Pequeño OS utilizando a Mikey manila porque lo amo mucho.

Personajes propiedad de Tokyo Revengers con ayuda de la canción de Adele "Make you feel my love" (oirla para más placer)

El shipp sin duda es MiTake.

No espero sea leído, simplemente escribo para desahogarme; algo soft, bonito, parece haber salido esta ocasión.

La portada es del cap. 118.
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¡Es un sueño, es un sueño!

Pensaba. Necesitaba que lo fuera, un cruel sueño. Su mayor pesadilla.

Manjirou no comprendía que sucedía, solo se veía a él mismo sobre aquel chico. Golpe tras golpe, arremetiendo vigorosamente contra el dulce rostro sin control alguno.

- ¡Detente, por favor, basta!- Gritaba el azabache a su versión rubia y desenfrenada. Y en apenas un susurro, añade- Es...Takemitchy...

Siente como el pánico y la furia toman control de él, con su pulso acelerado y los puños apretados con bastante fuerza; la frustración al límite pues no es capaz de hacer algo para evitar aquello, solo puede ser parte del público.

Hasta que escucha algo, una melodía lejana resuena. Poco a poco adquiere mayor fuerza y su atención se enfoca en buscar su origen mientras comienza a distinguir también una voz, alguien canta.

"Cuando la lluvia sopla en tu rostro y el mundo entero está criticándote..."

Manjirou sigue buscando...

"Cuando las sombras de la tarde y las estrellas aparecen y no hay nadie para secar tus lagrimas..."

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*En otro sitio lejos de Mikey, alguien recibe una llamada*

- ¿Bueno?- responde, aún adormilado.

Al otro lado de la línea, la voz de una mujer contesta- Buenas noches, disculpe la molestia, pero ha surgido algo y requerimos su ayuda. ¿Podría venir?

El sueño parece disiparse por completo y se pone alerta, sabe lo que esas palabras significan- En un momento estaré ahí- dice y finaliza la llamada.

Se apresura en ponerse unos tenis y toma la chamarra que dejó en una silla. Quiere llegar cuanto antes, así que por último agarra sus llaves y sale disparado.

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Mikey sigue perdido, pero la voz va adquiriendo fuerza.

"Pero jamás te haría daño, lo supe desde el momento en que nos conocimos..."

Mikey intenta aferrarse al sonido de esa voz, aún no logra reconocer lo que sucede pero de alguna forma escuchar eso le reconforta. No quiere dejar de oír.

"Pasaría hambre, iría de negro y azul, me arrastraría por la avenida..."

Su cuerpo esta temblando. Sigue algo ansioso pero su mente se ha ido nublando lentamente; aquella escena se había ido, dejando en su lugar solo un inmenso espacio blanco y la voz resonante.

"Las tormentas se desatan en el mar enfurecido y en la autopista del arrepentimiento...."

¿Por qué comienza a sentir tanta paz? Lágrimas se abren paso, van rodando por sus mejillas y se deja caer al piso.

"Los vientos del cambio soplan salvajes y libres, pero aún no has conocido a alguien como yo"

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- ¡Llegué!- Grita una vez que esta cerca de la recepción. Se toma un momento para respirar ya que venía corriendo, su casa se localiza relativamente cerca del lugar- ¿Qué ha sucedido?

- Señor Hanagaki- Interrumpe otra mujer que se encuentra en el escritorio adyacente- ha tenido una crisis nuevamente- hace una pequeña pausa, el pelinegro asiente para que continúe- hemos intentado tranquilizarle, pero usted sabe...nada parece ayudarle más que escuchar su voz.

- Lléveme con él, por favor- Takemichi da una pequeña sonrisa a la doctora mientras se acerca lentamente para darle un abrazo. Se conocen hace un tiempo pues es quien se a hecho cargo del tratamiento de su pareja.

Comienzan a dirigirse a la habitación; ya sabe lo que pasa, no es la primera vez que le llaman.

Takemichi al fin alcanzó un futuro donde podían ser felices.

A su vez, logró admitir los sentimientos que guardaba por su ex líder. Ambos formalizaron su relación, recibiendo el apoyo de todos; hasta de Hina, quién ya guardaba sus sospechas.

Aún así, claro que les había pasado factura todo lo acontecido. Manjirou se hallaba internado en un hospital psiquiátrico debido a las pesadillas de todo lo que había hecho...los recuerdos de esos días iban y venían.

Takemichi entendía, pasó por lo mismo luego de...bueno, tantos saltos en el tiempo. Sin embargo, se había recuperado bastante bien y seguía asistiendo a terapia, solo faltaba él.

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"Podría hacerte feliz, hacer tus sueños realidad.."

Manjirou va reaccionando, esa es la voz de su Mitchy. Lo sabe, al fin va cobrando sentido; esa es su canción, la que le dedicó una vez se confesaron en el santuario.

"No hay nada que no haría, iría al fin del mundo por ti..."

Espabila. Se encuentra en los brazos de su amado, sus ojos se fijan en aquel azul tan bello y que le miran llenos de ternura mientras continúa su canto.

"Para hacerte sentir mi amor"

Takemichi le sonríe. ¡Oh, esa sonrisa!

- Mitchy, estás aquí...- Mikey posa una de sus manos en el rostro del contrario acercando sus frentes- perdón, perdón, ¡no quería hacerte venir!

- Manjirou- su voz es firme, sí, pero con un toque cargado de amor- ¿por qué me pides perdón? He prometido cuidarte. Estoy aquí para ti.

- Tenía miedo... yo... no puedo...- solloza e intenta ocultar su rostro. Se da cuenta que se encuentra empapado en sudor gracias al escalofrío que recorre su cuerpo y siente aún mas vergüenza- de ver...

Takemichi no lo deja finalizar la oración, planta un beso en sus labios y es suficiente para que Mikey afiance su agarre a él mientras las lágrimas salen sin parar. Le abraza entonces fuertemente. Quiere hacerle sentir que nada va a pasarle y que comprende.

Se quedan así un largo tiempo hasta quedar dormidos; en ningún momento se sueltan.

Al amanecer, la doctora vuelve y los ve acurrucados. Ya saben en el hospital que en una crisis tan fuerte de Manjirou lo único que realmente le calma es escuchar a Takemichi cantarle esa canción tan apacible; la mente y corazón de su paciente se apacigua.

Gracias a ello y al tratamiento psiquiátrico, estas crisis han bajado notoriamente. No del todo, pero la mejoría es factible, van avanzando. Asimismo, las visitas de su familia y amigos son un pilar importante que rinde frutos para que siga adelante.

Takemichi despierta después de un rato y va reincorporándose, es feliz de tener a Mikey de esta forma; él espera con ansias a que le den de alta un día de estos para que regresen juntos a su hogar. Mientras tanto, seguirá llendo a cantarle cuando sea necesario.

Por ahora saldrá un momento para llamar a Emma y Shinichiro, deben estar al tanto para que igualmente avisen a los demás.

Aprovechará también para comprar un par de Taiyakis, no puede regresar con las manos vacías ¿cierto?