(CAPÍTULO 20:
Paren el mundo.)

Los pasos rápidos de Solar a Edward hicieron que Emmett se moviera dispuesto a detenerla. El cobrizo miro a su ex pareja viéndola respirar lentamente antes de alejarse, caminaba de un lado a otro con las manos en su cabello y pensando muchísimas cosas que lo confundían.

—¿Entonces, qué haremos?

Sol observó con seriedad al pianista, aunque se extraño al notar ausencia alguna de celos o molestia al verle cerca de aquella humana.

—Bella provocó una pelea con su padre... aunque dijo algo acerca de Leire—Aquello lo soltó Emmett que se encontraba molesto de cierta forma por lo dicho—... conoce a Leire el rastreador.

Sin dudarlo en ese momento todos perdieron el habla y se tensaron al ver el movimiento rápido de Sol hacia Bella. Se encontraba a centímetros de su rostro, con la mirada de fuego y apretando los dientes.

     —¿Sabes lo que puede pasar con Leire?

Lo susurro, haciendo que la castaña se encogiera de miedo por lo amenazante de su voz, no gritaba, pero su voz le demostraba lo furiosa que estaba. Edward al verle así dio un paso, siendo retenido por Emmet y Jasper quienes se encontraban en una situación similar de querer gritar.

—Yo...—los balbuceos de la castaña que estaba a punto de largarse a llorar hicieron que Esme se compareciera.

—Sol, déjala—Con suavidad y al escuchar las palabras de la mujer se alejo tan rápidamente que hizo suspirar a la mortal.

Rosalie que se encontraba furiosa susurró.

—Entonces ahora... Leire tendrá que ser protegida.

Edward asintió siendo Jasper el que comenzara a planear ideas de que podrían hacer.

—¿El rastreador sabe que es pareja de Jasper?

La respuesta afirmativa de Edward hizo que Carlisle mirará a Bella un poco serio y molesto.

—No podré cuidarla entonces...—susurró el empático—, solo sí...

—Yo la cuidaré—Aarón murmuró, se acercó al patriarca al notar una mirada de duda—, la cuidaré.

—Entonces yo cuidaré a Bella.

El pianista se ofreció rápidamente a lo que Jasper negó.

—No, él sabrá que no te quieres alejar de Bella y conoce que no estarán lejos el uno del otro.

Solar con resignación se acercó y se unió a la conversación.

—Puedo llevarla yo a otra parte, solo... si me prometen que no le sucederá nada a Leire.

Y a Caden...

El nombre se quedó en su mente, Edward no evito leer aquello a lo que le observó completamente serio.

—No dejaré que nadie se acerque a Leire—murmuró Aarón—, lo prometo.

Alice aceptó quedarse con Edward, Esme y Carlisle diviéndose a buscar el rastreador o cuidar a ambas familias.

—Jasper irás con Solar—murmuró Edward—, podrás influenciar si sucede algo con Bella.

La cobriza aceptó y desapareció subiéndose al mercedes negro. Rosalie se negaba a alejarse de Leire o del lugar cercano a donde podría encontrarse.

—Yo no me pondré nada de ella—murmuró al escuchar la petición de Edward—, no es nada de mí.

—Es parte de la familia ya... Edward está con ella—La mirada fría de Rosalie hizo a Carlisle suspirar.

Alice se acercó y tomando los dos abrigos de la mortal le pasó uno a Esme, siendo ambas las que decidirían esparcir el aroma de la humana.

—Entonces, tu irás con Aarón a cuidar a Leire—La rubia asintió y se acercó al ilusionista.

Al pasar cerca de la mortal le ignoro por completo, el hecho de sentir cariño por Leire solamente hacía que pudiera soportar estar cerca de ella. Edward se reunió con Bella, plantando un beso suave en su sien.

—Cuando todo termine, iré contigo y nos iremos del país si es necesario...

Jasper vio con seriedad a la pareja, sintiéndose un poco triste por dejar sola a su compañera y deseando despedirse de ella por sí todo resultaba mal.

—La cuidaré, Jasper. Conocí a Leire y es la mejor persona que pudo estar contigo... no dejaré que nada—Apretó una de sus manos— le suceda. Lo prometo.

Con un abrazo rápido, la cobriza se acercó al ilusionista tomándole de la mano. Miraron a cada pareja despedirse y separarse, dirigiéndose cada uno a un destino.
Simplemente esperaban que nada sucediera.

