02
—¡Tae, ya para! —Yoongi reía mientras su cuerpo se retorcía al recibir las cosquillas de su pareja. Pasar momentos como esos le hacían muy feliz.
—Me gusta verte reír, te ves tan bonito. —susurró Taehyung esbozando una sonrisa. Dejó de hacerle cosquillas al omega, notando que este ya se estaba tranquilizando— Te amo.
—También te am-
Ding dong
Taehyung maldijo a quien sea que estuviera tocando la puerta, ¿Quién se atrevía a interrumpir su momento con Yoongi? Bastante estrés había con la universidad, y ahora que por fin tenían tiempo libre, venía alguien a joderles la vida. El menor se levantó molesto, ignorando la cara confundida del omega. Abrió la puerta con furia, gritando sin siquiera mirar quién era el que había ido a visitarlo.
—¡¿Cómo te atreves a....?! —Su expresión cambió, convirtiendo su cara en un poema— ¿Pero qué...?
—Hola, Tae. —El chico le sonrió, sus manos se encontraban cruzadas tímidamente— ¿Te acuerdas de mí?
—¿Tú? —Taehyung miró al omega— ¿Qué haces aquí? ¿Cómo supiste dónde vivo?
—Pensé que te daría gusto verme. —admitió decepcionado— Te extrañé mucho. —dijo con un tono triste, acercándose al pelirrojo para acunar su rostro amorosamente— No he podido olvidarte.
—Discúlpame, Jihoon. Pero lo nuestro terminó hace mucho tiempo. Sabes que...
—Que encontraste a tu omega destinado, lo sé. —Frunció el ceño— Fuiste un cobarde en ese tiempo. Me dejaste solo porque te habías dado cuenta de que yo no era tu destinado. ¿Acaso eso importa? Nos amábamos...
—Ahora amo a Yoongi. Sí, es verdad que al principio estuve con él porque era mi destinado, pero es una persona increíble, y al poco tiempo de novios supe que realmente lo amaba. Además, ni siquiera te pude explicar la situación, ya que te habías ido del país.
—Mejor obvia ese tema. Yo no vine para hablar del pasado. —Acarició las mejillas del alfa, viéndolo con cariño— He venido para darte una hermosa noticia. No he tenido el valor para enfrentarme a ti, hasta ahora. Creo que ya va siendo hora de que compartas junto a mí el fruto de nuestro amor.
—¿De qué hablas, Jihoon?
—Tenemos un hijo, Taehyung. Quedé en estado semanas antes de que terminaras nuestro noviazgo.
—¿Qué?
—¿Quién es, amor? —Yoongi caminó perezosamente hacia el pelirrojo, aferrándose a su brazo— ¿Es importante?
—Créeme, Yoongi. Es muy importante. —Jihoon se cruzó de brazos, observando divertido la cara de piedra que tenía el alfa— Cuánto tiempo sin vernos.
—¿Nos conocemos? Porque no te recuerdo. —El mayor de los tres ladeó la cabeza, pensando— La verdad no sé.
—Soy el ex de TaeTae. —Sonrió cuando Min arrugó el entrecejo— ¿Ya me recuerdas, paliducho?
—Eres ese molesto omega que perseguía a Tae, aún sabiendo que él y yo éramos novios. ¿Qué haces aquí?
—Oh, mi querido Yoongi. Te pondrás muy feliz con la noticia...
[...]
—Entonces... ¿Ya puedes decirme qué demonios hacemos aquí? —cuestionó Seokjin nervioso, ya que nada sería bueno si venía de Lalisa. Lo presentía, y más si ella lo había llevado de repente a un restaurante muy lujoso y caro.
—Ay, Jin. No seas tan intenso. —Rió divertida, mirando el rostro inexpresivo de su mejor amigo— Verás que tu alfa se pondrá muy contento cuando encuentres una buena pareja. —Le dedicó una de sus miradas con doble intención, alzando las cejas de forma sugerente— Pronto olvidarás a ese conejo hipócrita, y te centrarás solo en él.
—¿Quién es él?
—Espera un momento. —La rubia tecleó algo en su celular, y posteriormente, un chico alto salió del baño, caminando hacia ellos. El pelinegro lo miró extrañado y con una mueca formándose en su cara. Aquel muchacho tenía porte de alfa, sus ojos estaban maquillados y la ropa del desconocido era por completo de color negro, dándole un aspecto rudo y dominante.
—Hola, Seokjin. —Le dijo el chico, quien no parecía mayor que él— Mi nombre es Kim Namjoon, y soy amigo de Lisa.
—¿Ustedes son amigos? —inquirió Jin— ¿Desde cuándo?
—Eso no importa. —Intervino ella— Lo importante aquí es que Namjoon y tú podrán conocerse, y quién sabe, tal vez suceda algo entre los dos....
