Jimin viaja en medio de Jia y Hoseok, mientras Taehyung conduce y Eve lo acompaña de copiloto. El rubio disimula muy bien su nerviosismo, pero debe admitir que por dentro se está muriendo de miedo.

Su mente piensa en muchos escenarios y uno de ellos es que el plan que Jungkook ha ideado de matar a Richie y luego a Sam, no resulte como lo ha planeado.

—Oye, ¿Estás bien? —lo cuestiona Jia.

El rubio se limita a asentir.

—Es la tercera vez que llamo tu atención —murmura la pelirroja.

—Todo estará bien —masculla Hoseok, entrelazando su mano con la de Park—. No te alejes de mí.

—Uhum —emite como respuesta, Jimin.

El vehículo se detiene y al costado derecho pueden ver la propiedad de Jeon, todos bajan del auto a excepción de Jimin.

—Necesito un momento —se dirige a Taehyung.

—Entiendo —susurra el azabache, accediendo a la petición.

El rubio suelta un suspiro, recapitula su vida meses atrás y puede a jurarse así mismo que nunca se imaginó que los cambia formas y hombres lobos son reales, que se enamoraría de uno y que se embarazara.

—Maldita locura —farfulla, frustrado.

Y sí, se veía y sonaba como una maldita locura. ¿Cómo mierda es que está embarazado? Es hombre y eso es imposible, pero la luna lo había escogido y ahora debía cuidarse, cuidar del bebé que está creciendo dentro de él y hacerle entender a su novio el cambia formas que no es invencible y que lo necesita a su lado.

—Todo estará bien —musita para sí mismo mientras baja del auto.

—¿Seguro que estás bien? —lo interroga Taehyung.

—Lo estoy —contesta con tranquilidad, Park.

—No se alejen de mí y de Marie, si ven algo extraño háganlo saber —les indica Kim.

Jimin ve de reojo la casa de Jungkook, pasan de largo y puede ver cómo muchos cambia formas se reúnen emocionados debido a lo que está a punto de suceder.

Mientras más se acercan el panorama es cada vez más sorprendente para los tres humanos y la bruja que los acompaña. Hay un círculo enorme formado con antorchas. A los alrededores se pueden ver a hombres de avanzada edad vistiendo solo sus pantalones con su torso descubierto mostrando sus tatuajes.

El sonido de unas maracas los pone alerta ven con dificultad tras las llamas de las antorchas y ven como dos filas de personas, entre ellos niños y mujeres se separan y comienzan una extraña danza.

—Es la ceremonia de iniciación —les plática Taehyung.

—Había escuchado de las ceremonias —confiesa Eve. —Es asombroso —dice maravillada.

—Sí, asombroso hasta que recuerdas que alguien va morir —suelta sin pensarlo, Jia.

—Solo ignórala —le pide Hoseok a Jimin, mientras frunce su entrecejo viendo a la pelirroja.

—Lo siento —musita Jia—. Estoy nerviosa.

Todos se detienen cuando Taehyung lo hace, ven a una anciana acercarse al círculo creado por antorchas y los tres humanos se quedan estupefactos al escucharla emitir palabras que desconocen.

—¿Qué es lo que hace? —indaga Hoseok.

—Es la bruja de la manada, está sellando el círculo con un poco de la sangre de Jungkook, Richie y de ella. Una vez los dos estén dentro de la única forma en que pueden salir es uno muerto y el otro vivo, ofreciendo un poco de sangre a la bruja para dejarlo salir —responde y explica con perspicacia, Taehyung.

Los tres humanos se observan, mientras Eve ve con mucha atención cada movimiento que la anciana bruja realiza.

—Al fin llegaron —se escucha la voz de una chica.

—Mar —la saluda Taehyung.

La alfa asiente y luego se dirige a Jimin.
—Jungkook quiere verte, acompáñame.

—¿Puede acompañarme, Hoseok? —pregunta, nervioso el rubio.

—Si es lo que quieres —se limita a decir la cambia formas. —Taehyung, ve a tu puesto y lleva a la humana y a la bruja contigo —le ordena al azabache.

—Mi nombre es Jia —replica la pelirroja.

Marie sonríe ladinamente, se da la vuelta y decide ignorar a la humana. No tiene ganas de discutir ni siquiera por diversión, tiene una misión y está segura que perder el tiempo no lo es.

Mientras caminan Jimin coge uno de los antebrazos de Hoseok, se detienen y luego pueden ver a Richie y a Sam a un costado.

—No los veas —demanda Marie, haciendo que el rubio desvíe su atención de ambos hermanos.

Park alza su vista y ve como una silueta alta y corpulenta que solo viste un short se acerca a ellos. Recuerda las primeras veces que vio a Jungkook en la oscuridad y una pizca de nostalgia lo aborda.
Desearía no sentirse tan nervioso, temeroso y sin saber qué hacer con todas sus emociones y malos pensamientos para poder apreciar lo atractivo que Jeon luce.

—Ven aquí —le pide el pelinegro.

El rubio suelta la mano de su amigo y se acerca al cambia formas.