El camino a otra parte de la ciudad fue relativamente corto, el tiempo solo causaba nervios a Jasper quién deseaba regresar con Leire, protegerla de cualquier cosa.
Pronto llegaron al hotel, registrándose y pidiendo una habitación que pronto usaron.

Solar recibió una foto a lo que Bella fisgoneo dejando de respirar al notar aquello, haciendo que la curiosidad surgiera en ella.

—El curso que tomo el rastreador... lo lleva a un estudio de ballet—murmuró Bella mirando detalladamente el dibujo de la pixie a través del teléfono de Solar.

Jasper había explicado acerca de las visiones de Alice que podían ser muy diferentes dependiendo del que tomara la decisión, la pianista suspiró y pensó un poco, viendo futuros alternos que siempre le llevaban al mismo.

La decisión de Bella podía ser cambiada... aunque si ella provocaba aquello, Leire sufriría una muerte por Victoria... pero si dejaba que Bella hiciera lo que debería, no veía algo con Leire.

—¿Haz estado en el lugar?

—Tome clases de ballet ahí, el estudio tenía un arco igual que ese—murmuró la mortal, notando que a través de la pantalla aparecía el llamado de Aarón.

Con disculpas se alejó del lugar, escuchó las palabras atentamente a través de la linea y con una mirada preocupaba, pero decida se acercó a Jasper e hizo que bajarán.
Pasándole el teléfono a Bella, Edward hablo un poco con ella, intentando tranquilizarla un poco.

—¿Qué harán ahora?

—Los demás seguirán buscándola, la mujer sigue en la zona. Protegerán a sus familias... yo... iré por ti. Iremos a cualquier lugar, solos—murmuró el cobrizo—. Solo, iré contigo y nos iremos.

Solar había tomado una decisión, que aunque llegaría a afectar de cierta forma a partes de su familia, sería mínima a comparación de su primera visión.
Sabía que la llamada de parte de James sería aceptada por Bella y que accedería a verlo sola; la madre de la joven se encontraba en riesgo y sin duda quería suficiente a Edward para arriesgarse.

Las decisiones estaban siendo tomadas.
     Finalmente después de unos minutos, Jasper reconoció la ausencia de la mortal, causando que informará al resto de la familia.
     Las cosas se estaban complicando.

Bella soltó un alarido, gimió tocando detrás de su cuello y sintiendo la sangre caliente en sus dedos, empapando por completo la columna de mármol.

—... Edward se percatara y echara a perder la diversión. Me pasó una vez, oh, sí, hace siglos—murmuró James caminando hacia ella—. La primera y única vez que se me ha escapado una presa.

》El vampiro que tan estúpidamente se había encariñado con aquella insignificante presa hizo la elección que tu Edward ha sido demasiado débil para llevar a cabo un cabo, ya ves. Cuando aquel viejo supo iba detrás de su amiguita, la raptó del sanatorio mental donde él trabajaba, hizo aquello que la liberó de la única forma que tenía para ponerla a salvo. La pobre criaturita ni siquiera pudo notar el dolor.《

Las palabras del hombre siguieron, siendo Bella la que se sorprendiera.

—En venganza, maté al viejo...

Aquello cobró sentido.

—Alice.

La historia que James había contado fue reconocida al instante. La vidente de la familia Cullen.

Habló un poco más con la mortal para después, acercarse, se echó hacia atrás y se agazapó en una posición qué Bella reconoció de inmediato.

Su amable sonrisa se ensanchó, y creció hasta dejar de ser una sonrisa y convertirse en un amasijo de dientes visibles, pero antes de que él se le aventara a Isabella para llevar a cabo lo prometido, el golpe contra James fue suficnte para lanzarlo al otro del salón, destruyendo cristales a su paso. Edward propinaba golpes recibiendo la contestación del cazador, pronto un golpe fue dirigido lo suficiente fuerte para dejarlo en el piso y haciendo que el otro tomara la ventaja para acercarse a la castaña.

—Se feliz...

Con aquello, James mordió la muñeca de Bella haciendo que el cobrizo rugiera y se lanzará contra él, pronto llegaron el resto de la familia haciendo separarlos para dejar el último trabajo para Jasper y Alice.

—Tendrás que succionar el veneno—Carlisle murmuró—, no podrá seguir.

