estadounidense, es británica.
Yeonmin miró sorprendido al mayor. Estaba acostumbrado a que en su país todos sus compañeros se volvieran locos por entrar a alguna universidad de renombre. A el no le importaba, estaba decidido a quedarse en Japón y estar cerca de Yuta, y por suerte las mejores universidades estaban en Tokyo. Por esa razón se sorprendió al saber que Kakeru no planeaba estudiar en el país, si no que planeaba irse a Inglaterra a estudiar.
— ¿Se irá? ¿Como puede ser? ¿Mayumi lo sabe?
— Tsuneo, el padre de Kakeru, hizo un máster en Inglaterra, y volvió fascinado por su educación, siendo que él estudió aqui en Japón. Al parecer le contagió la fascinación, porque Kakeru planea igualmente estudiar allí, pero no un máster, va por la licenciatura, el combo completo— Explicó el omega— Supongo que Mayumi no quiere confesarse por eso, estar en una relación por un año solamente, cuando pasó enamorada de él mas de la mitad de su vida.
— Ahora me siento mal por decirle que se confiese de una vez.
— No lo sabías, y tampoco creo que sea malo, solo quieres ver a tu amiga feliz— Dijo el mayor, acariciando el cabello teñido del adolescente— Gracias por cuidar de mis hijos, aun si te dan dolores de cabeza.
— Creo que yo les daré mas dolores de cabeza de lo que ellos me darán a mi— Bromeó, haciendo reir de igual forma al albino— Pero seguiré junto a ellos, incluso Koharu.
— Gracias por la oferta de niñero, la tendré en cuenta.
El microondas, anunciando su finalización, interrumpió la conversación. Yeonmin sacó su hamburguesa y la dejó en un plato, Yuu lo ayudo y le dejó una bandeja para que le fuera mas facil llevarsela arriba.
— Solo espero que recuerden bajar los utensilios y lavarlos, asi como sube debe bajar ¿Ok?
— Ok. Gracias.
Y sin decir mas, el mayor se retiró. Yeonmin suspiró aliviado, no fue descubierto o al menos Yuu no le reprochó nada. Estaba a salvó.
Tomó del refrigerador la leche de Yuta y de igual forma subió silenciosamente al cuarto. Como creyó, Yuu ya era consciente de su presencia, por lo que los mayores tenían una amena conversación sobre sus vidas.
Al entrar a la habitación, se encontró con el menor recostado en su cama, mirando su telefono. Eso le bastó para sonreír, podían haber 2 camas en el cuarto pero algo le decía que Yuta usaría la suya enves de la propia.
— Volví.
— Tardaste siglos ¿Acaso te transformaste en lobo y fuiste a cazar a la vaca tu mismo?
— Ya nadie puede transformarse, tonto. Tu padre llegó a la cocina y nos pusimos a conversar.
— Papí te quiere mucho, como si fueras su propio hijo. Incluso apuesto que te quiere mas a tí que a mí. No ve el día en que seas parte de nuestra familia.
Yeonmin se detuvo al escuchar aquello ¿Que tanto le habían dicho a Yuta? Porque estaba seguro que no había forma de que supiera la verdad, ni que le mintieran entrometiendo a Mayumi.
— ¿Que cosas dices Yuyu? ¿De donde sacas algo como eso?— Preguntó entre risas, vago intento de camuflar su nerviosismo.
— Una vez escuche a papi decírselo a papá, que seria lindo tenerte de yerno— Respondió tranquilamente, abriendo su caja de leche— Aunque dudo sea posible, Mayumi esta enamorada de Kakeru, y Koharu es muy pequeña.
— ¿Y tu?
— ¿Yo que?
— ¿Nunca creíste que podían estar hablando de ti?
— ¿De mi? ¿Osea nosotros dos?
— Pues si.
— Oh... Nunca lo pensé.
"ES MAS LENTO DE LO QUE CREÍ"- Gritó internamente, aparentando tranquilidad.
En ese exacto momento deseaba confesarse a gritos, para comprobar si asi al menos el menor captaba algo. Pero no lo haría, le acababa de prometer a Yuu que todo iria a su tiempo, por mucho que le molestara la situación.
— Oh my god! Yuyu, creo que lo mas lógico es que tus padres siempre te emparejen con tu mejor amigo.
