Katerina...

Hemos estado viviendo en París y todo está muy bien de alguna forma Elijah y yo somos una pequeña familia, decidimos casarnos y hacer algo muy pequeño solo el y yo jurando nuestro amor, no tenemos a nadie a quien invitar aparte de algunos amigos que hemos hecho en este tiempo.

Será algo muy sencillo pero lo importante es que estamos felices, estuve viendo mi vestido y me encantó es uno bastante sencillo no era muy voluminoso ni extravagante, pero Elijah llegó.

--Amor mío tengo una novedad-el me mira desde la puerta.

-Que pasa, es klaus? Nos tenemos que ir?-

-No, tranquila no es nada de eso solo quería decirte que daremos una fiesta por nuestro matrimonio.-

-Pero... Pensé que querías algo pequeño.-

-En un principio pensé que mi familia no estará ni la tuya y que no tenemos muchas amistades pero he decidido que sea abierta al público todo el que desee venir a nuestra boda será bien venido.-

-Porque el cambio de parecer la verdad no sé si quiero que sea muy grande, solo tu y yo.-

-En mi familia tenemos la costumbre de hacer las mejores fiestas y celebraciones y aunque no esté con mis hermanos no voy a dejar mis costumbres.-

-Prefiero que sea algo pequeño no quiero a mucha gente, esto tiene que ser algo solo de nosotros.-

-Bien que te parece si nos casamos solos y después damos la fiesta para que nuestra unió sea privada.-

-Me parece bien pero ahora debo buscar otro vestido para la fiesta.-

-En mi despacho hay dinero compra lo que quieras mientras yo veo los preparativos.- el dejo un beso en mi cabeza antes de irme.-

La boda es en muy poco tiempo y no se si vaya a encontrar a un sastre capas de hacerme un vestido en menos de tres días, salí a buscará a mi sastre mágico y lo encontré aunque fue más la magia de la hipnosis lo que lo ayudara a hacerlo.

La unió de los dos vampiros está a horas de comenzar Katerina extraña a su familia y a aquella niña que dió a luz quisiera tenerlos a todos ellos con ella pero sabe que eso es imposible, hace tiempo le hablo a Elijah de su hija aunque no le a dicho directamente que quiere encontrarla no sabes si eso le vaya a gustar.

Las sirvientas la preparan, la visiten maquillan y peinan para su día quiere sentirse feliz pero no puede guarda mucho dolor en su corazón sus últimas esperanzas de ser feliz son Elijah y encontrar a su hija.

-Señorita Katerina se ve muy hermosa, pero porque está triste.-pregunta la esclava.

-Mi familia no estará aquí conmigo, me hubiera gustado que mi padre me llevará hasta el altar pero tendré que caminar yo sola.-

-Lo siento mucho señorita pero se casa con un buen hombre, uno que la ama.-

Las palabras de la chica le dan un poco de aliento y decide ser positiva, está por salir pero Andreu llega y la mira feliz, Andreu es el panadero que se ha hecho gran amigo de ambos vampiros en especial de Katerina.

-Niña porque esas lágrimas -dice abrazándola.

-Como quisiera que mis padres estuvieran aquí, voy a estar sola.-

-Escucha se que nos acabamos de conocer pero puedo llevarte con tu esposo, del brazo como lo haría tu padre.-

Ella asiente feliz pues le tiene cariño al viejo pandero, ya es hora de que vaya a la iglesia Elijah la espera, Andreu le ofrece la mano y ella la toma, la lleva hasta la iglesia donde hasta el fondo puede ver al padre y a Elijah. Hay poca gente tal ves unas cinco personas contando a Andreu.

Camina por la iglesia hasta llegara al altar donde Elijah la recibe, Andreu toma asiento y la mira feliz, el padre comienza a hablar y ambos vampiros se ven a los ojos, ambos ojos marrones entrelazados felices porque sus dueños estarán juntos por muchos años.

El padre sigue su discurso hasta que llega a la parte donde le hacé prometer a Elijah su amor y lealtad a Katerina.

-Lo juro -dice sin quitarle la mirada a la morocha que tanto ama.

-Y usted Katerina acepta casarse con el señor Elijah Mikaelson, jura amarlo respetarlo y cuidarlos en las buenas y en las malas, en la riqueza y en la enfermedad.-

-lo juro.-

Después de algunos votos por fin llega la parte en al que aceptan unirse en matrimonio y ambos aceptan, sellan su matrimonio con un beso y sus corazones por fin en mucho tiempo son felices.

La fiesta que Elijah organizo es hermosa la gente se divierte y el baila con su amada, la música es alegre y todo mundo se está divirtiendo.

-Te ves muy hermosa.-

-Tu también te ves apuesto.-

-No puedo esperar para quitarte ese vestido.-

La pareja baila hasta que algo o alguien llama la atención del original. Entre la gente logra ver una cara que le resulta conocida, es klaus. En cuanto se da cuenta de que es su hermano se le eriza la piel, klaus solo los observa con una sonrisa.

Al darse cuenta de esto se queda parado causando que Katerina lo vea preocupada.

-Hay que irnos de aquí.- le dice sin dejar de ver a klaus que lo saluda con una sonrisita.

-Que sucede porque hay que irnos?-

-Mira hacia la mesa de licores.-

La morena hace lo que le dice y ahí ve al híbrido parado viéndolos con una sonrisa que le causa escalofríos. Elijah la toma d ella mano y comienzan a caminar entre la gente para poder salir de ahí, lo logran y tratan de correr pero antes de que lo hagan tienen a klaus enfrente.

