💛Capítulo 40
Yoongi suspiró un poco para agarrar el valor, ya había comenzado así que no había marcha atrás. Miró una última vez a la muchacha frente a él.
—¿Estás segura de hacer esto Irene?
Ella asintió, en realidad lo había pensado mucho y por más que le daba vueltas en su cabeza sabia que no tenia nada que perder y nada que ganar.
—Si Yoongi, estoy segura de esto. ¿Tú no?
Yoongi giró su rostro a la ventana que tenía a su derecha, el sol afuera estaba cubierto por las nubes que de vez en cuando lo dejaban salir a relucir.
¿Qué si estaba seguro? No completamente pero tenía que intentarlo.
—Lo estoy.
Irene sonrió poniéndose de pie de inmediato.
—Perfecto, deja yo me encargaré de todos los preparativos tú sólo encárgate de hacer llegar las invitaciones.
Rodeó el escritorio y se acercó a él para darle un abrazo antes de salir de la oficina.
Cuando se quedó solo Yoongi dejó caer su cabeza hacia atrás, tenía un sin fin de cosas en su cabeza pero no quería pensar.
Tan solo ayer se había enterado de que su verdadero padre era ese hombre Lee Kun-Hee, y por lo que conocía de él era un hombre ruin y malo. Solo deseaba poder hacer algo para que pagase lo que había hecho con Ha Neul su madre.
Acabaría con todas las cosas pendientes que tenia incluyendo lo de Irene y después iría por su cabeza.
El teléfono sonó sacándolo de sus pensamientos así que rápido respondió.
—¿Diga?
—¿Hyung?
—¿Taehyung?
Yoongi se levantó a penas escuchó la voz de su amigo.
—¿Tae? ¿Todo bien? No he sabido nada de ti desde anoche. Te he llamado y no...
—Hyung, estoy en problemas.
Cuando Taehyung dijo eso, Yoongi sólo quiso salir corriendo en busca de él.
—¿Qué sucedió? ¿Dónde estás?
—No se a donde voy, estoy dentro de un auto, en el maletero de un auto, está muy oscuro y mi celular está a poco de apagarse Hyung... ayúdame tengo miedo. No saben que tengo mi celular todavía pero si se dan cuenta me van a matar.
Yoongi sentía sus pies pesados porque esta era una situación muy complicada ¿Cómo demonios iba a averiguar donde estaba Taehyung si iba dentro de un maletero? ¿Y quien se lo estaba llevando?
—Tae escucha ¿donde estuviste cuando te han atrapado?
—En el hotel Ichwon.
—Bien, apaga el celular y enciendelo en unos 20 minutos ¿Está bien? Iré por ti.
—Si Hyung, te espero.
Yoongi colgó la llamada tomó su saco y salió de su oficina lo más apurado posible.
La única manera de averiguar donde estaba Taehyung era rastreando su ubicación y conocía a alguien que podía hacerlo rápidamente, aunque no era santo de su devoción.
Manejó tan rápido como le fue posible y en poco tiempo estaba ya afuera mal estacionando su automóvil y casi lo dejó con las llaves puestas y la puerta abierta.
Entro corriendo al interior y ya le conocían bastante bien así que los guaridas lo dejaron entrar.
Se dirigió a donde sabía que podía estar y al abrir la puerta éste le devolvió la mirada filosa.
—La reunión es más tarde ¿Qué haces aquí? Jimin no está.
—No busco a Jimin te busco a ti.
Jungkook unió sus cejas sin comprender por qué Yoongi lo buscaba a él.
—Si vienes a pelear por Jimin...
—¡Con una mierda! ¡Dije que no es por Jimin! ¡Me importa una mierda si está o no está! Te busco porque necesito de tu ayuda.
Ahora Jungkook mostró un poco más de interés en Yoongi. Dejó el Vaper que estaba usando sobre la mesa y se levantó.
—¿Y que es eso tan importante?
—Es Taehyung, necesito que me ayudes a rastrear su ubicación.
—¿Le pasó algo? —Jungkook se apresuró a sacar su laptop y a encenderla.
Yoongi a su lado observaba los movimientos rápidos de Jungkook.
