Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 85

Capítulo 85:
❝El potencial de dos devastados padres❞

   —Tú…
   —¡Doctor! —interrumpe Naoko, sujetándole el brazo a su marido— ¡Venga rápido! ¡El paciente de la habitación #7 está inestable!
   —Ah, claro… de inmediato.
   Y así ambos se retiran rápidamente. Kana da un largo sorbo a su refresco de fresa.
   —Tu doctor es muy animado, ¿no? —comenta Midoriya.
   —Sí… supongo —murmura.
   —Perdona que siempre diga lo que pienso. Ribbit —habla Tsuyu—. Pero ese hombre… se parece mucho al hombre con el que aparecer en las fotografías que hay en tu habitación, ¿no?
   —¡Ah! Es verdad… se parece a-
   —Se nos hizo tarde —interrumpe Shōta—. La única condición con la que la Academia los dejó venir es que estuviéramos de regreso a las 15:00, ya son las 14:15, si no nos vamos ahora no llegaremos a tiempo. Despídanse de Koenmoku, nos vamos ahora.
   —Ah, que lástima —gruñe Kaminari—. Como sea, fue bueno verte, Moku-chan, ¡espero te recuperes pronto!
   —Cuídate, Koku-chan —sonríe Ōjiro—, ¡regresa pronto a la academia!
   —Esperamos te gusten los dulces que trajimos, Koen-chan —sonríe Satō.
   —¡Descansa mucho! —sugiere Jirō.
   —Te dejaré mis apuntes por si quieres estudiar —indica Yaoyorozu.
   —¡Si necesitas algo puedes llamarnos! —asegura Uraraka.
   Les toma cinco largos minutos, pero por fin se retiran.
   —Volveré de inmediato —avisa Shōta, y le coloca una mano en el cabello—. No quiero que estés sola por mucho tiempo, mucho menos con esos dos merodeando… sé que son tus padres, pero en tu condición actual no es bueno que mantengas contacto con ellos. All Might-san estará aquí en unos minutos… Sabes que puedes confiar en él, ¿no?
   —No te preocupes por mí, estaré bien.
   —Regresaré pronto y veremos como solucionar todo esto, no aflijas.
   Camina a la puerta despreocupadamente. Sabe que su muchacha estará bien.
   —Shōta…
   —¿Sí?
   —Gracias…
   Su rostro y sus ojos se iluminan, sus quebradizos pero recién humectados labios se arquean hacia arriba, aparta el cabello de su cara y esboza una sincera sonrisa, un honesta mueca de felicidad.
   —Gracias por cuidar de mí —habla, con genuina alegría en su voz. No es el típico tono desinteresado y frío, este genera musicalidad y calienta corazones—. ¡Estoy feliz de estar contigo! ¡Gracias por devolverme mi felicidad!
   El frío corazón del pro héroe de bajo mundo da media vuelta.
   Una Kana feliz…
   Sobre ella parecían aparecer letras grandes y doradas que rezaban “Personaje Desbloqueado”.
   Se aleja de la puerta y camina a su protegida para colocar su mano sobre su cabello.
   —Y yo estoy feliz de estar contigo.
   Le da un beso en la frente y finalmente la deja sola.
   Kana mantiene una sonrisa en su rostro.
   Aprovechando su buen humor y tranquilidad a su alrededor decide revisar las dedicatorias de todos los regalos a su alrededor, al menos las que están más cerca, pues sus piernas todavía se sienten adormitadas. La mayoría, tal como pensó, eran de sus compañeros y profesores, algunos eran de pro héroes involucrados, habían un montón de flores y chocolates por parte de los Todoroki.
   Pero hubo una que le llamó más la atención.
   «Ojalá mueras. -Shigaraki Tomura»
   Kana observa con curiosidad las flores. Son comunes, no tienen nada de raro, incluso son bonitas… ¿en serio las envió él? Parece mentira. Debe ser solo para asustarla. Pero no lo logra, de hecho, logra hacerla reír levemente.
   Está abriendo una caja de chocolates cuando la puerta de su habitación suena con dos suave toques.
