Yeon Jun suspira mientras se mira en el espejo, su hijo pasaba de un lugar a otro en la habitación del lugar donde sería la boda.

El alfa castaño en el momento en que Soo Bin se quedó dormido llamó a todos sus amigos diciendo que la boda se hará mañana porque se hará mañana. Los chicos no pusieron objeción en la decisión del alfa, ya que todo el dinero saldría de él.

Sí, tuvo que pagar más, ya que conseguir el salón que estaba destinado para ellos para dentro de dos semanas fue un poco difícil, algo que Yeon Jun pudo solucionar con unos cuántos ceros. Lo más fácil fue conseguir quien los casara, Mark ayudó mucho en eso.

Ji Min y Miae organizaron el salón de forma rápida, ya que querían ayudar a los novios. Yeon Jun pago a mucha gente para que el salón esté listo a eso de las 5 p. m. la boda se realizará a las 7 p. m.

Ahora, Yeon Jun se encontraba acomodando su traje. Eran las 6:30 p. m. media hora para que su boda iniciará, media hora en la que le dará su apellido a su alfa. Woo Sik sentía sus manos sudar por los nervios.

¿Y si su madre dice que no? ¿Y si sale corriendo llevándose a los cachorros con él? ¿Y si-

No seas ridículo, mamá nos ama...
No nos dejará ¡NUNCA!

Woo Sik suspira ante lo dicho por su lobo.

Yeon Jun acomoda por novena vez su corbata, suelta otro suspiro al ver que está no se arregla.

Dos toquecitos en la puerta hacen que Woo Sik se detenga y Yeon Jun gire un poquito su cabeza. El alfa joven abre la puerta.

— ¿Cómo va mis dulces alfas? —  Ji Min entra a la habitación junto con Sunoo. El bebé tenía su puño en su boca babeando su trajecito blanco.

Yeon Jun suspira — No puedo con esta corbata de mierda — resopla.

— No digas groserías, tu hijo está aquí — Ji Min tapa las orejitas de Sunoo quien empezó a estirar sus bracitos hacia Woo Sik. El alfa joven toma a su hermanito.

— Déjame ayudarte, niño grosero — dice Ji Min mientras se acerca a Yeon Jun quien ríe.

Ji Min realiza un nudo increíble en la corbata, golpea la mejilla de Yeon Jun para después apretarla con sus dos dedos logrando una queja por parte del mayor.

— ¿Estás nervioso? — Yeon Jun gira mirando en el espejo, Ji Min se coloca a un lado del castaño. Los dos se ven por medio del reflejo en el espejo.

— Muy nervioso — Yeon Jun muerde su labio — ¿Y si se arrepiente? Soo Bin puede irse y dejarme aquí con tres hijos... Bueno dos — Ji Min empieza a reír.

— Soo Bin no te dejará, está muy enamorado de ti como para pensar en esas cosas — Ji Min acaricia los brazos de Yeon Jun dejando su cabeza en el hombro de este — Soo Bin está enlazado contigo, tienen tres hijos, vive contigo y en unos minutos se convertirá en un Choi. Nunca te dejaría — Yeon Jun suspira.

— Tienes razón — Ji Min se separa.

— Siempre la tengo, soy tu madre — Ji Min toma a Sunoo de los brazos de Woo Sik — Vamos cachorrito, papá debe terminar de arreglarse — los dos salen de la habitación.

Woo Sik se acerca a su padre — ¿Listo para casarte con el amor de tu vida? ¿Con la mejor persona del mundo? ¿Con el ser más perfecto sobre esta tierra? ¿Con mi hermosa madre? — Yeon Jun ríe girando quedando cara a cara con su hijo.

— Estoy más que listo para casarme con mi alfa y ser felices para siempre, feliz porque voy a pasar toda mi vida con Soo Bin — Woo Sik asiente.

— Estamos listos.

— Estamos listos — los dos alfas chocan los cinco.

— Quiero vomitar — es lo primero que dice Soo Bin antes de ser sentado en frente del tocador.