—Está secuestrado, solo tiene su celular.
—Con eso tengo suficiente. —Repuso Jungkook. —Llámalo.
Yoongi obedeció al instante, marcó el número de regreso y éste comenzó a sonar, señal de que ya habían pasado 20 minutos y Tae lo había vuelto a encender.
—¿Hyung?
—Soy Jungkook, solo mantente cinco minutos conmigo ¿Si? ¿Podrías?
—N-no lo sé el teléfono tiene 3 de carga.
—Es suficiente, no vayas a colgar o perderé la conexión.
—Si, está bien.
—¿En donde estuviste por última vez usando tu celular?
—Cerca del hotel Ichwon.
—Genial, lo tengo. —Jungkook tecleaba a velocidad en su laptop.
La voz de Tae se escuchaba amortiguada a cada minuto que pasaba.
—Prepara a los demás, no podemos ir solos tú y yo.
Yoongi se quedó un momento de piedra, creyó que al final sí le iba a tocar a él solo ir. Pidió ayuda a Jungkook de rastrearlo pero no de rescatarlo.
Se movió segundos después para ir en busca de Hoseok y de Jimin si es que lo encontraba, pero Jungkook había dicho que no estaba.
Aunque parecía que el destino siempre tenía que ponerlo en su camino. Bajando de su motocicleta venía el peli-rosa, Yoongi observó como se quitó el casco y sacudió su cabello rosa.
—¿Qué haces en mi casa Min?
—Créeme que es el último lugar en el que quiero estar Kim...Park.
Jimin le observó por unos instantes y luego pasó a su lado.
—Necesito tu ayuda.
—¿Mía? ¿Y para qué?
—Tienen a Taehyung secuestrado en este momento.
Jimim detuvo su andar y enfoco sus ojos miel en Yoongi.
—¿Tú novio? Seguro. ¿Y que vas a hacer?
Yoongi omitió el hecho de que siempre que Jimin se refería a Tae lo llamaba "su novio" y le señaló mejor a Jungkook en la mesa con su laptop.
—¿Tae me oyes?
Hubo un incómodo silencio en la que las miradas de los tres se cruzaron.
—S-si
—Bien, ya logré conectar con la antena telefónica que se encuentra cerca del Hotel Ichwon, solo necesito que enciendas el Google Maps o simplemente conectes el WiFi o entres a alguna aplicacion que necesite tu ubicacion. ¿Puedes?
—Lo intentaré.
Otros incómodos silencios se instalaron entre los presentes y Taehyung hasta que finalmente logró hablar.
—Listo, entre a Google Maps, el celular tiene 1 de batería. ¿Hyung? ¿Estás ahí Hyung? T-tengo miedo.
Yoongi acercó su rostro a su celular que estaba sobre la mesa y habló con Tae.
—Si Tae estoy aquí ya voy por ti no tengas miedo.
—¡Lo tengo! —El grito de Jungkook hizo que tanto Jimin como Yoongi dieran un respingo.
—Ya vamos Tae resiste.
Yoongi sigio a Jungkook sin esperar si quiera a ver si Jimin iría con ellos. Es más no le importaba si al final nadie iba con él. Él sólo podría ir por su amigo.
Increíblemente Jungkook abrió la puerta de una Hummer negra y lo apremió para subir. Y así lo hizo, Jungkook subió adelante en el asiento del piloto y Yoongi a su lado.
Después la puerta de atrás se abrió y por ella entró Jimin.
Jungkook miró por el retrovisor antes de ponerse en marcha.
—¿Y Hope?
—Se quedó en el Le Fleur dijo que volvería en una hora.
Jungkook asintió saliendo apresuradamente de la Mansión Kim, dejando un rastro de humo a su paso y el rechinar de las llantas.
—No podemos esperar una hora iremos nosotros.
Jungkook llevaba su celular donde le marcaba la ubicación de Taehyung.
—¿Tae?
—¿Yoongi Hyung?
—Vamos por ti no te preocupes.
Según la ubicación que le marcaba a Jungkook Taehyung se movía a 60 Kilómetros por hora sobre la carretera.