El cobrizo miró con los ojos vidriosos y culpable a la castaña que se retorcía de dolor.

—No puedo...

—Tienes que hacerlo—la orden de parte de Carlisle hizo que el pianista finalmente se rindiera.

Edward sintió tristeza al saber que si en ningún momento se hubiera acercado a la mortal... nada hubiera sucedido, la pareja de su hermano no estaría en peligro.

Cuando fue suficiente y fue retenido por Carlisle, festejó un poco aquello, la familia se encontraba bien, siendo Aarón y Rosalie los únicos ausentes.

—Iremos a casa...—las palabras de Carlisle fueron interrumpidas por Alice.

La pequeña chica había soltado un grito ahogado al visualizar un futuro de cierta ojiazul.

—Es... Leire.

Los pasos de Victoria por encima del techo provocando que Leire despertara del profundo sueño en el que yacía. La imagen de la ojiazul atrajo la atención de la pelirroja, quién la observó sorprendida por sus ojos que se encontraban blanquecidos.

Sin dudarlo demasiado ingreso a la pequeña habitación notando la pose alarmada de la castaña quién reconoció su presencia.

—He de admitir que tu eres una mejor adquisición que esa otra humana—la voz de Victoria hizo que Leire se tensara—, una lástima que James haya ido detrás de la otra... pero es mejor así, no tendré que compartirte.

Bella, el pensamiento fue rápido de parte de la castaña.
Aunque Victoria quería acercarse y finalmente acabar con el juego camino por la pequeña habitación.

—Así que hay más personas aquí... más personas que te aman a ti...—Victoria camino observando una foto.

Las preguntas rondaban por la mente de Leire, quién se encogía en su lugar intentando pensar que hacer.

—Lo veremos después... ahora—Con paso veloz se acerco a la ojiazul y tomándola de la camiseta la cargó sacándola por la ventana—, jugaré un rato contigo...

Aquel ruido de la ventana cerrando con fuerza atrajo la atención de Rosalie, quién ingreso al dormitorio olfateando el aire y notando la ausencia de su amiga. El rugido que dejo salir fue suficiente para hacer la casa temblar. Levantó su teléfono y llamó, hablando al primer segundo de la llamada.

—Victoria tiene a Leire...

Victoria sonreía, sabiendo que los Cullen vendrían hacia ella. La chica ojiazul era una persona bastante curiosa, por lo que tenía que llevarla a dónde le recordará el sufrimiento a Jasper; Un almacén de bóvedas.
El color azul coloreaba por todo el lugar, causando que la oscuridad fuera un manto, el color de los ojos de la mortal. Se sentó y dejando a una Leire inconsciente espero a la llegada de aquellos vampiros.

Poco a poco Leire recobró la consciencia siendo Victoria la que la obligará a permanecer en el lugar.

—¡Leire!—Rosalie gritó al notar el estado de la chica, se encontraba un poco lastimada por los tratos de Victoria.

La rubia se encontraba sorprendida, a su lado tenía a varios del clan Cullen, estando todos preocupados, pero siendo Jasper el más afectado al notar aquel error.

Debió proteger un poco más a su compañera...

—Vaya... hasta que llegan, ¿James mató a la humana y vienen por la que sigue viva?—murmuró levantándose—, una lástima y un pésame.

—No... James no está vivo.

Victoria al escuchar aquello borró su sonrisa.

—¿Qué?

—Lo convertimos en cenizas... lo asesinamos.

Jasper murmuró caminando con lentitud, viendo preocupado a su compañera en el suelo.
     Victoria negó repetidamente y con los ojos vidriosos, se acercó a la mortal hundiendo sus uñas en su sangre lastimándola.

—Entonces—murmuró suavemente—, ella no vivirá tampoco...

Con rapidez rompió una de las piernas de la ojiazul haciendo que comenzara a quejarse del intenso dolor, siendo una mordida la que marcará su brazo, dejando brotar sangre al instante.
Con aquello, la pelirroja desapareció dejando a Jasper destrozado al notar a su compañera desangrarse y quejarse del dolor.

Leire... estaba muriendo...

➥Nota de la autora📦📝

O1. Que se pone bueno esto😱🙂‍↔️
O2. ¿Qué creen que pase?🙂‍↔️
O3. Me dejan una estrellita? les agradecería 💗🥰

JASPERHALE, 2024
© my eyes look at you fanfic