   Con cierra dificultad, aferrándose a la pared para no caer, camina hasta hasta la puerta y gira el picaporte. Si es alguno de sus padres les cerraría de inmediato…
   Pero el pequeño espacio entre la puerta y la pared revela a los Todoroki. Todoroki Enji y Todoroki Fuyumi específicamente.
   —Buenas tardes —saluda, ofreciendo una gentil sonrisa, abriendo del todo la puerta.
   —Buenas tardes —masculle el flameante héroe.
   —¡Buenas tardes! —sonríe Fuyumi.
   —Por favor, pasen. Está un poco desordenado aquí dentro, ¡pero siéntanse libres de tomar asientos donde quieran! Me alegro mucho de verlos a ambos. Todoroki-san, me alegra saber que está bien. Fuyumi-san, no nos veíamos desde hace mucho tiempo, ¡es bueno saber que estás bien!
   Ambos Todoroki se adentran en la habitación, Kana se sienta en su cama y los observa fijamente.
   —¿Qué los trae por aquí? Si es mi salud lo que les preocupa, estarán felices de saber que estoy bien.
   —De hecho, yo… yo tengo algo que decirte.
   Enji toma un fuerte respiro y cierra sus manos en puños. La cicatriz en su rostro es notoria, pero a ella le gusta bastante; le gusta mucho las cicatrices heroícas.
   —Él quiere agradecerte —completa Fuyumi al ver que su padre es incapaz de expresarse correctamente—. Si no hubieras estado ahí, Moku-chan… él definitivamente estaría muerto.
   —Yo… no soy bueno para expresarme —admite, Enji, fijando sus intensos ojos azules en los ambar de Kana, quien lo observa expectante—. Así que haré esto lo más rápido que pueda —toma un fuerte respiro y se postra en el suelo ante ella, Kana frunce los labios—: infinitas gracias por salvarme. Estaré en deuda eterna contigo. Pídeme lo que quieras y te lo daré.
   «Lo que quiera»
   —No haga eso, por favor —murmura, y se arrodilla frente a él para sujetarle el rostro—. ¡Es usted mi héroe favorito, Todoroki-san! ¡Por favor, tome esto como un agradecimiento por todas las personas que ha salvado! No me debe nada, ni la vida, ni dinero, ni favores… Mientras que usted pueda enmendar sus problemas, y pueda volverse un hombre del que sus hijos estén orgullosos, ¡yo me daré por satisfecha!
   El hombre frunce los labios.
   —Aun si lo pones de esa forma, me siento en deuda eterna contigo. Pídeme cualquier cosa, Koenmoku, y te la daré.
   —No va a aceptar un “no” como respuesta —advierte Fuyumi.
   —Bueno, si ese es el caso… ¡Le pediré un abrazo!
   —¿Ah?
   —¡Un abrazo! —repite, extendiendo sus brazos a los lados, esperando el dicho gesto.
   —¿Me oíste bien? ¡Te daré lo que quieras! ¡Pídeme mi maldita compañia y será tuya!
   —¡Solo quiero un abrazo! —repite, sin bajar los brazos— Eres mi héroe favorito, Endeavor, ¡te admiro desde que soy muy pequeña! Nunca me vi trabajando a tu lado, incluso las veces que me acerqué para pedirte un autográfo te negabas y me rechazabas diciendo que estabas muy ocupado… ¡aun así siempre me pareciste tan genial! ¡Y ahora hasta te salvé la vida! ¡Para mí no hay mejor regalo que ser la heroína de mi héroe! Por eso lo único que te pido es un abrazo.
   —¿Estás segura?
   No…
   —Como nunca lo he estado.
   El héroe suspira con pesar, extiende sus brazos y la atrapa contra su pecho. No está acostumbrado a hacer cosas como esas, pero si eso es lo que quiere su heroína él no va a poner queja alguna.
   Y ella está feliz de recibir ese abrazo.
   Claro que ahora se arrepiente. Le pudo pedir un millón de yenes… ¡tres millones de yenes! ¡Quizás cinco!
   ¡Hasta diez!
   Él mismo lo dijo, ¡le podía dar su compañia entera!
   —Perdona si esto te parece imprudente, pero… no puedo dejar que acabe así.
   —¿A qué se refiere?
   —Por favor, Koenmoku Kana, permite que sea yo quien corra con tus gastos médicos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro