Jimin desayunaba tranquilamente en la mesa como en muchas semanas no lo había hecho, su madre lo miraba de soslayo y sonreía como si tratará de decirle algo importante, pero no encontrara las palabras para hacerlo. Ella era hermosa, de rostro angelical y ojos expresivos, amaba a su madre, aunque no estuviera de acuerdo con sus métodos de crianza, sabía que ella se esforzaba mucho para darle lo mejor, sólo deseaba que utilizara un poco de su tiempo para demostrarle que no estaba tan solo como se llegaba a sentir.

—¿Está bueno? —dijo refiriéndose al platillo que había preparado con esmero para su hijo y esposo

—Mucho mamá, gracias—respondió con amabilidad extrañaba tanto la comida de su madre, ya que, desde que comenzó con las dietas, no las comía con gusto o las porciones eran pocas a nulas.

—¿Cómo va la escuela? —preguntó su padre cuando bajo la tasa humeante de café, a diferencia de su progenitora este tenía las facciones más duras y cansadas, aunque le importaba su familia consideraba que la mejor manera de cuidar de ellos era proveyendo las cosas necesarias para que tuvieran una buena vida, pero ¿Realmente eso era lo que su familia necesitaba?

—Todo tranquilo papá, he estado más unidos a mis amigos y las clases están en periodo de poco trabajo, aún no tengo exámenes

—Eso está bien hijo, no descuides tus notas ahora que sales más con tus amigos

Jimin asintió incómodo, para él era difícil abrirse a las personas, sobretodo si eran sus padres, los amaba incansablemente, pero al mismo tiempo no los conocía y dudaba mucho que ellos lo hicieran con él. Eran pocas las ocasiones donde estos dejaban sus trabajos para pasar tiempo con a su lado. Antes su madre se quedaba con él, pero al cumplir los diez años decidió regresar al trabajo reduciendo considerablemente el tiempo que pasaban en familia.

—Deberías traerlos a la casa cariño —comentó su madre distraída mientras respondía un mensaje, esta fue su señal, de ahora en adelante la poca atención de sus padres se había desviado al trabajo

—Planeo hacerme un tatuaje en la cara—sonrió por lo bajo al no ver alguna reacción

Sus padres estaban al teléfono, por más que se esforzará por entablar una buena conversación ellos no lo escucharían, así podía gritar y no habría reacción

—Esta bien cariño te daré dinero

Sonrió con tristeza ahora en esos momentos se sentía sólo ¿Por qué tener hijos sino se iban a ocupar de ellos?

—¿Te llevo a la escuela Jimin?— preguntó su padre cuando dejo en teléfono en la mesa

—No papá, me iré yo, no quiero retrasarte

Deseo escuchar un "No me retasas hijo deja te llevo" pero sabía que no sería posible

—Esta bien hijo, cuídate mucho y suerte

Se levantó de la mesa y les dio una última inclinación con respeto. Salió de la cocina y tomó sus cosas, estaba harto, necesitaba alguien con quien hablar de lo miserable que se sentía, pero ¿Quién quisiera escucharlo? Nadie y esa respuesta le partía el alma en miles de millones de pedazos, porque no era más que un barco naufragado a la deriva, nadie lo amaba, nadie se preocupaba y nadie le escuchaba, sentía que estaban hartos con su presencia y por más que lo intentara, no podía demostrarles que estaba ahí.

Caminó con lentitud, ajeno a todo, recordaba la tarde de hace dos días donde paso un momento maravilloso con Yoongi, este le había mostrado muchas cosas, podía parecer serio y estar la mayor parte apartado de los demás al igual que él, pero tenía una idea de la vida admirable y el hecho de haberlo llevado a su lugar de relajación significó mucho para él, estaba pasando por lo peores momentos de su vida donde su cobardía lo había llevado a la desesperación de verse dentro de una caja de metal que lo incapacitaba para salir y hacer algo por sí mismo. Ese chico que conocía de pocas semanas se había preocupado mucho más que sus padres, que llevaban con él dieciocho años de su vida. Siendo temprano el cielo apenas empezaba a aclararse, hacia fresco por lo que cerró su chamarra.

—Mira qué tenemos aquí, el puerco volvió

La sangre huyó de su cuerpo, estaban en el parque cercano a la escuela aquel que permanecía en la penumbra y en completa soledad, su voz retumbó en sus oídos, ahora sí estaba jodido y en grande.

"Genial gordo, debiste aceptar ir con tu padre"

Trató de alejarse pero le cerraron el paso y comenzaron a empujarlo sin piedad, durante dos días no lo habían molestado y eso era porque estaban muy al tanto de que en la escuela los maestros vigilaban sus movimientos, esperaron pacientemente a que el conejo cayera en la madriguera del zorro, deseaban venganza y enseñarle que aunque deseara no podía librarse de sus aterradoras garras y si lo intentaba sería una guerra que no ganaría.

—¿Estás tratando de huir? —YiFan se acercó a él peligrosamente—.  Estar con el idiota de Yoongi te ha dado agallas pollito, creo que debemos enseñarte nuevamente quien manda

El primer golpe no se hizo esperar, con el dorso de la mano, Zico le volteo el rostro, de los cuatro era el menos agresivo seguido de Mino sólo que este estaba de vacaciones y el imbécil de Bobby lo golpeaba con mas intensidad de parte de su amigo; sintió el típico ardor en su mejilla izquierda, este acto exacerbaba su odio, los aborrecía, ellos eran la razón de su maldito miedo y odio, por ellos comenzó a sentirse una pequeña hormiga perdida en una telaraña, eran los culpables de su lastimado cuerpo y su cansada mente, crearon a un ser perfecto para molestar y minimizar

—¡En la cara no estúpidos no debe tener marcas!—refunfuñó JB recargado en un árbol, él iría casi al último, los hijos de puta tenían una buena organización, iban del más débil al más sádico.

Zico sonrió y después de escupirle en la cara, reanudó los golpes en su torso, a veces Jimin se preguntaba por qué no moría de una hemorragia interna aquellos golpes le brindaban un dolor lacerante que nublaba por completo sus sentidos. Sus puños como ladrillos que eran tirados al piso el sonido era pesado y fuerte, tocia con unas tremendas ganas de vomitar, estaba mareado y el dolor le había imposibilitado respirar adecuadamente.

"Aguanta, tienes que aguantar"

"Saldremos de esto, siempre lo hacemos"

"Aguanta un poco más"

Su mente que llegaba a ser cruel era la misma que le impedía doblegarse y rogar piedad, esta le brindaba fortaleza aunque ya no pudiera mantenerse en pie, sus piernas temblaban si seguían golpeando de esa manera sus costillas, caería sin poderse mover

—¡Sueltalo!

No, No, No, no, se repetía Jimin en la cabeza al reconocer aquella dulce y profunda voz, el dueño de esta no debería de estar ahí y mucho menos entrometerse

—Mira quién llegó, la ratita de SeokJin, ese hijo de puta al fin lo dejo libre por ahí, Mino estará muy decepcionado por no estar aquí para probarlo

Taehyung no se inmutó ante la agresiva declaración, estaba muy asustado pero no dejaría que le hicieran daño a Jimin, este negaba y trataba de decirle que estaba bien que debía huir de ahí, pero el dolor le imposibilitaba hablar sin tener que gritar

—Deberíamos jugar también con tu amigo Jimin—dijo JB con profunda voz

Este negó pero fue detenido con un golpe en la nuca que lo hizo perder el equilibro y caer en la hierba mojada, trató con todas sus fuerzas de levantarse, pero era imposible

—Vamos a jugar—dos de ellos se acercaron a Taehyung y lo tomaron de los hombros, trató de resistirse sin éxito, su interior rabiaba mirando en el piso a Jimin destrozado, no entendía de donde estaba sacando las fuerzas para mantenerse firme y no gritar por ayuda. Levantó fuertemente su pierna derecha golpeando a Zico en la entrepierna, este maldijo y le dio un cabezazo haciendo que inmediatamente la sangre cayera por los orificios de su nariz, Jimin se quejo tratando de levantarse aun a pesar de las dolorosas punzadas de su torso, con una mano se sostuvo, pero cuando estaba por levantarse YiFan que había observado todo con una sonrisa divertida en la cara le dio una patada en la parte baja de la espalda mandándolo nuevamente al piso

Zico sonrió con vehemencia, mirando al castaño bajar la mirada mareado después de aquel golpe

—Ahora no eres tan valiente mocoso, ¿Qué tus padre no te han enseñado a no meter la nariz en donde no te llaman? debiste quedarte tras las faldas de SeokJin

—E--ere-s--hijo--p--uta

—Nos salio grosero el muchacho, ves lo valiente que es tu amigo Jimin, lo que nunca serás —dijo mientras miraba al muchacho tirado en el piso

YiFan lo pateo sacando un quejido de dolor, sus ojos picaban al ver como Zico golpeaba a Taehyung en las piernas y cadera, dentro de él algo se rompió, como pudo miró a YiFan que parecía estar en medio del disfrute más grande de su vida.

Con ojos abiertos repletos de lagrimas y con su mandíbula temblando hizo lo que juro no hacer, hizo lo que su mente le había prohibido durante años, lo que él mismo se prometió que no les daría, sus súplicas.

—Po..r...fav...or.....por favor...deja...lo a...él no

El alto abrió los ojos sorprendido de ver al gordo castaño llorar, doblegarse por completo ante él una emoción satisfactoria inundó su pecho, lo miró vehemente sonriendo, dejo de golpearlo y se agachó a su altura, tomando sus cabellos y estirando hasta hacerlo sollozar más

—No era tan difícil, por fin tengo lo que siempre quise, a ti completamente destruido, amo verte llorar Jimin es la sensación más grande de mi vida, maldito gordo de mierda, espero que después de esto reconsideres morir—volteó la cabeza para que viera como Taehyung a pesar del dolor aún peleaba —. Él tiene agallas, cosa que nunca he visto en ti, tú le estas haciendo esto a tu amiguito

Lo soltó cuando este lloro con ganas, gritaba haciendo que su garganta doliera por el esfuerzo, Zico paró y los cuatro bravucones miraron sonriendo como sus esfuerzos habían dado frutos al fin, lo tenían, Taehyung soltó lagrimas de impotencia a ver a Jimin de esa manera, en esos momentos no le interesaba estar herido, sino su amigo llorando destrozado.

—Se terminó el juego chicos, vamonos antes de que comiencen a venir

Zico tomó de la playera a Taehyung y lo lanzó hacía Jimin, este lo abrazo fuertemente tratando de calamar su llanto

—Nos veremos de nuevo Jimin

Se alejaron sin remordimiento dejando a los dos chicos ahí llorando deshechos

—Jimin basta, ¿Jimin?

Taehyung intentaba en vano hacer que Jimin reaccionara pero este estaba al borde de una crisis de pánico, no dejaba de gritar y llorar, le faltaba el aire, sentía que en cualquier momento iba a morir.

—Por favor cariño —intensifico su llanto al ser consciente de la mirada pérdida de Jimin

—¡¿Taehyung?!—gritaron a lo lejos, él no volteo pero supo que Jungkook se acercaba corriendo

Al llegar a su lado se dio cuenta que no venía solo, Yoongi tomó de los hombros a Jimin quien estaba ligeramente sentado en la hierba, lo observo con detenimiento siendo capaz de ver el daño tan grande que esos chicos le habían hecho, dejo escapar un suspiro tembloroso, sus manos tomaron sus mejillas y beso su frente.

—¿YiFan?—preguntó a Taehyung quien estaba envuelto en los brazos de Jungkook, este asintió asustado

Jimin miraba culposo a los tres sin dejar de llorar, una arcada lo ataco y al tocer se dio cuenta que algo con sabor metálico salía de su boca, los tres chicos lo miraron espantados al ver la sangre resbalar por sus labios y como sus ojos se cerraban llevándolo a la inconsciencia total.

Lloré al escribir esto, lo siento 🥐