¡Nuestra pequeña Aoi!

Siendo exactamente las tempranas horas de la mañana, dos idols se encontraba apresurados en llegar a la oficina de su jefe, y sin avisar su entrada abrieron de golpe la puerta.

—¿Que sucede? -Exaltado, Shining miro sorprendido hacia estos idols.—Ringo-sensei, Hyuga-sensei ¿por que entran de esa manera?

—Es sobre Aoi.- Exclamo exaltado Ringo.— ¡Mire! -Dijo este mientras mostraba una pequeña niña durmiendo tranquilamente en los brazos de Hyuga.

—La encontramos en la sala dormida.-Dijo Hyuga mientras miraba a su jefe desesperado.— ¿Como fue que llego a estar asi?

—No se preocupen.-Dijo este tranquilamente.— Tiene que volver a su estado normal...solo hay que esperar.  Por ahora, uno de ustedes háganse cargo, mañana lo arreglaremos. 

Ambos salieron de la oficina. Reconociendo fácilmente que ambos deseaban compartir un momento a solas con la compositora, se miraron fijamente y como si supieran lo que pensaba el otro, alzaron la mano.

— ¡Piedra, Papel o Tijeras! –Gritaron ambos mientras movían sus manos de arriba hacia abajo. Gano Hyuga con Piedra.

Camino tranquilamente por el pasillo mientras miraba las puertas que se encontraban antes la de él, abrió lentamente la puerta que daba su habitación. Recostó a Aoi y con cierto cuidado la arropo, el por su parte, cansado se comenzó a estirar y camino hacia el baño...tomando una ducha rápida y ponerse su ropa para dormir, se acostó en la cama junto a Aoi.

—Huele a Dulce...-Susurro Hyuga oliendo el cabello de la pequeña. Y sintiendo como la aquella pequeña criatura se acurrucaba en el pecho de este, la abrazo hasta quedar profundamente dormido.

......

Sintiendo como una mano le golpeaba la cara, Hyuga abrió lentamente sus ojos.

—Ne~ Hyuga-niisan.-Abriendo sus ojos rápidamente, se levantó. — Hyuga-niisan ¡tengo hambre! –Comenzando a golpearlo en el pecho, este se limitaba a verla.

—Aoi-chan, ¡eres super tierna! –Balanceándose sobre ella, este la abrazo. La pequeña se comenzó a reír, y le regreso el abrazo a Hyuga.

—Hyuga-niisan, ¿me das comida? –Pregunto esta mientras le estiraba su camisa. Sintiendo ternura por la pequeña, se levantó de la cama y la cargo. — ¡Yeii! A la cocina. –Exclamo la pequeña desde el hombro de este.

La pequeña se encontraba con su ropa de la última vez en miniatura, su cabello se encontraba igual de corto, pero esta no traía sus anteojos.

—Aoi-chan, ¿puedes ver? –Pregunto este refiriéndose a sus anteojos. La pequeña asintió con una sonrisa. —Le preguntare a Ringo si tiene algo de ropa para ti...-Susurro este a sí mismo.

Llegando a la entrada de la cocina, Hyuga bajo a Aoi. Esta emocionada entro apresurada sin esperar a Hyuga. Dando un suspiro entro enseguida a la cocina.

— ¡Que linda! –Reconociendo la voz de Natsuki, este observo como la pequeña se encontraba llorando por su libertad. Hyuga se acercó y la tomo.

—Hyuga-niisan, ¿Quiénes son ellos? –pregunto la pequeña mientras apuntaba a los Idols.

Todos miraron sorprendidos la escena, justo en ese momento la puerta de la cocina se abrió.

— ¡Es Otoya-niisan! –La pequeña salto de los brazos de Hyuga a abrazar las piernas de este. — ¿Cómo estas, Otoya-niisan?

El pelirrojo la observo sorprendido por unos segundos, y después regreso su mirada hacia sus compañeros.

— ¿Por qué reconoce a Otoya? –Pregunto Masato triste. La pequeña se giró hacia los chicos y con cuidado se acercó a ellos.

—Aoi-chan, ellos son nuestros amigos.-Cargándola, Otoya la abrazo cuidando que no se cayera de sus brazos.

— ¿"nuestros"? –Pregunto la pequeña mientras miraba a Otoya de reojo. —Yo solo conozco a Otoya-niisan, a Hyuga-niisan y a Ringo-niisan.-Comento la pequeña mientras le mostraba una pequeña sonrisa.

