(CAPÍTULO 09:
Comportamiento... diferente.)

El resto de la clase para la pareja había sido normal, siendo la última del día para ambos. Además de otros momentos donde Jasper se controlaba, todo había sido como comúnmente hablaban.

—¿Esta tarde irás con Rosalie?—la pregunta del empático hizo que Leire sonriera y girará hacia él, afirmando su pregunta con una respuesta positiva.

Un rubor casi invisible a los ojos de todos fue visto solamente para el texano. Este sonrió y sin querer se acercó lo suficiente a la chica para quitar un mechón de cabello de su rostro. La ojiazul al sentir algo cerca de ella se tensó, pero al notar como su cabello era puesto detrás de su oreja se relajó.

—Gracias...—susurró suavemente sonriéndole al chico.

Ambos tomaron caminos separados, dirigiéndose respectivamente con Tyler y Emmett. Jasper al estar fuera del instituto por una indicación de Alice se quedó mirando a su compañera al otro lado del estacionamiento. El suspiro de la invidente hizo que le observará con más curiosidad. Hacía rato que la chica llevaba esperando a su madre y esta no aparecía, lo cual causaba una inquietud en el mayor. Tyler se había tenido que retirar despidiéndose con un beso en la mejilla, dejando sola a la chica de ojos azules.

Jasper miró con dureza como el automóvil de un azul algo oscuro aparecía. La madre de la chica se arreglaba la ropa suavemente, aplicándose un labial y acomodando sus ropajes para esconder una marca rojiza en su cuello.

—Mi niña... ¿Llevas rato esperando?—La mujer abrió la puerta saliendo, ayudó a su hija subiéndola suavemente.

—No, no te preocupes—La ojiazul le sonrió—. Ya estás aquí—La sonrisa de Leire era comprensiva, sus pensamientos acerca de lo que pudo haber hecho su madre para tardar eran completamente ajenos de lo que realmente hacía.

—¿Nos vamos?—La rubia le sonrió a su hija y pasó una mano por su cabello al tenerla en el asiento del copiloto—. Tu padre llegará tarde.

El texano que veía todo desde lejos suspiró con fuerza, la joven estaría dolida con la verdad que le ocultaba su madre. Quiso decirle lo que estaba pasando en realidad, pero no era su responsabilidad.
La castaña y su madre en el camino iban cómodas y al llegar a su hogar, la mujer le dio un beso en la mejilla y dejándola en su hogar volvió a trabajar.

—¡Mi niña preciosa!—Un hombre cruzó la puerta de su hogar sonriéndole a su hija. Leire rápidamente fue a su encuentro, recibiendolo en un abrazo—. ¿Cómo estuvo tu día? Hablemos de ello mientras cenamos.

—Por supuesto—La ojiazul asintió. Acompañó a su padre, el cual después de retirarse el saco y colocarlo en el perchero hizo que caminarán hacia la cocina.

—¿Qué tal han sido los chicos?—Leandro miraba a su hija lavándose las manos para poder empezar a picar verduras. Con cuidado empezó a cortar en pedazos pequeños un par de tomates, lechuga y varios trozos de carne.

—Bien, tengo varios amigos—La chica sonrió recordando a Ángela, Eric, Jessica y Tyler.

—¿Y esa sonrisa? ¿Hay un chico?—El mayor miró a su hija con curiosidad—. ¿Alguien robará el corazón de mi princesa?

—No... No lo sé—La castaña se sonrojó pensando en cierto empático, quien hacía que sintiera cosquillas en el estómago—. Cambiando de tema... hay una chica. Acaba de llegar, es hija del oficial Swan.

—¿Hija de Charlie?—El hombre miró a su hija buscando una respuesta.

—Sí, es un poco —murmuró—, silenciosa.

—¿Silenciosa?—Arqueó una ceja en su dirección—. ¿En qué sentido?

La conversación fluyó entre ellos hablando de distintos temas, siendo el padre el causante de varias risas de parte de la chica, quien no paraba de sonreír. Le agradaba pasar tiempo con el hombre, lo cual hacía que él pudiera sentirse un poco mejor de dejarla la mayoría del tiempo sola.

Con risas y un helado al final de la noche, ambos quedaron cómodos.

—Bella...—La nombrada miró a Mike acercarse a ella, teniendo cerca a Leire, la cual bufo al escuchar la voz del rubio—. Quería preguntarte... ¿Tienes pareja para...?—Eric entró interrumpiendo el momento.
Se acercó a la ojiazul y sacudió su gorro dejando caer unas gotas en la chica, la cual se removió riendo.

