Estoy en la parte principal de los dormitorios junto a las chicas, mientras ellas se están quejando de que trabajan duro yo estoy pintandome las uñas de los pies.

-Estamos trabajando muy duro todos los días.- se queja Mina cansada.

-No se llama entrenamiento intensivo por nada.- habla Jiro crugiendo sus dedos.

-Aún así, queda menos de una semana para el examen de licencia provisional.- explica Momo.

-Momo, ¿cómo va tu movimiento especial?- pregunta Toru.

-Hay algo que quiero hacer, pero mi cuerpo no puede seguir el ritmo todavía, así que necesito desarrollar mi peculiaridad un poco más primero.- habla algo nerviosa Momo.

-¿Y tu Ochako?- pregunta Tsuyu.- pareces cansada.

-Oh, no, no estoy cansada.- habla rápidamente y nerviosa.- apenas he comenzado.

-Tus pequeños trucos para mentir son nefastos, te pones nerviosa y encima mueves los ojos rápido.- comento mientras paso el esmalte por la uña.- me encanta este color.

-¿Cuándo has llegado?- pregunta Mina.- creía que estabas en la ducha.

-He terminado hace un rato y llevo aquí hace cosa de cinco minutos.- sigo pintándome las uñas.

-Hay algo que quiero deciros.- nos mira nerviosa Ochako.- Hace poco, mi corazón se ha sentido agitado...

-¿Qué dices?- alzo una ceja.

-¿Es amor?- sonríe Mina.

-Que asco.- comento asqueada.

-N-no se de qué hablas.- se pone aún más nerviosa Ochako.

-¿Es Midoriya o Iida?- pregunta Mina interesada.

Ochako se pone a flotar mientras da vueltas, entonces sigo pasando el esmalte de color naranja por la uña de mi dedo pequeño, mientras las demás siguen hablando sobre sus chorradas sobre el amor.

-En realidad no sé nada sobre esas cosas.- comenta Ochako nerviosa.

-No es bueno forzar una investigación.- habla Tsuyu.

-Eso es cierto.- interviene Momo.- Más importante, mañana comenzamos temprano, así que deberíamos irnos a dormir.

-Sois muy pesadas, ahora entiendo porque siempre estoy con los chicos.- pongo los ojos en blanco.

-Porque ellos son los únicos que soportan tu actitud.- responde Jiro.

-¿Has dicho algo?- la miro.

-Que ellos son los únicos que te aguantan, siempre que estás con nosotras te quejas o eres sarcástica.- Jiro frunce el ceño.

-Ah, te pones agresiva, vale, chata, yo tengo una vida y lo que vosotras hacéis o dejáis de hacer me trae sin cuidado.- respondo con franqueza.

-Eres un disco rallado.- comenta Toru.

-Vosotras sois muy pesadas, me largo.- sin querer me pinto todo el dedo de naranja.- ¡Mierda!

Llega el día del examen, ¿estoy preparada? por supuesto que no, ni siquiera me apetece una mierda, pero oh tenemos que hacerlo solo porque... eh... nos obligan, básicamente.

-Si podéis pasar esta prueba y conseguir vuestras licencias profesionales, entonces los huevos se habrán convertido en polluelos.- habla Aizawa.

-¿De que está hablando este tío ahora?- murmuro.

-Os vais a convertir en semiprofesionales.- termina de aclarar Aizawa.

-Pues haber empezado por ahí.- escupo.

-Martina, cálmate.- me pone la mano en el hombro Denki.- Me voy a convertir en un polluelo.

-La droga os sienta mal.- comento algo irritada.

-Pareces de mal humor, juntarte con Katsuki te afecta.- se burla.

-Como vuelvas a decir algo así te desintegro.- sentencio.

-Venga chicos vamos a gritar, en sus puestos, listos...- sonríe Eijiro.- ¡Plus Ultra!

-Me estoy cagando.- arruino el momento plus ultra por diversión.

-¡Martina!- regañan todos a la vez.

-¿Qué? Siempre estáis con vuestras tonterías, no va a pasar nada.- Digo con indiferencia.

De pronto aparece una tal Joke o algo así o Miss Joke, no sé quién es, tampoco me importa, entonces aparecen sus alumnos que parecen querer conocernos, antes de que se acerquen, una mano aprieta con fuerza mi hombro, miro a ver quién es, y es Katsuki mirando a los alumnos de la tal Joke mientras me aprieta fuertemente el hombro.

-Soy Shindo, la U.A. ha tenido problema tras problema este año, así que debe haber sido difícil.- me agarra las manos.

-Eh...- lo miro sin confiar en tanta amabilidad.

-Pero aún así, todos queréis ser héroes.- agarra las manos de Denki.- ¡Es maravilloso! Un corazón fuerte, es lo que creo que todos los héroes deberían tener de ahora en adelante.

-Creo que me estoy enamorando.- comento sarcástica.

-¡¿Eh?!- gruñe Katsuki cerca de mi oído.