— Bueno, si lo pones así tiene sentido ¿Entonces crees que hablaban de nosotros?
"No lo creo, efectivamente hablaban de nosotros"— Pensó, mordiendose la lengua para no decirlo— Supongo, despues de todo, soy mas cercano a ti que a Mayu.
— Bueno, supongo tienes razón. Nunca pensé en esa posibilidad.
— ¿Y ahora que piensas?
El menor lo miró sorprendido. Tal vez estaba tentando demasiado su destino ¿Pero podían culparlo? Tenía en frente a su crush, con la oportunidad de saber si tenía alguna oportunidad o no, y si con ello lo incomodaba, podía disculparse por el atrevimiento y no volver a insinusrse.
— Bueno, es extraño pensar en ti como mi pareja... Es decir ¿Alguna vez pensaste asi de mi?
— Si, lo hice.
Mierda, eso salió involuntariamente, y por la expresion de Yuta supo que tambien lo escucho. Ahora si estaba jodido.
— Oh... No sabía que podías pensar asi de mi... Es extraño.
— ¿Te incomoda?
— U-un poco. Pero supongo es parte de crecer. Quiero decir, soy Omega, tu eres Alfa, y pasamos mucho tiempo juntos, creo que es natural que los demas nos vean como pareja potencial, y que incluso ambos consideremos esa posibilidad.
— No creas que por esto te veo ahora mismo como pareja— Dijo Yeonmin, tragandose su orgullo y su confesión— Ambos somos amigos, no tenemos porqué cambiar eso si no queremos, ni distanciarnos por algo como esto ¿Si? Tu sigues siendo mi amigo, y estar juntos es mi prioridad.
Tal vez no era la mejor confesión, ni se acercaba a todo lo que deseaba decirle, pero si al menos podía dejarle en claro lo mucho que lo apreciaba y que deseaba estar siempre a su lado, lo haría.
— Estoy de acuerdo. Solo... No quiero crear malos entendidos. No por mi, aun no me interesa tener pareja, pero puede que tu sí, y yo seré solo un estorbo.
— Acabo de decirte que eres mi prioridad. No quiero pareja, y de quererla, sabría administrar mis tiempos, tanto con esa persona como contigo. No necesitas alejarte ¿Ok?
— Ok.
— Ademas, aun no tienes edad para preocuparte por esas cosas, apenas tienes 14.
— Exclamó el adolescente de 16— Se burló el menor, ganándose un leve golpe de su amigo— Koko dice que estos temas empiezan con la adolescencia, es normal que comiencen las primeras experiencias amorosas.
— Supongo que sí, pero por el momento no las necesitamos— Murmuró el peliazul, recostandose al lado del omega.
— Cuando dijiste que pensaste en mi como pareja ¿Que fue lo que exactamente pensaste?
— ¿Realmente quieres oirlo?
— Me da curiosidad— Dijo entre risas, volteandose a ver al mayor.
— Bueno... Imaginé como sería estar casado contigo.
— ¿Y como se veía?
— Justo como ahora— Respondió, mirando de igual forma al menor.
Notó un leve sonrojó formarse en las mejillas del castaño, y tuvo que contenerse para no acercarse aun mas y besarlo, mas no separo su vista de los ojos canela del menor.
— No creo que eso sea una visión muy romantica— Murmuró el menor— ¿Estás seguro que realmente pensaste en mi de esa forma?
— ¿Acaso quiere que nos imagine besándonos o que?
"Imaginaste eso y mas" - Susurró una vocecita en su cabeza, a la cual le hizo caso omiso.
— Iugh ¡No!
— ¿Como que Iugh! Te apuesto a que soy un buen besador. Muchos morirían por un beso mio.
— ¡Ay si! Me imagino, "Principe Rompecorazones"
— Oh, creeme, pronto recibiré miles de cartas de confesión. Y ya vendrás llorando por que te de atención. Te aseguro nunca encontraras a un alfa como yo.
Lo único que obtuvo como respuesta fue la leve carcajada del menor, y estaba seguro que si no estuviera tan enamorado de el como para adorar verlo sonreír, le hubiera borrado la sonrisa de un golpe. Si, tal vez no era el ser mas amable como sus yernos y Yuta creían.