-Que lindo los recién casados, vengo a darles mis felicitaciones y mejores deseos.-

Ambos lo miran asustados pues saben bien de lo que es capaz el híbrido, Elijah pone a Katerina atrás de él en seña de que no está dispuesto a dejar que la lastimé.

-Creiste que soy estúpido, que no te iba a encontrar sabía bien que me dejaste por esta zorra y que la ayudaste a escapar.- el se les acerca con pasos fuertes y lentos.

-Niklaus déjala ir ponme la daga si quieres, si eso te hará sentir mejor pero déjala.-

-Sabes que no, la quiero muerta.-

El híbrido se abalanza sobre su hermano y Katerina pero Elijah no lo deja acercarse a ella y una pelea comienza entre ambos hermanos.

-PUDE AVER ROTO LA MALDICIÓN!!!-

-No vas a cambiar con eso niklaus no dejaras nada con romperla, no cambiarás el pasado y lo que eres.-

Klaus logra empujar a su hermano e ir por Katerina, la tumba al suelo y comienza a meter su mano en su pecho tratando de alcanzar el corazón de la morena pero Elijah se lo quita de encima y lo retiene contra una pared.

-Katerina! Corre!!-

La morena se levanta a como puede y correr hacía el bosque, huye lo más lejos que puede y se deja caer, toma aire y toca su pecho que está bañado en sangre.

Se arrastra y se recuesta en un árbol, tiene miedo, miedo de que klaus la mate y le haga daño a Elijah, trata de calmarse respirando profundo y viendo hacia el cielo, pide que Elijah este bien, escucha pasos en el bosque y con miedo de que sea el híbrido toma una rama para defenderse. Pero se calma al ver que es Elijah, corre hacia el y lo abraza.

-Ahh eres tu-ella lo abraza con fuerza y aún con mucho miedo.

-Shuu ya aquí estoy el no te va a hacer daño, yo te cuido.-

Los brazos y palabras del original la calaman pero no quiere apartarse de él, tiene miedo Elijah es lo único que le queda y tiene miedo a perderlo.

-Hay que irnos amor mío le rompí el cuello pero no tarda en despertar, hay que irnos antes de que lo haga.-

La tomo de la manos y comenzaron a adentrarse en el bosque para alejarse de ahí lo más antes posible y lo más lejos que puedan, Elijah no piensa volver a ser el cómplice de klaus, no quiere seguir aguantando lo y no piensa dejarla que toque a Katerina aún así de su vida y libertad por ella.

Elijah....

Después de lo que pasó con klaus tuvimos que huir a Eslovaquia ahora logramos un poco de tranquilidad, tenemos una casa y estamos bien, no se por cuánto tiempo solo espero que niklaus no nos encuentre.

Le di mi palabra a Katerina de que buscaría la manera de que sea madre, quiero intentar con la magia, se que la magia ya me a metido en problemas pero quiero arriesgarme por su felicidad y la mía porque también me aria feliz poder tener una familia propia.

Cuando llegamos a Eslovaquia supe de una bruja eslovaca que segunda algunos aldeanos hace milagros, no creo en los milagros pero si en la magia así que me di la tarea de ir con ella, obtuve su dirección y al llegara me encontré con una cabaña en el bosque toque a su puerta y una vieja vos me respondió.

-Entra está abierta.-

Al entrar me encontré con una mujer anciana sentada enfrente de algún tipo de altar, adentro de la cabaña habían muchas hierbas y objetos extraños pero eso es común en las brujas.

-Sientese joven... Si así se le puede llamar a un hombre como usted.-

-Creo que sabe bien lo que soy.-

-Dime vampiro que te trae por aquí.-

-Me acabo de casar y mi esposa y yo queremos terne hijos o almenos uno, pero creó que usted sabe bien que los vampiros no podemos tener descendencia.-

La mujer se quedó callada por unos segundos antes de mirarme con atención.

-Mmm dos vampiros que desean ser padres.-

Me pareció extraño que dijera vampiros, nunca le dije que Katerina lo es.

-Puedo ayudarte pero necesito tu ayuda, la pócima que te prepare necesita ingredientes peculiares, debes conseguirlo y te aseguro que pronto tendrás un hijo.-

-Que ingredientes son, dígamelos y yo se los traeré.-

-Necesito los cabellos de un bebé, sangre de cordero, las ojas de un Olmo blanco, tierra de cosecha y sangre vírgen, la sangre de una doncella pura una que nunca haya sido tocada por un hombre y tú y tu esposa tendrán el bebé más hermoso que puedan imaginar.-

-Que quiere acambio, ustedes siempre piden algo a cambio.-

-Los años te favorecen, quiero un poco de la pocion que te voy a preparar.-

-Porque una anciana como usted quiere eso y porque no me pide riqueza o otras cosas.-

-No soy como las otras brujas, ya estoy vieja y no puedo buscar los ingredientes para mis pociones tráeme eso y tendrás a tu hijo-

-Bien le traeré lo que pide.-

-Espera vampiro como buena bruja debo advertirte de lo que estás apunto de hacer la magia es engañosa puede traer consecuencias y problemas, estás seguro a los que te quieres arriesgar.-

Me quedé pensando por unos segundos pero soy el tipo de hombre que por amor se arriesga a todo.

-Estoy dispuesto a correr el peligro.-