-Entre vosotros está Bakugo, que ha experimentado ser el centro del incidente de Kamino.- habla orgulloso Shindo.- Tienes un corazón especialmente fuerte. Hoy haré mi mejor esfuerzo mientras aprendo de ti.

-Deja de fingir, lo que estás diciendo no coincide con la expresión de tu cara.- gruñe Katsuki.

-¡Oye se más respetuoso!- exige Eijiro.- perdona por su mala actitud.

-Esta bien, solo demuestra lo fuerte que es su corazón.- responde Shindo.

-Ahí lleva razón.- admito.

-Shorty...- noto el aliento caliente de Katsuki en mi oreja.

-Vale, ya me callo.- suspiro.

Nos vamos a la recepción dónde está lleno de gente, que incomodidad dios mío, encima apenas puedo moverme, esto es un escándalo y un agobio.

Se abre el techo lentamente y después la sala se abre del todo mostrando los diferentes escenarios donde vamos a hacer el examen coñazo este de licencias insignificantes.

Todos van corriendo, vaya panda de ineptos, yo voy volando impulsando mi energía roja para aumentar la potencia de vuelo y ser más rápida. Veo que Eijiro, Denki y Katsuki van juntos, decido volar tras ellos pero me doy cuenta que de Shoto va solo, suspiro y me dirijo hacia el, por una vez me apetece estar a solas con el, no he tenido tiempo de tener una conversación con el.

Pero antes de llegar veo que mis otros compañeros están siendo perseguidos por pelotas naranjas, lo siento Shoto tienes que ir solo por el momento.

-Escudo energético máxima potencia.- aterrizo en medio de ellos para desatar un escudo rojo de energía.

-Martina.- habla sorprendido Iida.

-Si, ya lo sé, no puedo dejaros solos.- comento divertida.

-Creía que ibas a ir con Kacchan.- me habla Izuku.

-No, iba a ir por libre, como siempre, pero somos una clase, ¿no? estaré en el aire cubriendo desde la distancia.- sonrío.

-¿Estas confiando en nosotros?- pregunta Mashirao.

-No del todo.- admito.

-Cuando te dé la señal, quitas el escudo.- ordena Izuku.

-De acuerdo.- pongo los ojos en blanco.

-Cuidado con la chica de energía roja, es peligrosa.- anuncia Shindo.- su peculiaridad es... difícil de explicar.

-Martina, van a por ti.- me mira asustada Ochako.

-Puedo alterar la realidad como le venga en gana, no me preocupa.- explico.

-Martina, ahora.- Izuku me señala con el dedo.

Libero el escudo energético y todos van a librarse de las pelotas e ir hacia los enemigos, yo voy a irme volando, pero antes de poder impulsarme, me agarran con fuerza de la cintura, miro a Shindo sujetándome con fuerza.

-Lo siento, bruja, pero eres la más peligrosa, después de Bakugo, pero él no está aquí.- me sonríe Shindo.

-Si quieres pelea, la tendrás.- le doy un codazo en el abdomen.

-Fuerza bruta cuando te sientes amenazada.- me agarra el brazo con fuerza.- Te conozco, Martina.

-¿Eh?- lo miro desconfiada.- sabía que no eras de fiar.

Me lanza contra un pilar de roca, intento amortiguar el golpe pero el impacto me deja medio tonta, así que me levanto lentamente pero Shindo se coloca encima de mi poniendo todo su peso.

-Sabes, eres una damisela en peligro que siempre va por libre fingiendo ser algo que no eres, princesa.- me guiña el ojo.

-¿Quién te crees que eres? nadie me habla de esa forma.- frunzo el ceño.

Me agarra de la barbilla alzando un poco mi cara, se acerca a centímetros de mi rostro, notando su aliento en mi cara.

-¿Que intentas?- lo miro aún con más desconfianza.

Noto que aplica más fuerza para inmovilizarme en el sitio, muy bien, te voy a seguir el juego, capullo, desencadeno una explosión de energía roja lanzando a Shindo rodando por el suelo.

-Lo siento, no me gusta que estén encima de mi, ya sea física o mentalmente.- me voy volando en busca de Shoto.

Mientras me voy volando, noto que la tierra debajo de mi comienza a vibrar destruyendo la zona rocosa, así que me alejo dejando a los demás, se que Shoto estará bien, pero aún así me apetece ayudarle, siempre estoy con Katsuki, Eijiro y Denki, cambiar un poco de compañeros a veces viene bien de vez en cuando.

-Martina, ¿has notado esos temblores?- me pregunta mientras aterrizo a su lado.

-Pues si, ¿por qué?- pregunto.

-Creo que es una peculiaridad.- me confirma.

-Ah, pues si, puede ser.- miro alrededor.

-Tenemos que irnos.- Shoto se pone a caminar.

-Eres un exagerado.- camino a su lado.

-Puede.- sigue caminando.

-Eh oye, se que tú y yo nos hemos llevado muy mal, pero tampoco bien, solo quería ir contigo para fortalecer vínculos o algo así.- me encojo de hombros.

-Vale, pero tengo una pregunta.- me mira bastante serio.- ¿Te gusta Katsuki?