Arin empieza a negar mientras va sacando las acomodando el cabello de Soo Bin — No señorito, acabe de maquillarte. No dañarás mi obra de arte, quédate quieto — Soo Bin hace un puchero.

— Tengo muchos nervios, ¿por qué? — Entrelaza sus manos observando a su hermana acomodar su cabello por el espejo — Llevo viviendo con él mucho tiempo, tenemos tres hijos, tengo una marca en mi cuello que muestra lo felices que estamos, ya que nos enlazamos — resopla — ¡No debo estar nervioso! Cómo si Yeon Jun fuera a escapar y llevarse a mis bebés — sus ojos observan fijamente a su hermana quien alza una ceja — ¿O sí? ¡Yeon Jun puede irse y llevarse a mis bebés...! Pero Yeon Jun nunca haría eso ¡Pero puede que lo haga! Pero no lo hará, confía Soo Bin, ¡confía en tu alfa! — Soo Bin suspira — Amo tanto a Yeon Jun.

Arin empieza a reír — Eres un caso.

Dos toques en la puerta, unos segundos después, Miae aparece en la visión de los chicos con Hyun Soo en sus brazos.

— ¡Má! — Hyun Soo grita estirando sus manitas hacia Soo Bin, Miae camina hacia el rizado y deja al bebé en sus piernas — ¡Nito!

Soo Bin sonríe con ternura — ¿Estoy bonito bebé? — Hyun Soo asiente — Gracias, precioso, tú te ves tan guapo con ese trajecito negro ¡Hmm! — Soo Bin empieza a besar las mejillas de Hyun Soo quien ríe.

El bebé se recuesta en el pecho de su madre, Hyun Soo con su manita busca el pecho de Soo Bin.

— Oh, no, el traje se va a arrugar — Arin mira a Soo Bin por el espejo, en sus manos se encontraba una botella de agua y una peineta.

— Mi nene tiene hambre — Soo Bin dice con una sonrisa, su dedo pasando por la nariz pequeña de su cachorro — ¿Mi bebé quiere comer? Tan hermoso mi bebé — Hyun Soo hace un sonido con la boca observando a su mamá.

Soo Bin desata los botones del traje y algunos de la camisa que tiene de fondo. Hyun Soo pega su boca de forma inmediata al ver la tetilla de su madre. Soo Bin empieza acariciar la cabecita de Hyun Soo quien empieza a cerrar sus ojitos.

— ¿Dónde está mis otros bebés?

Miae se acomoda en el mueble que se encuentra en la habitación — Sunoo está con Ji Min quien fue a ver al segundo novio, Woo Sik está con él desde hace más de cinco horas — Soo Bin asiente.

Hyun Soo deja de chupar el pezón, Soo Bin se acomoda la ropa para después seguir con las caricias en su dulce bebé. Los minutos pasaron en la habitación, Arin termina el peinado en Soo Bin.

— ¡Te ves hermoso! — Ji Min grita mientras entra a la habitación, Sunoo estira sus brazos hacia Soo Bin queriendo que su madre lo cargue — No ha parado de decir "Eche" desde que salimos de la habitación donde se encuentra Yeon Jun y Woo Sik.

— Ow, mi bebé tiene hambre — Soo Bin acomoda a Hyun Soo en el mueble colocando algunas almohadas alrededor para que no caiga. Camina hacia Ji Min y toma a Sunoo en sus brazos — Mi pequeño alfa — Soo Bin se sienta en unos de los muebles que se encontraban en un extremo de la habitación, quita algunos botones de su saco y camisa de fondo. Acerca a su hijo a su pezón para que unos segundos después, Sunoo empezara a tomar su leche.

La sala se encontraba llena, había familiares cercanos, amigos de la empresa, algunos clientes amables que asisten a la floristería y algunos compañeros y profesores de la escuela del cachorro.

Dae Hyun reía con Da Mi mientras Seo Jun tomaba fotos al lugar. Se escuchaba música relajante, las personas llegaban y se sentaban en su lugar correspondiente o entablaban conversaciones con personas conocidas.

