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Katerine espera en casa se la vampira Russe solo quiere que Elijah llegué por ella y puedan escapar lejos donde klaus no los encuentre, ruega que klaus no lo lastime..

—Que esperas Katerina, crees que vas a vivir un cuento de hadas con el, mejor huye lejos alejate de el, vas a sufrir con elijah.—

—Lo amo Russe y estoy dispuesta a todo por el.—

—Incluso a morir en manos de klaus.—

—No, no estoy dispuesta a morir ni por el ni por nadie.— ella mira molesta a la vampira ama a Elijah y moriría por el pero no por klaus.

La espera le parece eterna el no llega y teme que no lo haga, solo quiere huir lejos con el pero debe esperarlo, no piensa irse sin el.

En el castillo Elijah busca la manera de decirle a niklaus que ya no podrá usará a Katerina para el ritual, espera a su hermano en el despecho y sabe cómo va a reaccionar, después de una espera niklaus entra como siempre de mal genio.

—Dime que la encontraste.—

—Si pero ya no podrás usarla niklaus se ha convertido en vampiro y a huido.—

Klaus lo mira por unos segundos antes de explotar.

—COMO PUDISTE DEJAR QUE ESCAPARA!!! Cómo una simple humana pudo escapar de tus manos.—

—No lo sé klaus fue astuta.—

Klaus molesto toma la daga y se abalanza sobre el para intentar ponersela pero no lo logra ya que Elijah lo empuja y evita que este le clavé aquella daga.

—Ni lo pienses niklaus, no voy a dejar que ninguna daga vuelva a tocar mi pecho.— el mira retador a si hermano.

—No Elijah esto amerita la daga, la dejaste escapar.—

—Conseguire otro doppelganger para ti.—

—Si claro dentro de quinientos años. Al menos le di su merecido a esa perra.—

—Que hiciste niklaus.— el vampiro mira a su hermano con el entrecejo fruncido.

El sale de la habitación molesto y Elijah aprovecha para salir del castillo y poder buscar a Katerina, llega hasta la choza de la vampira Rousse pero al llegar se encuentra con que ella no está ahí.

—Donde está katerina.—

—Salio dijo que volvería pero antes tenía que ver a su familia.—

Sin contestarle sale de la casa y va a buscarla a casa de sus padres, cada paso que da le parece eterno solo quiere encontrarla y huir lo antes posible, al llegar a la casa la encuentra tirada en un mar de llanto justo al lado de su familia sin vida.

El la mira con pena pues está muy efectada por la muerte de su familia, a eso se refería klaus cuando dijo que le dio su merecido. Se acercó a ella y se sentó a su lado para abrazarla.

—Fue el yo lo sé cómo no pudo matarme mato a mi familia, a mi hermana a mi madre y a mi padre. Nunca debí irme debí dejar que me matará, mi familia no estaría muerta.—

—Me tienes a mi Katerina yo nunca voy a dejarte sola, siempre te voy a proteger nunca estarás sola conmigo, jamás voy a dejara que te hagan daño te doy mi palabra.—

Ella lo abrazo su padre y madre le hicieron daño al quitarle a su hija pero aún así los amaba y se siente destrozada y con mucho odio hacia el hermano del hombre que ama.

—Hay que irnos niklaus está hecho una furia y debe estar buscándote.—

Ella asiente y se levanta lo abraza aunque en el fondo hasta a él lo odia su dolor es demasiado pero debe ser fuerte. El levanta su cara con sus manos y la mira a los ojos antes de dejar un beso en su cabeza.

—Juntos amor mío.—

—Hasta el final de los siglos.—

Katerina...

El viaje me pareció eterno, viajamos durante días pero al fin estamos en París sin más nada que nuestra ropa pero juntos, Elijah me dijo que conseguiría una casa y que aquí podríamos estar mientras niklaus no nos encuentre.

El se fue y me dejó en una panadería donde me quedé esperándolo, mientras regresaba decidí observa un poco París, es muy bonita las calles están llenas de casa hermosas y hay muchos vendedores, me estaba preocupado porque no volvía pero al fin lo hizo y pude estar tranquila.

—Vamos encontré una casa.— el me extiende su mano y la tomo.

Me llevo hasta una bella casa que parecía un castillo, entramos y le di un vistazo era muy hermosa después fuimos a ver las habitaciones.