—Oye, Reile. ¿Te gusta la lluvia?—El extraño apodo de Leire hizo que se alegrará. El pelinegro abrazó suavemente a la chica mirando a los demás. Sonrió al ver la mueca de la castaña, pero al divisar la mirada de Bella observó incómodo a los demás.

—¿Hablamos en un rato?—El trío asintió y respectivamente se colocaron en sus mesas, siendo Eric el compañero de Leire.

—Raíces y células de cebolla. Eso es lo que hay en vuestras diapositivas—El profesor explicó, siendo el chico el ayudante de tomar aquellas pequeñas placas y hacer que la invidente las tocará reconociendo su tamaño—. Deben separarlos en mitosis y anafase—Con entusiasmo levantó una cebolla dorada, lo que hizo reír a más de uno—. Los primeros compañeros en terminar y acertar, ganarán la cebolla dorada—Eric hizo un chiste hacia la castaña, ocasionando que esta sonriera.

—No puedo pensar una vida donde no tenga esa cebolla—el comentario de la ojiazul hizo al chico reír.

Tomando iniciativa, la pareja comenzó a buscar diferencias, siendo Leire la que más acertaba en las diapositivas comentado en la forma que deberían verse. Ambos carcajearon varias veces, escuchando el regaño del profesor a ciertos alumnos que usaban algún libro para ayudarse o que comparaban las diapositivas.

—¿Señor Eric? Debería darle la oportunidad a la señorita Leire—El nombrado se ruborizo y tartamudeó en busca de una respuesta, siendo la salvadora la ojiazul.

—En realidad, hicimos juntos la observación, no es tan difícil—Señaló sus ojos, siendo un gesto desinteresado.

—Muy bien—el profesor murmuró y tomó la hoja revisando que todas estaban en lo cierto—. Es de gran ayuda para usted, señor, tener a la señorita Leire. Serán un gran equipo—Con aquello dicho, la cebolla dorada llegó a las manos de Eric, el cual sonrió agradecido.

—Toma—El pelinegro observó a su compañera entregándole suavemente la recompensa—. Seguro podré vivir sin ella—Ambos sonrieron, la clase continuó siendo una explicación rápido sobre el trabajo.

—¡Que suerte! Se han ganado la cebolla dorada—Ángela se sumó a ellos acompañándolos por el pasillo—. La mayoría de las diapositivas eran muy parecidas, que rollo—la queja hizo que Eric le sonriera.

—Esperemos que podamos ser compañeros, te deberás defender bien con la raíz de cebolla—La conversación hizo que Leire sonriera sabiendo que ambos se gustaban. Caminó lentamente teniendo en sus manos la cebolla.

—¡Hey nena!—Tyler se unió a los tres chicos, sonriéndole a Leire. Pasó uno de sus brazos por sus hombros, sonriéndole—. ¿Cómo te ha ido con este niño?

—Muy bien. ¿Nos vamos?—El moreno asintió y caminó hacia el estacionamiento—. ¡Diablos! Se me ha olvidado algo en clase, ¿Puedes quedarte en la camioneta mientras esperas a tu madre?

—Claro—Asintió y siguiendo sus órdenes, se recargó suavemente en el automóvil sintiendo el frío metal—. No tienen que esperar conmigo, pueden irse.

—¿En serio?

—Claro, Ángela. Mi madre llegará en poco tiempo—Sonrió sutilmente, Eric como la pelinegra se despidió, y juntos caminaron hacia el coche del chico. Una melodía comenzó a cantar la ojiazul, moviendo entre sus manos la cebolla.

—You are a pure person even if you don't think about it, you are someone important...—La suave canción que había inventado era melodiosa para cierto chico que la veía desde el otro lado del estacionamiento. Rosalie se puso al lado del empático, observando desde lejos a su nueva amiga y compañera.

—Es una bonita canción—Solar se acercó abrazando por los hombros a la rubia, y al igual que ambos miró a la dirección de la joven chica, sintiendo el malestar en ella al ver como su compañero salía junto de la chica Swan, hablando cómodamente.

—Maldito Edward—Los insultos de parte de la rubia no se hicieron esperar. Emmett le sonreía divertido pasando una mano por su cabello.

—Cálmate, Alice ya viene—Aquello era cierto. La pixie había dicho que tardaría un poco, sintiéndose confundida por las visiones que fueron vistas días antes con respecto a la pareja de su hermano y Bella.

—¡Hey! Hola...—las palabras de la vidente fueron cortadas al ver un automóvil.

