No pudo resistir sus impulsos, el placer que le estaba dando Chanyeol era tan bueno que no pudo evitar rasguñar su espalda.

—Nada de marcas—. Gruño el alto alejándole las manos.

—No lo notará.

Su amante pareció molestarse pues detuvo las embestidas, pero BaekHyun no estaba dispuesto a que eso parara. Logró posicionarse encima de él y comenzó a mover sus caderas, justo como sabía le gustaban.

—Demonios—. Dijo tomándolo de la cintura para ayudarlo en los movimientos.

Era Bien sabido que Chanyeol no tenía mucho autocontrol.

A BaekHyun le molestaba una cosa de su amante; no tenía autocontrol y después se inundaba de sentimientos de culpa. Justo como lo estaba haciendo ahora, en cuanto se recuperó, comenzó a vestirse.

—¿Hasta cuando vas a hacer esto?

—No empieces BaekHyun, ya te dije que no puedo pedirle el divorcio.

—No me importa si estás casado o soltero—se paro frente a él sin importarle su desnudes.— Me estás usando.

—Por Dios, vístete—. Se tapo los ojos.

—No te hagas el inocente, no solo me has visto desnudo, has besado, chupado, lamido y mordido todo mi cuerpo, solo estás en la fase de culpa.

Ya estaba enojado, así que comenzó a vestirse.

—Lo que hacemos está mal.

—¡Claro! Esta mal ahora que terminaste de saciarte, pero no está mal cuando me penetras ¿verdad? Eso no está mal.

—BaekHyun—. Suspiro sobándose la cíen.

—¡Cállate! No quiero escucharte.

—No empieces con tus berrinchitos.

—¿Berrinches? Por supuesto, como solo me ves como un pedazo de carne al cual puedes cogerte cuando te dé la gana, ahora es un berrinche.

—¿A donde vas?

—A donde sea donde no estes.

Salió azotando la puerta del motel. Chanyeol no le dio importancia, sabía que cuando se le bajara el capricho volvería a provocarlo.

👄

BaekHyun era joven, como cualquiera, energético y que todos los fines de semana iba alguna fiesta. Tenía una buena vida y no dejaría que el imbécil de su amante la arruinara. Tenía apenas veintitrés años y era físicamente atractivo, por eso se dirigió a aquel bar-club donde solía asistir.

—Uh alguien viene de malas—. Pronunció su amigo SeHun al verlo tomarse dos shots sin siquiera respirar.

—Cállate.

—Me lo confirmas—. Miro hacia la pista de baile.

—Solo quiero divertirme esta noche, ¿comprendes?

—Me supongo traes condones.

—Carajo, los olvidé.

—Yo tengo— busco en su bolsillo y le dio un par. —Úsalos correctamente.

—Lo haré SeHun.

BaekHyun metió los condones en su propio bolsillo y se adentró a la pista de baile, el alcohol en sus venas ya estaba haciendo efecto, era hora de divertirse un poco. Llevaba puesto un pantalón negro de cuero y una camisa que dejaba ver parte de su pecho, sin mencionar que se colocó un poco de maquillaje. No tardo mucho en sentir las manos de Lucas sobre su cintura.

—¿Hoy me dejarás bailar contigo?

BaekHyun sonrió y se giró para verlo.

—Sí te portas bien quizás hasta te dejo hacer más cosas—. Le guiño el ojo.

—¿Cómo que?

BaekHyun se pego a su cuerpo y rodeó su cuello con sus brazos acercándolo a sus labios.

—Lo dejare a tu imaginación.

Susurro antes de besarlo y meterle la lengua hasta la garganta. Quería quitarse el olor de Chanyeol.

👄

Cuando llegó a su departamento, tambaleándose en un intento desesperado de estar de pie, Chanyeol ya lo esperaba en la sala.

—Carajo, pareces mi mamá.

—Pues casi lo soy, BaekHyun—gruño. —¿Dónde estabas?

—Con mi novio—río buscando su habitación. —¿No deberías estar en casa con tu esposa?

—Estas borracho, tu no puedes tener novio.

—Déjame ver si entendí—se paró derecho.—Yo no puedo tener novio ¿pero tú si puedes tener esposa? ¡Cuánta justicia!

Puede que estuviera borracho, pero la rabia y el orgullo le ganaban al alcohol. Chanyeol no era tonto, sabía que BaekHyun se había acostado con alguien más, lo sabía por las marcas que evidentemente él no dejó, por su ropa desarreglada, su maquillaje corrido y la colonia de otro.

—Apestas a puta barata—. Se quejó tratando de tomarlo y llevarlo al baño.

—Barata no, yo cobro bien ¿o es que a ti te salió barato este departamento?

—¡Ya basta!

—¡Cállate! Tengo migraña y no estoy para tus reclamos, por algo me salí de casa ¿o crees que solo fue por ti? Agh, hazme un favor y vete con tu esposa de una vez, debe estar muy preocupada.

Rodó los ojos antes de encerrarse en su habitación. Su madre lo martirizaba con sus constantes reclamos cuando salía de fiesta, esa fue una de las razones por las que se salió de su casa, y claro que Chanyeol no dejaría que su bebé deambulara por las calles. Por supuesto que no, así que Chanyeol le compro aquel departamento acomodado en una buena zona, cerca del campus universitario, cerca de sus amigos, y sobre todo lejos de su esposa.

Era un departamento bastante lujoso, era amplio, de pisos de madera fina, grandes ventanales con hermosas vistas, paredes en tono blanco y con lo último de tecnología e innovaciones en casi todos los artículos que poseía. Es ahí donde se encontraban casi a diario para satisfacer las necesidades del otro, aunque había ocasiones donde Chanyeol era tan desesperado que lo citaba al motel más cercano, como había ocurrido esa mañana.

Aunque ciertamente le molestaba mucho la actitud del alto, BaekHyun también era un poco inconsciente, desde un principio sabía que no debía involucrarse con un hombre casado, mucho menos con Chanyeol, pero no podía evitarlo, no cuando parecían estar creados el uno para el otro. Cuando su relación ya estaba más que enredada, BaekHyun trato de librarse, enserio trato de alejarse, pero nada le funcionaba, ni siquiera tener otras relaciones, incluso cuando se enojaba con su amante y BaekHyun se metía en la cama de otros, siempre pensaba en Chanyeol y regresaba como perrito faldero a sus brazos.

Se encerró en la habitación, con demasiada pereza como para bañarse o siquiera cambiarse de ropa. Escucho cuando Chanyeol se fue azotando la puerta, y solo pudo cerrar los ojos para dormir.

Ser amante era muy cansado.

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Diciembre 2020, tal vez más.

Decidí comenzar a publicar esta historia que tenía olvidada, es un poco corta y tal vez tarde un poquito en actualizar pues estoy en cierre de inter-semestral y es bastante pesado, por ello, dejaré esta pequeña historia con la esperanza de animarme con sus bonitos comentarios.

Un mes se vacaciones antes de un último semestre pesado y saturado, daré lo mejor de mí para seguir dándoles calidad, y si me apoyan siguiéndome, me anima aún más a seguir escribiendo ♥

Hasta aquí fue,

JHS.