Yeon Jun carraspea repasando sus votos en su cabeza.

Soo Bin caminaba de un lugar a otro mientras sus manos se encontraban entrelazadas entre sí.

— Es hora — las dos omegas hablan en diferentes habitaciones, pero al mismo tiempo.

Yeon Jun asiente con una sonrisa, salta en su lugar dos veces antes de salir de la habitación e ir a la entrada de la sala y jardín donde los invitados esperan con ansias.

Soo Bin acomoda su traje y cabello para después salir de la habitación y esperar a que le den la orden de salir.

Yeon Jun ladea su cabeza a cada lado, truena sus dedos, se coloca en la punta de sus pies para después volver a lo normal; repite eso una cuatro veces hasta estar listo. El alfa castaño empieza a entrar a la sala y jardín, la música sonando de forma armoniosa, las personas viéndolo con una sonrisa llena de orgullo. Su traje negro resaltando ante los demás.

Al llegar al lugar donde el padre se encontraba, Yeon Jun gira mirando la entrada en espera de Soo Bin. Los violines empezaron a sonar, la música era tan hermosa como tranquila.

Woo Sik y Huening Kai aparecen con una canasta llena de pétalos de rosas rojas y rosadas. Mientras caminaban por la alfombra roja dejaban caer unas cuantas rosas por todo el camino.

Detrás de ellos entraban Arin y Ji Min, cada uno con un bebé en sus brazos. Los dos cachorritos miraban la multitud; Hyun Soo con una sonrisa hermosa y Sunoo con el puño en su boca.

Yeon Jun siente sus ojos lagrimear al ver a su alfa entrar a la sala. El hermoso traje blanco le quedaba a la perfección, resaltaba sus hermosas caderas. El maquillaje era hermoso, Soo Bin traía un delineado fabuloso, un brillo que resaltaba en sus ojos y mejillas. Yeon Jun puede decir que tiene todo lo que necesita en la vida.

Soo Bin sonríe al momento en que se coloca al lado de Yeon Jun.

— Hola — dice en un susurro.

— Hola — Yeon Jun le responde con una sonrisa.

La música deja sonar, todos los invitados se sientan. Yeon Jun entrelaza sus dedos junto con los de Soo Bin quien le miraba con ojos verdes brillantes.

— Yeon Jun — el padre mira a Yeon Jun sonríe sintiendo sus mejillas temblar.

— Yo... Te amo tanto Soo Bin. Estoy tan feliz y orgulloso de todo lo que hemos logrado — Yeon Jun toma con sus dos manos las dos manos del rizado quien mordía su labio — Estoy tan orgulloso de todo lo que eres. Eres más de lo que pedía a la madre luna, puedo recordar el día en el que nos vimos por primera. Yo me encontraba emocionado por asistir a mi primer día en la guardería, pero de un momento a otro me sentí nervioso y solo quería volver a mi casa. Tú apareciste y me saludaste...

— Hola — un niño de rizos agitaba su mano mientras una sonrisa con hoyuelos aparece — Soy Soo Bin, pero mi mami me dice Binnie.

— Con tan solo tres años y tenías un increíble vocabulario, desde ese momento te convertiste en alguien especial para mí. Te volviste mi mejor amigo — Yeon Jun pasa su lengua por sus labios — Recuerdo cómo sentía la necesidad de protegerte y hacerte reír, y solo tenía cinco años. También recuerdo el día en que nos tocó despedirnos, fue la primera vez que gruñí y te reclamé...

— ¡MÍO! — volvió a gritar poniéndose delante del alfa rizado, Soo Bin solo se aferraba a Yeon Jun como si su vida dependiera de eso.

— Éramos unos cachorritos cuando nos hicimos esa promesa... ¿La recuerdas? —  Soo Bin asiente, lágrimas cayendo de sus hermosos ojos verdes.

— Llevo osito de colores, recuerda — se acerca — Soy pequeñito, pero cuando sea más grande — una enorme sonrisa se hace presente — Nos casaremos y así viviremos juntos por siempre — aplaude.