—Tu mano —susurra al verla con rastros de sangre.

—Es por la iniciación —le hace saber el más alto.

—Yo...

—Necesito que guardes silencio, me escuches y que confíes en mí —lo interrumpe Jungkook. —Te amo mi lindo humano, sé que te amo porque estoy dispuesto a lo que sea por ti y el cachorro —realiza una pequeña pausa en la cual aprovecha a posar su mano izquierda en el estómago del rubio y la derecha en una de sus mejillas. —Te voy a proteger con mi vida siempre, Jimin —asevera el pelinegro.

El rubio intenta decir algo, separa sus labios, pero no puede emitir una sola palabra, sus ojos se llenan de lágrimas hasta el punto de derramar unas cuantas.

—No temas, me encargare de todo, solo confía en mí. No llores —masculla el lobo, sintiendo su corazón tan frágil al ver al rubio llorando. —Confía en mí —añade en voz baja.

—Uhum —emite el chico.

Jungkook ve el lindo rostro de Jimin, lo mira y está seguro de todo lo que hace y hará por él y su cachorro. Ambos se miran a los ojos, las esferas bicolores del cambia formas ven con parsimonia al humano, mientras los ojos anegados en lágrimas del chico ven detenidamente al corpulento hombre frente a él hasta que el sonido de tambores obtiene su atención.

—Mírame a mí —le pide el pelinegro. —¿Quién ama a su lindo humano? —lo cuestiona con serenidad, Jeon.

—Su-su bestia —contesta Jimin.

El alfa asiente mientras sonríe ladinamente, posa sus labios sobre los del chico y luego se distancia un par de pasos de él.

—Llévalo con Eve y luego ve a tu lugar —le ordena a Marie.

Park sorbe su nariz, siente como alguien coge su mano, quiere saber quién es, pero lo único que puede hacer es mantener su visión puesta en aquella espalda ancha llena de tatuajes que se aleja cada vez un poco más de él.

—Muévanse —demanda Marie.

Jimin se gira y camina contra su voluntad, tiene miedo a pesar de que Jungkook le pidió que confiará en él. Es solo que una parte en su interior no permite que deje de temer por la vida del cambia formas.

Se detienen cuando la alfa lo hace, les da indicaciones a los humanos y luego a la joven bruja que los acompaña.

—Jimin, dime cómo te sientes —le pide Hoseok. —Jimin —lo llama por segunda vez.

—Creo que lo mejor es que lo llevemos a la casa del hombre lobo —propone Jia.

De inmediato el rubio mueve su cabeza de izquierda a derecha en negación.

—Estoy bien —consigue articular con dificultad. —Estoy bien —repite mirando está vez a Jia.

—Estoy aquí —le recuerda Hoseok.

Jimin pasa saliva y sujeta con fuerza la mano del castaño.

Los tambores dejan de sonar y esta vez se escucha una especie de corneta, el primer sonido le da paso a qué uno de los viejos lobos amenice la palea, cuando deja de hablar se escucha el segundo sonido y es cuando aparece Richie.
El de cabello avellana mira a su hermana por unos segundos, la abraza y luego entra al círculo.

El tercer sonido suena y seguido se escuchan aullidos, uno más fuerte que el anterior en apoyo al alfa Jeon. El pelinegro ve a Marie atrás de él y a Taehyung al costado izquierdo en guardia. Mira hacia el lado derecho y observa a Jia, Hoseok, Eve y Jimin.
Sus ojos bicolores se vuelven más brillantes, ve a la bruja y cuando ella hace contacto visual con él, el cambia formas asiente.

La castaña asiente de igual manera, todos presencian como el alfa Jeon entra al círculo al mismo tiempo que Eve se gira de manera brusca y de un puñetazo noquea a Jia haciéndola caer al suelo.

—¿Qué mierda te sucede? —la interroga furiosa, Hoseok.

—Toma a Jimin y sígueme —le ordena la bruja.

—Eso no pasará —se opone el castaño.

—Si pasará a menos que quieras que mate al feto y luego a tu amigo —lo amenaza la bruja.

Taehyung se acerca a toda prisa, Eve lo mira, extiende su mano derecha dice una extraña oración y el cambia formas cae al suelo en un santiamén.

—Muévete, rápido —demanda desafiante.

—Eve, ¿Qué haces? —la cuestiona Jimin, absorto.

—Cierra la boca y hagan lo que les ordeno y estarán bien —se limita a responder la bruja.

Entran a la camioneta qué horas atrás le había pedido a Hoseok conseguir con un par de suministros. La mentira fue que Jeon los necesitaba para los cachorros de su manada.

Jimin intenta salir del auto, pero la chica se lo impide bloqueando las puertas, se coloca una mascarilla y luego desatapa un frasco, el rubio y el castaño comienzan a toser y segundos después caen completamente dormidos.

—Lo siento, Jungkook —masculla Eve.

Arranca sin pensarlo alejándose de esa manera de Headwaters a toda velocidad.

Puedo prometerles que amo mucho está historia y disfruto escribir este tipo de capítulos.

Nos leemos la próxima semana, cuídense.

Mucho love ♥️