Miré hacia todas partes buscando a alguien para preguntar información. Pude ver la recepción de la sala de emergencias, me acerqué rápidamente.

-Buenas noches, estoy buscando a Jeon Jungkook, lo trajeron hace no mucho tiempo, ¿puede darme información? -

-Sí claro, deme in segundo-

-Gracias- moví mi pié con desespero mientras dejaba que la enfermera buscará información sobre él.

Mordí la yema de mi dedo índice, estaba realmente nerviosa y asustada.

-¿Tú eres la chica?- al guíen había tocado mi hombro me había girado rápidamente.

-¿Qué? -

-Que si eres la novia de Jungkookie-

Parpadee varias veces, solo para encontrarme de frente a un chico con cabello rubio cenizo, que cubría parte de sus ojos. Alto, tanto como Jungkook. Y su voz era grave.

-Soy yo, ¿Quien eres tú? -

-Soy la persona que te habló por teléfono, soy Taehyung, amigo de Jungkook, ven, sígueme, él ya está en una habitación -

Con mis manos cubiertas con el dorso de mi sudadera lo seguí. Subimos al elevador y escogió el piso tres. Cuando bajamos lo seguí de nuevo, seguimos de largo por un pasillo. Donde nos topabamos con pacientes  en sillas de ruedas o en muletas, algunos doctores y otras personas. Nos detuvimos frente a una puerta, Taehyung la abrió y entró primero.

Jamás pensé encontrarme con esta escena en mi vida, tal vez era porque sabía que Jungkook no tenia amigos, o eso creía. Pero su habitación estaba completamente llena, aparte de Taehyung, habían cinco personas más por diferentes partes de la habitación. Unos hablando con Jungkook o hablando entre ellos mismos, o solo mirando sus teléfonos.

-¡Llegué! - alzó la voz Taehyung.

-¿Tragiste la cajita de leche de vainilla, Tae?- preguntó uno de los que estaban ahí mismo.

-No, pero traje algo mejor - sonrió.

Ahí todos se detuvieron de hacer lo que estaban haciendo y pusieron atención a mi persona, que aún estaba en la puerta.

-¡Ah!- exclamó Jungkook al verme.

Frunci el entrecejo y me cruce de brazos.  Jungkook parecía realmente sorprendido de verme ahí.

-Hice algo bueno por ti, Jungkookie, le avisé a tu novia de lo que pasó, así ella no se enojaria, además te estabas quejando de que querías irte ya-

-¡Pero dije que no le dijeran nada a ella! - cerré la puerta detrás de mí.

-¿Por qué no?- pregunté yo.

-Espera, no es lo que piensas, tiene una explicación, yo si iba a ir, no pensaba dejarte plantada-  levantó sus manos en mi dirección.

-¿Y cual es la explicación? - 

-Yo lo puedo decir- habló alguien más.

Un chico de cabello rubio y de mirada tierna. Mejillas abultadas al igual que sus labios rosados, era más pequeño que todos los que estaban ahí precentes. Muy tierno. Él habló.

-Hola, yo me llamo Jimin, Jungkook está en esta situación por mi culpa, trató de defenderme de unos hombres y... bueno, eran tres contra uno, por eso quedó en este estado, perdón si hice que te enojaras con él -

No sé que fue lo que hizo que ese malestar se fuera, si ese chico tan tierno o saber que tres hombres golearon a Jungkook.

Pero lo que sea que fue, funcionó. Pues todo ese malestar que se había ido y que me había mantenido algo cuerda, había dejado paso a algo más...

-¡Ay no! -

-¡¿Que hacemos?!-

-¡Jungkook, has algo!-

-¡Callense!-

Todos en esa habitación se habían puesto histéricos, pues yo me había puesto a llorar con demasiado sentimiento que hasta el respirar era difícil.

Ah~  ¿Quien podía entender a éste estúpido órgano llamado corazón? Nadie, ni yo misma entendía el mío.