—¿Qué estás diciendo? Él es un alfa, ¿Cómo puede ser que pase algo entre nosotros? —La estruendosa risa del moreno alertó al pelinegro— ¿Qué es tan gracioso? —preguntó fulminándolo con la mirada— ¿Te estás burlando de mí?
—No es eso. —Balbuceó, limpiándose las lágrimas producto de la risa— Es que me da gracia que todos piensen lo mismo de mí.
—¿Qué? —El mayor no entendía.
—Soy un omega. —afirmó Namjoon, dejando a Jin con la boca abierta por la impresión— Si me olieras debidamente, te darás cuenta de que es verdad lo que digo.
—¿Cómo es eso posible? Tú no lo pareces...
—El hecho de que yo sea masculino no significa que tenga que ser un alfa. —Le sonrió, dando unos cuantos pasos para estar más cerca de Seokjin— Lo mismo va para ti, ¿No? Que yo sepa, los alfas no son fanáticos de las princesas de Disney.
—¡A mí no me gustan las princesas! —exclamó el mayor ruborizado.
Namjoon se permitió soltar una carcajada ante el tono tan chillón del contrario. Tan tierno.
—No es para que te pongas así, bonito. Yo no estoy para juzgarte, sino todo lo contrario. Lisa me contó que su mejor amigo es un poco... especial. Pero ahora que te veo, sé que eres más que eso. Incluso tu belleza le gana a cualquier omega. —Se sentó al lado del mayor en la mesa, volviéndose tímido ante la vista tan potente del alfa sobre él— ¿Puedo... puedo tocarte?
—Sí...
Seokjin agachó la cabeza, pensando en por qué se volvía tan sumiso cuando ese omega lo veía fijamente. Quizá era la gran necesidad de su lobo por sentir la calidez y el cariño de otra persona. No lo sabía, simplemente quería que Nam hiciera contacto con él.
Y Namjoon no desaprovechó la oportunidad para acariciarle la sonrojada mejilla, percibiéndola caliente por la vergüenza que tenía el mayor de los dos. La rubia alfa susurró un "aww" que no fue escuchado por ninguno de los chicos, estos solo se encontraban centrados en su mundo, en la burbuja que habían creado.
—¿Quieres salir conmigo este fin de semana? —murmuró el menor, tomando con sus manos el rostro ajeno para dedicarse a darle mimos— Creo que nos llevaremos súper bien.
—Está bien, salgamos.
Perdóname, Jungkookie. Pero no puedo esperarte toda mi vida. Perdón... perdón por romper mi promesa.
[...]
El azabache estaba cansado de todo, literalmente. Si tan solo pudiera regresar a su hogar, a Corea. Pero no, en lugar de eso tenía que estar trabajando sin descanso en la empresa de Yugyeom. Se sentía vacío y con pocas fuerzas. Su omega rasguñaba en su interior, quejándose porque quería estar con el alfa de Seokjin.
—¿En qué piensas? —La voz de Kim se oyó a sus espaldas— Te veo muy distraído, y aún hay muchas cosas por hacer.
—Estoy cansado, Gyeomie. Cansado de la vida. Quiero morirme. —dijo el mayor de los dos, arrepintiéndose de todo lo que había hecho años atrás.
—Me duele verte así, Kookie. ¿Por qué no aceptas que quieres verlo de nuevo? ¿Por qué eres tan masoquista? El Jungkook que conozco no es cobarde, así que admite tus sentimientos y ve a buscarlo, idiota. —Soltó todas las palabras que tenía retenidas desde que se enteró de la situación— No me rompas más el corazón, yo solo quiero que seas feliz. Si tú eres feliz, yo también lo soy.
—Yugyeom.... —Se acercó al alfa, y con todo el cariño del mundo, lo abrazó. Su rostro se pegó al pecho del menor— Eres el chico más estúpido que he conocido en mi vida. Eres tonto, muy tonto... —Sin darse cuenta, de sus ojos comenzaron a salir unas rebeldes lágrimas, mojando la camiseta de Kim— Pero eres mi lindo tonto. Si yo no estuviera enamorado de nadie, definitivamente me fijaría en ti.
—Claro que sí. Soy una persona irresistible. —bromeó, haciendo que el mayor riera entre sollozos— Y no pienses que me he rendido, eh. Al contrario, si Seokjin te rechaza sabes que puedes volver a mí. Siempre te estaré esperando con los brazos abiertos.
—Gracias. —dijo, permitiéndose llorar en silencio. Los abrazos de Yugyeom lo reconfortaban en los momentos más tristes, sin embargo, extrañaba a su distraído Taehyung, e incluso a Yoongi. Extrañaba el calor de su hogar, a su ciudad. Pero sobre todo, anhelaba ver nuevamente a Jin.
Y estaba seguro de que eso pasaría más pronto de lo que planeaba.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro