Capítulo 36
Capítulo 36:
❝Nuestra patética muchacha sobre-esforzándose❞
—Kouta... detesta a los héroes, ¿no? —murmura Midoriya.
—No lo culpo —comenta Kana, y coloca un dedo en sus labios mientras sujeta su toalla con una sola mano—. Al principio no lo reconocí, pero este niño es Izumi Kouta, el único hijo de los Water Horse, con quirk de hidrokinesis. Perdieron su vida en su trabajo hace dos años, protegiendo civiles de un villano bastante poderoso. Una muerte digna para dos héroes tan geniales.
—Tú sabes mucho de héroes, ¿no? —señala Pixie Bob, a quien claramente no le agrada mucho la presencia de la copia-quirks.
—Soy fanática.
—Claro, su muerte fue gloriosa para los espectadores —murmura Mandalay, frunciendo los labios—, pero para un niño que apenas entiende todo a su alrededor, para quienes su padre fueron su mundo entero... Ellos "lo dejaron", pero el mundo celebraba a los Water Horse por sus acciones —la heroína suspira fuertemente—. Estoy segura que tampoco le agradamos, pero no tiene otra opción. Para Kouta, los héroes somos criaturas desagradable e incompresibles.
Kana frunce los labios y vuelve puños sus manos. Ella conoce a la perfección esa sensación, pues hace solo unos meses la estaba viviendo en carne propia…
—Como sea, deberían ponerse ropa o Eraser malentenderá toda la situación.
Y así termina el primer día de campamento.
El segundo inicia a las 5:30am.
—Hoy inicia el verdadero entrenamiento —habla Aizawa a sus adormitados alumnos. Kana está flotando, ni siquiera se ha peinado, por lo que su cabello cubre sus ojos. Sus compañeros mantienen distancia pues les recuerda a la antagonista de una historia de terror—. La verdadera intención de todo esto es fortalecer sus quirks para permitirles adquirir una licencia temporal. Para que puedan afrontar verdaderos peligros, para preparar sus corazones y mentes. En tres meses lo único que han ganado es experiencia, y han obtenido crecimiento emocional y técnico. Como sea, apartir de hoy nos encargaremos en mejorar sus quirks, en empujarlos más allá de sus límites, así que no me decepcionen.
Kana finalmente aparta el cabello de su rostro.
La mirada de "padre" e "hija" se encuentran y chocan entre ellos. Y ella sabe que con aquel discurso quiere decir «mucho menos tú, niña».
Y ella piensa que le pondrán uno de los entrenamientos más complicados, que le harán usar cien quirks a la vez, ¡o más! Que la obligarán a convertirse en un Nomu natural hasta que pueda hacerlo sin caer inconsciente.
Pero solo ha estado leyendo comics desde hace horas.
—Oe, ¿por qué mierdas no te estás conviritiendo en un Nomu o algo así? —gruñe Shōta.
—RagDoll me puso a hacer esto —se excusa—. Además, ¿sabías que su quirk tiene un límite de 100 personas? Sin embargo, no puede ver las 100 debilidades a la vez, el límite de debilidades es de 25 a la vez.
—Mira, sé que tu quirk solo sirve si entiendes bien los demás quirks, pero puedes convertirte en un jodido Nomu natural.
—Ellas no lo saben así que no molestes. Estoy estudiando.
—¡Tiger! —llama.
—¿Sí?
—Ka- Koenmoku puede convertirse en un Nomu natural, ayúdale con eso.
—¡RagDoll! Tú eres buena en eso de quirks, ayuda a Koenmoku-san.
—¡De inmediato! —sonríe la entusiasta mujer— Nee, Kanya-chan, yo ya había notado lo de muchos quirks a la vez, pero como la última vez que lo usaste quedaste inconsciente, preferí no sugerirlo. ¡Pero parece que no hay de otra! ¡Saca la bestia terrorífica!
—Si me descontrolo y mato a alguien, háganse cargo —advierte, dejando sus revistas y poniéndose de pie.