—Hyuga-sensei, ¿Cómo fue que Milikan-san quedo en ese estado? –Pregunto Tokiya mientras se acercaba a Hyuga. Este solo se encogió de hombros.

—Aoi-chan, mi nombre es Natsuki.-Tomándole de las manos, la pequeña comenzó a reír junto a Natsuki.

—Sois divertidos.- Dijo la pequeña mientras miraba a Otoya, este le sonrió. De la nada un pequeño ruido comenzó a hacerse presente...se trataba del estómago de la pequeña.

— ¿Me pueden dar una manzana? –pregunto la pequeña mientras miraba a cada uno de los Idols. Los Idols de Starish recordando la historia de Aoi, la miraron por unos segundos.

—Te prepare algo de desayunar.-Comento Masato mientras la tomaba de los brazos de Otoya, y la sentaba en la mesa.

— ¿Comida de verdad? –pregunto la pequeña mientras miraba a Masato con cierto brillo en sus ojos. Este sintiendo un nudo en su garganta asintió. —Muchas gracias.

Masato sin perder el tiempo comenzó a cocina, mientras que los Idols platicaban con la pequeña Aoi, ignorando por completo el motivo por el cual se encontraba en ese estado.

— ¿Quién me gusta de ustedes? –pregunto Aoi mientras miraba a cada uno de los Idols. Tomando cierto tiempo en mirar a cada uno, la puerta de la cocina se abrió. — Me gusta Masato-niisan.-Dijo le pequeña mientras observaba el plato de comida enfrente de ella. — Si me caso con Masato-niisan me hará mucha comida ¿verdad? –pregunto la pequeña mientras se giraba a ver a Masato.

—Por supuesto, te prepare toda la comida que quieras.-Dijo este mientras le agitaba cariñosamente el cabello de la pequeña. Está contenta comenzó a comer.

—Supongo que tendré que aprender a cocinar...-Susurro Cecil mientras hacia un puchero y miraba a la pequeña comer.

— ¡Qué demonios acabo de escuchar! –Golpeando violentamente la mesa, Ranmaru miro molesto a Masato. Sin percatarse de la consecuencia de su acción, el plato de comida de la pequeña Aoi se encontraba tirado...la comida se había caído.

—*Snif* *Snif* -Mirando a la pequeña, esta se encontraba mirando su comida con sus ojos cristalinos. — ¡Eres malo! –Grito esta mientras comenzaba a llorar sin consuelo.

—Genial, la hiciste llorar.- Comento Ai mientras se cruzaba de brazos, y observaba a Ranmaru. — ¿Y se supone que tenías pensado llevarla contigo? Ahora dudo que desee ir contigo a algún lado.

—Cállate.-Siendo lo único que dijo, camino apresurado hacia la salida. Una pequeña voz hizo que se detuviera.

— ¿Eres Kurosaki Ranmaru? –pregunto esta mientras saltaba de la silla para caminar hacia él. El miro por unos segundo a sus compañeros, y después regreso su mirada hacia le pequeña.

—Si.- Contesto este rápidamente. La pequeña olvidando lo de antes, le mostro una pequeña sonrisa.

—Mi papa es fanático de tu música.-Dijo esta inocentemente. Sintiendo una punzada, Ranmaru se inclinó al estar a la altura de la pequeña. — Te disculpo lo de la comida solo porque eres el Idol favorito de mi papa .-Dijo esta mientras se daba la vuelta. —Hyuga-niisan, ¿me puedes llevar a mi casa? Quiero ver a mi mama y mi papa.

—Dios...-Susurro Ranmaru mientras se levantaba.

—No puedo llevarte...-dijo este mientras miraba a la pequeña. — Tu vives aquí...-Comento este mientras se rascaba la nuca.

—Oh...-agachando la mirada esta se quedó pensativa. — Entonces juguemos! –Dijo está emocionada mientras tomaba la mano de Otoya, y la de Masato.

—Masato, ¿no tenías una entrevista?- Pregunto Ranmaru antes de que saliera junto con Aoi. Este se quedó pensativo.

—Es cierto.- Dijo este recordando. Soltó la mano de Aoi, y se agacho. — Me tengo que ir. Pero jugare contigo cuando regrese.- Y saliendo del lugar, Aoi movía su mano en modo de despedida.

—Vamos a jugar, Aoi-chan.- Tomando la mano de Aoi. Syo le mostro una sonrisa a la pequeña, haciendo que ella le devolviera el gesto.

—Demonios.-Susurro Ranmaru mientras observaba como ambos corrían sonriente sosteniendo las pequeñas manos de Aoi.

Continuara...