Yeon Jun asiente dando también una sonrisa con arruguitas en sus ojitos — Entonces te espere hasta más grandes — besa su mejilla — Y nos casaremos, tú y yo, y... Y osito de colores — ríe.

— ¡Míranos! ¡Nos estamos casando, viviremos juntos por siempre! — Soo Bin ríe junto con los demás invitados — Fui creado para estar contigo, fui criado para protegerte y saber tratarte como el increíble alfa que eres. La vida nos puso altibajos, nos pateó la cara un millón de veces, pero seguimos avanzando y nos encontramos para llenar esos vacíos que se encontraban en nuestros corazones — Yeon Jun besa las manos de Soo Bin con delicadeza — Agradeceré infinitamente a mi madre por pedirme unas flores de una floristería en específico — todos ríen.

— ¡Están destinados para estar juntos! ¡Yo solo adelante los hechos!

Yeon Jun gira sus ojos — Si tengo que comprar miles de flores para conocerte, lo haría. Te amo, gracias por llegar a mi vida y aceptarme como soy, aceptar mi pasado y recibir a mi hijo que ahora es nuestro, como tuyo. Eres tan perfecto, tan hermoso y tan diferente, eres único. Te amo y sé que lo he dicho muchas veces que importa, ¡te amo, te amo, te amo!

— ¡Tamo! — Hyun Soo grita logrando hacer reír a todos en la sala.

Yeon Jun se acerca a su alfa — Te amo — susurra cerca de sus labios antes de juntarlos en un beso. Sus labios se movían de forma sincronizada. El padre carraspea.

— Se están adelantando señores — Soo Bin ríe separándose, con sus manos limpia sus lágrimas — Después de esas emotivas palabras — el beta mira a la pareja con una sonrisa — Choi Yeon Jun, ¿aceptas a Kim Soo Bin para ser tu esposo, tu alfa?

Yeon Jun conecta miradas con Soo Bin — Acepto.

— Kim Soo Bin, ¿aceptas a Choi Yeon Jun como tu esposo, como tu alfa?

Soo Bin sonríe a más no poder — ¡Acepto!

— Con el poder que me ha sido otorgado, los declaró — el padre cierra su libro — Esposo y Esposo, Alfa y Alfa — los invitados empiezan aplaudir mientras Yeon Jun se acerca a su alfa y lo toma en un beso lleno de amor.

Al separarse, Soo Bin firma unos papeles donde acepta cambiar su apellido y tener el de su esposo. Woo Sik abraza a Da Mi con una sonrisa, Hyun Soo aplaudía contento al ver tantas personas aplaudir y gritar, Sunoo solo miraba a sus padres besarse.

Todo resultó hermoso, la recepción fue perfecta. El baile, las risas, las anécdotas. Soo Bin se sintió muy feliz, pero su felicidad subió de nivel al saber que ya se iba a su luna de miel.

Ji Min prometió cuidar a los tres hijos Choi mientras la pareja de recién casados se iba por unos días, ya que Soo Bin no puede estar muy lejos de sus bebés alfas.

Mientras esperaban el avión, Soo Bin miraba el suelo pensando en todo lo que ha ocurrido en su vida durando todos estos años. Vivía prácticamente en el hospital, sus madres lo echaron de su casa, su abuela lo recibió con los brazos abiertos, sus conversaciones con su abuela donde decía que nunca iba a llegar su pareja destinada, ver a Yeon Jun entrar a la floristería, hablar con él, aceptar el cortejo, el sexo... Todo estaba mal al principio hasta que Yeon Jun llegó a su vida.

Yeon Jun le dio luz y sentido, y no solo Yeon Jun. Woo Sik también llegó a transformar su vida de la mejor manera.

Ama a su familia, ama esta vida que tiene y ahora puede decir que se siente orgulloso del alfa que es.

Un alfa diferente, el alfa diferente de Yeon Jun.

Kim Soo Bin murió...

Pero...

Choi Soo Bin nace...

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