MY GIRL
A Princess_Roseanne adaptation

❝—Eres mía, Lili, solo mía.

—Uhm, solo tuya.❞

“Yo sé...”

Los ojos del pelinegro se expandieron al leer el contenido del pequeño papel que se le había sido dejado “anónimamente”.

Porque de anónimo no tenía nada.

BamBam conocía esa letra, por lo que perfectamente podía identificar al creador de tales palabras, sin embargo, también quería engañarse a sí mismo, hacerse pensar que estaba equivocado, y que un chico como Jackson, tan tranquilo y tímido, no había sido quien le había dejado aquella nota sobre su mesa.

Wang era demasiado bueno para hacer algo así.

Aunque... ¿mentirse era la solución?

La rabia estaba subiendo poco a poco, expandiéndose por toda su anatomía, apoderándose de todos sus sentidos.

Deseaba poder ser ciego.

Pero querer tapar el sol con un dedo no bastaría.

“Tú sabes...”

Se levantó de su lugar, tomando sus cosas y saliendo apuradamente del salón, importándole poco el haber chocado y casi haber hecho caer a varias personas en el camino. Su mente estaba muy ocupada como para preocuparse por los demás.

Su prioridad era encontrar a Lalisa, necesitaba hacerlo, realmente necesitaba hablar con su novia y escuchar que todo era una muy mala broma para molestarlo un poco.

Que lo amaba a él y solo a él.

Que no había nadie más.

Que Jackson no había sido capaz de interferirse entre ambos.

Que todo era una jodida mentira.

“Nosotros sabemos...”

La risa del peligris se escuchó por todo el pasillo, era como un maldito disco rayado puesto en los altavoces para enfurecerlo aún más, y eso lo hizo parar en seco, haciendo a su cabeza pensar.

¿Qué ganaba buscando lo que él quería? ¿No sería mejor que su pareja fuese sincera con él?

Sí, tal vez solía ser cerrado con sus sentimientos y emociones, pero por supuesto que le dolería enterarse por la boca de quien más amaba que lo había estado engañando con uno de sus amigos en común más cercanos.

Jackson y Lalisa...

No, no quería creerlo.

Claro que muchas veces notó acercamientos más allá de lo normal, ese tipo de actitudes que iban a un rumbo diferente al de la amistad, así como él y Lalisa tuvieron antes de empezar a salir formalmente. No obstante... ¿y si se equivocaba? ¿Y si su pareja solo trataba al peligris con un cariño de hermanos y estaba confundiendo todo? La rubia podía ser bastante amorosa con quienes tenía confianza. En el pasado tuvo que tragarse sus celos al ver a su novia ser demasiado cariñosa con Yugyeom, mas nada pudo hacer. Manoban y Kim eran mejores amigos, no valía la pena molestarse por eso.

Solo que la situación de ahora era diferente, porque Jackson y Lalisa no eran más que amigos que recién empezaban una amistad.

—¡Bammie!

Se sobresaltó en su lugar cuando la voz de su mayor lo llamó, suspirando al sentir cómo el cuerpo de la contraria chocaba con el suyo para, posteriormente, sonreír al tener los brazos ajenos alrededor de su cuello.

—Lili... —murmuró.

—¿Dónde estabas? ¡Pasé horas buscándote!

—Salí temprano de clases y quise pasear un rato a solas.

—Ouh, comprendo.

“Manoban sabe...”

El menor se separó para admirar el rostro de Lalisa. Tenía los labios ligeramente rojizos e hinchados, el cabello despeinado y los ojos brillosos.

No quería creerlo.

Pero tenía las pruebas suficientes ahora que veía cómo Jackson se posicionaba detrás de su pareja, a una distancia de casi un metro.

—BamBam... —lo saludó.

—Wang... —respondió, con cierta frialdad.

Lalisa se separó un poco de él para mirar por sobre su hombro, sonriendo con ternura al notar que Jackson la había seguido.

El corazón del pelinegro se rompió en miles de pedazos al notar eso.

—Jack me acompañó mientras te buscaba ya que no quería dejarme sola —buscó excusarse, siendo algo innecesario ya que BamBam no le había pedido ninguna explicación.

—A veces sueles perderte, Lili tonta.

—¡Hey, respétame!

Ambos rieron, y BamBam solo se limitó a sonreír, ahorcando mentalmente al peligris cuando notó que éste lo miraba con cierta burla.

—Bueno, Lili, debemos irnos. Recuerda que quedamos en ver a Youngjae —el peligris “le recordó”.

—Oh, es verdad.

Lo último que BamBam sintió fueron los labios de la contraria posándose delicadamente sobre su piel, dándole un beso de despedida.

—Adiós, Bammie.

Y cuando ambos estuvieron bastante lejos de la vista del menor, Wang rodeó la cintura de Manoban con uno de sus brazos, atrayéndola hacia él mientras reían cómodamente.

—Eres mía, Lili, solo mía.

—Uhm, solo tuya.

Solo que no contaron con que el pelinegro los había estado siguiendo cuidadosamente, logrando escucharlos.

Suya...

El chico detuvo sus pasos, aceptando la realidad, dejando ir a Lalisa.

“...que es mi chica.”

FIN.

Quería escribir de estos tres hace tiempo y encontré la historia perfecta para hacerlo.

Espero que les haya gustado como a mí.

Adaptación, todos los créditos a bibiwantstocry, ¡gracias por permitirme adaptar tu historia! ♡