Capítulo 31:
❝Kana, la detective. Parte 5❞

　　　Una vez mejor salió de la enfermería.
　　　Mientras caminaba a los vestidores para colocarse su uniforme, se encontró con Midoriya Izuku, quien seguramente iba a la sala de descanso. Ante esto, se vuelve invisible y lo sigue, esperando que sus tacones no hagan ruido, los pidió con pequeñas almohadillas que bloqueen el sonido al caminar, pero no ha tenido oportunidad de comprobarlo.
　　　Entra junto a él y observa la sala; será cuestión de ella, pero el aire se siente más pesado, la tensión se puede cortar con un cuchillo. All Might se encuentra en su forma delgada y demacrada de la última vez.
　　　—Cierra la puerta —indica el héroe. Midoriya se sienta frente a él.
　　　Kana se acomoda en una esquina, y la charla empieza.
　　　—El Asesino de Héroes lamió tu sangre, ¿no? ¿Recuerdas lo que te dije cuando te concedí este poder?
　　　—«Come esto» —Kana se cubre la boca para no reír.
　　　—¡No, eso no! —exclama— Sino «no importa cómo, siempre y cuando obtengas mi ADN».
　　　«Un poder heredado» recuerda Kana. «Eso quiere decir que no es su hijo, si lo fuera no hubiera necesidad de que… ‹comiera eso›» piensa unos momentos más. «Espera, ¿qué comió?». Pero prefiere dejar de preguntarse eso o terminará teniendo ideas erroneas de toda la situación.
　　　—El One For All no se transmite a otro a menos que el dueño lo desee —explica—, así que no puede ser robado a la fuerza, ¡pero sí transmitido a la fuerza! Es un quirk especial… y lo mismo para su origen. El One For All se deriva de un quirk diferente que ha existido desde el inicio de los quirks…
　　　Kana reza todo lo que sabe y a todos los dioses que conoce por que la historia no dure más de treinta minutos, o estará en problemas.
　　　—All For One, el quirk que roba el quirk de otros y los hace suyos.
　　　“Como mi quirk” piensa.
　　　—Como el quirk de Koen-san —comenta acertadamente Midoriya.
　　　—No. La joven Koenmoku imita quirks. All For One los roba, los arrebata. Y, además, tiene el poder de transferirlos a otros.
　　　“El quirk de transferir quirks” murmura Kana, y piensa que puede ser bastante útil.
　　　—Inició en el comienzo del fenómeno, con una sociedad no adaptada al cambio. Durante un tiempo de desorden y descontrol, en que nadie sabía que hacer; en ese entonces creció una figura que reunió a las personas. Él robaba los quirks de otros, y gracias a su poder, su influencia se esparció rápidamente por todo el país. Movió las masas y tomó control de Japón en menos de un parpadeo.
　　　Kana recuerda haber leído de un quirk así. Pero a causa de la falta de información y lo peligroso que le parecía, prefirió nunca copiarlo.
　　　—¿Cómo todo esto está conectado al One For All?
　　　—El All For One también puede conceder quirks. Es solo que los cuerpos de aquellos a los que se transferían no aguantaban la presión, y muchos se volvieron muñecos sin habla. Justo como Nomu. También habían casos en que los quirks se unían y mutaban juntos.
　　　“Genial”.
　　　—El hombre del que hablamos tenía un hermano menor sin quirk, pequeño y frágil, ¡pero con un gran sentido de la justicia! Las acciones de su hermano hicieron eco en él, y se opuso totalmente. El hombre entregó a su hermano un quirk que amontonaba poder, no se sabe si lo hizo por amabilidad o para controlarlo.
　　　—Imposible…
　　　“¡Asombroso!”
　　　—Sí, el que se creía sin quirk de hecho ya tenía uno, ¡el inútil quirk de transferir su quirk a otros! Y entonces, el quirk de amontonar poder, y el quirk de pasarse a otros se unieron. ¡Y ese es el origen del One For All!
　　　El silencio es total. Kana se cubre la boca para no chillar de la emoción, aquella historia la exalta enormemente.
　　　—La justicia siempre nace de las entrañas del mal.
　　　—N-No, espera, yo… entiendo como nació… pero…
　　　Kana escucha atentamente el resto de la conversación. Un escalofrío le recorre el cuerpo entero mientras escucha el gran alcance del All For One, y como el One For All se ha transferido de persona en persona.
　　　—Tú también tendrás que enfrentar a ese hombre… a esa gran maldad.
　　　Silencio una vez más.
　　　—Temo que es demasiado para-
　　　—¡Daré lo mejor de mí! ¡Siempre que te tenga a mi lado, podré hacerlo!
　　　Por la expresión de All Might y la forma y lo tenso que se mira, es fácil para Kana deducir que para cuando ese momento llegue…
　　　—Gracias.
　　　Él no va a estar ahí.
　　　Intercambian unas palabras más, y Midoriya finalmente se retira. Kana se ve incapaz de moverse, pero debe hacerlo pues solo le quedan dos o tres minutos de invisibilidad.
　　　—Joven Koenmoku…
　　　Su cuerpo se tensa violentamente. Se pone de pie y se dispone a salir de ahí sin llamar más la atención.
　　　—Sé que estás ahí. Te vi seguirnos la última vez.
　　　—Mierda —susurra, y desactiva su quirk. De inmediato se inclina ante él—. ¡Perdone mi imprudencia! Sé que no debí espiar de esta forma, pero le pido no se aflija, su información está a salvo conmigo. ¡La protegeré con mi vida!
　　　—Dejé que escucharas la historia por una razón —habla, poniéndose de pie e indicándole erguirse.
　　　—¿Lo hizo? —susurra ella, viendo directo al brillo azul que resalta de toda la demacrada apariencia del héroe.
　　　—Lo sabes, ¿no? Lo que le quise decir al joven Midoriya…
　　　—Sí —susurra una vez más, bajando la mirada—. Usted… morirá.
　　　—Es lo más probable. Pero el joven Midoriya necesita un apoyo, y ahora mismo no puedo confiar en nadie más que en ti. Tu discreción e inteligencia le podrían beneficiar más de lo que crees. Por eso te pido, si algo llega a pasarme, encárgate de él.
　　　Ella toma un fuerte respiro. Le están dejando una fuerte responsabilidad, pero para que el Símbolo de la Paz confíe tal tarea en ella debe ser por alguna razón extraordinaria que sobrepasa su entendimiento…
　　　—Sí, All Might —acepta, asintiendo firmemente, presionando sus manos en puños. Aun si le ha confiado tal deber nada más por ser la única que sabe de su secreto, ¡piensa dar lo mejor de si!—. ¡Estaré aquí para brindarle a Midoriya el apoyo que necesita!
　　　—Muchas gracias.
　　　—Pero, respecto a su quirk —saca su libreta y su bolígrafo—, ¿le molestaría comentarme acerca de su forma músculosa un poco? Porque, verá, yo-
　　　—Vete a clases, Koenmoku.