— Estaré esperándolo. Pero te aseguro que cuando yo entre a preparatoria, seré el omega mas codiciado de la escuela.
"Ya lo eres para mi"- Pensó Yeonmin, mirando la sonrisa de su amigo.
— Bueno. Si me lo permites, esa hamburguesa esta reclamando mi atención hace mas de una hora, y no pienso hacerla esperar mas.
— Toda tuya.
Tras su almuerzo improvisado, jugaron algunos videojuegos juntos, pasando la tarde entre risas y pequeñas peleas sin sentido.
Mayumi volvió unas horas despues, mas no dijo ni una sola palabra de lo que paso desde que su amigo basicamente la abandonó alli con el mayor. No se la veía molesta ni feliz, Yeonmin estaba seguro que algo paso, pero estaba claro por su expresión que no hablaría de ello.
La cena se llevó a cabo junto a la pareja de mayores una vez el alfa de la casa volvió del trabajo, mas no hubo una charla muy amena debido al cansancio del mismo, por lo que se retiro a su cuarto antes del postre.
No pasó desapercibida la triste expresión en el albino, no para los mayores y Yeonmin, mas no hablaron del tema, simplemente desviaron la conversación y se centraron en disfrutar el postre.
Una vez los mayores se fueron, y los menores subieron a sus cuartos tras dejar todo limpio, Yuu decidió que tal vez era el momento para hablar, por lo que en ves de dirigirse a su estudio personal de arte, subió a su cuarto matrimonial.
Al entrar se encontró con su esposo, secándose el cabello antes de ponerse la camiseta de su pijama. No supo si fue su lado Omega o el humano el que lo impulso a abrazarlo por la espalda, reconfortandose con el contacto de piel directa que hace varios meses no sentía, nisiquiera en sus celos.
Lo extrañaba tanto, su aroma, su calor, su voz, todo de él. Extrañaba los tiempos en los que solo se quedaban abrazándose en la cama, tiempos que parecían tan lejanos.
— Yuu, hoy estoy cansado— Murmuró el castaño, deteniendo su accion para mirar a su esposo.
— ¿Tan cansado como para no devolverme un abrazo?— Preguntó irritado ante el rechazo.
— Enserio, Yuu, no ahora ¿Podemos solo dormir?
— Debemos hablar primero.
— En menos de 6 horas debo estar en la empresa, y no saldré de alli hasta el horario de la cena ¿Podemos hablar de lo que sea que quieras hablar en el fin de semana?
— Eso dijiste la semana pasada, incluso desde antes que Yeonmin llegara a Japón— Se quejó el albino, viendo como su esposo se ponía su camiseta, sin darle real importancia a sus palabras— ¿Siquiera puedes mirarme?
El alfa refunfuñó en voz baja, volteandose a ver a su omega, el cual mantenía el seño fruncido. En otro momento le hubiera acercado y lo hubiera mimado hasta que sonriera, pero el desgaste físico y mental solo lograban irritarlo.
— ¿Que quieres?
— A mi esposos devuelta.
— ¿Que mierda dices? Estoy aquí, siempre estuve aquí— Se quejó molesto, no estaba para bromas del albino ni pensaba seguirle el juego.
— Pues el Ryota con el que me case hace 20 años ni loco hubiera desperdiciado una invitación a follarme.
— El "Ryota de hace 20 años" no tenía que encargarse de una empresa, llena de incompetentes que no hacen mas que cagarla, 14 horas al día, los 7 días de la semana— Respondió sarcástico— Y si el Ryota actual no logra arreglar el error de esos incompetentes tendrá que ver de que se disfraza cuando se junte con los inversionistas de Alemania y le pregunten que esta pasando con sus acciones.
— Ahora puedo entender a Hanako— Resoplo, sonriendo sin gracia alguna.
— ¿Disculpa?
— Cuando Hanako se quejo que tu padre no pasaba tiempo en casa, y la dejaba sola con los niños ¿Que sigue? ¿Adoctrinar a Mayumi para que sea tu clon? ¿Que solo viva para trabajar en la empresa?
— No todos gozamos de horarios flexibles como para estar todo el dia en casa, Yuu. Algunos tenemos trabajos reales para mantener a otros— Escupió hastiado.
Al ver la expresión del mas bajo, supo que la había cagado. No necesito ver lagrimas, ni escuchar gritos para saber que a su esposo le dolieron sus palabras.
Desde que Yuu decidió estudiar arte sabía que todos lo juzgaban por no buscarse una carrera "sería", que lo llamaban "mantenido" o "privilegiado" por estudiar aquello sin preocuparse por el dinero, ya que su esposo se "encargaría" de ambos.
Lo vió llorar por cada vez que rechazaban su trabajo en alguna galería, por cads critica en la que resumian su exito por ser "El omega de Ichinose" enves de acreditar su esfuerzo y dedicación.
Pudo ver en los ojos de su esposo la decepción por su declaración, porque sabía que todo el mundo lo menospreciaba por su carrera y posicion, pero del que menos se esperaba oirlo, era de su propia pareja destinada.
— Lamento no tener un trabajo "real"— Murmuró sin expresión alguna.
Antes de darle oportunidad al mayor de hablar, se retiro del cuarto con un portazo. Claro que la conversación no terminaría alli, en una fracción de segundos la pareja se encontraba en el estudio de arte.
— Yuu, perdon. Es que yo...
— No me interesan tus disculpas. Ve a dormir, tengo mucho trabajo por hacer... Oh, cierto, no es un trabajo, me quedare toda la madrugada despierto porque adoro vivir desvelado— Escupió con sarcasmo, sin apartar la mirada del gran lienzo frente a el.
— Yuu, por favor, escuchame.
— No, Ryota, ya dejaste en claro que no tenías tiempo para hablar. Y esta bien, ve a dormir solo, yo tampoco tengo tiempo ahora. Tengo que entregar 20 cuadros en un mes ¿Y sabes cuantos me faltan? Aun me faltan 7, practicamente debo terminar 7 cuadros de metro y medio por dos metros en menos de 30 días. Y si aun tienes tu cerebro activo, podras hacer algo tan simple como dividir 30 por 7 ¿Cual es la respuesta?
— Yuu, no estoy para juegos— Exhalo agotado, frotandose la sien.
— ¿Cual es la respuesta?— Pregunto entre dientes
— ... Cuatro dias
— Correcto, 4 días. Ahora pasemos los dias a horas, 24 horas por dia, por cuatro dias son 96 horas, pero recordemos que como minimo debo dormir 3 horas para no desmayarme de la fatiga, medio dia menos en esos 4 dias, encargarme de los almuerzos de los niños, al igual que la cena, minimo 2 horas menos por dia, 8 en cuatro dias. Tambien recordarte que tenemos una niña de casi 9 años que pronto volvera a primaria, donde alguien debe buscarla y ayudarla con sus tareas, al igual que hacerse cargo de ella. Minimo 4 horas menos por dia, 16 horas menos. Asi que ahora, alfa sabelotodo, haz la cuenta de 96 menos 3, menos 8, menos 16. Ahora.
— 69 horas.
— ¿Y eso en dias cuanto es?
— No llega ni a 3.
— Correcto, en menos de 3 días tengo que tener listo cada cuadro, sin contar contratiempos o una hora de descanso. Una hora de descanso que soy capaz de darle a mi esposo para al menos verlo a la cara, porque ni siquiera quiere abrazarme o tocarme— Dijo con la voz quebrada, tratando de reprimir las lagrimas— ¿Te agota trabajar demasiado? A mi tambien, no te exigire citas ni sexo, pero al menos ten la descencia de devolverme un puto abrazo ¿O es que acaso ya no quieres verme?
— ¿De donde mierda sacas eso? ¿Enserio crees que ya no te quiero?
— No demuestras lo contrario.
— Debes estar bromeando. Aun si no pasamos tiempo juntos, por el lazo deberías saber que yo...
— ¡No te siento!— Gritó molesto, sorprendiendo al castaño— Ya no puedo sentirte como antes.
— Yuu ¿Por que no me lo dijiste?
— ¿Y como iba a decirtelo? Si cada vez que quiero hablar solo te alejas, nos alejas.
— ¿Ahora todo es mi culpa?
— Yo no soy el que rechaza cualquier inocente contacto alegando que esta cansado.
— ¿Ah si? Pues yo tampoco soy el que decide encerrarse aquí cada noche.
— Es mi trabajo, quieras o no.
— Asi como me reprochas que mi trabajo nos separa, el tuyo tambien ¿Cuando fue la ultima vez que dormimos juntos? Que yo recuerde, hace al menos un año me voy a dormir solo, y el unico momento que puedo verte es cuando estas durmiendo.
— Sabes que no puedo medir mi trabajo. A veces es demasiado exigente, en otras con suerte y entro al estudio en una semana.
— Oh ¿Entonces que yo trabaje 14 horas al dia y no tenga tiempo para ti por el cansancio es de desconsiderado, pero si tu pasas 12 horas encerrado alli adentro es comprensible?
— No dije eso.
— ¡Pues eso me das a entender! Ya no duermes conmigo por estar aqui, y te niegas a salir a cenar cada que te invito, tambien por estar aquí.
— ¿Salir a cenar? No me jodas, tus últimas invitaciones en estos 3 años fueron fiestas de negocios y dejarme solo para atender a tus socios, y te recuerdo que alli todos me desprecian y a ti te llaman perrito faldero o gobernado. No quiero imaginarme que dicen de ti ahora que no estoy como para que quieras que vuelva.
— Al menos te incluyo, tu nunca me invitas a tus exposiciones.
— Porque cada vez que lo hice se interponía en tus juntas de negocios o viajes al extranjero. No me sorprendería que en un mes estes devuelta afuera.
Ryota guardó silencio, ganándose una risa sarcastica por parte del omega, quien lo miraba exceptico.
— Debes estar jodiendome ¿Enserio Ryo?
— No puedo hacer nada para detenerlo. En un mes es la junta de Inversionistas de la sede alemana, y nos necesitan ahi.
— ¿Y donde estoy yo? ¿Eh? ¿En que parte de tu vida estoy?
— Sabes que eres mi prioridad, al igual que los niños.
— ¿Prioridad? Te recuerdo que hace unos 5 minutos me rechazaste por preferir descansar para tu trabajo. No vengas a decirme que soy tu prioridad cuando nisiquiera quieres hablar conmigo por preferir dormir.
Ryota estaba molesto, con una sola de sus manos podía contar las peleas entre ambos, y siempre se solucionaban con solo charlarlo, mas esta vez el omega no parecía cooperar para llegar juntos auna solucion.
— Estoy física y mentalmente cansado, Yuu, y sabes muy bien que cuando te doy mí atención, es completa, no a medias ¿Acaso es tan malo querer descansar y en otro momento escucharte?
— Pues si, es terrible. Hablas de escucharme cuando estes descansado ¿Pero en que momento será eso? Mañana llegaras mas tarde que hoy, y si seguimos asi ¿Cuando podremos hablar? Cuando menos te lo esperes estaremos en navidad y luego me reprocharás por no haberte dicho las cosas en su momento.
— ¡Bien! Ya tienes mi total atencion, soy todo odios— Comentó sarcastico, sentandose en uno de los taburetes, frente al omega— Anda, dime lo que tanto esperabas.
— No te lo diré asi, ni hoy, ni mañana— Respondió, cruzandose de brazos— Cuando recuerdes que soy tu esposo y que somos familia, hablamos, porque se nota que ni tu, ni tu lobo, me consideran su prioridad en estos momentos— Dijo secando sus lagrimas— Ahora vete, tengo trabajo por hacer y no pienso desperdiciar mas tiempo escuchando vagas excusas.
— Pero...
— ¡Vete!
Yuu rara vez se enojaba, y cuando lo hacía, era de las personas que prefería alejarse de los demas y calmarse, porque sabía que no conseguiría nada en un ataque de ira. Ryota lo sabía, pero sentia que si se marchaba, las cosas empeorarían.
Cerró la puerta del estudio, sin dejar de ver como el cuerpo del mas bajo temblaba, seguramente por el llanto. Le dió culpa, estaba dañando a su esposo con algo que se prometió jamas haría ¿Pero que podía decir en aquel momento para arreglar todo?
El tambien estaba dolido, tal vez no lo insulto, pero practicamente dudó de el, de sus sentimientos, ni reconocía que el tambien estaba alejandose. Aun si su lobo le ordenabaa volcer y reconfortar a su omega herido, su lado humano se negaba a ir, no cuando tambien se sentia horrible.
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