Nicklaus/ Klaus mikaelson
The originals/The vampire diaries

Las brujas solían tener muy ocupado a Klaus estos días. Estaba muy estresado por el echo de proteger a Hope de ellas. Fue por eso que no le dijiste lo que ocurría contigo.
Fue por eso que no le dijiste que ocurría en tu cabeza.
Decidiste mudarte de habitación, dándole algo de espacio. El ni siquiera se había enterado puesto que últimamente no dormía. Tomaste el altillo de la mansión, estaba bien alejado de las demás habitaciones. No escucharian lo que ocurria allí.
Estabas sentada en la cama mirando a la nada, te levantaste lentamente y te acercaste al espejo de pie.
Tu rostro estaba algo pálido, habías adelgazado un poco y tus ojeras eran algo profundas. Intentabas que nadie te viera en la mansión, no necesitabas sumarle más problemas a los demás.
¿A qué demonios se debía esto? No lo sabías. Ni siquiera supiste cuando comenzó. Buscaste en todos los libros de hechizos que poseias pero ninguno supo darte respuesta.
Y es que no era normal ver fantasmas por doquier.
Algunos solo te ignoraban, otros te pedirán auxilio. Pero otros, mucho más violentos y agresivos, te ostigaban al punto de dejarte marcas en la piel.
Muchos de ellos eran conocidos, tal vez viejos enemigos de la familia mikaelson, pero te costaba mantenerlos bajo control, tu magia se debilitaba al igual que tu aspecto, y ya no podías dormir tranquila sabiendo que podrías no volver a despertar si uno de ellos aparecía.
Suspiraste profundamente. Abriste la puerta de la habitación y saliste hacia el pasillo buscando tomar aire en el patio interno de la mansion.
-¿Abrumada querida?- pregunto una joven vampiro morocha junto a ti. Traía una herida en el pecho que dejaba salir sangre. Su piel era gris, como cuando se utiliza una daga para matar vampiros- me sorprende que no hayas salido corriendo con tu noviesito Klaus aun-
-vete de aqui- gruñiste sin detenerte a mirarla o detener el paso.
-¿Sabes? Pensaba asesinarte, darle a Klaus una cucharada de su propia medicina, pero creo que esto es mucho más divertido-rio con burla viéndote de arriba a abajo.-te volveré loca, no te dejare en paz jamás. Como un mosquito zumbando en tu oreja, siempre estaré ahí junto a ti-
-¡Que te largues!- gritaste furiosa, enviando una ráfaga de magia en su dirección, pero ella ya no se encontraba allí.
-_____- dijo una voz delante de ti. Elijah se encontraba enfundado en un traje de vestir, con sus manos en sus bolsillos y mirada curiosa - ¿Que ocurrió?-
-nada- murmuraste mirando de reojo el lugar donde hace segundos estaba la joven- lo siento, ¿Que necesitas?-
-en realidad, venía a ver qué necesitabas tu- respondió el, cambiando el peso de una pierna a la otra- escucha, se que no son los mejores tiempos, pero soy muy observador- un sudor frío corrió por tu espalda- ¿Hay algo que necesites decirme?- pregunto intimidandote con la mirada.
Veo personas muertas. Pensaste para tus adentros.
- si, necesito que alguien cuide a Hope por mi hoy, no me siento muy bien, tal vez algo que comi- respondiste segura de ti misma. No hay mejor mentiroso que el que se miente a sí mismo.
-bien- fue lo único que Elijah te dijo. Asentiste dando por terminada la conversación y renaudaste tu huida al patio.
- _____ - te llamo Elijah nuevamente deteniendote algunos pasos después - somos una familia, recuérdalo. Y la familia nunca te abandona -
Luego de eso, desapareció en direccion al cuarto de Hope.
Suspiraste al sentir la brisa que corría en el patio interno de la mansión. No había muchos vampiros dando vuelta ese día por lo que tenías privacidad. Te sentaste en uno de los bancos mientras sostenía tu cabeza con tus manos.
¿Que mierda podías hacer? Ya habías gastado todos tus recursos.
El sonido de unos pasos llamó tu atención, elevarse tu vista y viste una chica caminar por el segundo piso.
Ella parecio observarte fijamente, y luego se dio la vuelta, con la espalda a la baranda que la separaba de una caída de dos pisos. Su cabeza atrás se encontraba ensangrentada, con los cabellos enmarañados.
Abrió sus brazos lentamente y simplemente se dejó caer al vacío, haciendo que respingaras del susto mientras ella desaparecía al tocar el suelo.
Respirabas agitada. Eso no tenía nada que envidiarle a las películas de terror. Tu rostro estaba caliente, tu corazón, acelerado. Ya ni siquiera la brisa fresca del lugar podía calmarte.
Decidiste ir al baño a enjuagar tu rostro con agua helada.
Caminante al baño privado de la habitación de Klaus que era el más cercano, el no estaba en la mansion por lo que no habría problema en usarlo.
O al menos eso creías.
Mojaste tu rostro con abundante agua fría y luego levantaste la vista, llevándote un susto de muerte.
-Klaus- murmuraste con el corazón a punto de explotar. Podías verlo a través del espejo apoyado en el marco de la puerta. Era suficiente de sustos por hoy.- creí que llegarías mañana- secaste tu rostro aún dandole la espalda.
- solucione las cosas en mystic falls antes de lo previsto- fue su respuesta. Estaba de brazos cruzados y su mirada era penetrante, como si te estuviera evaluando
Te ponía nerviosa. Sentías que podía observar todos tus defectos.
-que bien- sonreiste sinceramente. Te acercaste a él y rodeaste su cuello con tus brazos, pero el mantenía la mirada seria- te había extrañado-
Sus brazos te rodearon por la cintura atrayendo te a el.
-se que algo ocurre, no soy estupido, te di tiempo para que me lo digas, pero no me gustan las mentiras- murmuró de manera enojada en tu oido, te estremeciste, a pesar de que era tu pareja y se conocían hace muchísimo tiempo, ver a Klaus enojado nunca era bueno.
-yo...- no supiste que decir. Te separaste levemente de el, pero sus manos se mantuvieron en tu cintura. El enarco una ceja esperando tu explicación.
Suspiraste pesadamente, fue en ese momento que algo llamó tu atención detrás de él.
Un hombre caminó cruzando la habitación con una herida en el corazón. Tomo una estaca de su bolsillo y la clavó allí donde estaba herido. Desapareciendo nuevamente.
No pudiste evitarlo, tus ojos se llenaron de lagrimas incapaz de detenerlas. Alarmando a Klaus quien no estaba enterado de lo ocurrido.
- _____ ¿Que es lo que ocurre? - pregunto con un tono más suave que antes.
-ya no lo soporto- sollozaste enterrando tu rostro en su pecho- ya no puedo- murmuraste entre lagrimas- veo gente muerta-
Klaus no dijo nada. Tal vez sorprendido, tal vez incapaz de procesar lo dicho. Solo acaricio tu cabello mientras dejabas su camisa manchada de lagrimas.
Una vez más tranquila pudiste respirar sintiendo que un peso se había quitado de encima. Te apartarte viendo sus ojos, el parecía esperar una explicación.
-no sé cuándo comenzó, yo simplemente comencé a verlos. Al principio los ignoré pero... Luego me fue imposible- mostraste tus brazos, el último ataque en la mañana te había dejado marcas de dedos allí, y también moretones.
-¿fue por esto que te mudaste de habitacion?- pregunto el sorprendiendote, no creías que se hubiera dado cuenta
-No quería distraerte. Suficiente tienes con las brujas buscando a Hope como para ocuparte de mis problemas-
-eres parte de mi familia, y yo protejo a los mios- fue su respuesta.
Asentiste conmovidas incapaz de hablar nuevamente. Lo solucionarían, siempre lo hacían.