-No.- miento.- ¿Por qué?

-En el campamento, fuiste tras él cuando lo capturaron los villanos, te vi llorar y gritar de impotencia, al igual que te deprimiste pero aún así, fuiste a su rescate.- sonríe momentáneamente.

-Solo me preocupo por el, nada más, es mi amigo, sería raro no preocuparme.- hablo tranquilamente.

-¿También harías eso por mi?- pregunta mirando a otro lado.

-Por supuesto.- admito.- Además somos los mejores de la clase, hay que ayudarnos para mejorar.

-Tiene sentido.- asiente.- rápido por aquí.

Me agarra del brazo y nos escondemos detrás de una tubería enorme, Shoto parece estar pensando en alguna estrategia, yo reviso alrededor pero no veo nada diferente o personas que estén cerca, esto es extraño.

Después nos ponemos en movimiento, una pelota viene hacia nosotros, la rodeo con energía roja para desviarla, Shoto simplemente me mira sin ninguna reacción, supongo porque ya conoce mis movimientos.

-Vaya, eso estuvo bien, como se esperaba, el segundo puesto y el tercer puesto del campeonato deportivo de la U.A. juntos.- se burla uno de los otros estudiantes.- ¿No estás con el primer puesto?

-El está por ahí haciendo su parte del examen.- inclino la cabeza.

-Sois dos contra diez, ¿que haréis?- pregunta una chica.

-Bueno, Shoto, parece que quieren que nos rindamos.- sonrío con arrogancia.

-¿Tienes un plan?- me mira divertido.

-Siempre.- le guiño el ojo.

Rápidamente Shoto congela los pies de los enemigos, yo simplemente sonrío, entonces unas pelotas naranjas vienen hacia nosotros, las rodeo de energía roja y las desvío una vez más.

Rápidamente lanzan un tornillo en forma de rueda que se agranda, me interpongo entre el y Shoto para detener el alcance del tornillo.

El tornillo se envuelve de energía roja mientras lo detengo voy retrocediendo por el impacto y por lo rápido que va, entonces lanzan más mientras.

-Shoto...- trato de resistir pero esto pesa mucho.- perdóname.

Lanzo los tornillos hacia atrás destruyendo la mitad de las tuberías que nos rodean, Shoto simplemente se cubre con una pared de hielo.

-¿Estas bien?- pregunta Shoto.

-Los brazos me duelen, no estoy acostumbrada a levantar y aguantar cosas tan pesadas.- respondo agotada.

-¿Y por qué no lanzas un rayo de energía?- me pregunta Shoto.

-Nos han visto en el campeonato deportivo, saben mis movimientos.- respondo.

-Recuerdo que dijiste una vez que te gusta ser imprevisible.- me sonríe Shoto.

-¿Estas pensando en lo que creo que estás pensando?- pregunto con una sonrisa.

-Por supuesto.- me guiña el ojo.

-Bien, hagámoslo.- me cruzo de brazos.

Uso el teletransporte para ir lanzando rayos de energía roja desde diferentes ángulos y que sea difícil esquivarlos mientras Shoto lanza sus llamas, rápidamente el hielo atrapa a los otros estudiantes y les lanzamos pelotas naranjas para eliminarlos. Nuestros puntos de eliminación se iluminan de azul.

-Los que han aprobado deben ir a la sala de espera.- anuncia una chica.- Daos prisa.

-¿Hemos aprobado? Menuda pasada.- respondo sonriendo.

-Eso parece.- se pone a caminar.

-Vaya Shoto sí que eres un tempano de hielo, pero admítelo formamos un buen equipo.- camino alegremente a su lado.

Después llegamos a una sala donde hay muchas personas, Shoto se sienta en uno de los sillones pegados a la pared y yo me voy a comer porque me muero de hambre.

También veo a Momo, Jiro, Menzo y Tsuyu entrar, se ponen a hablar con Shoto pero yo sigo comiendo porque esta comida está de muerte, aunque también me pregunto dónde estará Katsuki y si ya habrá ganado, seguramente si, el siempre gana, solo es cuestión de su fuerza y de lo enfadado que este.

Poco después entran los demás, veo a Katsuki, Eijiro y Denki entrar, me dirijo hacia ellos cuando Shindo rápidamente me rodea de la cintura y me acerca a su cuerpo.

-Oye déjame en paz.- intento liberarme de su agarre.

-No he tenido la oportunidad de hacer lo que quise hacer cuando estuve encima de ti.- Shindo acerca su cara nuevamente a mi.

-Oye tú, ha dicho que la sueltes.- gruñe Katsuki detrás de Shindo.

-¿Y sino?- Shindo mira a Katsuki con arrogancia.

-Te convertiré en ceniza.- escupe con ira.

-Oye guapo podía encargarme de esto yo sola.- me libero del agarre de Shindo con un rayo de energía rojo.

-Ya lo veo, has tardado mucho.- se cruza de brazos.

-Bueno Katsuki, no tenía previsto usar mi peculiaridad.- confieso.