—Va para el muelle de Jeongok, vas más rápido de lo permitido en la carretera, podemos alcanzarlo pero en el camino seguro que a Taehyung se le termine por apagar su celular. Igualaré lo más posible la distancia para no tener tanta diferencia si llegamos a perder la conexión.
—¿Y si se apaga? —Preguntó Yoongi preocupado por ese hecho.
—Igual no hay mucha posibilidad que se desvie para otro lado. La carretera vieja sólo conduce al muelle de Jeongok Pears. Mientras el teléfono esté encendido las torres eléctricas que hay a la orilla del camino estarán conectadas conmigo.
Yoongi asintió.
Atrás Jimin solamente veía por la ventana. No había abierto la boca en todo el camino ni lo haría.
—¿Tae?
—¿S-si Hyung?
—¿Recuedas la canción que solías cantarme cuando no podía dormir?
—S-si...
—Cantala Tae, cantala para mi otra vez.
Hubo un silencio corto que solo fue interrumpido por la ronca voz de Taehyung llegando a través del altavoz del celular de Yoongi.
—She looks like a blue parrot
Would you come fly to me?
I want some good day, good day, good day
Good day, good day
Looks like a winter bear
You sleep so happily
I wish you good night, good night, good night
Good night, good night
Imagine your face
Say hello to me
Then all the bad days
They’re nothing to me
With you
Winter bear
Ooh, ooh, ooh
Sleep like a winter bear
Ooh, ooh, ooh
Sleep like a winter bear
Cuando la canción se acabó y la ronca y arrullante voz de Taehyung se apagó también se apagó su celular.
—No, tae... maldición. —Murmuró pegando en el asiento con sus puños.
Jungkook por su parte metió a fondo el acelerador peligrosamente.
Jimin en cambio atrás iba sumido en sus pensamientos, se iba atormentando a sí mismo. Porque veía a Yoongi y su preocupación por Tae, la manera en que sus ojos se habían opacado, sus puños apretados ante la desesperación por traerlo de nuevo.
¿Por qué no ocurrió lo mismo con él? ¿Por qué no pudo Yoongi correr hacia él y salvarlo también? ¿Habría corrido así de preocupado por él si hubiera sabido que estaba en peligro?
De pronto la respuesta estaba ahí, mirándolo con sus gatunos ojos grises a través del espejo retrovisor implorando otra vez por él, brillosos por la acumulación de las pequeñas lágrimas. Diciéndole todo y nada a la vez en silencio.
La mirada implícita que decía "Si lo hubiera hecho por ti, no te habría perdido"
Porque eso taladraba la mente de Yoongi en ese momento. Volver a sentir el miedo de perder a alguien especial.
Jimin soltó una débil sonrisa devolviendole la mirada.
—Lo vamos a traer de regreso Yoon.
Yoongi asintió en silencio.
Cuando Jungkook estacionó cerca del muelle, las numerosas embarcaciones a la orilla se veian como una pintura al anochecer.
Solo pasaron 10 minutos desde que el celular de Tae se apagó, así que era imposible que estuviera aún metido dentro de un maletero.
Había más de 30 barcos pequeños ahí así que podía estar en cualquiera.
—Sólo espero que no vaya en ese barco que acaba de zarpar. —Dijo Jungkook abriendo la puerta de atrás de la Hummer. —Saca tu arma Min.
Yoongi se asomó y vio una infinidad de armas en el auto cuando Jungkook levantó un compartimiento secreto.
Tomó un rifle y Jungkook igual, Jimin se demoró más buscando un par de armas.
—Bien, yo iré a la derecha, tu al centro y tu a la izquierda. Nos reuniremos con Jimin en el centro.
Jungkook les tiró a ambos chalecos antibalas.
—Sabes que odio usar esto Golden.
—Lo sé Kitty, ahora pontelo.
Jimin resopló aún así se lo colocó.
—Suerte Agust D. —Dijo antes de dirigirse a las embarcaciones de enmedio.
Yoongi igual se colocó su chaleco y se dirigió a los de la izquierda. Debían revisar uno por uno y no tenían mucho tiempo.
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