—Esta será la nuestra o no se si prefieres dormir sola.—

—No, está bien lo que menos quiero es estar sola.— entre a la habitación que parece ser la principal.

—Conseguire dinero para que compres ropa y estés cómoda.—

Observé todo y me fijé en el baño, moría por darme una ducha.

—Voy a prepararme un baño muero por uno, tu no.—

—Si pero tengo cosas que hacer y hay varios sirvientes para que te ayuden.—

—No te vayas acabamos de llegar relájate un poco conmigo, el dinero y lo demás puede esperar.—

El me miro serío pero después me dió una sonrisa y acepto, pedí que me preparan un baño y cuando estuvo listo entre, el agua calientita en mi piel era la mejor sensación, el se ducho antes pues no quiso esperar a que prepararán el baño.

Cuando salí no tenía ropa que usar, pensé en pedirle una camisa pero decidí quedarme así como estaba, estaba en la cama cuando el entro con un baso de sangre, me observo por unos segundos y después dejo la sangre en la mesita de noche.

Subió a la cama y fue hacia mi, comenzó besando mis piernas hasta su subir a mi vientre y de mi vientre a mi pecho.

—Porque no te has vestido.—dice jalando me hacía el.

—No tengo ropa limpia.— el se coloca entre mis piernas y no logró aguantar un suspiro.

—Puedes usar una de mis camisas después.- subió completamente encima de mi y comenzó a besar mi cuello.—

Su boca en mi piel se sentía tan bien hasta que sentí sus colmillos clavarse en mi cuello, no puede evitar gritar y esto no pareció molestarle ya que siguió bebiendo mi sangre.

Me dió la vuelta y fue dejando besos por toda mi espalda y ahí comenzó.

—Ah... podrías ser más delicado.
—
No obtuve respuesta en su lugar de eso solo obtuve dolor. Descansar en su pecho me encanta pero tenía el cuello lleno de sangre y estaba débil, se alimento de mi aunque eso me hiciera perder mucha sangre.

—Elijah que piensas de hacer una familia tu y yo.—

—A que te refieres amor mío.—

—A que estemos juntos los dos y hacer nuestra familia, tu y yo y un bebé .—

—Keterina no podemos tener hijos, somos vampiros no hay manera.—

—y si hubiera una, no todo es imposible.—

—y si se pudiera no es el momento, acabamos de escapar de niklaus.—

Todo esto obviamente me entristeció y lo noto.

—Escucha yo también he pensado en esa posibilidad pero no tenía una pareja o esposa para intentar una familia pero si eso te hará feliz te prometo buscar la manera de que seas madre.—

—Las promesas no valen nada para mí.—

—Bien te doy mi palabra de que buscaré la manera de que seas madre.—

Use una de sus camisas mientras las sirvientas me buscaban ropa, me senté al lado de la chimenea y pensaba en la hija que tuve, ni siquiera llegué a tenerla en mis brazos, estaba en mis pensamientos cuando el llegó.

Me miraba desde el marco de la puerta y parecía pensativo así que me levanté del suelo y fuí hacia el, dejé un beso en sus mejillas y acaricié su pecho.

—En que piensas.—

—Quiero hacerte una pregunta Katerina.— llevo su mano al bolsillo de su traje y saco algo que no pude ver.

—Que es.—le pregunto curiosa.

—Quieres casarte conmigo katerina.— el toma mi mano y me muestra un anillo con una piedra roja.

Me estaba pidiendo que me case con el, sentí mucha alegría pues aunque lo usé para saber lo que klaus quería hacerme eso no quita que lo amo.

—Si... Si quiero casarme contigo.—

No lo dude ni un segundo se que también lo culpo de la muerte de mi familia pero en el fondo se que no es así, que el no tuvo ni la menor culpa. El puso el anillo en mi dedo y dejo un beso en mi boca, después lo hice sentarse al frente de la chimenea, me acosté en sus brazos y por primera vez en mi vida me siento amada.

Holi aquí les dejo los separadores para está historia espero y les guste ahora Katerina suena muy romántica e indefensa y la estoy haciendo así porque creo que debe estar mal por su familia, además quiero decirles que puede que la personalidad de Katerina en esta historia no sea exactamente igual a la de tvd porque es desde la perspectiva de una fan.