El chirrido fuerte se convirtió rápidamente en un estruendo. El que manejaba la camioneta era Mike, quien trataba de guiar el camino, siendo algo inútil por el suelo que tenía restos de lluvia. La furgoneta negra patinaba con las llantas bloqueadas chirriando contra los frenos; Rosalie soltó un jadeo de sorpresa. La furgoneta dio un brutal trompo sobre el hielo del aparcamiento. Iba a chocar contra la parte posterior del automóvil de Tyler siendo Leire la que se encontraba en medio de ambos vehículos.

—¡Leire!—el grito de cierto moreno, el cual veía todo con los ojos desorbitados fue desgarrador. La chica ojiazul sentía las piernas temblorosas, era como si no pudiera moverse. Los fragmentos de su accidente pasaron por su memoria ocasionado que un par de lágrimas bajarán por sus mejillas.

Cuando retomó el control de su cuerpo, quiso dar varios pasos, pero sintió un golpe en su cadera y uno en la cabeza. Edward a lo lejos veía todo serio, Bella a su lado veía todo con preocupación y los ojos desorbitados como todos en el estacionamiento.

La castaña se quejó suavemente sintiendo un dolor agudo en el estómago, pero seguía con vida; sabía que Jasper había sido el causante de aquello.
El texano había podido detener la camioneta, pero su falta de control al estar tan cerca de la castaña, le había impedido cubrirla en su totalidad y sabía que posiblemente más de un golpe se había llevado.

Leire reconoció a Jasper.
El aroma peculiar del chico le hizo reconocerlo al instante, tratando de levantarse torpemente. Rosalie a lo lejos agradeció aquello, siendo la que hubiera hecho lo mismo al ver a su amiga en peligro. Solar miraba todo sorprendida al igual que Emmett y Alice.

Su visión se había cumplido.

—Leire—la voz del empático hizo que la ojiazul reaccionara. De repente, el olor a sangre llegó al chico, el cual se preocupó por ella, ignorando el deseo de beberla. El silencio del lugar fue reemplazado por gritos de parte de todos, siendo algunos los que se acercaban a ver y otros a ayudar.

—¡Saquen a Mike del auto!—alguna voz hizo que Leire supiera quien había sido el causante. Sin embargo, el sabor metálico en su boca hizo que escupiera.

Jasper miró todo alarmado siendo ayudado por Emmett, quien rápidamente se había dado cuenta de lo sucedido y se acercó a ayudar a su hermano para tomar el cuerpo de la chica. La pasaron a un lado de la furgoneta viendo que, un fuerte golpe había sido insertado en el abdomen de la castaña quien se quejaba y cubría su estómago, intentando sentirse mejor.

—¡Llamen a una ambulancia! ¡Ahora!—el grito de parte de Solar ocasionó que varios tomaran sus celulares y comenzarán una llamada. Se acercó rápidamente a la chica, conociendo los tratos que debía tener. Al haber sido enfermera, era de ayuda.

—No la toquen—El empático miraba a su compañera alarmado—. Jazz, Jazz—la violinista llamó al chico sacándolo de su trance—, vete. Ahora—su voz fue seria en un acto dominante al chico, el cual fue empujado por Emmett. Rápidamente el sureño se separó, acercándose a Rosalie, quien le tomó con fuerza reteniéndolo a su lado.

Los pasos apresurados de Tyler hicieron que Jasper mirará al chico aproximarse a su compañera. El moreno corrió notando a su amiga, la cual tenía una mano en su costado y se quejaba suavemente. La sangre hizo que el chico enfureciera.

—¡Leire! Mierda, no debí dejarte—Tocó el rostro de la chica, rápidamente buscó al causante, notándolo quejarse—. ¡Mike!

Automáticamente se acercó al chico que se movía tambaleándose. Tyler alejó su vista de Leire, acercándose rápidamente al rubio, empujándolo duramente. Antes de poder golpear su rostro, Jessica y Eric se adelantaron a separarlos.

—¡Tyler! Suéltalo—El aludido miraba al causante de todo aquello con furia.

—¡Eres un imbécil! ¡PUDISTE ASESINARLA!—el grito del chico hizo que todos quedaran en silencio, escuchando a la ambulancia y las sirenas de policía.

➥Nota de la autora📦📝

O1. ¿Se esperaban esto? Tyler es un buen amigo 🥰
O2. Yyyyy, notaron los cambios?💙 espero les gusten un montón! A mi me agradó❤️
O3. Voten mucho! piquen a la estrellita⭐️

JASPERHALE, 2024
© my eyes look at you fanfic