Se deshace de la parte superior de su traje y suspira. Recuerda la sensación de frustración que la invadió en el ataque de la U.S.J, e intenta pensar en todos los quirks que conoce.
Grita con fuerza, como si aquello la va a liberar. La gran cantidad de poder empieza a desesperarla, siente todos los quirks activarse a la vez, y seguido siente su cuerpo deformarse violentamente. Lucha por no perder la consciencia, pero tal lucha solo la lleva a asustarse y bloquear la transformación. Cae de rodillas y no escupe, sino que vomita sangre, su nariz y orejas también sangran.
—¡Koenmoku! —exclama Shōta, corriendo a ella al verla en tal mal estado.
—Mierda —susurra ella, con el cuerpo tembloroso.
—Está bien —asegura RagDoll—. Su cuerpo no soportó la tensión, se reventaron algunos vasos dentro de ella, pero no es nada precisamente grave.
—¿Qué pasó?
—El poder es abrumador —murmura, parpadeando con fuerza, como para asegurar que todo a su alrededor es real—. Tantos quirks a la vez... da miedo.
—Bien, escucha, linda gatita —sonríe RagDoll, ayudándola a poner se pie y ofreciéndole una toalla para que se limpie la sangre. Su actitud tan animada y brillante le impiden enojarse por la situación —. El problema aquí fue que tuviste miedo, ¿entiendes? ¡Debes dejarlo salir todo! ¡Sin temor! Si la cosa se pone fea, ¡nosotros te ayudaremos!
—Bien —murmura, terminando de limpiarse—. Aléjate, Aizawa, puedo hacerlo.
Una vez más toma un fuerte respiro. Piensa en todos los quirks que es capaz de recordar en ese momento, y una vez más grita con fuerza. Su cuerpo empieza a deformarse como la última vez, y una vez más lucha por no perder la conciencia mientras lo hace. Sus brazos se tensan, engruesan y endurecen, sus piernas se alargan, su torso también, su boca se agranda y sus dientes se vuelven filosos colmillos, su lengua se alarga de tal forma que sale de su boca. Sus ojos se vuelven grandes y saltones, su cabeza alargada pero no deforme como la de otros Nomus, y su largo cabello flota a su alrededor.
Ruge potentemente. Tal rugido llama la atención de todos los estudiantes.
—¡RagDoll! —exclama Midoriya, dispuesto a saltar a salvarla.
—¡Muy bien, Kanya-chan! —exclama la gatuna heroína. La criatura hace una mueca parecida a la de una sonrisa— ¿Sigues consciente, o eres una marioneta sin voluntad? —Kana extiende sus garras mostrando un solo dedo, intentando dar a entender que es la primera opción— ¿Puedes hablar? —ella niega con la cabeza— Como sea, ¡lo hiciste muy bien! Ahora destransfórmate y descansa.
La bestia desaparece y vuelve a ser Kana, quien una vez más cae de rodillas y vuelve a escupir grandes cantidades de sangre, sus ojos se encuentran inyectados en líquido carmesí, sus orejas sangran, su nariz y sus encías también.
—¡Kana! —se horroriza Aizawa.
—¡Koen-san!—exclama Midoriya, corriendo a ella.
—Estoy bien —susurra ella, incapaz de levantar la voz más allá de eso. Trata ponerse de pie para incorporarse colocando sus manos como apoyo, pero sus brazos le fallan y vuelve a caer al piso, golpeándose la barbilla.
—No pareces muy bien —murmura él, y se coloca uno de sus brazos sobre su hombro para ayudarla a ponerse de pie, Eraserhead hace lo mismo con el otro brazo.
—RagDoll, no creo que practicar así sea seguro para ella —habla el responsable de la idea.
—No —lo detiene Kana, empujándolos con la poca fuerza que tiene, y tambaleándose para mantenerse de pie. Se limpia la sangre del rostro y suspira fuertemente—. Estoy bien. Lo haré otra vez, y luego otra, hasta que yo... —la vista se le nubla— Hasta que yo...
Pero cae inconsciente antes de terminar su monólogo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro