El día había llegado y yo no podía estar más nerviosa. Me había arreglado para la ocasión y estaba llevando lo que yo misma había preparado por separado, pero aún sentía como mi corazón palpitaba acelerado.

Tal vez solo quería que todo esto terminará de una buena vez. Muy temprano por la mañana había recibido un mensaje de Seokjin, dándome la hora a la que tenía que estar en su casa. Y era por eso que ahora yo me encontraba afuera de su casa. Toque el timbre un par de veces hasta que él vino a abrirme.

-Eres puntual -

-Siempre lo he sido, pero creo que es porque quiero que todo esto termine ya-

-Lo siento-- hablo con una sonrisa torcida y apenada.

Yo solo asentí y caminé hacia dentro de su casa, donde los chicos ya estaban presentes o algunos.

-¿Dónde está Yoongi? - pregunté más por cortesía que por otra cosa, ese chico me hacía ponerme a la defensiva siempre, y no es que me cayera mal, no, no era eso.

-Yoongi fue la persona que perdió en piedra, papel o tijera, así que él es el encargado de traer a Jungkook -

-¿Y si no quiere? - pregunte mientras me sentaba a un lado de Taehyung y Jimin.

-Es por eso que confiamos en Yoongi, él no acepta un no por respuesta - me sonrió mientras acomodaba algunos platos de botanas en la mesa.

-¿No tendrá problemas? Jungkook es muy fuerte y... -

-Oye, no te preocupes por Yoongi hyung, Jungkookie solo le tiene miedo a una cosa en la vida, y eso es ver enojado a Yoongi hyung-- escuche decir a Jimin.

En ese momento todos los que estaban en la habitación se empezaron a reír. No podía imaginarme a Jungkook huyendo de un chico pálido y algo menos corpulento, no cuando él era alto, fuerte y con algo más de músculos.

-Bien chicos, tenemos que apurarnos, si Yoongi tiene suerte estarán aquí pronto y eso es seguro, tenemos que terminar pronto-

Y así fue como Seokjin dio algunas palmadas para poder empezar. Los chicos estaban dispersos por toda la habitación haciendo diferentes cosas, yo solo tomé una bolsa de globos para poder ayudarle a Taehyung y a Jimin, quienes tenían sus mejillas infladas también por el aire.

[...]

De un momento a otro todas las luces de la casa se apagaron, cada quien se fue a esconder detrás de algún mueble o donde podían. Todo eso había empezado desde que el teléfono de Seokjin recibió un mensaje. Ellos ya venían.

-Ya están aquí - susurró Taehyung desde  el sofá, donde estaba escondido.

Todos pusimos atención al picaporte que empezó a girar, señal de que alguien estaba por entrar. La puerta se abrió poco a poco, dejándonos ver solo las sombras de dos personas. Era ahora.

-¡Feliz cumpleaños, Jungkookie! -

Habíamos gritado todos, las caras de todos fue épica, pues estábamos sorprendidos. La de Jungkook también era algo graciosa, ¿Por qué? Bueno, Jungkook estaba sosprendido porque todos habíamos gritado y nosotros estábamos sorprendidos por el simple hecho de ver como Yoongi había traído a Jungkook.

-¡¿Por qué lo traes así, Yoongi?! -

Saltó Seokjin desde su escondite y encendiendo las luces, viendo así mejor.

-Él no quería cooperar, ¿que más querían? Aquí está -

-¡Si, pero no de la oreja! -

Yoongi chasqueo la lengua y soltó a Jungkook, él jadeo un poco y se tocó su oreja. Quise ir, pero cuando me vio su cara cambió por completo.

-¿Qué es todo esto? - preguntó mirando todo a su alrededor.

-Una fiesta sorpresa, ¿no lo ves? - le dijo Seokjin.

-Sí pero, ¿que hace ella aquí? - y con esas palabras me sentí de lo peor.

Seokjin pudo ver eso porque con el ceño fruncido se acercó al menor y le dio un golpe en la cabeza.

-No seas maleducado, ella está aquí porque ella misma fue quien organizó todo ésto-

-¿Qué? -

Jungkook me miró confundido, yo me acerque a él esta vez sin temor, pero sí con algo de tristeza.

-Esto era lo que estaba haciendo, ese día en que te enojaste conmigo, yo estaba planeando salir con Jimin para que me ayudara con todo, era por eso que no podía decirte nada, los chicos me ayudaron a planear mejor las cosas -

-¿Era ésto lo que escondias? -

-Sí, lo siento, yo... -

Y no pude evitarlo, mis lágrimas empezaron a salir descontroladamente, creo que mi corazón se sentía más ligero ahora que había sacado todo.

-Ah, ya la hicieron llorar, se supone que este día seria para reír y celebrar- hablo Hoseok mientras venia hacia mi con una servilleta para limpiar mis lágrimas.

-Estoy bien, es solo que me siento... mejor- confesé con una sonrisa avergonzada.

Pude ver a Jungkook algo apenado, tenia un leve sonrojo en sus mejillas, cubrió su boca con su mano y después suspiro algo agotado. Se alejó de YoonGi, quien se hizo a un lado para perderse entre la cocina, tal vez estaba cansado de lidiar con el maknae. Jungkook vino a mi y me rodeo en sus fuertes brazos, mis ojos se abrieron a mas no poder por la sorpresa, él suspiro en mi cuello.

-Lo siento- hablo tan bajo, casi como un suspiro.

-Esta bien, todo esta bien- suspire su aroma, lo había extrañado mucho.

Escuchamos el bullicio típico de niños de clase cuando ven a una pareja enamorada. No pude evitarlo y me sonroje a mas no poder, Jungkook aun me tenia entre sus brazos, protegiéndome de lo que sea. Suspire de nuevo, este día estaba suspirando demasiado.

-Bien, ya que todo quedo aclarado, que Jungkook dejo de ser alguien celoso...-

-No Jimin, Jungkookie jamás dejara de celar a su novia- rio Taehyung.

-Ya déjense de juegos, es mejor que empecemos esto, la comida se enfriara- hablo Seokjin, claramente algo molesto por la espera.

Sonreí alejándome un poco, solo un poco de Jungkook, todos caminamos hacia el comedor, donde había algunas ollas con comida, algunos platos ya servidos y algunas bebidas. La fiesta había empezado.

Lo que hace unos días había estado escondiendo era esto, una fiesta sorpresa para Jungkook, y claro, creo que jamás lo haría de nuevo, no haría nada que me involucrara a mi y a uno de los chicos, no quería pasar de nuevo por algo así pero ahora que todo estaba bien, solo podía decir una cosa.

¡Feliz cumpleaños, mi príncipe Jungkook!

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El siguiente sera el final, esperenlo con ansias.